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MODULO V: LA DOBLE REVOLUCION

REVOLUCION FRANCESA

Fue un conflicto social político, con diversos periodos de violencia, que convulsionó Francia y, por
extensió n de todo lo que implicó , a otras naciones de Europa que enfrentaban a partidarios y
opositores del sistema conocido como el Antiguo Régimen. Se inició con la autoproclamació n del
Tercer Estado como Asamblea Nacional en 1789 y finalizó con el golpe de estado de Napoleó n
Bonaparte en 1799. 

Antecedentes: Culturalmente nos situamos en el Siglo de la Ilustració n y es en Francia dó nde tendría
mayor importancia. La ilustració n francesa tiene un gran contenido político. El Derecho Natural que
tienen todos los hombres a la vida, la libertad y la prosperidad.

La misió n del Estado será defender los derechos del hombre, garantizar su libertad, su seguridad y su
propiedad, por tanto el Estado debe ser representativo y liberal. Los políticos ilustrados se oponen al
absolutismo moná rquico y quieren para Francia un régimen que esté basado en la igualdad y en la
libertad.

Causas de su origen:

 Un régimen monárquico que sucumbiría ante su propia rigidez en el contexto de un mundo


cambiante, y que, tras varios intentos de adoptar medidas destinadas a atajar la crisis política y
econó mica, capituló ante la violenta reacció n de la nobleza.
 Una aristocracia (la nobleza y el alto clero) aferrada a sus privilegios feudales, que bloqueó
todas las reformas estructurales (de Machault, de Maupeou, de Turgot) que se intentaron
implantar desde la Corte.
 El auge de una clase burguesa nacida siglos atrá s, que había alcanzado un gran poder en el
terreno econó mico y que ahora empezaba a propugnar el político. Su riqueza y su cultura la
había elevado al primer puesto en la sociedad, posició n que estaba en contradicció n con la
existencia de los estamentos privilegiados, nobleza y clero.
 El malestar de las clases populares urbanas y del campesinado, empobrecidos por la
subida de los precios, en particular de los cereales y del pan, base de la alimentació n y por el
incremento continuo de los impuestos y derechos señ oriales y reales. El diezmo que cobraba el
clero, apenas servía para mantener el culto y socorrer a los pobres. El campesinado
reclamaban ademá s el origen de la propiedad de los derechos y servidumbres feudales
(recogidos en los llamados «libros terriers»), que les parecían abusivos e injustos.
 La expansió n de las nuevas ideas ilustradas.
 La regresión económica y las crisis agrícolas cíclicas (la que estalló en 1788 fue la má s
violenta de todo el siglo XVIII), agravados por las malas cosechas en los añ os que precedieron a
la Revolució n.
 La quiebra financiera provocada por los vicios del sistema fiscal, la mala percepció n y la
desigualdad de los impuestos, los gastos de la Corte, los costes de las guerras, y por los graves
problemas hacendísticos causados por el apoyo militar a la guerra de Independencia de los
Estados Unidos. Los problemas fiscales de la monarquía, junto al ejemplo de democracia del
nuevo Estado emancipado precipitaron los acontecimientos.
 Mayor gasto del Estado y un descenso de la producción agraria, provocó una gran escasez
de alimentos de primera necesidad, en los meses anteriores a la Revolució n.Las tensiones,
tanto sociales como políticas, mucho tiempo contenidas, se desataron en una gran crisis
econó mica a consecuencia de los dos hechos puntuales señ alados: la colaboració n interesada
de Francia con la causa de la independencia estadounidense (que ocasionó un gigantesco
déficit fiscal) y el aumento de los precios agrícolas.
El conjunto de la població n mostraba un resentimiento generalizado dirigido hacia los
privilegios de los nobles y del alto clero, que mantenían su dominio sobre la vida pú blica
impidiendo que accediera a ella una pujante clase profesional y comerciante.

NAPOLEON BONAPARTE:

Es evidente que la Revolució n Francesa no puede entenderse sin la figura de Napoleó n, no porque
fuera uno de los instigadores de la misma, sino porque la Revolució n finalizó precisamente bajo su
mazo, en el momento en que dio el Golpe de Estado del 18 de brumario, en 1799, el añ o en que se
coronó primer có nsul. Napoleó n, nacido en 1769, se convirtió en primer cónsul de Francia en
1799 pero sus ansias de grandeza nunca terminaron ahí. Así, en 1804 se otorgó a sí mismo el título
de emperador. A partir de ese momento, Napoleó n se lanzaría a unas Guerras Napoleó nicas que le
llevarían a enfrentarse a numerosas potencias europeas, con el objetivo de construir su gran imperio.

Generalmente se considera a Napoleon como la figura clave para el paso hacia una Europa má s
contemporá nea, la del siglo XIX. Napoleó n fue el paso siguiente a la Revolución Francesa, y cuando
su imperio se extendió , todos los Estados tuvieron que acogerse al có digo Napoleó nico. En muchos
casos, este có digo supuso grandes avances en la sociedad de la época, permitiendo entre otras cosas el
sufragio universal masculino, la abolición del feudalismo y la servidumbre, e incluso la
libertad de culto.

REVOLUCION INDUSTRIAL:

La revolución industrial fue un proceso de grandes transformaciones económicas y sociales que


comenzaron en Inglaterra en el siglo XVIII.
Esta revolució n se extendió por gran parte del hemisferio norte durante todo el siglo XIX y principios del
siglo XX. Fueron grandes innovaciones que se gestaron en la industria y que permitieron inicialmente un
gran avance en la Europa del siglo XIX. El uso de la maquina en los procesos mejoro notablemente la
productividad en las fá bricas, lo que trajo consigo un progreso rá pidamente. La industria textil,
metalúrgica y química tuvo un gran crecimiento en Inglaterra y Europa durante este Siglo, y La
agricultura también experimento grandes avances gracias a las nuevas herramientas, esto trajo consigo
algo conocido como la revolució n agrícola de la cual hablaremos má s adelante.

Causas de la revolución Industrial:

Las principales causas de la revolución que ayudaron a que se diera en Inglaterra, fueron:

 El sistema político imperante en Inglaterra no era la monarquía absoluta, era la monarquía


liberal, lo que permitió que los ingleses se mantuvieran libre de las revoluciones que aquejaban
a los otros países europeos.
 La modernizació n de la agricultura mediante la rotació n cuatrienal de cultivos, la introducció n
de maquinaria moderna a los trabajos agrícolas y el cierre de campos de cultivo. Estas medidas
dejaron sin trabajo a muchos campesinos que se vieron obligado a trasladarse a las ciudades y
aseguraron la abundancia de mano de obra barata.
 La burguesía inglesa tenía capital suficiente para financiar las fá bricas, adquirir materias primas
y má quinas y contratar empleados.
 Los beneficios econó micos obtenidos gracias al dominio del mercado europeo y en la posesió n
de un gran imperio colonial. La gran cantidad de capital de que se disponía se invirtió en las
nuevas actividades industriales
 Una mentalidad econó mica, por parte de los burgueses, pero también por parte de la
aristocracia terrateniente, dispuesta a invertir en el comercio y la industria. Estos dos grupos
sociales fueron controlando el Parlamento, desde donde promulgaban leyes que aseguraban la
libertad econó mica (eliminando los privilegios de los gremios), y protegiendo los mercados
propios (proteccionismo), entre otras medidas.
 La existencia de una buena red viaria y fluvial, que aseguraba la fluidez del abastecimiento de
materias primas, la distribució n de manufacturas y el mercado interior.
 Las innovaciones técnicas, que permitían sustituir las herramientas tradicionales para
má quinas que trabajaban má s rá pido. Las mismas universidades fomentaban una formació n
intelectual prá ctica que repercutía en la investigació n y la experimentació n.
 La riqueza de fuentes de energía como el carbó n de coque, de gran calidad, para hacer funcionar
las nuevas má quinas de vapor, y la abundancia de materias primas para la industria textil, como
el algodó n colonial y la lana inglesa.
El trabajo manual fue sustituido por las má quinas, y la fuerza humana y animal, así como la de los
elementos naturales, dejó paso a las nuevas fuentes de energía. Las principales industrias afectadas
fueron la textil, la metalú rgica y la química.

La característica principal de la revolución industrial fue la creación del sistema de fábrica


mecanizada, es decir, las fá bricas se han trasladado de la producció n fabricada simple a lo complejo
sustitució n del trabajo manual por las má quinas. Esta sustitució n implicó la aceleració n de la
producció n de mercancías, que se produjeron a gran escala.
Esta época es importantísima porque se pasó de un mundo rural en un mundo industrial. También fue
una época de grandes inventos, destacando sobre todo uno: La maquina a Vapor, Con este invento
nacieron el ferrocarril y el barco a vapor.

Surgimiento de Nuevas Clases Sociales:


 La burguesía así como en la revolució n francesa se convirtió en el grupo hegemó nico porque
era la propietaria de las industrias y los negocios. También existía una burguesía media
compuesta por profesionales liberales, funcionarios y comerciantes.
 Un gran nú mero de empleados y tenderos formaban la pequeñ a burguesía.
 Los trabajadores de las fá bricas formaban el proletariado industrial y urbano. Constituían la
mano de obra necesaria para las fá bricas. Eran un grupo muy numeroso y desfavorecido. Al
principio no había ninguna legislació n que fijara las condiciones laborales de los trabajadores.
En consecuencia, sus condiciones de vida y de trabajo resultaban muy duras: jornada laboral
de 12 a 14 horas diarias y remuneraciones insuficientes

ETAPAS: Existen 2 etapas que mancaron la industrializació n una llamada primera revolució n
industrial (1760-1870) caracterizado por el crecimiento regular de la població n generando mano de
obra abundante y la producció n agrícola, la divisió n del trabajo industrial provocando un cambio en la
estructura de la població n activa, la introducció n de innovaciones técnicas, la configuració n de la
fá brica como lugar de producció n, la articulació n de mercados má s amplios a través de la expansió n
del comercio y el desarrollo de una mentalidad empresarial, focalizado especialmente en el mundo del
textil algodonero y la siderurgia y que finalizaría con una grave crisis debido a la sobreproducció n que
generaba.

Y una segunda revolució n industrial (1870-1914) que la superaría con la introducció n de novedades
en el campo de las fuentes de energía y la aparició n de nuevos sistemas de producció n, transporte,
comunicació n y financiació n truncados, en parte, en 1914 por el estallido de la primera Guerra
Mundial. Esta segunda Etapa de la revolució n se caracterizó por la mejora de la producció n gracias a la
incorporació n de nuevas fuentes de energía como la electricidad y el petró leo.
Consecuencias de la revolución

 Crecimiento en las Ciudades, la mecanizació n de las tareas agrícolas y la concentració n de la


producció n industrial en las
ciudades favorecieron la
emigració n del campo a la
ciudad. Muchas ciudades
prosperaron alrededor de
fá bricas.
 Crecimiento demográ fico, la
Revolució n Industrial
también fue un proceso de
cambio social. A lo largo del
siglo XIX se aceleró el crecimiento de la població n. En 1900 en Europa vivían má s de 400
millones de habitantes.
 Las causas de este crecimiento demográ fico fueron dos: un descenso brusco de la mortalidad y
un incremento de la fecundidad.
 Cambios y surgimiento de una nueva clase social llamada el proletariado, que se separó de la
burguesía y fueron los llamados a trabajar de obreros en las fá bricas.
 Explotació n en el Trabajo.
 Movimiento Obreros
 Sindicalismo
 Entre 1800 y 1924, 60 millones de europeos emigraron a otros continentes. Estas migraciones
transoceá nicas se produjeron por oleadas: hasta el 1870 los que emigraron má s fueron los
britá nicos, sobre todo los irlandeses y los escandinavos; posteriormente, los sucedieron los
centroeuropeos; a finales de siglo, los grupos que emigraron má s fueron los italianos, los
españ oles, los griegos y los turcos. La mayoría de los emigrantes europeos se dirigieron a
América.

MODULO VI: EL SIGLO XIX


MODULO VII: EL SIGLO XX

EL ¿NUEVO? NACIONALISMO: FALTA

GUERRAS MUNDIALES

PRIMERA GUERRA MUNDIAL:

El estallido de la primera guerra mundial puso fin a casi un siglo de equilibrio y paz entre las
potencias. La guerra abarco la gran mayoría de los países europeos y a algunos de otros continentes y
causo má s de veinte millones de víctimas, entre muertos, heridos y mutilados.

La economía europea quedo muy debilitada, mientras que los estados unidos y Japó n crecieron como
potencias econó micas mundiales.

Después del fin de la guerra se produjeron importantes transformaciones políticas: cayeron los
imperios de Europa central, los bolcheviques tomaron el poder de Rusia e instauraron el primer
estado comunista y ya de la década de 1920 el fascismo se estableció en Italia.

La gran guerra: en 1914 los principales estados europeos se embarcaron en una confrontació n bélica
que marco el fin de una época de prosperidad econó mica y equilibrio internacional. El detonante del
conflicto fue el asesinato del heredero del trono austrohú ngaro. La declaració n de la guerra de este
imperio a Serbia provoco una serie de tomas de posició n de todas las potencias europeas. Rusia, que
respaldaba a los serbios, movilizo las tropas, Alemania aliada del imperio le declaro la guerra a Rusia
y pocos días después, a Francia; Gran Bretañ a, aliada de Francia y Rusia, hizo lo propio contra
Alemania. Así, en poco tiempo, casi toda Europa se vio involucrada en una guerra que se
desarrollo en una escala hasta entonces desconocida por la humanidad.

La guerra tuvo una primer etapa, desarrollada en 1914, conocida como “guerra de movimientos”, que
se caracterizo por los grandes movimientos de tropas. Así, el ejército alemá n atravesó Bélgica y entro
en Francia. Sin embargo, las tropas de francesas lograron detener a los alemanes en la batalla del
Marne.

Comenzó , entonces, lo que se llamo “guerra de posiciones”. Las tropas peleaban enterradas en
trincheras, a veces muy cerca de las del enemigo. En este frente, se liberaron las má s terribles batallas
de la guerra que, a pesar de sus dimensiones, no lograron alterar el rumbo del conflicto.

La economía de la guerra: los estados involucrados se vieron obligados a movilizar todos sus
recursos. Los problemas que debían afrontar eran innumerables. Se fueron surgiendo verdaderas
economías de guerra, en las que toda la actividad productiva, controlada estrictamente por el estado,
se subordino a las prioridad militares.

La victoria de los aliados: en 1917 la guerra entro en una nueva etapa, caracterizado por el ingreso
al conflicto de los estados unidos y por el triunfo de la revolució n rusa. A partir de la declaració n de
guerra a Alemania en 1917, los estados unidos se involucraron directamente en el conflicto y enviaron
a Europa alrededor de un milló n y medio de soldados.

Ese mismo añ o, Alemania logro cierto alivio: la firma del tratado de Brest-Litovsk, por el cual Rusia
ponía fin a su participació n en la guerra.

Duras condiciones de la paz: las potencias triunfantes (Estados Unidos, gran Bretañ a, Francia e
Italia) se reunieron a principios de 1919 en Paris para tratas las condiciones de paz. Los acuerdos
alcanzados en Paris contemplaron la firma de tratados de paz con los países vencidos. Se firmaron
cuatro tratados: con Alemania, Turquía, Austria-Hungria y con Bulgaria.

El tratado de Versalles apuntaba a neutralizar la amenaza Alemana, que durante la guerra había
estado a punto de derrotar a los ejércitos aliados. Alemania fue considerada como la ú nica causante de
la guerra y de todas sus consecuencias.

En parís también se intento tomar medidas tendientes a evitar la posibilidad de una nueva guerra, a
través del proyecto presentado por Woodrow Wilson, presidente de los estados unidos, para
constituir la sociedad de las naciones. Este será el organismo supranacional que aseguraría la paz
sobre el principio de autodeterminació n y que resolvería de manera pacífica los conflictos de los
estados.

La revolución soviética: de Lenin a Stalin (revolución rusa): la revolució n de Octubre de 1917


puso fin a la monarquía zarista e inauguró el primer estado socialista de la historia. Desde principios
del siglo xx, el régimen zarista experimentaba una profunda crisis. El descontento econó mico y social
se combino con el existente por la situació n política: el gobierno zarista ejercía el poder de manera
autocrá tica, represiva y antidemocrá tica. En 1905, en medio de huelgas, protesta, se produjo un
primer movimiento revolucionario, que fue rá pidamente sofocado por el gobierno de zar Nicolá s II.

En febrero la monarquía zurista se derrumbó ; el zar fue obligado a abdicar y el poder quedo en manos
de la Duma (el parlamento), que formo un gobierno provisional encabezado por el general Alejandro
Kerenski. El gobierno de Kerensiki no logro ejercer un poder efectivo mientras iba creciendo cada vez
má s el poder de los soviets y la influencia del partido obrero social demócrata.

La situació n del gobierno provisional se volvió insostenible. En octubre de 1917, la fracció n


bolchevique del partido obrero social demó crata, liderado por Vladimir Ilich Ulianov, Lennin, que
controlaba los soviets de petrogrado y Moscú , tomo el poder. Lennin lanzo la nueva política
econó mica. Esta consistía en reimplentar algunas formas de la econó mica capitalista: se restableció el
pago de impuestos en moneda, se termino con las confiscaciones de granos de campesinos, se
permitió que estos pudieran comercializar sus excedentes y se autorizo el establecimiento de
pequeñ os establecimientos industriales.

En 1924, luego de la muerte de Lennin, se desato una lucha por su sucesió n, cuyos protagonistas
fueron Josef Stalin y Leon Trotsky.

Stalin sostenía la tesis del “socialismo en un solo país”: el principal objetivo era la consolidació n del
ú nico estado socialista del mundo, la URSS. Permaneció al frente de la URSS hasta su muerte.

Stalin imprimió un giro en la política econó mica. Abandono la NEP y elaboro un plan de
colectivizació n forzosa y de industrializació n planificada. El plan se baso que una buena parte de la
producció n agrícola subsistirá el desarrollo industrial. A fines de la década del 30 la URSS se había
convertido en una potencia econó mica industrial.

El fascismo: cuando estallo la primera guerra mundial en 1914, el gobierno italiano anuncio que
mantendría una posició n neutral. Surgió la figura de Benito Mussolini, había sido un importante
militante del partido socialista italiano y combatiente en la guerra. En el periodo transcurrido entre
1922 y 1925 logro asegurar la evolució n de hacia un estado dictatorial y de partido ú nico y obtener el
control del poder: clausuro el parlamento, disolvió los partidos políticos, termino con la libertad de
prensa e instauro la pena de muerte.

En 1932 viajo a Berlin y firmo una alianza con Hitler, hecho que abarco a Italia en la segunda guerra
mundial, al lado de los Nazis. Con la mayor parte de la sociedad en contra de la participació n italiana
en la guerra, el rey y gran consejero fascista decidieron destituir y encarcelar a Mussolini y establecer
conversaciones con los aliados. Este fue liberado por los alemanes y en poco tiempo encabezo un
régimen controlado por los alemanes en el norte de Italia, la repú blica italiana.

DE LA PRIMERA POSGUERRA A LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL (esta se produjo unos meses


después a que finalice la guerra civil española)

La segunda guerra mundial fue una guerra anunciada. El tratado de Versalles estuvo destinado al
fracaso desde su firma y provoco resentimiento tanto en Alemania como en Italia.

La crisis econó mica mundial desatada a finales de la década del 30 había facilitado la llegada al poder
de regímenes autoritarias, militantes y con ambiciones imperialistas, mientras que el mundo asistía a
una profunda crisis de las democracias liberales europeas.

Sin duda alguna, la causa directa de la segunda guerra mundial fue la política externa de Adolf Hitler,
su estrategia consistía en lograr los mayores resultados posibles a través de la diplomacia, mientras
ganaba tiempo para el proceso de rearme en que había asumido a su país. Así, en 1935 Alemania ya
contaba con una fuerza aérea, había rearmado a todas sus fuerzas armadas y había restablecido el
servicio militar obligatorio.

En 1936 el estallido de la guerra civil españ ola contribuyo a través del apoyo a Franco, a acerca de
Hitler y Mussolini y a constituir el “eje Berlin-Roma”. Gran Bretañ a y Francia, anunciaron su no
intervenció n en el conflicto españ ol, lo que termino favoreciendo a los fascistas españ oles, que
recibieron la ayuda de Alemania e Italia. En 1938 Japon se convirtió en el tercer miembro del eje. Ese
mismo añ o, tropas alemanas invadieron el territorio austriaco, y proclamaron la Anschlls (unió n) de
Austria al Reich alemá n, mientras las demá s potencias europeas permanecieron imposibles.

El siguiente paso de Hitler fue reclamar una porció n de territorio checoslovaco habilitado por una
minoría de alemanes. Para tratar el reclamo, se celebro una conferencia en la ciudad de Minuchi.

En agosto de 1938 Hitler firmo sorpresivamente un pacto de no agresió n a la unió n soviética. El


acuerdo establecía que ambas partes se comprometían a no realizar ningú n acto de agresió n y a no
ingresar en ninguna alianza que los enfrentara, Stalin, por su parte, quería ganar tiempo para su
propio rearme.

El primero de septiembre las tropas alemanas invadieron Polonia, el 3 Gran Bretañ a y Francia,
cumpliendo esta vez con su promesa de defender a Polonia, declararon la guerra a Alemania. La
segunda guerra mundial estaba en marcha.

En una primera etapa la guerra tuvo un cará cter exclusivamente Europeo. En el frente oriental, en
menos de un mes, los alemanes derrotaron a la débil resistencia polca. Los soviéticos, por su parte,
ocuparon Polinia Oriental y las repú blicas bá lticas. En occidente los alemanes se enfrentaron con Gran
Bretañ a y Francia.

La estrategia de guerra relá mpago, adoptada por Hitler le permitió dominar directa o indirectamente
toda Europa Occidental. El ejércitoAlemá n consiguió penetrar el territorio Francés. Francia pidió el
armisticio, fue parcialmente ocupada por Alemania y así quedo dividido en una zona ocupada y una
zona libre.

A pesar del pacto de Hitler, Italia había adoptado una posició n neutral al comienzo de la guerra. Sin
embargo, los éxitos iníciales de los alemanes contribuyeron a que Mussolini se decidiera a abandonar
la neutralidad y declarar la guerra Francia y a gran Bretañ a. Poco después, los alemanes ocuparon
también la zona de los Balcanes e intervinieron en el norte de Á frica.

A mediados de 1941 Hitler tomo la sorpresiva decisió n de desconocer el pacto de 1939 e invadir la
unió n Soviética.
El 7 de diciembre de 1941 una fuerza aeronaval japonesa ataco por sorpresa la base militar
norteamericana en Pearl Harbor (hawaii) y destruyo la mitad de la flota de los estados unidos en el
pacifico. Los norteamericanos declararon la guerra a Japó n y dos días má s tarde, Alemania declaro la
guerra a los Estados Unidos. A partir de ese momento. Japoneses y norteamericanos comenzaron a
enfrentarse en el océano pacifico y la guerra alcanzo una dimensió n mundial. La ventaja inicial lograda
por las fuerzas aeronavales japonesas, que en solo unos pocos meses habían logrado ocupar todo el
sudeste asiá tico, quedo neutralizada desde 1943, cuando los norteamericanos pusieron en combate
una gran flota.

La derrota de Alemania: Los britá nicos eligieron como escenario el norte de Á frica y posteriormente
Italia. En 1944 prevaleció la postura Norteamericana, se produjo el desembarco en Normandía y
avanzaron sobre Alemania. Alemania capitulo a principios de 1945 y el 30 de Abril Hitler se suicida.
(CON ESTO FINALIZA LA GUERRA)

Consecuencias: La segunda guerra mundial involucro el conjunto de las actividades econó micas y las
sociedades de los países participantes.

GUERRA FRIA

Hacia el final de la guerra, las potencias vencedoras comenzaron a delinear un nuevo sistema de
relaciones internacionales que ofrecieran mayores garantías que el de la primera posguerra. En
febrero de 1945, los líderes de los estados unidos, gran Bretañ a y la unió n soviética se reunieron en la
conferencia de Yalta. Allí decidieron la creació n de un organismo internacional en el que estuviera
representado todos los países soberanos, destinados a resolver los conflictos internacionales de
manera pacífica. Así, en junio de 1945, reunidos en la ciudad de san francisco los representantes de
cincuenta países redactaran la carta de la organizació n de las naciones unidas ONU.

Una de las principales consecuencias de la guerra fría fue el desplazamiento del centro de poder
internacional. Dos nuevas potencias pronto dominarían amplias zonas del mundo: los estados unidos
y la unió n soviética.

Apenas terminada la guerra, surgieron profundas diferencias entre los principales componentes del
bloque aliado que desembocaron en una confrontació n abierta entre los bloques liderados por las dos
grandes potencias.

La guerra fría: El final de la segunda guerra mundial abrió una nueva etapa tanto en el terreno de la
política internacional como en el del desarrollo econó mico. En el primero, la guerra fría denomino el
escenario. En el segundo, hubo una expansió n econó mica sin precedentes.
El enfrentamiento entre los Estados Unidos y la unió n Soviética recibió en nombre de guerra fría. No
fue una guerra abierta, sino que se manifestó una lucha política y diplomá tica entre dos bloques que
aspiraban al predominio mundial.

Este enfrentamiento implicaba el conflicto entre las ideas socialistas de la unió n soviética y las
liberares-democrá ticas de los estados unidos, la oposició n entre un sistema econó mico de los países
occidentales, basados en la iniciativa privada y otro de los países socialistas, apoyada en la propiedad
estatal de los medios de producció n. También se planteaba una lucha estratégico-militar: los estados
unidos y la unió n soviética se embarcaron en una carrera armamentista, que concentro en ambas
potencias medios de destrucció n de tal magnitud que ponían en riesgo la continuidad de la vida en la
tierra.

En este marco, Europa quedo dividida en dos


campos, uno alineado a los estados unidos y otro,
en la unió n soviética y se convirtió entonces en el
principal escenario de la guerra fría.

MUNDO BIPOLAR: Cuando Estados Unidos y la


URSS lideraron la política internacional, el mundo
se dividía en dos bloques claramente
diferenciados. Había dos ideologías antagó nicas, el
sistema democrá tico de los países occidentales liderados por Estados Unidos frente al modelo
comunista de partido ú nico que impuso la URSS en toda Europa oriental. Desde un punto de vista
econó mico, Estados Unidos y sus países aliados impulsaron un modelo capitalista basado en el libre
mercado y el bloque soviético mantuvo una economía planificada y basada en
la intervención estatal.

En el siglo XXl el equilibrio de fuerzas es mucho má s complejo y por ello se habla de un mundo
multipolar: Con la desintegració n de la URSS, parecía inicialmente que el mundo tendría una ú nica
superpotencia, Estados Unidos. Este país es, sin duda, un líder en el orden mundial, pero en las ú ltimas
décadas ha perdido una parte significativa de su hegemonía en el orden internacional y por este
motivo los politó logos hablan de un mundo multipolar. Para entender el nuevo orden mundial, hay
que tener en cuenta que son varias las naciones e instituciones que conforman bloques de poder.
China, la Unió n Europea, los países del BRICS y la OEA son algunos de los nuevos actores de la política
internacional.
Al margen de estas naciones, instituciones o bloques, no hay que olvidar que existen otros centros de
poder: los lobbies, las multinacionales, las ONG, los movimientos sociales o las comunidades en red.
Por otro lado, la multipolaridad tiene que asociarse al fenó meno de la globalización.
LA REVOLUCION RUSA (ACA LO DESARROLLA MÁ S)

Se denomina a Revolución rusa al conjunto de acontecimientos sucedidos entre febrero y octubre de


1917 y que llevaron al derrocamiento del régimen zarista y la instauració n del primer gobierno
socialista del mundo.
La Revolució n rusa tuvo dos etapas. Una primera revolució n en la que el gobierno zarista es
derrocado y se impone u gobierno provisional, y una segunda revolució n en la que se elimina este
gobierno provisional para establecer un gobierno comunista.
La Revolución rusa es una de las má s virulentas que se han dado en la historia moderna, y que
supone la explosió n del descontento de todo un pueblo con la situació n que vive el país. Sin embargo,
también tuvo demasiadas luchas y discrepancias internas.
una de las principales causas para el estallido de la revolució n fue el descontento con el zar Nicolás
II, que ejercía un poder despó tico y vivía en la má s absoluta riqueza, mientras el pueblo rusa se moría
de hambre y se encontraba sin recursos las continuas batallas perdidas frente a Alemania durante
la 1ª Guerra MundiaL.
Otra de las causas de la revolució n rusa fue la entrada de capital extranjero del país, el cual
dominaba las fá bricas y centros productivos de la Unió n Soviética. Esto dio lugar a la aparició n de los
obreros, los cuá les trabajaban en unas condiciones infrahumanas. Pronto se hicieron cada vez má s
frecuentes las protestas, que luego pasaron a huelgas y terminaron en grandes revueltas. Muchos de
estos obreros se agruparon en organizaciones sindicales conocidas como soviets.
DESARROLLO DE LA REVOLUCIÓN RUSA: La primera revolució n rusa tuvo lugar en febrero. En el
caos que se había originado, el zar Nicolás II se dio cuenta de que no poseía poder militar suficiente
para combatir la revolució n y vio que su ú nica solució n era abdicar. En este momento, un gobierno
provisional asumía el control del país (gracias a la unió n momentá nea de socialistas y demó cratas). El
objetivo de este gobierno provisional era aportar unos cimientos só lidos para la celebració n en un
futuro de unas elecciones democrá ticas.
En un principio los soviets, que eran organizaciones formadas por obreros y sectores socialistas má s
radicales, dejaron al gobierno provisional realizar sus funciones, con el objetivo de asentar la
revolució n e impedir un posible intento de regreso zarista. Sin embargo, pronto los soviets
comenzaron a separarse del gobierno provisional y se dio una lucha de poderes. El gobierno
provisional poseía el parlamento y el poder del estado, mientras que los soviets tenían el apoyo de los
obreros y de los crecientes sectores de izquierdas. Esto terminó desembocando en la Revolució n de
octubre, en la que los trabajadores soviéticos que formaban el partido bolchevique, dirigidos por
Lenin, derrocaban al gobierno provisional y constituían finalmente un gobierno socialista. 
CONSECUENCIAS DE LA REVOLUCIÓN RUSA: La revolució n rusa tuvo importantes consecuencias ya
que supuso un cambio profundo dentro de la sociedad, economía e incluso la cultura de la Unió n
Soviética.
La primera consecuencia evidente fue el derrocamiento del régimen zarista y de la dinastía de los
Romanoff, que llevaban siglos de presió n y de poder absolutista en el denominado Imperio Ruso. En
su lugar se creó el primer estado socialista del mundo, la Unió n de las Repú blicas Socialistas
Soviéticas (URSS). Esto supuso la adopció n de las ideas socialistas y el desarrollo de otras ideas
anarquistas y comunistas.
La Revolució n rusa también provocó algunas discrepancias acerca del camino a seguir tras la muerte
de Lenin y luchas de poder entre dirigentes como Stalin (que pretendía consolidar la revolució n en
Rusia) y Trotsky (buscaba una revolució n a nivel general). En cualquier caso, la implantació n del
socialismo en la URSS era ya imparable.

Tras la Revolució n rusa la URSS se convirtió en una de las principales potencias económicas a
nivel mundial, una posició n que mantuvo hasta su disolució n. Entre otras cosas, la URSS fue
fundamental para derrotar a Alemania en la 2ª Guerra Mundial y fue el país que pugnó por la
supremacía mundial con EE.UU durante la Guerra Fría, escenificando la lucha entre el bloque
capitalista y el bloque comunis.

EL NAZISMO

Alemania Nazi: la repú blica alemana debió enfrentar una grave crisis econó mica. (1923, antes de la
segunda guerra mundial), entre ellos la inflació n. En medio de la crisis hubo intentos de derrocar al
gobierno Alemá n encabezado por Hitler, sin conseguirlo. En 1925 se abocó a la reorganizació n del
partido logrando en 1932 ocupar el segundo lugar en Alemania. En 1933 fue nombrado canciller de
Alemania. Hitler llego al poder de manera legar pero una vez en el gobierno estableció un régimen
cuya ley fundamental era su propia voluntad.

Las ideas nazis: los nazis se consideraban anticapitalistas, anti comunistas, y racistas.

La consolidación de Hitler en el poder: en 1933 como consecuencia del incendio en el parlamento


se abolieron todos los derechos individuales, se censuro a la prensa y se persiguió a políticos
opositores. A pesar de que no eran mayoría en el parlamento Hitler logro aprobar la ley de pleno
poderes. A partir de 1933 todos los partidos políticos con excepció n del nacional socialistas (Hitler)
fueron declarados ilegales. L a muerte del presidente fue aprovechada por Hitler para reunir en su
persona los cargos de presidentes y canciller y asumió personalmente el mando de las fuerzas
armadas.

El holocausto: fue la persecució n y eliminació n sistemá tica de los judíos por los nazis.

Campos de concentración: en los campos de concentració n se seleccionaban los judíos aptos para el
trabajo (hombres y mujeres jó venes, sin hijos), y de los que iban a ser exterminados.
Cuando termino la guerra los crímenes cometidos por los nazis fueron juzgados en la ciudad de
Nuremberg.

LA GUERRA CIVIL ESPAÑ OLA

La Guerra Civil española fue un conflicto de fuerzas políticas por la lucha de poder en España.
Fue llevado por el Generalísimo de Francisco Franco, que sacudió a Europa entre los añ os 1936 y
1939 en este año comenzó la Segunda Guerra Mundial. El conflicto mantuvo de un lado, un
frente popular para unir a todos los sectores democrá ticos y de izquierda. El Frente Popular luchaba
por la sustentació n de las reformas sociales y políticas. Por otro lado estaban las fuerzas de derecha,
articuladas alrededor de la Falange Españ ola Tradicionalista. Las fuerzas de derecha conspiraban para
derrocar al gobierno republicano.

Dos fuerzas:

 Falangistas: De tendencia fascista y comandados por el general Francisco Franco, tenían


como objetivo eliminar el creciente movimiento comunista en España. Tienen el apoyo
de los sectores tradicionales y conservadores de la sociedad española (Iglesia, Ejército y
grandes propietarios rurales). También cuentan con la ayuda militar de la Alemania nazi
y de la Italia fascista. Tenían por objetivo la implantación de un gobierno autoritario.

 Frente Popular: De tendencia izquierdista, contaban con el apoyo de los


sindicatos, partidos políticos de izquierda y defensores de la democracia. Querían
combatir el nazi-fascismo, que estaba creciendo en España y otros países de Europa.
Defendían al Gobierno Republicano y tuvieron el apoyo externo de la Unión Soviética.
El asesinato del diputado y líder de la derecha monarquita, José Calvo Sotelo, por milicias republicanas,
provocó el inicio de la guerra civil el 13 de julio de 1936, luego vino el golpe de estado el 18 de julio
de 1936, el general Francisco Franco comandó al ejército español en un golpe de estado contra
el gobierno democrático y legal de la Segunda República Española. Pero el golpe no fue exitoso y
Españ a quedó dividida entre falangistas y republicanos.
La guerra civil se convirtió en uno de los primeros frutos de lo que sería la Segunda Guerra Mundial: el
ejército nacionalista o falangistas lograron apoyo militar de los regímenes fascistas de Alemania e
Italia, que estaban interesados en implantar un régimen fascista en Españ a y combatir el crecimiento
del movimiento socialista en el país. Los republicanos contaron con el envío de armas y equipos bélicos
de la Unión Soviética. Después de casi tres años de conflicto bélico la Guerra Civil, considerada
una de las más violentas y crueles de la historia, terminó con la victoria de los falangistas que
lograron derrocar al Gobierno Republicano del poder. En septiembre de 1939, unos meses después
de la victoria franquista, comenzó la Segunda Guerra Mundial.
MAYO DEL 68

Corría la primavera del 68 y la ciudad de París era escenario de uno de los acontecimientos que marcó
la historia contemporá nea de Francia. El mismo se llamó Mayo francés y fue caracterizado por una
sucesió n de huelgas y protestas espontá neas. Protestas que partieron de los movimientos
estudiantiles y que se contagió a los sindicatos obreros generando una protesta jamá s vista.

SIITUACIÓN SOCIAL Y CULTURAL:Los cambios culturales en los añ os 60 fueron a un ritmo


desorbitado. En unos añ os donde el éxodo de los pueblos a las grandes ciudades había saturado éstas,
dando como resultado el nacimiento de una sociedad ampliamente consumista, donde los medios de
comunicació n invaden los deseos de consumo.Es la primera vez que a los jó venes se les reconoce
como una parte má s de la sociedad, ahora tenía una categoría social y cultural, alguien a quien tener
en cuenta en sus opiniones. Todo esto fue posible gracias a los movimientos contraculturales que
comenzaban a aparecer, la famosa cultura underground y los movimientos juveniles que siguieron
como fue el movimiento hippie.

SITUACION POLITICA: Ante un gobierno un tanto inestable, y la figura de De Gaulle cada vez má s
denostada, por sus constantes prá cticas autoritarias, una radicalizació n del movimiento obrero
francés, alejá ndose cada vez má s de las doctrinas sindicales, provocan huelgas constantes e incluso
llegan a ocupar fá bricas rechazando cualquier tipo de acuerdo.

Huelgas en todos los sectores, automovilísticos como Renault, astilleros como los de Nante, industrias
químicas, agricultura, estudiantes, obreros, intelectuales. Fueron los intelectuales los que junto con los
estudiantes, comenzaron a trazar las estrategias activistas, sentá ndose las bases de la revuelta de
mayo del 68.

EL MAYO FRANCÉS DEL 68: Este suceso tuvo comienzo un Viernes 3 de Mayo, cuando un grupo de
estudiantes se reunió en la Plaza de la Sorbona, dentro del histó rico Barrio Latino para protestar en
contra del sistema universitario. Allí comenzó a unirse gente provocando la presencia inevitable de la
policía la cual concluyó por detener a una serie de estudiantes.

Estos hechos generaron una convocatoria aú n mayor, siendo miles de estudiantes y trabajadores los
que protestaban y hacían huelga. Esto provocó un gran enfrentamiento con la policía que bajo las
ó rdenes de Charles de Gaulle se multiplicaba cada vez má s. El resultado fue terrible, dado que se
generó una batalla campal contra la policía y posteriormente una huelga general de estudiantes y diez
millones de trabajadores franceses, paralizando el país por completo y siendo impulsadas por los
obreros principalmente obligando a la Confederació n General del Trabajo (CGT) ha secundar el paro, a
pesar de su primera oposició n.
El sá bado 11 de mayo, la indignació n en París y en toda Francia fue inmensa. Se formaron marchas
espontá neas en casi todas partes, que reunieron no solo a los estudiantes, sino a cientos de miles de
manifestantes de todos los orígenes, principalmente muchos trabajadores jó venes o padres de
estudiante. El Gobierno era símbolo del enemigo del pueblo, debido a la cantidad de arrestos
cometidos. Ante esta situació n, el Primer Ministro, Georges Pompidou, anunció en la noche que a
partir del lunes 13 de mayo, la policía se retiraría del Barrio Latino, la Sorbona reabrió y los
estudiantes arrestados fueron liberados.

CONSECUENCIAS DEL MAYO FRANCÉS DEL 68: El mayo francés de 1968 supuso un acontecimiento
de difícil clasificació n. Al considerarse un hecho bastante espontá neo, sin un objetivo fijo y compuesto
por muchos grupos sociales con diferentes intereses, es muy difícil discernir si finalmente tuvo éxito o
no. De Gaulle renunciaría a la presidencia casi un añ o después de los eventos de mayo de 1968, en
abril de 1969, después de perder un referéndum y de que su plan de reformas fuera rechazado por el
Senado, muriendo un añ o después. Por lo tanto, en el á mbito político, aunque Charles de Gaulle acabó
dejando la presidencia, no se puede decir que el movimiento tuviera un gran éxito.

Se produjeron algunas reformas, sobre todo a partir de 1969, pero la conflictividad laboral continuó
siendo muy intensa en Francia y, en otros países donde también tuvieron lugar protestas de distinta
consideració n tras los estallidos de París, como Suiza, la Repú blica Federal Alemana, Estados Unidos o
México, entre otros, tampoco se produjeron importantes cambios tras su final.

Por otro lado, después de la convocatoria de elecciones, el movimiento fue perdiendo fuerza
paulatinamente y, al mismo tiempo que los trabajadores volvían a sus puestos y los estudiantes, a las
aulas, el gobierno central recuperó poco a poco el control de la situació n.

Sin embargo, si lo miramos desde una perspectiva social y cultural, las protestas de mayo de 1968 se
convirtieron en todo un mito, en una suerte de representació n de una época. Visto a la vez como la
ú ltima gran revolució n romá ntica en busca de la libertad individual y social y, al mismo tiempo, como
una visió n de los peligros que se pueden esconder dentro de los movimientos sociales de tipo
aná rquico, el mayo del 68 sigue siendo uno de los referentes má s importantes de la segunda mitad del
siglo XX.

LA REPÚ BLICA DE WEIMAR

La derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial trajo consigo la creació n de la República de


Weimar, régimen político que se instauraría en el país teutó n entre 1919 y 1933. Tiene su origen
concretamente el 11 de agosto de 1919 en la ciudad de Weimar, lugar donde se constituye la
Asamblea Nacional que proclama esta nueva constitució n.
Antes de esta repú blica Alemania vivía bajo el II Reich y el kaiser Guillermo II. Sin embargo la llegada
de este nuevo régimen no trajo consigo la estabilidad de la nació n, ya que durante la misma se
produjeron numerosas tensiones econó micas, sociales y políticas. Ya desde un principio no se apoyó
en una base política fuerte. Tanto la izquierda como la extrema derecha nunca estuvieron de acuerdo
del todo con la Constitució n aprobada en Weimar.

La delicada situació n econó mica y social hizo que a medida que fueran pasando los añ os la mayoría de
partidos políticos perdieron la fe en este nuevo régimen, que contó con dos presidentes: Ebert (1918-
1925) y Hindenburg (1925-1934). Este estado caó tico de las finanzas se debió en gran parte a las
indemnizaciones que Alemania tuvo que pagar a los vencedores de la I Primera Guerra Mundial.
Grandes territorios llenos de riquezas pasaron a manos extranjeras para poder hacer frente a esos
pagos.

Estos problemas acarreaban que la sociedad, en un primer momento aliviada con el fin de la guerra,
comenzara a ver su futuro demasiado oscuro. La clase obrera acusó al gobierno casi desde un
principio de mirar ú nicamente los intereses de la burguesía, por lo que en algunas ciudades del país se
iniciaron movimientos revolucionarios. A todo esto se le añ adió , para má s inri, el efecto de la Gran
Depresió n de 1929 que afectó a todo el mundo.

Ante este panorama tan desolador (revueltas sociales, crisis econó mica, alta tasa de desempleo, etc…)
la Repú blica de Weimar no tenía visos de ningú n tipo de poder triunfar y salir adelante. El 30 de enero
de 1933 el presidente Hindenburg no tuvo má s remedio que nombrar canciller y jefe de gobierno a
Hitler, del partido nazi, quien poco después suprimiría por completo la democracia, poniendo así fin a
este convulso momento de la historia de Alemania conocido como la Repú blica de Weimar.

LOS LOCOS AÑ OS 20

La denominació n de Felices Añ os Veinte o Añ os Locos corresponde al periodo de prosperidad


econó mica que tuvo Estados Unidos desde 1922 hasta 1929. Esta prosperidad benefició a toda la
sociedad e hizo que la economía siguiera creciendo a un ritmo que no se había registrado antes. Pero
esta prosperidad duraría un corto periodo que finalizaría el 24 de octubre de 1929, conocido como el
Jueves Negro, y con la llegada del "crack" del 29, que culminaría finalmente con el advenimiento de la
Gran Depresió n.

Hubo cantidad de factores determinantes a la hora de llegar a esta situació n. En la Primera Guerra
Mundial EEUU había exportado grandes cantidades de armamento y otros productos a los países
europeos. Al finalizar la guerra, la economía de Europa quedó tocada seriamente. Los efectos de los
tratados de paz tuvieron su repercusió n en el marco demográ fico europeo. Alemania se vio
seriamente afectada a causa de la pérdida de Alsacia y Lorena, territorios con grandes industrias
mineras y, ademá s, por la pérdida de sus colonias. Austria y Hungría vieron restringido su mercado
interior al verse reducida a la cuarta parte su territorio anterior. A esto se le suma la pérdida de la
hegemonía econó mica mundial de Inglaterra. La Primera Revolució n Industrial y el colonialismo
habían favorecido a este país. Al acabar la guerra, Inglaterra tenía deudas de guerra con EEUU, al igual
que muchos países europeos, lo que ló gicamente favoreció la economía de EEUU al ser receptor de
estas deudas. A esto se le debe sumar que Estados Unidos se había convertido en la nació n proveedora
mundial. Esto se debe a que toda Europa necesitaba productos que no podían fabricar ellas por el
hundimiento econó mico. Estados Unidos se vio con un exceso de oferta y Europa necesitaba mucha
cantidad lo que hizo que la economía y los ingresos americanos crecieran vertiginosamente.

La expansió n de EEUU se basó en una profunda transformació n productiva dominada por la


innovació n técnica. De esta forma se disminuían costes y se aumentaba la producció n, obteniendo má s
beneficios. Fue en esta época donde se popularizó el uso del teléfono, el automovil y los
electrodomésticos. Estos aparatos eran demasiado caros, y fue entonces cuando se aplicó por primera
vez la venta a plazos. Esto creó una oleada consumista, ya que la gente podía comprar los productos
sin necesidad de tener el efectivo en un primer momento. El aumento del consumo y la popularizació n
de la venta a plazos hizo que se comprara tanto hasta el extremo de que los consumidores se
endeudaran. También fue objeto de popularidad la difusió n de la radio como medio de comunicació n
masivo, ya que era un dispositivo econó mico y al alcance de toda la població n.

La mú sica como el jazz se empezó a desarrollar en estos tiempos de bienestar.En estos tiempos la
fá brica Ford innovó con la utilizació n de la cadena de montaje. De esta forma se reducían costes y
tiempo. Este medio de producció n se aplicó a otros sectores (siderurgia, cristal,etc). También tuvieron
efectos positivos la demanda de la construcció n de rascacielos.

Todo esto tuvo una gran influencia en el mercado de trabajo, dejando la tasa de desempleados en
Estados Unidos en 13 millones. No había habido ninguna tan baja hasta la fecha. Estos añ os
constituyeron los mejores para la sociedad Norteamericana. Se vivían unos añ os de excelente
bienestar y de gran optimismo.

La reactivació n iniciada en Estados Unidos en 1922 (tras la crisis de 1921) fue algo má s tardía en
Europa (1924). Abrió las puertas a una etapa expansiva de la economía mundial que propició un clima
de euforia y ciega confianza en el sistema capitalista.

Se pusieron en marcha las transformaciones heredadas de la Segunda Revolució n Industrial:

Desarrollo de nuevos sectores de la producció n (químico, siderurgico, alimentario, automoció n).


 Empleo de nuevas fuentes de energía: electricidad y petró leo.

 Introducció n de nuevas formas de organizació n del trabajo: taylorismo, estandarizació n,


fordismo.

 Concentració n de capitales en torno a grandes corporaciones (trust, cartel, holding),


especialmente en USA y Alemania.

Los Estados Unidos se convirtieron en la locomotora de la economía mundial. El modelo de vida


americano fue exportado por todo el mundo.

Se trataba del "american way of life" que rá pidamente sedujo a los europeos, cimentado en el
consumo individual de bienes (automó viles, teléfonos, electrodomésticos), impulsado por la
publicidad y sostenido por un crédito fá cil y las ventas a plazos.

Los espectá culos de masas (cine, deportes, cabarets, teatro), el interés por la alta costura, las nuevas
corrientes musicales (jazz, charleston, blues) se conviertieron en objetos de consumo y alimentaron a
toda una industria que hasta entonces no había sido significativa (Hollywood, discográ ficas, moda,
etc.)

La prensa conoció un gran esplendor, proliferaron las revistas especializadas, las deportivas, las
dedicadas a la mujer. Fenó meno destacado fue el de la radio, cuyas ondas se difundieron por campos y
ciudades y comenzó a utilizarse como excelente instrumento de publicidad. Al final de la década
existían casi 14 millones de receptores en Estados Unidos.

La América opulenta se reveló a los ojos de todo el mundo como el paradigma de las libertades, de las
posibilidades de enriquecimiento y el bienestar. Los valores que la impulsaban eran los del éxito, la
iniciativa y el esfuerzo individual.

Por contra la pobreza y el fracaso fueron considerados signos de pereza, falta de inteligencia,
debilidad e incompetencia.

El país se exhibió como en un escaparate donde toda iniciativa conducía al éxito, se proyectó a través
de los medios los medios de comunicació n de masas (cine, publicidad, etc) como la Meca soñ ada para
los que iban en busca de la fortuna

Una fuerte inmigració n comenzó a afluir desde todos los rincones del mundo (Alemania, Polonia,
Italia, China) en busca de oportunidades, agolpá ndose en las ciudades en barrios abarrotados de
extranjeros donde reinaban la pobreza y la exclusió n.
Pero esos inmigrantes eran portadores lenguas, religiones, costumbres y diferentes ideales políticos,
de modo que en no pocas ocasiones chocaron con los valores de lo ya establecidos, que reaccionaron
aferrá ndose a los conservadores ideales del modelo "WASP" (blanco, anglosajó n, nativo y
protestante).

La percepció n de la "otra América", la de los que llegaban, se convirtió en un grave problema social,
político y moral.

La Administració n conservadora republicana optó por una política de control de la emigració n (Leyes
de 1921) y desde postulados racistas prohibió la entrada de individuos de origen asiá tico
restringiendo asimismo la entrada de europeos -especialmente de eslavos y latinos- mediante leyes
como la Immigration Act de 1924 (también conocida como "Johnson-Reed Act").

Desde una mentalidad puritana, se difundió la opinió n de que el país estaba siendo corrompido por
ideas y modos de vida extrañ os y se identificó a los inmigrantes con la ingesta de alcohol. El gobierno
prohibió su consumo, fabricació n y venta ("Ley Seca"), fomentando con ello la creació n de bandas
organizadas que ejercieron el control de un floreciente contrabando y mercado negro, favoreciendo
indirectamente el fenó meno de las mafias y el gansterismo (Al Capone y otros).

Este optimismo que en Estados Unidos impregnó a las clases altas y medias fue menos intenso en el
resto del mundo, reduciéndose a los sectores má s acomodados, aquellos con suficientes recursos para
imitar el modo de vida americano.

El ciclo expansivo fue interrumpido bruscamente a raíz de la crisis desencadenada por el hundimiento
de la Bolsa de Nueva York en octubre de 1929. En su lugar se instalaron en el ambiente el pesimismo y
la desesperanza que caracterizaron el período de los "Treinta".

MURO DE BERLIN

La construcció n del Muro de Berlín y, especialmente su caída, han formado parte de los momentos
má s importantes de la historia del siglo XX. Este muro dividió Berlín en dos partes durante 28 añ os,
separando a familias y amigos.

Antecedentes

Al finalizar la II Guerra Mundial, tras la divisió n de Alemania, Berlín también quedó dividida en cuatro
sectores de ocupació n: soviético, estadounidense, francés e inglés. Las malas relaciones entre los
comunistas y los aliados fueron creciendo hasta llegar al punto en que surgieron dos monedas, dos
ideales políticos y, finalmente, dos alemanias.

En 1949, los tres sectores occidentales (estadounidense, francés y britá nico) pasaron a
llamarse Repú blica Federal Alemana (RFA) y el sector oriental (soviético) se convirtió en la Repú blica
Democrá tica Alemana (RDA).

Berlín quedó dividida y se crearon 81 puntos de paso entre las dos zonas de la ciudad.

La construcció n del muro

La maltrecha economía soviética y la floreciente Berlín occidental hicieron que hasta el añ o 1961 casi
3 millones de personas dejaran atrá s la Alemania Oriental para adentrarse en el capitalismo.

La RDA comenzó a darse cuenta de la pérdida de població n que sufría (especialmente de altos


perfiles) y, la noche del 12 de agosto de 1961, decidió levantar un muro provisional y cerrar 69 puntos
de control, dejando abiertos só lo 12.

A la mañ ana siguiente, se había colocado una alambrada provisional de 155 kiló metros que separaba
las dos partes de Berlín. Los medios de transporte se vieron interrumpidos y ninguno podía cruzar de
una parte a otra.

Durante los días siguientes, comenzó la construcció n de un muro de ladrillo y las personas cuyas casas
estaban en la línea de construcció n fueron desalojadas.

Con el paso de los añ os, hubo muchos intentos de escape, algunos con éxito, de forma que el muro fue
ampliá ndose hasta límites insospechados para aumentar su seguridad.

El Muro de Berlín acabó por convertirse en una pared de hormigó n de entre 3,5 y 4 metros de altura,
con un interior formado por cables de acero para aumentar su resistencia. En la parte superior
colocaron una superficie semiesférica para que nadie pudiera agarrarse a ella.

Acompañ ando al muro, se creó la llamada "franja de la muerte", formada por un foso, una alambrada,
una carretera por la que circulaban constantemente vehículos militares, sistemas de alarma, armas
automá ticas, torres de vigilancia y patrullas acompañ adas por perros las 24 horas del día. Tratar de
escapar era similar a jugar a la ruleta rusa con el depó sito cargado de balas. Aun así, fueron muchos
los que lo intentaron.

En 1975, 43 kiló metros del muro estaban acompañ ados de las medidas de seguridad de la franja de la
muerte, y el resto estaba protegido por vallas.

Cruzando al muro
Entre 1961 y 1989 má s de 5.000 personas trataron de cruzar el muro y má s de 3.000 fueron
detenidas. Alrededor de 100 personas murieron en el intento, la ú ltima de ellas el 5 de febrero de
1989.

En el Museo del Muro de Checkpoint Charlie se narran las historias má s curiosas de có mo la gente
consiguió cruzar el muro.

La caída del muro de Berlín

La caída del muro vino motivada por la apertura de fronteras entre Austria y Hungría en mayo de
1989, ya que cada vez má s alemanes viajaban a Hungría para pedir asilo en las distintas embajadas de
la Repú blica Federal Alemana. Este hecho, motivó enormes manifestaciones en Alexanderplatz que
llevaron a que, el 9 de noviembre de 1989 el gobierno de la RDA afirmara que el paso hacia el oeste
estaba permitido.

Ese mismo día, miles de personas se agolparon en los puntos de control para poder cruzar al otro lado
y nadie pudo detenerlos, de forma que se produjo un éxodo masivo.

Al día siguiente, se abrieron las primeras brechas en el muro y comenzó la cuenta atrá s para el final de
sus días.

Una vez liberados, familias y amigos pudieron volver a verse después de 28 añ os de separació n
forzosa.

EL FASCISMO DE MUSSOLINI

La formació n del Estado fascista en Italia arrancó en 1922. Dos décadas má s tarde, concluyendo la II
Guerra Mundial, llegaría su fin, cuando el ú ltimo reducto de Mussolini, la República de
Saló (Repú blica Social Italiana), sustentada por los alemanes, fue derrotada por los aliados.

El líder indiscutible del fascismo italiano fue Benito Mussolini, nacido en 1883 en el seno de una
familia de origen humilde (su padre era herrero).

Se formó como maestro de escuela y ejerció como tal durante cinco añ os, militó en el Partido
Socialista Italiano desde 1900 hasta 1914, fecha en que fue expulsado de la organizació n por
defender la entrada de Italia en la guerra, frente al neutralismo del partido. En 1915
fue militarizado y en 1917 gravemente herido en combate.

Una vez recuperado se embarcó en una intensa actividad política y periodística, ejerciendo su


labor en el perió dico “Il Popolo”, que él mismo había fundado en 1914.
En 1919 constituyó en Milá n el grupo de cará cter paramilitar los “Fasci di
Combattimento” (fascios italianos de combate), grupo paramilitar, de ideología ultranacionalista,
anticomunista y antiliberal, cuyos miembros lucían uniformes de color negro. De ahí surgiría en
1921 el Partido Nacional Fascista.

Mediante la acción violenta sobre socialistas, comunistas, anarquistas y, en general sobre todos los
demó cratas italianos, logró alcanzar el poder en 1922, creando un régimen totalitario constituido en
precedente y modelo de otros tantos surgidos en Europa a lo largo de la década de los treinta.

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