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ETAPAS DEL DESARROLLO HUMANO

1) Etapa prenatal. Esta es la primera etapa de la vida humana, denominada también fase
intrauterina, ya que tiene lugar dentro de la matriz de la madre durante el embarazo. Por
lo tanto, esta etapa va desde la fecundación (unión de las células sexuales de los
progenitores) y el desarrollo del feto, hasta el nacimiento o el parto.

2) Etapa de la infancia. La segunda etapa de la vida de todo ser humano, pero la primera
fuera de la contención y protección del cuerpo de la madre, es la infancia. Va desde el
instante del parto hasta alrededor de los seis años de edad, cuando se inicia como tal la
niñez.

3) Etapa de la niñez. Ubicada entre los 6 y 12 años, esta tercera etapa de desarrollo
humano coincide con la escolarización del individuo, es decir, su capacidad para el
aprendizaje y la convivencia con otros individuos de su edad. En la escuela el niño
aprende a través de diversos mecanismos lúdicos y pedagógicos a sacar provecho a sus
facultades mentales, físicas y sociales.
4) Etapa de la adolescencia. Esta cuarta etapa de la vida humana se inicia al término de
la niñez, alrededor de los 12 años, y finaliza con la entrada en la juventud, alrededor de
los 20. No existen límites precisos para ello, pues varía de acuerdo al individuo: pero se
toma como inicio claro de la adolescencia la entrada en la pubertad, es decir, la
maduración sexual de individuo.

5) Etapa de la juventud. Se llama juventud a la primera etapa de adultez o adultez


temprana, en la que el individuo ya está maduro sexualmente y ha superado las
turbulencias de la adolescencia, listo para iniciar una vida responsable de sí misma. Se
considera que normalmente la juventud oscila entre los 20 y los 25 años de edad, si bien
estos parámetros no son fijos.
6. La etapa más prolongada normalmente del desarrollo humano, se inicia luego de los 25
años de edad, con el fin de la juventud y se prolonga hasta la entrada en la vejez o la
ancianidad, alrededor de los 60 años. Se considera que un individuo adulto está en la
plenitud de sus facultades psíquicas, físicas y biológicas, por lo que en esta etapa suele
tener lugar el deseo de la paternidad y de fundar una familia.

7) Etapa de la ancianidad. La última etapa de la vida humana, que inicia alrededor de los
60 años de edad y se prolonga hasta el fallecimiento. Los adultos en esta etapa pasan a
denominarse “ancianos” y suelen hallarse al final de una cadena familiar a la que
transmitir sus aprendizajes y enseñanzas vitales.

FABULAS

El hombre y el león
Un León y un Hombre tuvieron la suerte de viajar en compañía a través del bosque.
Pronto comenzaron a discutir, ya que cada uno de ellos se jactaba de que él y los
suyos eran muy superiores al otro tanto en fuerza como en mente.
De repente llegaron a un descampado en el bosque y allí había una estatua. Era
una representación de Heracles en el acto de romper las fauces del León de
Nemea.
“Mira”, dijo el hombre, “¡así de fuertes somos! ¡El Rey de las Bestias es como la cera
en nuestras manos!
“¡Ho!”, Se rió el León, “un hombre hizo esa estatua”. Hubiera sido una escena muy
diferente si un León la hubiera hecho”.
Moraleja: todo depende del punto de vista y quién cuenta la historia. Siempre
confíe en su propio ingenio y trate de juzgar las circunstancias.

El lobo y la grulla
Un Lobo había estado festejando con demasiada avidez, y un hueso se le había quedado
cruzado en la garganta. No podía subir ni bajar, y por supuesto, no podía comer nada.
Naturalmente, esa era una terrible situación para un Lobo codicioso.
En un momento, se le ocurrió visitar a la Grulla. Estaba seguro de que ella, con su largo
cuello y pico, fácilmente podría alcanzar el hueso y sacarlo. “Te recompensaré muy bien”,
dijo el Lobo, “si me sacas ese hueso”.
La Grulla, como puedes imaginar, estaba muy intranquila por meter su cabeza en la
garganta de Lobo. Pero ella se aferraba a la naturaleza, por lo que hizo lo que el lobo le
pidió que hiciera. Cuando el Lobo sintió que el hueso se había ido, comenzó a alejarse.
“¡Qué!” Gruñó el Lobo, dando vueltas. “¿No la tienes? ¿No es suficiente que te deje sacar
la cabeza de mi boca sin quitártela?
Moraleja: No espere recompensa por servir a quien no tiene honor. Permanecer en
compañía de personas egoístas no hará ningún favor a nadie.

El oso y los dos amigos


Una vez dos amigos caminaban por el bosque. Sabían que cualquier cosa peligrosa podía
sucederles en cualquier momento en el bosque. Entonces se prometieron mutuamente
que permanecerían unidos en caso de peligro.
De repente, vieron un gran oso acercarse a ellos. Uno de los amigos subió a un árbol
cercano. Pero el otro no sabía cómo escalar. Entonces, siendo guiado por su sentido
común, se tumbó en el suelo sin aliento, fingiendo ser un hombre muerto.
El oso se acercó al hombre que yacía en el suelo. Olía a sus oídos, y lentamente dejó el
lugar. Porque los osos no tocan a las criaturas muertas. Ahora el amigo del árbol bajó y le
preguntó a su amigo en el suelo: “Amigo, ¿qué te dijo el oso en tus oídos?” El otro amigo
respondió: “El oso me aconsejó que no crea en los amigos falsos”.
Moraleja: Un buen amigo es el que siempre te apoya y respalda en cualquier situación.

El ratoncito
Había una vez un ratoncito y su madre. Vivían en un agujero en una pared de una casa
grande y cálida con mucho queso para comer. Entonces, un día, la madre decidió sacar al
ratoncito fuera de su casa. Fuera de la cueva, esperaba un enorme gato, lamiendo sus
labios y esperando para comerlos a los dos.
“¡Madre madre! ¿Qué deberíamos hacer?” decia el Ratón bebé llorando, aferrándose a la
cola de su madre. La Madre Ratón hizo una pausa, mirando a los ojos pequeños y
brillantes del gato hambriento. Pero no tenía miedo porque sabía exactamente cómo tratar
con gatos grandes y atemorizantes. Ella abrió la boca e inspiró profundamente.
“¡Guau! ¡Guau! Guau Guau! “Ella gritó, y el gato se escapó tan rápido como pudo.
“¡Guau, madre! ¡Eso fue increíble! “, Le dijo el pequeño ratoncito a su madre, sonriendo
alegremente.
“Y eso, hijo mío, es la razón por la que siempre es mejor tener un segundo idioma”.
Moraleja: Siempre es bueno tener un segundo idioma.

El zorro y las uvas


Una tarde, un zorro caminaba por el bosque y vio un racimo de uvas colgando de una
rama alta.
“Justo lo que necesito para saciar mi sed”, pensó.

Retrocediendo unos pasos, el zorro saltó y se le erró a las uvas colgantes. De nuevo, el
zorro retrocedió unos pasos e intentó alcanzarlos, pero aún falló.
Finalmente, dándose por vencido, el zorro levantó la nariz y dijo: “De todos modos, son
amargas”, y procedió a alejarse.
Moraleja: es fácil despreciar lo que no puedes tener. Nada es fácil sin un trabajo duro.
Entonces, trabaja duro y alcanza tus metas.

Leyendas

1. Leyenda del Mico Brujo


Esta es una leyenda que se originó en tiempo de los mayas, hace más de medio milenio,
y que se mezcló con algunas creencias aportadas por los españoles tras la conquista.
Habla acerca de unas brujas que tienen el poder de transformarse en seres muy similares
a monos mediante un ritual demoníaco.
Se dice que las monas aparecen después de la media noche cuando hay luna llena para
buscar a los hombres que abandonan a sus mujeres, pero cualquier curioso que se
asome al escuchar el bullicio que arman puede ser atacado.

2. Leyenda de la Tatuana
Esta leyenda narra la historia de la más bella mujer que hubo alguna vez en Guatemala.
Tras ser acusada de bruja por atraer a todos los hombres, fue sentenciada a morir
quemada en la hoguera por la Santa Inquisición.
La noche antes de su ejecución, dibuja en la pared de su celda un barco con un pedazo
de carbón y tras recitar un conjuro aparece el diablo y la ayuda a escapar en el barco.

3. Leyenda del Jilguerillo


Esta es la historia de una bella doncella maya que habitó en Izabal antes de la llegada de
los españoles. Era muy feliz hasta que un sanguinario principe guerrero la escogió como
esposa, por lo que ella huyó al bosque.
El principe se enfureció y para obligarla a salir ordenó que el bosque fuera quemado,
ofreciéndole perdonarla si salía y se casaba con ella. Pero ella prefirió la muerte, tras lo
cual se transformó en un pajarito que aún se escucha en Guatemala.
4. Leyenda de la Siguamonta
No hay que confundir a la la Siguamonta con la Siguanaba. La Siguamonta es una
leyenda de principios del Siglo XX, originada en la capital de Guatemala. Cuenta la
historia que en aquel entonces, la todavía pequeña capital estaba rodeada por barrancos
donde sucedían cosas atroces.
El culpable según los testigos era un endemoniado pajarillo dorado de simpatiquísimo
cantar que atraía a los niños curiosos y desobedientes para embarrancarlos.

5. Leyenda de la Cegua
Esta leyenda narra la historia de una hermosa mujer que se aparece de noche a los
hombres mujeriegos que van por caminos solitarios. La mujer camina sola por el camino y
pide al hombre que va pasando en su caballao que la ayude a llegar a su destino. Cuando
el hombre accede y la mira lujuriosamente, la Cegua le da una mordida en el cachete
dejandolo marcado para siempre.
Existen relatos de que la Cegua sigue apareciendo en la actualidad, aunque lógicamente
la mujer de las historias más recientes pide un aventón en el borde de la carretera.

5. Leyenda del Cadejo


En nuestro país se manejan dos versiones de esta famosa leyenda: la primera da a
conocer que el Cadejo es como un perro de color negro y ojos rojos que pareciera que
tiene fuego. Se dice que cuida a quienes se emborrachan y deambulan por las calles
acompañándolos hasta su casa.
La segunda versión describe a tres perros, uno blanco, uno negro y uno gris. El blanco
protege a las mujeres, el negro a los hombres y el gris cuida a los niños desamparados y
enfermos.

Cuentos
EL ÁRBOL MÁGICO
Hace mucho mucho tiempo, un niño paseaba por un prado en cuyo centro encontró un
árbol con un cartel que decía: soy un árbol encantado, si dices las palabras mágicas, lo
verás.
El niño trató de acertar el hechizo, y probó con abracadabra,
supercalifragilisticoespialidoso, tan-ta-ta-chán, y muchas otras, pero nada. Rendido, se
tiró suplicante, diciendo: "¡¡por favor, arbolito!!", y entonces, se abrió una gran puerta en el
árbol. Todo estaba oscuro, menos un cartel que decía: "sigue haciendo magia". Entonces
el niño dijo "¡¡Gracias, arbolito!!", y se encendió dentro del árbol una luz que alumbraba un
camino hacia una gran montaña de juguetes y chocolate.
El niño pudo llevar a todos sus amigos a aquel árbol y tener la mejor fiesta del mundo, y
por eso se dice siempre que "por favor" y "gracias", son las palabras mágicas

EL MUÑECO DE NIEVE:
Había dejado de nevar y los niños, ansiosos de libertad, salieron de casa y empezaron a
corretear por la blanca y mullida alfombra recién formada.
La hija del herrero, tomando puñados de nieve con sus manitas hábiles, se entrego a la
tarea de moldearla.
Haré un muñeco como el hermanito que hubiera deseado tener se dijo.
Le salió un niñito precioso, redondo, con ojos de carbón y un botón rojo por boca. La
pequeña estaba entusiasmada con su obra y convirtió al muñeco en su inseparable
compañero durante los tristes días de aquel invierno. Le hablaba, le mimaba...
Pero pronto los días empezaron a ser más largos y los rayos de sol más cálidos... El
muñeco se fundió sin dejar más rastro de su existencia que un charquito con dos
carbones y un botón rojo. La niña lloro con desconsuelo. Un viejecito, que buscaba en el
sol tibieza para su invierno, le dijo dulcemente: Seca tus lágrimas, bonita, por que acabas
de recibir una gran lección: ahora ya sabes que no debe ponerse el corazón en cosas
perecederas.

LA GATA ENCANTADA
Erase un príncipe muy admirado en su reino. Todas las jóvenes casaderas deseaban
tenerle por esposo. Pero él no se fijaba en ninguna y pasaba su tiempo jugando con
Zapaquilda, una preciosa gatita, junto a las llamas del hogar.
Un día, dijo en voz alta:
Eres tan cariñosa y adorable que, si fueras mujer, me casaría contigo.
En el mismo instante apareció en la estancia el Hada de los Imposibles, que dijo:
Príncipe tus deseos se han cumplido
El joven, deslumbrado, descubrió junto al a Zapaquilda, convertida en una bellísima
muchacha.
Al día siguiente se celebraban las bodas y todos los nobles y pobres del reino que
acudieron al banquete se extasiaron ante la hermosa y dulce novia. Pero, de pronto,
vieron a la joven lanzarse sobre un ratoncillo que zigzagueaba por el salón y zampárselo
en cuanto lo hubo atrapado. El príncipe empezó entonces a llamar al Hada de los
Imposibles para que convirtiera a su esposa en la gatita que había sido. Pero el Hada no
acudió, y nadie nos ha contado si tuvo que pasarse la vida contemplando como su esposa
daba cuenta de todos los ratones de palacio.
EL LOBO
Cauto, silencioso, el lobo salió una noche del bosque atraído por el olor del rebaño. Con
paso lento se acercó al redil lleno de ovejas, poniendo atención en donde ponía la pata
para no despertar con el más leve ruido al dormido perro.
Sin embargo, la puso sobre una tabla y la tabla se movió. Para castigarse por aquel
error, el lobo levantó la pata con que habla tropezado y se la mordió hasta hacerse
sangre.
¿Verdad, amiguitos, que este lobo fue el mejor juez de sí mismo?

EL GRANJERO BONDADOSO
Un anciano rey tuvo que huir de su país asolado por la guerra. Sin escolta alguna,
cansado y hambriento, llegó a una granja solitaria, en medio del país enemigo, donde
solicitó asilo. A pesar de su aspecto andrajoso y sucio, el granjero se lo concedió de la
mejor gana. No contento con ofrecer una opípara cena al caminante, le proporcionó un
baño y ropa limpia, además de una confortable habitación para pasar la noche.
Y sucedió que, en medio de la oscuridad, el granjero escuchó una plegaria musitada en
la habitación del desconocido y pudo distinguir sus palabras:
-Gracias, Señor, porque has dado a este pobre rey destronado el consuelo de hallar
refugio. Te ruego ampares a este caritativo granjero y haz que no sea perseguido por
haberme ayudado.
El generoso granjero preparó un espléndido desayuno para su huésped y cuando éste
se marchaba, hasta le entregó una bolsa con monedas de oro para sus gastos.
Profundamente emocionado por tanta generosidad, el anciano monarca se prometió
recompensar al hombre si algún día recobraba el trono.
Algunos meses después estaba de nuevo en su palacio y entonces hizo llamar al
caritativo labriego, al que concedió un título de nobleza y colmó de honores. Además,
fiando en la nobleza de sus sentimientos, le consultó en todos los asuntos delicados del
reino.

CUENTOS MUDOS

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