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II. ORIGEN.-
Se originó a partir de la interacción de las culturas Nazca,
Tiahuanaco y Huarpa; esta última era la cultura local de la
región de Ayacucho.
Los antecesores directos de los huari fueron los HUARPAS
establecidos en Chaquipampa entre Ayacucho y Huanta;
este pueblo se fue imponiendo sobre sus vecinos en base a
una alta tecnología agraria (andenes, canales y acueductos)
hasta que tomaron contacto con Tiwanakus y Nazcas y
otros de quienes recibieron enorme influencia.
VII. EL URBANISMO
Los edificios diseñados en forma de letra D, fueron una
característica distintiva de los sitios de Huari a lo largo de los
andes. Se cree que el urbanismo Huari estuvo asociado a la
clase guerrera que a la religión.
Cultura Huari o Wari, durante su expansión alcanzó por el norte hasta los territorios de los departamentos de
Cajamarca y Lambayeque y por el Sur hasta el Cusco y Moquegua; estableciendo distintos centros arquitectónicos
en muchas de sus provincias, tales como Cajamarquilla o Piquillacta y centros religiosos como Pachacámac. Usaron
andenes en las faldas de los cerros para mejorar su producción agrícola.
No se ha precisado el tipo de control e influencia que ejerció sobre otras culturas regionales. Algunos
investigadores consideran que su principal actividad era de carácter militar. Combatieron a lo largo y ancho del
territorio peruano, conquistando los diversos señoríos de su tiempo. Junto al Imperio incaico, se consideran las
dos únicas culturas “imperiales” aparecidas en el hemisferio sur.
Fin del Imperio: Es posible que la caída del Imperio Huari haya sido consecuencia de los levantamientos regionales
y guerras continuas provocadas por la crisis ante la falta de excedentes de producción, las ciudades importantes
fueron abandonadas, así los incas se enfrentan a un Huari en decadencia.
En febrero del 2011 se dio a conocer un hallazgo arqueológico de un complejo funerario,
cuya tumba principal pertenecía a un dignatario del Imperio wari, se hallaron 223 piezas de
plata, 17 piezas de oro y más de 100 piezas de cerámica, en Espíritu Pampa, distrito de
Vilcabamba, provincia de La Convención, región Cusco, bautizado como el Señor Wari de
Vilcabamba. Este hallazgo ha sido comparado en importancia con la del Señor de Sipán.
En 2014, se presentó una gran exposición en el Museo de Lima, de los hallazgos
arqueológicos del Castillo de Huarmey, región Ancash, en el actual Perú, donde se encontró una cámara funeraria
intacta de la cultura Wari con 63 fardos funerarios, además de objetos de oro, plata, bronce, madera, textiles y
cerámicas que demuestran la importancia de la mujer.