Breve reseña de su vida

Nace el 26-02-1921 en París de donde su familia regresa 2 años después.

Hijo de Alejandro E. Shaw Fynn y de Sara Dolores Rosa Tornquist Algelt
Estudia en el Colegio de LaSalle, donde se destaca. Miembro de la Congregación Mariana.
A los 14 años ingresa en la Marina a pesar que su padre se opone por imaginar para él un futuro en
las empresas familiares.
A los 18 años lee un libro del Cardenal Suhard sobre las responsabilidades del cristiano en la vida.
Allí conoce la Doctrina Social de la Iglesia, lo que motiva un cambio en su vida y le permite definir,
en 1941, dos pensamientos que signaron su vida:
1. SOY UN PECADOR
2. DEBO IR DECIDIDAMENTE HACIA DIOS.
“ese fue el momento de mi conversión definitiva” según él mismo dice.
Se casa en Cecilia Bunge en 1943 y tienen 9 hijos (uno de ellos, sacerdote) y en 1945 viaja a Chicago
enviado por la Marina para hacer un curso sobre Meteorología.
Es en ese año donde infiere que su camino es distinto y que Dios le pide un apostolado específico.
Entonces pensó en hacerse obrero pero un sacerdote, al ver su perfil, le sugiere que, teniendo en
cuenta su perfil, lleve el evangelio al mundo empresario al cual pertenecía su familia.
Pide la baja en la Marina, como Teniente de Fragata, e ingresa en CRISTALERÍAS RIGOLLEAU donde
llegó a ser Director General, al igual que en otras empresas familiares.
En esos años: “Como empresario, sembrar esperanza, ver la realidad, renunciar al beneficio aparente
del momento, ser un puente entre quienes conocen el problema y el sumergido, que piensa en su
problema inmediato”.
Se incorpora a la ACCIÓN CATÓLICA y al MOVIMIENTO FAMILIAR CRISTIANO.
En 1952 funda la ASOCIACIÓN CRISTIANA DE DIRIGENTES DE EMPRESA de la cual fue su primer
presidente.
En 1958 ayuda en la creación de la UNIVERSIDAD CATÓLICA ARGENTINA y de la fundación de
CÁRITAS.
Si bien no actuó en política, ayuda en la redacción de las bases de la DEMOCRACIA CRISTIANA en
Argentina. Sostiene que “en la empresa, haya una comunidad humana, que los trabajadores
participen en la producción y, por lo tanto, den al obrero el sentido de pertenencia a una empresa;
que le ayude a adquirir el sentido de sus deberes hacia la colectividad, el gusto por su trabajo y de la
vida, porque ser patrón no es un privilegio sino una función”.

A pesar de sus principios, es encarcelado junto a otros 18 dirigentes católicos a fines de 1955 por el
gobierno de Juan Domingo Perón en el marco de su enfrentamiento con la Iglesia Católica que
comienza en 1954 (cancelando feriados católicos, abriendo prostíbulos, promulgando la Ley de
divorcio, prohibió manifestaciones católicas por las calles, la exhibición de pesebres en los locales
comerciales en conmemoración de la Navidad, entre otras otras cosas…).

En 1957 se le diagnostica un cáncer contra el que lucha hasta el 27-08-1962 cuando fallece.
(leer pág 23 del ibook)

(fuente: Wikipedia)

Proceso de beatificación

12-10-1996, Jorge Cardenal Mejía impulsa a trabajar para iniciar la causa de canonización de Enrique
Shaw. La ACDE inicia las gestiones para su apertura.

13-10-1999, el Arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Cardenal Bergoglio da el visto bueno al
postulador, Lic. Juan Cavo.

25-09-2001, Jorge Cardenal Saraiva, Prefecto de la Congregación para las causas de los santos, envió
el “Nihil Obstat” al Arzobispo de Buenos Aires.

(fuente: ENRIQUE SHAW: Notas y apuntes personales. Adolfo Critto, Editorial Claretiana

Pensamientos…

“Debemos responder con el amor allí, en el lugar donde nos colocó la Providencia”.

“Reconocer en el prójimo a Cristo con una personalidad ABIERTA y DÓCIL al Espíritu Santo”

“Debemos cumplir en todo la voluntad de Dios y, para ello, tener una doble actitud, profundamente
comunitaria, de responsabilidad hacia Dios y de servicio a los demás”.

“Nuestro imperativo. Ser ministros de reconciliación, santos y santificadores, única forma en que
podemos servir al Maestro sin traiciónalo”

“Debo amar a Dios y a todo lo que Él ama, viendo al prójimo a través de los ojos de Dios (frágil,
redimible….¡Por quien Jesús dio su sangre!)”
“El Señor no necesita de nuestros triunfos sino de nuestro amor”

Respecto a la empresa en concreto

“El empresario debe ser Cristo en la Empresa”

“Hay que cristianizar la clase patronal argentina”

“Es indispensable mejorar la convivencia social dentro de la Empresa”

“El dirigente debe ser accesible”

“Para juzgar a un obrero…¡Hay que AMARLO!”

“Debemos crear trabajo y, cuanto más eficiente sea nuestra labor, más recursos tendrá la
Providencia para repartir entre pobres y necesitados”

En su autoformación puso énfasis en:

La AMABILIDAD y la MANSEDUMBRE
¡Debo ser más simpático!
“Me he propuesto tener una cara más simpática, porque es apostólicamente necesaria”
“El que rezonga constantemente, NO puede ser dirigente”
“Me he propuesto ser amistoso, teniendo el exterior que Dios y los demás necesitan que tenga”
“Debo ser una NAVIDAD para el otro”
“Que cada uno que se acerque a mí, reciba algo de la mansedumbre y el amor que Jesús le tiene”

PAZ y BENEVOLENCIA
Ser un instrumento de la Paz de Cristo fue su primera preocupación.
“Evitaré que alguien, alguna vez, pueda quedarse con una espina conmigo”
“Ser considerado y cortés…¡Aún con quienes me aburren!”
“Que todos asocien nuestro nombre con un buen recuerdo”
Que se diga de mi mismo lo que se decía de Santa Catalina de Siena: “Todo el que se le acercaba, se
retiraba mejor…”.

CAPACIDAD PARA ESCUCHAR

“Por cada 20 minutos de oir, 5 de hablar y entonces conversar, NO discutir”
“Señor, dame un corazón que escuche”
“Frente al prójimo, no podremos aliviarlo pero sí escucharlo…”

LAS RESISTENCIAS A LA CARIDAD

Frente a las presiones del carácter y del ambiente, Enrique Shaw se esforzaba por “ser amable” aún
“con quienes le molestaban”, sin disgustarse siquiera, aún teniendo razón.
“El precio que hay que pagar para entrar en la dinámica de la caridad, es negarse a si mismo (la
abnegación)”
“El egoísmo es un pecado contra la vida porque clama contra la solidaridad humana de quienes son
hijos del mismo Padre”.
Le rezaba a María “para que sea capaz de ver la imagen de tu Hijo en cada persona que vea, por
poco atrayente que sea”…

“Debo esforzarme en, por ejemplo, ser amable con quienes me molestan. Soy demasiado cortante,
lo cual hace que ofenda a mucha gente. Debo sr manso, dulce, de rostro no ceñudo sino jovial”

“Mortificarme en lo que es necesario para ser más útil al prójimo…No exasperarme con nadie”

“Mi defecto dominante es ser duro y cortante con la gente a quien aprecio. Esmejor ser querido…se
consigue mucho más. No vale la pena ser tan vehemente por cosas tan poco importantes…”