Guayaquil, Ecuador. Estudió en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, Comunicación Cultural y Literatura y el Máster de Estudios Avanzados en Literatura Española e Hispanoamericano Universitat de Barcelona. Y un Máster en Edición de Textos por la Universidad de Salamanca. Es profesora de Periodismo y Literatura y Proyectos Periodísticos en la Universidad Casa Grande. Ganó el premio de poesía Ismael Pérez Pazmiño, organizado por el diario El Universo con su libro “Tratado de los bordes o cercenación del estero”. Briones es también novelista, dirige el sello Cadáver Exquisito y es docente de la Universidad de las Artes.
Los libreros se unen para enfrentar la economía de la pandemia
“Meses tenebrosos”. Así describe María Paulina Briones, propietaria de la librería Casa Morada, marzo y abril. Los meses en que la pandemia de Covid- 19 causó mayor estrago en el Puerto Principal, para los libreros independientes fueron una época de escasez e incertidumbre. “Nadie compraba nada, la gente no quería salir de su casa. No teníamos idea de cuándo podríamos volver a la calle o cuándo volveríamos a hacer una venta”, recuerda “Nos ha tocado replantearnos para asegurar nuestro crecimiento a futuro”, señala Briones. Esto incluyó la apertura de un sitio web con los catálogos de cada uno de los sellos y librerías que son parte de esta agrupación conocida como La Colectiva: Las editoriales Despertar, Crímenes en Venus, Cadáver Exquisita y Dadaif Cartonera, y librerías Casa Morada, El Fauno Verde, La Gloriosa, Ágora Libros y Textos, Librería Itinerante, Butaca Paradiso y Mono Cómics. La labor funciona a través de cuotas utilizadas para los proyectos en común, como el sitio web. “A largo plazo, queremos construir seguros laborales que no tenemos, y plataformas que nos permitan crecer. Y obviamente esto es algo que debemos hacer nosotros mismos, porque la ayuda desde lo público es inexistente”, agrega. Al referirse a la propuesta desde el ministerio de Cultura y Patrimonio de abrir una línea de fondos concursables para reactivar las propuestas artísticas del país, es clara: “el sector literario no está contemplado en ese proceso. Los fondos están canalizados hacia los proyectos con contenido audiovisual y nosotros no aplicamos”.