TEMA 6

1. Asociaciones

La más importante de las personas jurídicas sin fines de lucro que regula el código civil es
la asociación.

Esta entidad es definida como una organización de personas naturales o jurídicas, o de

ambas, que a través de una actividad común persigue un fin no lucrativo.

“Las asociaciones son entidades creadas a partir de la unión de dos o más personas
naturales o jurídicas, o la combinación de una y otras. Para su constitución, entonces, se
requiere siempre pluralidad” (Fernández Sessarego, La persona en la doctrina jurídica
contemporánea)

Además, se requiere que la entidad persiga fines no lucrativos, esto es, que los miembros
no constituyan la entidad con la intención de distribuirse los correspondientes
rendimientos de capital que pudiesen generarse. El carácter no lucrativo se manifiesta en
el escenario de disolución y posterior liquidación de la asociación, en el que tampoco
habrá distribución del haber neto resultante. También se manifiesta en la relación que
existe entre sus miembros, entendemos que es de tipo no económico.

Encontramos una vasta gama de actividades no lucrativas que pueden desarrollar los
miembros de la asociación, entre ellas de carácter benéfico, cultura, religioso, deportivo,
gremial, etc.

Las asociaciones se constituyen por acto de autonomía privada. Al acto constitutivo se

adjuntan los correspondientes estatutos que son elevados a escritura pública. La
existencia jurídica de la asociación se dará desde su inscripción en el correspondiente
registro adscrito en el Gobierno autónomo departamental

La Ley departamental No 133 en su artículo 11 sobre los requisitos para la otorgación de

personalidad jurídica para asociaciones establece entre otros la presentación del poder del
representante legal, acta de fundación, estatutos y reglamentos internos, además de la
lista de asociados.

Las personas jurídicas de tipo asociativo se crean, en principio, para ser estables en el
tiempo. Si bien no hay una indicación sobre el particular en el código civil, el articulo 64
con relación a la extinción de la asociación, por las causas previstas en sus estatutos (un
tiempo de duración de la persona jurídica), sin embargo es frecuente que se entienda esta
como de duración indefinida, ello para otorgar a la entidad de cierto carácter de
estabilidad que diferenciaría a este tipo de personas jurídicas de otras.

Además este tipo de organización, tiene otra característica y es que está abierta a la
incorporación de nuevos miembros en la medida que compartan el objeto para el cual fue
creada. Las reglas para la admisión de nuevos miembros están supeditadas al contenido
estatutario; es así que el artículo 60 del código civil estable que: “Los estatutos deben
indicar la finalidad de la asociación, su patrimonio, las fuentes de sus recurso, y las normas
para el manejo o administración de estos. Los estatutos deben también determinar las
condiciones de admisión y exclusión de los asociados, los derechos y obligaciones de ellos
y las normas relativas a la extinción de la entidad”
2. Las fundaciones

A diferencia de lo que ocurre con las asociaciones, las fundaciones son entidades no
lucrativas que se constituyen con fines estrictamente de interés social.

“La fundación es un organización no lucrativa instituida mediante la afectación de uno o

más bienes para la realización de objetivos de carácter religioso, asistencial, cultural u otro
de interés social”

Este tipo de entidades se constituye a partir de la afectación de determinados bienes por

parte de una o varias personas naturales o jurídicas que actuaran a título de fundador o
fundadores, según fuere el caso

Espinoza Juan en su libro Derechos de las Personas, señala que, no tenemos en esta
entidad miembros en estricto sino gestores del patrimonio a título de administradores que
se encargaran de salvaguardar el patrimonio.

El código civil en su artículo 67 establece que la fundación tiene por objeto afectar bienes,
por la voluntad de una o más personas, a un fin especial no lucrativo.

La fundación se constituye por acto de autonomía privada, el acto fundacional puede ser
unilateral o plurilateral, siendo que los fundadores pueden ser una o varias personas
naturales o jurídicas, o la combinación de una y otras. La fundación se constituye por
escritura pública o por testamento.

El propio carácter de la fundación hace que esta no tenga miembros o titulares. El

fundador tiene como función proveer el patrimonio suficiente para satisfacer el objeto
para el cual ha sido creada la entidad. Los administradores en principio designados por
este, cumple una función gestora de la persona jurídica y de la consecución de sus fines.
No estamos ante una entidad abierta a afiliación dado que la “pertenencia” a ella solo se
daría a título de administrador.

Conforme a lo anterior, el único órgano que legalmente está contemplado es la

administración. La administración puede ser ejercida tanto por personas naturales como
por personas jurídicas. Sus funciones incluyen la representación de la fundación y asegurar
que el patrimonio afectado se asigne a la finalidad de interés social para la cual se ha
creado la entidad.

Al igual que en el caso de la asociación, es posible que la entidad realice actividades

económicas encaminadas a generar recursos que permitan alcanzar el objeto para el cual
ha sido creada. Naturalmente, ello excluye el beneficio al fundador o a sus familiares. Es
posible la generación de excedentes, los cuales se aplicaran a los fines de la entidad.
Queda claro que la búsqueda por alcanzar el objeto requiere del aporte inicial del fundador
o fundadores. Pero además de ello es posible generar rendimientos que serán útiles sobre
todo para las actividades de larga duración.

Finalmente es importante precisar que, en la medida que los administradores gestionan un

fondo económico concedido por el fundador, y además, en la medida que nos
encontramos ante la consolidación de objetivos de interés social a través de la fundación,
en el código civil se ha considerado necesario un mecanismo de supervisión de todas las
fundaciones, a través del Ministerio Publico, articulo 70 del código civil, todas las
fundaciones quedan sometidas a la vigilancia del Ministerio Publico, sin embargo no hay
una oficina o institución especifica de vigilancia dentro del Ministerio Publico.

3. Comunidades campesinas

En el ámbito constitucional, se ha resaltado la importancia de este tipo de personas

jurídicas. Su protección no implica solamente entenderlas como entidades de derecho
privado sino como parte de la identidad de nuestro país y actor importante en su
desarrollo económico.

La Constitución establece lo siguiente:

Artículo 2. Dada la existencia precolonial de las naciones y pueblos indígena originario

campesinos y su dominio ancestral sobres sus territorios, se garantiza su libre
determinación, que consiste en su derecho a la autonomía, a su cultura, al reconocimiento
de sus instituciones y a la consolidación de sus entidades territoriales.

Las comunidades campesinas son organizaciones de interés público, con existencia legal y
personería jurídica, constituidas por personas naturales y cuyos fines se orientan al mejor
aprovechamiento de su patrimonio, para beneficio general y equitativa de los comunarios,
promoviendo su desarrollo integral.