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INTRODUCCION
Nuestra legislación sustantiva y adjetiva en materia civil, regulan los actos y las
acciones jurídicas relativas a la posesión, como un medio de adquirir una cosa, así como la
posesión derivada de un título traslativo o simplemente declarativo de dominio. De igual
forma regulan las acciones tendientes a la conservación, retención, restablecimiento y
restitución de la posesión, acciones que encontramos normadas en los Artos. 1715 al Arto.
1829 C.C y Artos 1650 al Arto. 1683 Pr.
Fundamentalmente la posesión consiste en una situación o estado de hecho de la
cual derivan consecuencias jurídicas que, de ordinario, vienen a proteger en mayor o menor
medida esa situación o estado de hecho. Si se emplea la palabra posesión en su sentido más
amplio, puede decirse que posee aquél que de hecho actúa como titular de un derecho o
atributo en el sentido de que, sea o no sea el verdadero titular, de facto, goza de las ventajas
y soporta los deberes que normalmente corresponde gozar y soportar al titular del
respectivo derecho o atributo. Es natural que semejante actuación cree la apariencia de que
quien la realiza es el verdadero titular del derecho o atributo de que se trate. Así se
comprende el aserto de que "la posesión es la imagen del derecho".
En ese amplio sentido se habla no sólo de la posesión de las cosas sino de la
posesión de diversos derechos reales, de la posesión de herencia, de la posesión de estado,
de la posesión de créditos, etc. Pero, aun cuando en todas esas situaciones existen
elementos comunes, los mismos son bastante limitados y en cambio son muy diferentes sus
consecuencias jurídicas.
Indudablemente, la titularidad de la propiedad y de algunos derechos reales implican
un derecho a la posesión ("ius possidendi"); pero no siempre el titular ejerce efectivamente
esa facultad. En cambio, la posesión no implica la titularidad del derecho de propiedad ni
de ninguno de esos derechos reales ni tan siquiera la preexistencia de un derecho a poseer;
pero, una vez que existe, la posesión confiere al poseedor una serie de facultades o
derechos ("ius possessionis").
JUICIOS SOBRE PROPIEDAD Y POSESIÓN
1. GENERALIDADES
1.1 La Propiedad
Se puede definir La propiedad privada como el poder jurídico pleno o completo de
un individuo sobre una cosa.
Antes de dar inicio al procedimiento en juicio sobre Propiedad , Posesión y
Prescripción, es necesario tener claro el fundamento jurídico principalmente en la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, (CRBV) Título III de los Derechos
Económicos en su artículo 115 establece lo siguiente:
Se garantiza el derecho de propiedad. Toda persona tiene derecho al uso, goce,
disfrute y disposición de sus bienes. La propiedad estará sometida a las condiciones,
restricciones y obligaciones que establezca la ley con fines de utilidad pública o de interés
general. Sólo por causa de utilidad pública o interés social, mediante sentencia firme y pago
oportuno de justa indemnización, podrá ser declarada la expropiación de cualquier clase de
bienes.
Cabe destacar que constitucionalmente se garantiza la propiedad privada, con la
limitación lógica de las restricciones legales. Igualmente se contempla la expropiación por
causa de utilidad pública o social, por sentencia firme y pago oportuno de justa
indemnización.
Asimismo el Código Civil (C.C), en el artículo 545 del establece: “La propiedad es
el derecho de usar, gozar y disponer de una cosa de manera exclusiva, con las restricciones
y obligaciones establecidas por la Ley”
Con lo anterior expuesto se puede decir, que es el dominio que un individuo tiene sobre una
cosa determinada, con la que puede hacer lo que desee a su voluntad, con las restricciones y
obligaciones establecidas por la ley.
1.3 Posesión
Es una situación de hecho, mas no de derecho como lo es la propiedad (derecho real
por excelencia y consecuencia de la posesión a través de la prescripción).
La posesión requiere o necesita dos elementos para configurarse y ellos son el
corpus, que es la cosa en sí y el animus rem sibi habendi que es la intención de comportarse
como su dueño, es decir la posesión requiere la intención y la conducta de un dueño. De
esta manera distinguimos de la tenencia en la cual el tenedor reconoce en otro la propiedad
de la cosa en su poder.
Así mismo es válido recordar que la posesión se presume siempre de buena fe, posee
porque posee.
La imprecisión de la definición y la necesidad de una detentación efectiva del bien o
derecho, llevan a la mayor parte de la doctrina a considerar la posesión como un hecho con
efectos jurídicos.
Si bien la posesión no es un derecho en sí, es necesaria una protección de la misma,
de forma que un poseedor no se vea en la obligación de probar su título posesorio (el
motivo por el cual posee lícitamente) cada vez que alguien intente interrumpir su posesión.
El artículo 771 (C.C), que establece: “La posesión es la tenencia de una cosa, o el
goce de un derecho que ejercemos por nosotros mismos o por medio de otra persona que
detiene la cosa o ejerce el derecho en nuestro nombre.”
Por tanto, la posesión es una situación de hecho, mas no de derecho como lo es la
propiedad, es decir, es el control físico o material de una cosa, en el cual se le otorga a una
persona el poder exclusivo de retener una cosa para ejecutar actos materiales de
aprovechamiento. La posesión requiere de la intención y la conducta de un dueño, es
importante recalcar que en la posesión se presume de buena fe.
Diferencias entre una y otra: es que la posesión es una situación de hecho y la propiedad es
una situación de derecho
1.4 Prescripción
Para abordar la Prescripción, el articulo 1952 (C.C.) establece: “La prescripción es
un medio de adquirir un derecho o de libertarse de una obligación, por el tiempo y bajo las
demás condiciones determinadas por la Ley.”
El Juicio sobre propiedad y posesión, es una novedad en nuestra legislación procesal, todo
con el fin de afianzar y consolidar los derechos de propiedad y los demás derechos reales.
Para ello existe una figura jurídica muy amplia y que posee su propio procedimiento
especial, como lo es la prescripción adquisitiva.
En la propiedad cuando se pretenda la declaración por adquisitiva según la ley o la
declaración de cualquier otro derecho el interesado presentara demanda en forma ante el
juez de primera instancia en lo civil del lugar de situación donde se halle el inmueble. La
propiedad solo se adquiere por la ocupación y otros derechos que se transmiten por la ley,
por sucesión, por efecto de los contratos.
El actor deberá probar en juicio:
1.- Que es propietario de la cosa,
2.- Que el demandado posee o detenta el bien,
3.- Que el bien cuyo dominio pretende es el mismo que posee o detenta el demandado.
1. 5 Efectos de la Reivindicación
La declaración de la existencia de la titularidad del dominio por parte del actor, con
eficacia erga omns según lo establece la doctrina, la restitución de la posesión dispone que
el ilegitimo poseedor devuelva la cosa al propietario, GONZÁLEZ A. 1996 expresa lo
siguiente:
“Tanto el concepto de posesión, como el de despojo, a que se refiere el Artículo 783
del Código Civil, es el resumen de los hechos que realizados en forma material producen la
convicción de que, en efecto, se ha ejercido la tenencia de una cosa y se ha perpetrado la
privación de esa tenencia”. p.326-328
2. Juicio de Prescripción
La prescripción
La prescripción es un medio de adquirir un derecho o de libertarse de una
obligación, por el tiempo y bajo las demás condiciones determinadas por la Ley. En materia
civil la prescripción es en sentido amplio un derecho adquirido por el transcurso del
tiempo.
El Dr. Aníbal Dominicci, citado por Humberto Guzmán, en sus comentarios al
Código Civil Venezolano, conceptualiza la prescripción como “un medio de adquirir por la
posesión o de librarse de una obligación por la inacción del acreedor, después de
transcurrido en tiempo establecido en las Leyes”.
Estamos en presencia pues, de un modo de adquirir un derecho siempre cuando se cumplan
ciertas condiciones legales, y a tal sentido Nuestro Código Civil vigente, estable en su
Artículo 1952 lo siguiente: “La prescripción es un medio de adquirir un derecho o de
liberarse de una obligación, por el tiempo y bajo la demás condiciones determinadas por la
Ley”. Así también, el Art. 1903 de la misma Ley Sustantiva establece: “para adquirir por
prescripción se necesita posesión legítima”. Así pues, tanto las definiciones doctrinales
como normativas legales concuerdan en que la prescripción permite adquirir un derecho o
liberarse de una obligación si ha transcurrido un lapso legal de tiempo.
Sin embargo, notemos que la prescripción origina la ADQUISICIÓN de un derecho pero
también para LIBERARSE O EXTINGUIR una obligación, es decir que podemos tener la
certeza que la prescripción puede ser adquisitiva o extintiva. Para la primera, el requisito
indispensable para que pueda surtir efectos es la Posesión y en el segundo caso lo
indispensable es que exista inactividad del titular del derecho que posee. Estos principios lo
evidenciamos en la Ley Civil Sustantiva en los Artículos 1977 y 1979 que establecen lo
siguiente: “Todas la acciones reales se prescriben por veinte años y las personales por diez,
sin que puedan oponerse a la prescripción la falta de titulo ni de buena fe, salvo disposición
de la Ley”. Y “Quien adquiere de buena fe un inmueble o un derecho real sobre un
inmueble en virtud de un título debidamente registrado y que no sea nulo por defecto de
forma, prescribe la propiedad o el derecho real por diez años, a contar de la fecha del
registro del título”.
Dichos principios tiene sus excepciones, pues en materia de prescripción adquisitiva,
quedan excluidos de esta peculiaridad y por lo consiguiente, no son usucapibles las cosas
que no estén en el comercio (Art. 1959 C.C)
Se distinguen dos clases:
La prescripción adquisitiva y extintiva o liberatoria:
a) La Adquisitiva: tiene por objeto hacer adquirir un derecho sobre una cosa
b) La Extintiva o Liberatoria: es un medio o recurso mediante el cual una persona se libera
del cumplimiento de una obligación recuperando su libertad natural por el transcurso de un
determinado tiempo y bajo las demás circunstancias señaladas en la Ley.
Existen dos especies fundamentales:
• La Prescripción Veintenal: la posesión legítima del derecho correspondiente durante un
lapso de veinte años. Se debe entender como posesión legítima aquella que cumple con los
requisitos establecidos en el artículo 772 del Código Civil “cuando es continua, no
interrumpida, pacífica, no equívoca y con intención de tener la cosa como suya propia”. Por
ejemplo si una persona ha venido ejerciendo la posesión de un inmueble o casa durante un
transcurso de veinte años de manera continua, no interrumpida, pacífica, no equívoca y
manejándose como dueño, aun cuando no tenga título, la Ley considera que ha adquirido la
titularidad de la propiedad por vía legal de la prescripción adquisitiva o usucapión.
• La Prescripción Decenal: También llamada Abreviada, que supone la posesión legítima
del derecho correspondiente y la buena fe del poseedor, unida al transcurso del tiempo (diez
años) y a las condiciones preceptuadas en el artículo 1.979 del Código Civil.
Presupuestos de la prescripción decenal:
• Que se haya adquirido de buena fe un inmueble o un derecho real sobre el inmueble.
• Que la adquisición se funde en un título debidamente registrado que no sea nulo por
defecto de forma.
• El transcurso de diez años contados desde la fecha del registro del título
Régimen General de la Prescripción
a) No puede ser suplida de oficio:
Esto es que el Juez no puede decretarla si la parte a quien aprovecha la prescripción no la
hace valer oportunamente en juicio. Conforme al artículo 1.956 del Código Civil.
b) El destinatario de la Prescripción puede alegarla o renunciarla:
El alegato de la prescripción como defensa contra las pretensiones del actor compete a la
parte a quien favorece el efecto extintivo del nexo por obra del transcurso del tiempo o la
adquisición del derecho por la conjugación de este mismo factor con la posesión legitima.
La renuncia expresa resulta la manifestación directa de la voluntad de no aprovecharse de la
prescripción. La renuncia tácita resulta de todo hecho incompatible con la voluntad de
hacer valer la prescripción. La renuncia no se presume pero toda manifestación dirigida a
no hacer valer la prescripción debe velarse inequívoca y manifiesta. El derecho a renunciar
a la prescripción se reduce a las personas que tienen capacidad para disponer y está
consagrado en el artículo 1.955 del Código Civil por cuanto la renuncia supone disposición
de un derecho ya integrado al patrimonio.
c) Los derechos de terceros: Aunque el deudor o el titular del derecho adquirido renuncie a
la prescripción consumada, los acreedores o cualquier otro interesado en hacerla valer
puede oponerla, artículo 1.958 del Código Civil.
Objeto De La Prescripción
Según lo establecido en el artículo 1.959 del Código Civil, la prescripción no tiene efecto
respecto de las cosas que no estén en el comercio. Involucra la consolidación de un estado
de hecho, correspondiente al contenido de un derecho, por el transcurso del tiempo. Es
necesario entender que los derechos reales posibles son por regla general susceptibles de
ser adquiridos.
Son Susceptibles de Usucapión:
La propiedad; las servidumbres prediales continuas aparentes y discontinuas aparentes, así
como las servidumbres discontinuas aparentes y discontinuas no aparentes; la copropiedad;
el usufructo; el uso; el derecho de habitación y la enfiteusis.
Causas que Impiden, Suspenden e Interrumpen la prescripción
• Causas que impiden la usucapión:
Para que se pueda dar la usucapión (decenal o veintenal) el derecho positivo exige como
constante la posesión legítima según lo establecido en el artículo 772 del Código Civil.
La causa que impide la prescripción adquisitiva se vincula a la ausencia de posesión
legítima. Cuando exista una causa típica de esta adquisición por negocio jurídico,
compraventa, arrendamiento, de ella se deducirá la intención y el concepto posesorio, de
manera objetiva. Si la adquisición tiene lugar sin la intervención de la voluntad del
poseedor esta circunstancia no influye en la calificación del concepto posesorio.
• Suspensión de la prescripción:
La prescripción se suspende cuando la Ley impide que corra a favor de alguien. Su efecto
consiste en que no se cuente el tiempo de la suspensión. Únicamente se cuenta el tiempo
anterior de la suspensión, que es útil, que se adicionará más tarde el tiempo al que corra,
cuando cese la causa de la suspensión. No elimina estas causas él término transcurrido
antes de su verificación. Las causas generadoras de la suspensión obedecen a: A las
relaciones que vinculan a aquel en contra del cual corre la usucapión con el usucapiente (en
especial, relaciones de derecho de familia). Estas causas que suspenden la prescripción
están establecidas en los artículos 1.964 y 1.965 del Código Civil.
• Interrupción de la Prescripción:
Consiste en eliminar retroactivamente el tiempo transcurrido a favor del prescribiente, en
forma tal que, si se iniciara nuevamente la prescripción, el plazo anterior no entraría en el
cómputo. Está establecida en el artículo 1.967 del Código Civil.
• Interrupción Natural:
Esta se configura cuando el poseedor, por cualquier causa, deja de estar en posesión de la
cosa por más de un año; está establecida en el Código Civil en su artículo 1.968. Por
abandono o renuncia o porque un tercero le sea quitada la posesión. El abandono voluntario
de la posesión produce la pérdida definitiva del tiempo anterior.
• Interrupción Civil:
Estipulada en los artículos 1.969 y 1.973 del Código Civil enuncia las dos formas de
interrupción civil de la prescripción adquisitiva:
a. La demanda judicial, aunque se intente ante un Juez incompetente.
b. El reconocimiento del derecho del titular efectuado por el prescribiente. El decreto y el
acto de embargo y el cobro extrajudicial, son formas interruptivas aplicables a la
prescripción extintiva de los créditos.
Procedimientos:
A efectos de salvaguardar los intereses de quien pretenda solicitar la titularidad de la
propiedad de un inmueble por vía de la usucapión, éste deberá acudir por vía de demanda
ante un tribunal de primera instancia a efectos de que previamente revisados los extremos
de ley contemplados en los artículos 1.979 y 772 del Código Civil, le sea otorgado
mediante una acción mero declarativa dicha titularidad, (sino hay un tercero interesado que
se oponga a la misma), de existir dicho tercero el juez deberá resolver mediante la
utilización de la Ley, la lógica, máxima de experiencias y la sana critica dicho conflicto
intersubjetivo de derechos.
El procedimiento implica la citación de los demandados principales, que son
precisamente aquellos titulares de derechos reales susceptibles de registro, en la forma
prevista en el CPC, y la vigencia de un Edicto, que se fijará y publicará en la forma prevista
en el artículo 231 CPC que establece: “Cuando se compruebe que son desconocidos los
sucesores de una persona determinada que ha fallecido, y esté comprobado o reconocido un
derecho de ésta referente a una herencia u otra cosa común, la citación que debe hacerse a
tales sucesores desconocidos, en relación con las acciones que afecten dicho derecho, se
verificará por un edicto en que se llame a quienes se crean asistidos de aquel derecho para
que comparezcan a darse por citados en un término no menor de sesenta días continuos, ni
mayor de ciento veinte, a juicio del Tribunal, según las circunstancias.
El edicto deberá contener el nombre y apellido del demandante y los del causante de
los sucesores desconocidos, el último domicilio del causante, el objeto de la demanda y el
día y la hora de la comparecencia.
El edicto se fijará en la puerta del Tribunal y se publicará en dos periódicos de los
de mayor circulación en la localidad o en la más inmediata, que indicará el Juez por lo
menos durante sesenta días, dos veces por semana, una vez que esté realizada la citación de
los demandados principales, emplazando para el juicio a todas aquellas personas que se
crean con derechos sobre el inmueble.
La Sala de Casación Civil ha determinado el alcance del artículo 231 del CPC, al establecer
que la obligación de citar a los herederos desconocidos mediante edicto es aplicable incluso
cuando no esté demostrada la existencia de éstos.
La publicación de los edictos para la citación de los herederos desconocidos es una carga de
las partes, específicamente de los herederos conocidos, y la omisión deriva en la perención
de la instancia. Si las partes actúan con diligencia en la tramitación de la publicación de los
edictos y el tribunal incumple su responsabilidad, procede la anulación de lo actuado y la
reposición de la causa al estado de que se produzca la publicación correspondiente.
Los demandados principales deberán contestar la demanda dentro de los veinte días
siguientes a la citación del demandado, o del último de los demandados, mientras que los
terceros intervinientes, que se crean con derechos en el inmueble que no estén registrados,
deberán comparecer dentro de los quince días siguientes a la última publicación del edicto,
tomarán la causa en el estado en que se encuentre y podrán hacer valer todos medios de
ataque o de defensa admisibles para los demandados principales siempre que acompañe
prueba fehaciente del derecho que invoque sobre el inmueble.
La publicación del edicto debe efectuarse una vez cumplida la citación de los
demandados principales; mientras que la contestación de la demanda debe tener lugar
dentro de los veinte días siguientes a la citación del último de los demandados si fueran
varios y no desde la última publicación del edicto, lo contrario sería infringir los artículos
692 y 694 CPC.
La sentencia declarativa de propiedad por prescripción adquisitiva es un instrumento
apto para ser registrado e inscrito en el Registro de la propiedad inmobiliaria. El mismo no
puede ser impugnado de la forma como se prevé en los casos de filiación.
3. Interdictos Posesorios y Prohibitivos
Tal como lo aprecia la doctrina y nuestra legislación procesal especial interdictos es,
proteger el derecho posesorio contra el desalojo, las perturbaciones, o para prevenir los
daños que presumiblemente pueda causar una obra nueva o vieja; en los cuales y en
atención a los agravios del agente perturbador responsable de los daños, como de los
efectos que en cada caso se pueda prever para solventar la agresión. Cualquiera que sea el
fundamento de la acción interdictal, que se promueva requiere que el titular de ella sea o
tenga la cualidad de poseedor del bien o del derecho, cuya protección solicita. Los cuales se
distinguen en dos grupos:
Interdictos Posesorios:
El cual está destinado a preservar la posesión de los damnificados, contra actos de despojos
o perturbaciones (Art.16 C.P.C), el cual da lugar a dos tipos de interdictos.
a) Interdictos de despojo: según lo que establece el Art. 783 del C.C “Quien haya sido
despojado de la posesión cualquiera que ella sea, de una cosa mueble o inmueble, puede,
dentro de un año del despojo, pedir contra el autor de él, aunque fuere el propietario, que se
le restituya en la posesión”. Este es el fundamento legal y procediendo de conformidad con
el Art. 699 del C.P.C donde el afectado puede ocurrir ante el Juez de Primera Instancia, en
lo civil del lugar donde se encuentra situada la cosa objeto del agravio, para solicitar la
restitución o devolución de los bienes muebles o inmuebles sobre los cuales se hubieren
afectado los actos despojatorios.
b) Interdictos de amparo: la acción interdictal consigue su fundamento legal en el Art. 782
del C.P.C “Quien encontrándose por más de un año en la posesión legitima de un inmueble,
de un derecho rea, o de una universidad de inmuebles, es perturbado en ella, puede dentro
de un año, a contar desde la perturbación, pedir que se mantenga en dicha posesión” y “en
caso de una posesión por menor tiempo, el poseedor no tiene esta acción, sino contra el no
poseedor o contra quien lo fuere por un tiempo más breve”. Entonces encontrándonos
dentro de las hipótesis que establecen estas normas, se debe considerar titular de la acción
que le autoriza el Art.700 del C.P.C, para ocurrir ante el juez de Primera Instancia Civil, a
los fines de solicitar se decrete a su favor el AMPARO de los actos de perturbación
ejecutados, a los fines de que cesen.
Interdictos Prohibitivos:
Están destinados a la protección de los inmuebles, derechos reales o a otros objetos con
ocasión de la ejecución de alguna obra. El da lugar a dos tipos de interdictos:
a) Interdicto de obra nueva: según el Art. 785 “Quien tenga razón para temer que una obra
nueva emprendida por otro sea en su propio suelo, sea en suelo ajeno, cause perjuicio a un
inmueble, a un derecho real o a otro objeto poseído por él, puede denunciar al juez la obra
nueva con tal que no esté terminada y que no haya transcurrido un año desde su principio “.
Lo primero que se debe destacar es que el fundamento de la petición es una apreciación
subjetiva, en que se sustenta el temor que el sujeto pueda haber albergado con ocasión de
que una obra pueda causarle daño a sus viene.
b) Interdicto de obra vieja: “Quien tuviere motivo racional para temer que un edificio, un
árbol o cualquier objeto que amenace con daño próximo un predio u otro objeto poseído
por él, tendrá derecho a denunciarlo al Juez y, de obtener, según las circunstancias, que se
tomen las medidas conducentes a evitar el peligro o que se intime al interesado de dar
caución por los daños posibles”. A los efectos de diseñar el proceso para encausar la
denuncia del posible daño que pueda causar la edificación de edad provecta, el árbol o
cualquier otro objeto, el legislador sigue la conducta desarrollada en la legislación
sustantiva y que se repite en el Art. 786 del C.C y se oirá apelación en solo un efecto.
Competencia
En el caso específico de los procedimientos por Interdictos Prohibitivos (Obra Nueva y
Obra Vieja), la competencia fue asignada a los Juzgados de Primera Instancia por
nomenclatura con criterio forum rei sitae (donde esté situado el inmueble) sin importar la
cuantía establecida para el asunto, esto es, que independientemente que la demanda esté
estimada en menos de 3000 U.T., compete conocer al Juzgado de Primera Instancia Civil,
salvo que no exista en la localidad Tribunal de Primera Instancia en cuyo caso si
correspondería al Juzgado de Municipio respectivo. (Conforme a la Decisión Juzgado de
los Municipios José Félix Ribas y José Rafael Revenga de la Circunscripción Judicial del
estado Aragua. Sentencia 14-02-2011, Exp. 3066.
Procedimiento en los Interdictos
1. Se introduce la demanda, mediante un escrito que cumpla con los requisitos del Art. 340
CPC.
2. Se suponen que transcurren 3 días para el Auto de Admisión
3. Se consignan todas las pruebas
4. El Tribunal admite la acción o demanda
5. En ese estado, el Tribunal solicita al Querellante que constituya una garantía por la
cantidad de dinero que el estime conveniente para responder de los daños y perjuicios que
pueda causar su solicitud en caso de ser declarada sin lugar.
6. El Querellante verá si constituye o no la garantía exigida por el Tribunal
7. Si el Querellante constituye la garantía, el Tribunal inmediatamente le decretará la
restitución de la posesión
8. Si el querellante manifestare no estar dispuesto a constituir la garantía, pueden pasar dos
cosas:
a) Si el Juez verifica que están llenos o no, los requisitos del Art. 585 CPC, es decir; que
exista riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo y siempre que se
acompañe un medio de prueba que constituya presunción grave de esta circunstancia y del
derecho que se reclama. (Fumus boni iure – Pericullum in mora); va a decretar el
secuestro.
b) Si no cumple con estos requisitos, no decreta nada.
9. Decretada la restitución de la posesión, se práctica y ordena la citación.
10. Practicada la Citación del Querellado, éste quedará emplazado para el 2do. Día
siguiente a la citación, a fin de que exponga los alegatos que considere pertinentes en
defensa de sus derechos (Conforme a la Decisión de la Sala de Casación Civil del TSJ.
Sentencia 22-05-01, Exp. Nº. 00-202)
11. Luego, se abre la causa a pruebas por 10 días.
12. Concluido dicho lapso, las partes presentarán dentro de los 3 días siguientes, los
alegatos que consideren convenientes.
13. El Juez, dentro de los 8 días siguientes, dictará la sentencia definitiva.
14. En el lapso de sentencia, pueden pasar dos cosas:
a) Que declaren el interdicto CON lugar; cuya consecuencia será la extinción de la
garantía.
b) Que declaren el interdicto SIN lugar; la decisión será apelable en un solo efecto.
15. Si la decisión de la apelación en un solo efecto es declarada SIN lugar; ocurren dos
cosas:
a) Se vuelve a restituir en la posesión al que haya resultado despojado, por la medida
dictada con lugar.
b) Se procede a la ejecución de la garantía.
4. Deslinde Propiedad Contiguas
La acción de deslindar
Procesalmente hablando, la acción de deslindar es la facultad que tiene todo propietario de
determinar con precisión, los límites de su finca y al mismo tiempo, la obligación que tiene
el vecino colindante de permitir que se produzca el ejercicio de tal facultad y que al mismo
tiempo, también pose. Esto es lo que ha llevado a muchos autores, con razón a decir que la
acción de deslinde constituye una acción doble.
Articulo 550 CC. Todo propietario puede obligar a su vecino al deslinde de las
propiedades contiguas, y de acuerdo con lo que establezcan las leyes y ordenanzas locales,
o en su defecto, los usos del lugar y la clase, de la propiedad a construir a expensas
comunes, las obras que la separa.
Presupuesto Sustanciales Establecidas por la Norma
Para que exista la posibilidad procesal de ejercer la acción de deslinde,
sustantivamente el requerimiento de le pretensión de acuerdo a lo establecido por la norma,
debe obedecer a los siguientes requisitos:
1. Que las propiedades a deslindar sean contiguas o colindantes
2. Que las partes intervinientes sean propietarias de los inmuebles a deslindar
3. Que los linderos sean desconocidos e inciertos.
Características de la Acción de Deslinde
a) Es de orden publico
b) Como consecuencia de la anterior, resulta que la acción de deslinde por ser de orden
público, es irrenunciable
c) Es imprescriptible
Criterios Técnicos
A pesar de que no se establecen criterios técnicos para la fijación del lindero y el contenido
del acta, para mayor seguridad jurídica de las partes, deben indicarse los siguientes
elementos:
Los accidentes encontrados, cercas, hitos, mojones, ríos, lagos y cualquier otra
circunstancia preexistente que contribuya a la precisión de los límites.
Una indicación minuciosa de los nuevos hitos que definen los linderos.
La composición geológica de los terrenos y la cualidad y extensión de los mismos.
Las vías de comunicación.
El establecimiento de coordenadas U.T.M. en cartas bases topográficas aéreas.
La indicación de cualquier otra circunstancia que fuere útil para el levantamiento de la
línea divisoria o para la identificación de la línea ya levantada.
Fijación De Linderos
El CPC da una connotación diferente al acto de deslinde ya que, una vez oídas las
exposiciones de las partes, el Tribunal procederá inmediatamente a deslindar las
propiedades fijando los linderos. Si el lindero fijado por el Juez no es aceptado por las
partes siempre tendrá la condición de lindero provisional, cumpliéndose el objeto del acto
de deslinde. Por tal razón, las partes podrán expresar su disconformidad con el lindero
provisional, señalando los puntos en que discrepen de él y las razones en que fundamenten
su discrepancia, por cuanto es una oportunidad preclusiva.
La actividad probatoria posterior está referida a esta actuación y es de carácter
delicado porque cualquier omisión de sustanciación de las pruebas puede originar la
nulidad de la sentencia.
Tratándose entonces de un procedimiento en el que está envuelto el interés público de
evitar conflictos de vecindad, el juez está obligado a fijar los linderos, aunque sea en forma
provisional, y las partes deben respetar la definición hecha hasta tanto sea revisada de
acuerdo a los mecanismos procesales establecidos. Caso contrario, si el colindante traspasa
o altera el lindero provisional se le impondrá una multa en beneficio de la otra parte y
quedará sujeto a responder de los daños y perjuicios que hubiere ocasionado.
Oposición a la Fijación de Linderos
Sólo en el supuesto de que la parte interesada formule la oposición en el acto de deslinde,
se pasarán los autos al Juez de Primera Instancia en lo Civil, ante quien continuará la causa
por el procedimiento ordinario, entendiéndose abierta a pruebas al día siguiente del recibo
del expediente. En los supuestos en que no se produzca oposición al lindero fijado por el
tribunal, éste quedará firme ordenándose, mediante auto expreso, la expedición de las
certificaciones del acta de la operación de deslinde y del auto que declare firme el lindero a
fin de que se protocolice en la Oficina Subalterna de Registro correspondiente y se
estampen las respectivas notas marginales en los títulos de cada colindante.
Apelación
La decisión que dicte Primera instancia sobre la oposición o inconformidad alegada por el
demandado y resuelta en el procedimiento ordinario tiene carácter de sentencia definitiva,
por lo cual puede ser objeto de apelación en ambos efectos, contra la cual no es procedente
alegar que con ella se estaría validando una tercera instancia, pues el Tribunal de Distrito
(municipio) si bien es cierto que admitió la solicitud de deslinde y trato de practicar el
deslinde pero al momento de producirse la oposición , pierde el conocimiento del asunto y
sin decisión sobre el contradictorio remite todo el expediente a Primera Instancia y solo por
razones de paz social provisional un alinderamiento temporal y por supuesto no definitivo.
CONCLUSION
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Código Civil. (1982).
Código Procesal Civil Venezolano (1990). Recopilaciones y Reorganización para hacerlo
pertinente a los objetivos del Manual, Autor: José Antonio Mangiagli Testamarck.
01/12/2010
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (1999).
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