Italia, oficialmente República Italiana (en italiano, Repubblica
Italiana), es un país miembro de la Unión Europea, cuya forma de gobierno es la república parlamentaria. Su territorio, con capital en Roma, se divide en veinte regiones formadas estas, a su vez, por 106 provincias. Italia se ubica en el centro del mar Mediterráneo, en Europa meridional. Ocupa la península Itálica, así como la llanura Padana, la islas de Sicilia y Cerdeña y alrededor de ochocientas islas menores entre las que se destacan las islas Tremiti en el mar Adriático, los archipiélagos Campano y Toscano en el mar Tirreno, o las islas Pelagias en África septentrional, entre otras. En el norte, está rodeada por los Alpes y tiene frontera con Francia, Suiza, Austria, y Eslovenia. Los Estados de San Marino y Ciudad del Vaticano son enclaves dentro del territorio italiano. A su vez, Campione d'Italia es un municipio italiano que forma un pequeño enclave en territorio suizo. Ha sido el hogar de muchas culturas europeas como la civilización nurágica, los etruscos, los griegos, los romanos y también fue la cuna del Humanismo y del Renacimiento, que comenzó en la región de Toscana y pronto se extendió por toda Europa. La capital de Italia, Roma , ha sido durante siglos el centro político y cultural de la civilización occidental. Además, es la ciudad santa para la Iglesia católica, siendo el Papa el obispo de Roma y encontrándose dentro de la ciudad el microestado del Vaticano. El significado cultural del país se refleja en todos sus Patrimonios de la Humanidad, ya que tiene 55, el país con mayor número del mundo. Es el tercer país de la Unión Europea que más turistas recibe por año, siendo Roma la tercera ciudad más visitada.7Otras ciudades importantes son: Milán, centro de finanzas y de industria, y, según el Global Language Monitor, la capital de la Moda;8 Nápoles, importante puerto en el Mediterráneo, capital histórica y ciudad más poblada del Mezzogiorno;9 Turín, centro de industria automovilística y de diseño industrial. Italia es una república democrática, forma parte del G7 o grupo de las siete más grandes naciones avanzadas del mundo y es un país desarrollado con una calidad de vida muy alta, encontrándose en 2005 entre las siete primeras del mundo. Es el país número 28 (informe 2017) en materia de alto índice de desarrollo humano11. Es una potencia regional y mundial12131415 miembro fundador de la Unión Europea, firmante del Tratado de Roma en 1957. También es miembro fundador de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, de la Organización Mundial del Comercio, del Consejo de Europa y de la Unión Europea Occidental. El país, y especialmente Roma, tiene una fuerte repercusión en temas de política y cultura, en organizaciones mundiales como la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO),16 el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (IFAD), el Glocal Forum,17 o el Programa Mundial de Alimentos (WFP).
Historia[editar]
La historia de Italia está íntimamente ligada a la de la cultura
occidental y la historia de Europa, y buena parte de los principales acontecimientos históricos del mundo occidental y universal han tenido lugar en el país o los han protagonizado sus pueblos. Heredera de múltiples culturas antiguas como la de los etruscos y latinos y receptora de la colonización griega y cartaginesa, vio nacer el Imperio romano, legador de gran parte de la cultura occidental y uno de los mayores de la historia. Tras la caída del Imperio, Italia sufrió una serie de invasiones germanas alternadas con intentos bizantinos y francos de reconstruir la unidad del Imperio romano.19 Roma, sede del papado y fuente de legitimidad imperial fue en esos tiempos un foco que atrajo a figuras como Justiniano I y Carlomagno. Durante la Edad Media Italia se convertiría en un mosaico de ciudades-estado que luchaban entre sí para conseguir la hegemonía sobre el resto, con frecuentes intervenciones de las potencias circundantes y de la Iglesia católica. Su privilegiada situación geográfica hizo que fuera clave en el comercio europeo y favoreció repúblicas marítimas conectadas con la historia europea. La lucha entre el poder temporal imperial, que incluía a Italia, y el espiritual papal, que tenía su sede en Roma, tuvo en Italia especiales repercusiones. Esta herencia de relevancia política lo convirtió en foco de las luchas por el poder en Europa. Además, el legado cultural clásico y eclesiástico fue el caldo de cultivo de nuevas tendencias. En los siglos XV y XVI se convirtió en el centro cultural de Europa dando origen al Renacimiento y fue uno de los campos en los que se decidió la supremacía europea del Imperio español con la victoria sobre Francisco I de Francia. Tras el declive de la monarquía hispánica, el Imperio austrohúngaro pasaría a controlar la región, como buena parte de Europa Central. Transformada en un campo de batalla durante las guerras revolucionarias francesas y el Primer Imperio de Napoleón Bonaparte, pasaría a luchar por su independencia. Entre 1856 y 1870 se llevó a cabo la Unificación de Italia después de una serie de guerras que implicó enfrentarse al Imperio austríaco y los Estados Pontificios, a partir del cual Italia se instituye como un país. Posteriormente, el Reino de Italia junto con las demás potencias europeas llevaría a cabo políticas imperialistas que conformarían el Imperio italiano y que la llevaron a participar en la Primera Guerra Mundial del lado de la Entente, a desarrollar el fascismo de Benito Mussolini, a la invasión de Albania y Abisinia y a participar en la Segunda Guerra Mundial con las Potencias del Eje junto a la Alemania Nazi y el Imperio del Japón. Después de la derrota en la Segunda Guerra Mundial, la monarquía sería derrocada y se instauró la actual república que tuvo una excelente recuperación. En la actualidad Italia pertenece a organizaciones como la Unión Europea o el G-8.