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ENFOQUE INTEGRAL DEL MANDO POLICIAL1

Resumen

El presente artículo trata de aportar a la comprensión actual del mando policial mostrando
un enfoque coherente al contexto social e institucional, el cual responde a las evoluciones
que se han venido dando en estos contextos.

El cambio en las formas de mando que se ejerce en la institución policial, es crucial para
mejorar las relaciones que de forma permanente se generan en su ejercicio y que median
e influyen en un mejor desempeño de los funcionarios, lo que se reflejará en la prestación
de un mejor servicio policial.

El documento muestra como la visión de quien ejerce mando en la institución policial debe
ser amplia e integral para entender la nueva forma de gerenciar, dirigir y liderar el talento
humano de una institución moderna que interactúa en un contexto caracterizado por el
conocimiento y la tecnología donde debe alcanzar resultados efectivos.

Summary

This article tries to contribute to the current understanding of the police command by
showing a current approach to the social and institutional context, which responds to the
evolutions that have been taking place in these contexts.

The change in the forms of command that is exercised in the police institution is crucial to
improve the relationships that are permanently generated in its exercise and that mediate
and influence better performance that must be reflected in achieving better service. Police.

The document shows how the vision of those who exercise command in the police
institution must be broad and comprehensive to understand the new way of managing,
directing and leading the human talent of a modern institution that interacts in a context
characterized by the knowledge and technology that you must achieve effective results.

1
Coronel RAP. Jorge Elías Salazar Pedreros. Magister en Seguridad Pública, Especialista en Gestión Pública,
Especialista en seguridad, Especialista en Docencia Universitaria, Profesional en Administración Policial,
Administración de Empresas, Tecnólogo Policial.
Introducción

El mando policial no debe ser entendido como un concepto único o individual, como pudo
ser visto en tiempos anteriores, sino que en el contexto actual debe observarse de una
forma amplia e integral, al cual convergen una serie de conceptos, capacidades y
competencias que responden a varios procesos que hoy por hoy deben integrarse,
complementarse y correlacionarse para lograr un excelente ejercicio del mando y en
consecuencia alcanzar resultados sobresalientes y apreciables en un grupo o unidad policial.

La afirmación anterior, interpreta de manera totalmente contraria varios de los postulados


que en la década de los años setenta mostraban separadamente al líder y al directivo dando
el mensaje que estos atributos correspondían individualmente a personas diferentes, -algo
sin sentido- ejemplo de ello lo reseñó el señor Abraham Zalenick en 1977 en un artículo en
que manifestó que mientras los líderes eran mas activos y creativos, los mandos eran más
reactivos y estaban focalizados en dar respuesta a las ideas generadas. (Palomo, 2010, p17)
Allí estaba graficando a un mando directivo sin liderazgo, y separadamente a un líder; mas
el directivo de hoy debe integrar en sí mismo necesariamente estos dos campos si pretende
ser exitoso.

Por ello, el mando policial implica el desarrollo de procesos de liderazgo, gerenciales y


administrativos, propios de las ciencias de administración y más precisamente de la
administración policial, necesarios para la dirección de organizaciones modernas como la
Policía Nacional. Por ello los funcionarios que reciben la facultad de ejercer mando policial
requieren de una preparación especial que lo forme en competencias y capacidades para la
dirección en cuerpos de policía.

Enfoque integral del mando. El Autor

Uno de esos procesos al cual se ha asociado generalmente el mando policial es el ejercicio


del liderazgo, debido a la esencia propia del hombre y mujer policía y su significado frente
a la comunidad, donde es visto como un referente de servicio, colaboración y ayuda.
Mandar por mandar sin un sentido racional y de comprensión del subalterno y de como
influir en él sin necesidad de recurrir a la aplicación de correctivos o a formas de trato
fuertes o impositivas, forman parte de mandos sin liderazgo o con unas formas de liderazgo
impropias y descontextualizadas que se rigen por lineamientos autoritarios y egocentristas
donde la autoridad y el poder están centradas en quien ejerce el mando.

En este sentido el liderazgo debe considerarse como el proceso central del ejercicio del
mando debido a la gran influencia que tiene en el logro de las metas y objetivos del grupo
o de la unidad, y la institución policial lo ha entendido así, por ello se promueve en la
actualidad la adopción de un modelo de liderazgo holístico policial que busca que todo
policía se desarrolle como líder en todos lo ámbitos de su vida y en todos los entornos
institucionales, de tal manera que se fortalezca el liderazgo policial dentro de la institución
y hacia la comunidad en general. Ser un gran líder no le garantiza a un funcionario ser el
mejor mando, pero le abona en gran parte el terreno para que al complementarse con las
otras disciplinas pueda llegar a la excelencia.

Igualmente, el ejercicio del mando policial se ha desarrollado dentro del estudio de las
teorías de la administración teniendo en cuenta que quien ejerce mando debe direccionar
unidades policiales integradas por talento humano y diferentes procesos propios de la
administración. De allí que en la formación policial se ha privilegiado y profundizado el
brindar competencias a los mandos en gerencia y administración policial.

En este orden de ideas, el enfoque integral del mando policial implica entender el ejercicio
del mando como la interacción de varios procesos y conceptos que se deben desarrollar y
perfeccionar en quien lo ejerce2. Este enfoque busca que cada funcionario que es nombrado
con la facultad de mando además de la educación que le brinda la institución, se preocupe
por adquirir conocimientos en estos campos para poder ser reconocido como un excelente
mando policial.

-Campo Gerencial:

Este campo lo desarrollan todos aquellos funcionarios a quienes se les ha otorgado mando
en los diferentes niveles de la institución lo que implica que tanto oficiales como miembros
del nivel ejecutivo con mando comparten algunos cargos en los cuales se desempeñan con
las mismas funciones, tal es el caso de los Comandos de Estación de Policía o Comandos de
Atención Inmediata CAI o en las jefaturas de Talento Humano, entre otros.

El campo gerencial se interrelaciona con el concepto de dirigir, encargado de ejecutar las


actividades programadas. El éxito de la dirección está determinado por la capacidad del
mando (gerente) de orientar, guiar, y motivar a sus subordinados a cumplir con las tareas
asignadas.

La Policía Nacional como Institución ha diseñado su modelo gerencial denominado Sistema


de Gestión Integral, el cual reúne la gestión de la estrategia, la gestión de los procesos y la

2
Concepto propio del autor.
gestión del talento humano y la cultura institucional, enfocados hacia la generación de valor
hacia los ciudadanos y al logro de la misión asignada a la Policía Nacional.

En este sentido, el Sistema de Gestión Integral se convierte en la principal herramienta


administrativa con que cuenta un mando policial que se desempeña como comandante,
para gerenciar una unidad o grupo, por ello el primer componente de gestión de la
estrategia, implica llevar a la práctica todo el planeamiento de la estrategia institucional
referente al mantenimiento de las condiciones necesarias para la convivencia pacífica, o sea
ejecutar todos los planes y programas integrados en el plan estratégico institucional que se
despliega por medio de los planes de acción en las unidades operativas y que se materializa
por medio del servicio policial a nivel nacional. Es evidente entonces, que desde las
unidades básicas hasta las direcciones están comprometidas en la implementación y
cumplimiento del plan estratégico institucional PEI.

En cuanto al segundo componente del SGI, gestión y estructura de procesos, impone al


comandante comprender el significado de la gestión en función a los procesos, en este caso
la Policía Nacional tiene su proceso misional de convivencia y seguridad ciudadana el cual
tiene un carácter nacional y es desarrollado por todas las unidades operativas de la
institución a todo nivel. En este sentido el comandante debe conocer el proceso y los
diferentes procedimientos que se desarrollan en cumplimiento de este, los cuales son
gerenciados por medio del SGI. En este componente se articulan los subprocesos de
prevención, inteligencia e investigación criminal que hacen parte del proceso misional y
deben desplegarse y aportar integradamente en el servicio de seguridad ciudadana que
prestan las unidades policiales.

Y en el tercer componente que es el de talento humano y gestión de la cultura institucional,


el mando comandante gerencia y dirige a sus subalternos implementando en su unidad
todos los aspectos aplicables del componente como son, por ejemplo, la evaluación, la
capacitación, el estímulo, la motivación, entre otros. En este componente el mando debe
preocuparse por generar un ambiente laboral favorable para el desarrollo de
comportamientos que demuestren competencia, confianza y compromiso, como aspectos
característicos de la cultura institucional. En términos generales, el Sistema de Gestión
Integral se convierte en la “carta de navegación” para todo comandante ya que este sistema
es aplicable y adaptable a todas las unidades policiales; solo basta que quien es mando
gerencial tenga la visión y el conocimiento para llevarlo a la práctica.

Continuado con la idea, otros aspectos que también se desarrollan y que surgen en la
actividad gerencial son la planeación estratégica, el asesoramiento y el ejercicio de
autoridad, los cuales se mencionan a continuación:

En cuanto a la planeación estratégica se debe romper el mito que esta corresponde


únicamente a la alta dirección de una organización, puesto que esta actividad responde es
a la forma de pensar, analizar y concebir los problemas o situaciones que rodean el ejercicio
del mando. Por tanto, la visión y concepción estratégica frente a un problema o situación
debe caracterizarse por la amplitud y profundidad con que el decisor analiza, razona y toma
las decisiones. De tal forma que va al fondo de los problemas, busca conocer las causas, los
efectos, analiza las alternativas de solución que existen y con base en método y análisis de
información, conjugada con la experiencia y el conocimiento toma sus decisiones.

El asesoramiento es una actividad que implica la gerencia de un grupo; este se da en dos


vías, hacia el interior y hacia el exterior. Hacia el interior tiene que ver con el papel que
asume el gerente (mando policial) de asesorar a sus subalternos y a sus superiores, por que
deacuerdo a su cargo y conocimientos esta en posición de hacerlo para evitar errores o
fallas y para sumar al éxito de ellos, lo que a su vez revertirá en su éxito propio. El primero
por que le dará reconocimiento y confianza del mando superior y en cuanto a los
subalternos por que en la medida en que ellos hagan las cosas bien se revertirá en los
resulatdos de su grupo o unidad. A demás por que, con el sentido de lealtad hacia el
subalterno, busca evitarle fallas y errores que le pueden generar problemas institucionales
y que también pueden impactar el funcionamiento de su grupo o unidad y los resultados en
el contexto policial.

Y el asesoramiento hacia el exterior que implica a quien es comandante, asumir la


responsabilidad de orientar en el tema de la convivencia y la seguridad ciudadana a las
autoridades politicoadministrativas, lo que demanda de un amplio conocimiento y
competencias para comunicarse y transmitir información en un escenario interinstitucional
donde el mando policial se foguea con diferentes actores que cuentan también con
preparación y conocimientos.

Dentro de la gerencia se señala la actividad de ejercer la autoridad de la cual es revestido


el funcionario que ejerce mando policial y que es nombrado comandante (gerente) de un
grupo o unidad policial. Esta facultad implica llevar a la práctica el ejercicio y control de la
disciplina policial y de hacer prevalecer el ordenamiento institucional. Corregir, reorientar,
y actuar por medio de atribuciones que le otorga la misma norma, son herramientas para
la acción del mando. Lo importante de esta actividad está en comprender el nuevo contexto
del mando policial y de las formas que se deben utilizar actualmente para ejercer la
autoridad y poder, empleando técnicas marcadas por la empatía, la sinergia, la proactividad
y el buen trato, logrando actuar con autoridad, pero basado en el respeto, el
profesionalismo y el conocimiento.

-Campo de Liderazgo:

Es considerado el eje central del ejercicio del mando policial, que implica en quien lo ejerce
un desarrollo constante de su personalidad para acentuar sus fortalezas y dominar y
minimizar sus debilidades de tal manera que lo lleven cada vez más a expresarse en forma
permanente como un verdadero líder. Este aspecto del liderazgo, media entre el gerencial
y el administrativo, puesto que se enfoca más directamente en la persona, en el ser
humano, en sus problemas, necesidades, expectativas y motivaciones que forman parte del
quehacer de un líder holístico que aprecia la institución policial como un todo en la cual el
hombre y mujer policía son su centro.

Por lo tanto, el líder holístico policial debe estar en continuo crecimiento personal acorde
a como va accediendo a los diferentes niveles de la organización, para evitar el efecto
contrario que se manifiesta en algunos, que en la medida que van subiendo su nivel de
mando se van alejando de los niveles inferiores, pero sobre todo de los hombres y mujeres
que conforman los niveles de base. Esto implica que el buen líder no puede perder su
esencia frente al poder que va logrando, sino que debe contar con la capacidad suficiente
para mantenerse como líder puesto que cada vez su nivel de representatividad frente a sus
subalternos es mayor y no puede correr el riesgo a perderla y ser seguido únicamente por
el cargo o posición que ocupa.

El mando policial en su expresión de liderazgo ha venido evolucionando y entendiendo que


el hombre y la mujer policía son seres emocionales, con sentimientos y sensibilidades por
ello las nuevas teorías como la inteligencia emocional han venido calando en la
comprensión de quienes ejercen mando para entender que los hombres y mujeres policías
son seres humanos como los demás; y que dar importancia y atención a su aspecto
emocional puede llevar a prevenir una serie de situaciones que afectan la actuación del
uniformado en su relacionamiento primero con su núcleo familiar, luego con los
compañeros, los superiores, con los ciudadanos y finamente hasta consigo mismo.

La inteligencia emocional lleva al mando líder a entender esos estados de ánimo propios
para aprender a desarrollar habilidades controlándolos y logrando convertirlos de
emociones negativas a emociones positivas para aplicarlo de la misma forma con sus
funcionarios subalternos. El mando debe cuestionarse las posibles causas que afectan el
sistema emocional de tal manera que explore un poco más a fondo, por que de ello
dependen la prestación de un buen servicio o el mejor resultado en una actividad asignada,
pero sobre todo el bienestar del funcionario y el ambiente laboral de su grupo o unidad. En
este sentido, el psicólogo de organizaciones Jonathan García-Allen (2018) señala que: los
empleados con alta inteligencia emocional resultan mucho más productivos para las
organizaciones.

Daniel Goleman (1996) dice que los elementos de la inteligencia emocional son: el
autoconocimiento emocional, el autocontrol emocional, automotivación, reconocimiento
de emociones en los demas (empatía) y las relaciones interpersonales; como se observa
estos elementos implican el conocimiento de uno mismo y del otro. Por tanto, se entiende
la inteligencia emocional aplicada al mando policial como la capacidad de controlar,
percibir, comprender y regular las propias emociones en el ejercicio de la autoridad y poder
que le atribuye el mando para evitar ofensas, excesos o malos tratos a los demás y para
mediar de mejor forma los diferentes problemas que surgen en la relación del mando.
Cuando un mando pone en práctica esta inteligencia está contribuyendo a su crecimiento
emocional e intelectual y la de sus subalternos.
Sumado a esto, los líderes policiales centran una atención especial en la gestión de
conflictos que surgen en sus grupos de trabajo por la simple naturaleza de ser seres
humanos que tienen diferencias en su forma de pensar, de actuar, de percibir las
situaciones, de sus preferencias, de su carácter, entre otros. En este aspecto, un buen líder
esta muy atento a las relaciones de sus subalternos para detectar los conflictos que puedan
surgir para conocer en primera instancia las situaciones y poder actuar preventivamente y
evitar que los problemas escalen a crisis que muchas veces dejan consecuencias
irreparables.

Mando Integral. El Autor

Conocer la gestión de conflictos implica que el mando tiene conocimientos sobre las
técnicas para actuar desde los mecanismos alternativos que permiten intervenir o mediar
una situación conflictiva de manera informal como acción del mando pero que puede ser
muy efectiva para evitar problemas mayores. No obstante, si es necesario también puede
poner en juego estos mecanismos sobre los cuales puede orientar a sus subalternos para
encontrar atención y soluciones a las diferencias y minimizar riesgos.

Campo de Administración:

La administración es una ciencia aplicable a los procesos de mando y dirección policial que
involucran talento humano, recursos materiales y medios logísticos, entre otros, la cual
debe conocer el mando policial, puesto que asume en su ejercicio como comandante de
grupos o unidades que requieren de las técnicas, métodos y herramientas administrativas.

En este sentido, el instrumento gerencial diseñado por la institución policial para el


Comandante es el Sistema de Gestión Integral, por medio del cual desarrolla toda la gestión
que le corresponde de acuerdo al cargo y al proceso.
Este campo implica, que el mando nombrado tenga competencias y conocimientos en la
aplicación del proceso administrativo -planeación, coordinación, organización, dirección y
control- en el día a día de su gestión y en el horizonte mediano o largo según su nivel y
cargo. Poner en práctica la administración garantiza una gestión basada en la planificación,
que permite reducir los niveles de improvisación y de error en la disposición de los servicios
de policía, en la atención de las peticiones ciudadanas y en la toma de decisiones mucho
mas segura.

El mando que se desarrolla en el campo administrativo logra capacidades para brindar el


producto policial que es el servicio de policía con calidad, de manera oportuna, y con
efectividad entendiendo la institución como una organización moderna, con estándares,
protocolos y procedimientos que le dan garantía tanto al Estado como a los ciudadanos.

En conclusión, el enfoque integral del mando policial le apunta a la profesionalización y


cualificación de los funcionarios que tienen esa responsabilidad, quienes deben entender la
necesidad de desarrollarse en conocimientos amplios para adquirir las competencias
requeridas para poder responder al gran desafío que significa el ejercicio del mando en los
tiempos modernos, donde los contextos han cambiado y él como tal debe comprender
estos cambios y adaptarse para no quedar descontextualizados a la hora de mandar.
Comprender que el talento humano se integra al mando por medio del ejercicio del
liderazgo, donde el hombre y mujer de la institución reciba la atención suficiente que le
motive y estimule a desempeñarse con excelencia para alcanzar resultados sobresalientes.

El mando policial está en evolución, hacia un mando moderno, gerencial basado en el


conocimiento, el profesionalismo y el humanismo, en coherencia con los cambios y
evoluciones de la sociedad global y la sociedad del conocimiento, donde la manera de
mandar ya no se impone por el grado y las formas autoritarias de rasgo castrense, sino
entendiendo a los otros como seres humanos, potestatarios de la dignidad humana, del
conocimiento y de la capacidad de expresarse y aportar, eso sí dentro de los parámetros
que le brinda una institución jerarquizada con disciplina especial como es la Policía Nacional
de Colombia.

Referencias bibliográficas
_____________________

• Certo, C. y Peter, J. (1977). Dirección estratégica. McGrau Hill. Madrid.


• Goleman, D. (1996): Inteligencia emocional. Barcelona, Kairós.
• Goleman, D. (1998). Working with Emotional Intelligence. Nueva York.
• Palomo, M. (2012) Liderazgo y motivación de equipos de trabajo. Alfaomega. Bogotá.
• POLICIA NACIONAL DE COLOMBIA. (2010) Direccionamiento Policial Basado en el
Humanismo.
• POLICIA NACIONAL DE COLOMBIA. (2010) Enfoque Humanístico del Sericio de Policía.
• POLICIA NACIONAL DE COLOMBIA. (2019) Resolución 3948 de 2019. Manual del Sistema
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• POLICIA NACIONAL DE COLOMBIA. (2016) Resolución 01360 de 2016. Manual de Bienestar
y Calidad de Vida Optima para el personal de la Policía nacional.
• Triglia, Adrián; Regader, Bertrand; y García-Allen, Jonathan (2018). "¿Qué es la
inteligencia? Del CI a las inteligencias múltiples". EMSE Publishing.

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