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Ética
Salvador
Sección: 02
Docente:
Actividad:
Respuestas a la lectura:
“ÉTICA PUBLICA".
Estudiante: Carnet:
Fecha de entrega:
03/06/2020
ÉTICA PUBLICA
La ética pública y su relación con el servidor público. La ética pública es la disciplina que
estudia y analiza el perfil, la formación y el comportamiento responsable y comprometido
de las personas que se ocupan de los asuntos públicos, generando un cambio de actitud
en ella al inculcarles valores de servicio público.
Prestar un servicio implica dos requisitos: compromiso con el trabajo y respeto por la
persona a quien se sirve. Si el servicio se dirige a una comunidad, el compromiso es aún
mayor y lo es más si es público y si proviene del Estado. Esa es la razón por la que a las
personas que trabajan en la administración pública se las llama «servidores públicos»,
cuya función es la de ayudar a resolver conflictos comunes y a satisfacer las necesidades
de la comunidad pensando en el logro de un bien común. La transparencia es uno de los
valores éticos que todo servidor público debe aplicar en el ejercicio de su función, de ahí
la necesidad de detenernos en su análisis y en su confrontación con otros conceptos tales
como el derecho a la información, el acceso a la información y la rendición de cuentas con
los que la transparencia convive y se interrelaciona diariamente en la labor pública.
El término rendición de cuentas, está muy vinculado con la idea de controlar al poder, de
prevenir y evitar sus abusos, de limitarlo a ciertas normas y reglas de conducta. Este
concepto pone de manifiesto la preocupación por supervisar, controlar y restringir al
poder, con lo que adquiere una gran relevancia democrática. Deriva de la palabra inglesa
accountability, la cual a veces se traduce como control, otras veces como fiscalización y
otras como responsabilidad, pero la traducción más frecuente es como «rendición de
cuentas», incluyendo tanto a los que rinden cuentas como a los que exigen cuentas. Así
como un empleado rinde cuentas a su jefe, la autoridad pública rinde cuentas a la
comunidad, es decir que un buen gobierno rinde cuentas explicando sus acciones a la
sociedad.
A responder (3 de junio).
Esto si bien a sido siempre una obligación para toda entidad puede variar
dependiendo de la ética de quienes prestan el servicio.
La corrupción estatal corroe la capacidad del gobierno para ayudar a hacer crecer la
economía de manera que todos los ciudadanos se beneficien. Así que la corrupción en
general es dañina pero a mi criterio lo es a mayor escala si hablamos de una corrupción
estatal.
Con esta historia se podría comparar muchas de las sociedades actuales, es un gran
espejo para todas las supuestas democracias y las épocas que ha vivido la humanidad
hasta hoy.
En esta fábula animada de pocos minutos, podemos explicar los riesgos a los que se
expone la democracia de una sociedad cuando se limita, exclusivamente, a introducir un
papel en una urna, con un voto que va dirigido hacia una corriente política. Se evidencia
un país fragmentado que se deja llevar por publicidad que solo se ve en temporada de
elecciones y donde las personas defienden una corriente política que siempre termina por
ir en contra de sus propios intereses, la defienden como una religión que va impregnada
en sus mentes porque piensan que su dios es el verdadero.
Esta animación es tan verídica que mientras la observamos, nos vamos fijando que la
política esta devaluada, que la actualidad sigue siendo lo mismo que el pasado y que lo
podemos evidenciar en las campañas políticas que busca de cualquier manera hacer lucir
mejor a sus candidatos. La gran realidad es que no hay quien quiera hacer algo realmente
valioso por el pueblo, sino que por el contrario solo quieren protagonismo político o usar a
otros gobernantes para alcanzar sus propios intereses y beneficiar a algunos cuantos.
En las escuelas, universidades y hasta por medios de comunicación nos ensenan que la
democracia es la soberanía del pueblo pero sabemos que eso es en teoría porque en
algún momento de nuestra historia todo cambio y lo que se nos dio por derecho se nos
arrebató de alguna manera y nos hemos quedados petrificados mirando como el sistema
político se convirtió en una empresa, donde el pueblo somos los obreros y la burguesía
nuestros señores, nos hemos reducido a eso y no hemos avanzado como sociedad, nos
hemos dejado gobernar por la misma elite que con el paso de los años parecen
inmortales porque suben los hijos de los hijos y así sucesivamente, somos un pueblo
muerto, donde aunque somos la mayoría nos dejamos reducir por los que tienen más
dinero y nos contentamos con ese viajecito gratis que nos dan solo en época de
elecciones.
Gobierno de gatos para ratones podría ser cualquier lugar en el mundo pero
personalmente la contrasto con la realidad Salvadoreña porque es aquí donde he visto
como los gatos de todos los colores se disfrazan de ratones para devorarse nuestros
derechos, para engañarnos y hacernos sentir que todo va cambiar pero que en realidad si
cambia pero para su beneficio, El Salvador al igual que otras sociedades ha tratado de
reemplazar los gatos, los hemos visto de múltiples tamaños, razas y colores y lo
inentendible es que ha surgido alguno que otro ratón que convoca a otros ratones, pero
que en nuestra realidad Salvadoreña terminan burlados por los mismos y/o devorados por
los gatos.
Es increíble que después de haber pasado más de 30 años de estos gobiernos donde nos
reflejan la realidad con lo que vivimos, sigamos eligiendo a las mismas personas que no
han mejorado la calidad de vida, que no seamos capaces de diferenciar a quien debemos
apoyar para que los gatos puedan ser sacados de su comodidad, sino que seguimos
arraigados a los mismos partidos políticos que no hacen nada por mejorar pero
si llevarnos a más dificultades.
Es irónico ver que seguimos votando por los mismos partidos de siempre que nunca
terminan estando a nuestro favor sino haciendo todo lo beneficiable a la clase alta, a la
clase donde pertenecen los gatos que los ratones que elegimos como gobernantes.