Instituto Universitario Politécnico Santiago Mariño.
Escuela 42.
Resistencia de los Materiales II.
Esfuerzos en Vigas.
Profesor: Estudiante:
Ing. Jesús Cova. Sabrina Rojas.
C.I: 28.031.349
Puerto Ordaz, Junio 2020
Esfuerzos internos en vigas
Antes de describir los distintos tipos de esfuerzos internos que
experimenta una viga es importante repasar el concepto de lo que es una viga, siendo esta un elemento estructural en el cual la longitud es su dimensión más predominante sobre las otras dos, por lo general suele ser horizontal y está sometida a esfuerzos. Los esfuerzos son fuerzas que tratan de deformar los distintos elementos que conforman las estructuras sometidas a cargas. Existen 5 tipos de esfuerzos, los cuales son: Compresión, tracción, flexión, torsión y esfuerzo cortante.
El esfuerzo de compresión se da en aquellas vigas que están
dispuestas de manera vertical, en este la fuerza deformadora actúa aplastando y comprimiendo las fibras de la viga en sentido longitudinal.
Posteriormente encontramos el esfuerzo de tracción en el cual las
fibras de la viga tienden a alargarse y estirarse. Este tipo de esfuerzo podemos observarlo en las vigas sometidas a flexión, en donde la parte superior de la viga sufre un esfuerzo de compresión mientras que la parte inferior experimenta el esfuerzo de tracción.
La torsión es un tipo de esfuerzo que ocurre cuando la acción
deformadora tiende a retorcer las fibras de la viga. Un ejemplo sería el de una viga que sirve de soporte a una losa en voladizo, en la cual las cargas soportadas por la losa ocasionan un esfuerzo de torsión a lo largo de la longitud de la viga. En el esfuerzo de flexión la acción deformadora que actúa sobre la viga tiende a doblarla, este es muy común en vigas que son dispuestas de manera horizontal para la construcción de techos, ya que al soportar las cargas situadas sobre ellas se doblan curvándose hacia abajo de manera leve.
El esfuerzo cortante es el resultado de la acción de dos fuerzas
deformadoras que son paralelas entre sí, pero que tienen sentidos contrarios y que al mismo tiempo son perpendiculares al eje longitudinal de la barra. En este tipo de esfuerzo las fibras de la viga tienden a sufrir deformaciones angulares y se observa en aquellas vigas que se encuentran instaladas en forma de prisma o inclinadas.
Comparaciones entre los tipos de esfuerzos
La tracción es un esfuerzo a través del cual las fibras de una viga
tienden a alargarse, siendo este contrario al esfuerzo de compresión en el cual las fibras tienden a acortarse.
Al combinar los esfuerzos de compresión y tracción se produce el
esfuerzo de flexión, ya que al someter una viga a flexión, la parte superior de la misma va a contraerse mientras la parte inferior experimentara tracción obteniendo así un esfuerzo de flexión. Por ultimo tenemos los esfuerzos cortantes y de torsión, donde el esfuerzo cortante es provocado por una acción deformadora originada por dos fuerzas contrarias entre sí pero paralelas que ocasionan que parte de la estructura tienda a deslizarse una sobre la otra produciendo una deformación angular, mientras que por otro lado el esfuerzo de torsión se produce por una fuerza deformadora que actúa sobre el eje de la viga ocasionando que sus fibras tiendan a retorcerse en torno a su eje.
Esfuerzo cortante horizontal y vertical
El esfuerzo cortante horizontal también llamado esfuerzo cortante
longitudinal es el que se desarrolla a lo largo de un elemento estructural sometido a cargas transversales. Por otro lado el esfuerzo cortante vertical se desarrolla a lo largo de la sección transversal de un elemento estructural para resistir la acción deformadora de la cortante transversal.
La relación entre el esfuerzo cortante horizontal y transversal radica en
que al ser aplicada una fuerza cortante sobre una viga se generan esfuerzos tanto verticales como horizontales de igual magnitud cumpliendo:
t h=t v
Esto se debe aque la cortante horizontal va siempre acompañada de
una cortante vertical del mismo valor para evitar que la viga rote. También cabe mencionar que la combinación de estos esfuerzos cortantes genera esfuerzos de compresión y tracción diagonal.
Coeficiente de seguridad.
El coeficiente de seguridad es el resultado del cociente entre el valor
calculado de la capacidad máxima de un sistema y el valor del requerimiento esperado al que será sometido. El resultado del coeficiente de seguridad debe ser un número mayor que uno debido a que este indica la capacidad de exceso que tiene un sistema.
Cuando el resultado de un coeficiente de seguridad es un número
mayor a uno, indica que la estructura presenta seguridad ante el fallo, es decir, que cuanto mayor sea el coeficiente de seguridad menor probabilidad hay de que ocurra un fallo en la estructura. Por otro lado si el resultado es menor que la unidad hay una probabilidad elevada de que el fallo ocurra, de esta manera, se entiende que mientras menor sea el coeficiente de seguridad, más probabilidades habrá de que ocurra un fallo en la estructura.
El coeficiente de seguridad puede ser utilizado en el diseño para
aumentar las fuerzas realmente esperadas, multiplicándolas por el coeficiente, o también para disminuir la resistencia realmente esperada del material dividiéndola por el coeficiente. Ejemplos de resistencia a la tracción y a la fluencia en vigas.
Ejemplo de fluencia en vigas.
La fluencia es el aumento de deformación de un elemento que soporta
una carga constante durante un periodo de tiempo largo. Un ejemplo de la fluencia en vigas se refiere a un edificio construido con un hormigón de resistencia menor a 25 KN /mm2y que está situado en una ciudad de clima seco. Siendo ambos, factores propicios a sufrir fluencia.
En la edificación antes mencionada, a los 3 años de ser construida
comenzó a aparecer una fisura en uno de los muros de una vivienda situada en la planta baja del edificio, sobre el garaje. Dichas fisuras se repararon y se pinto sobre ellas, poco tiempo después volvieron a aparecer extendiéndose y recorriendo el muro en sentido vertical, apareciendo después fisuras inclinadas que parten de la fisura superior. Al revisar el suelo, el rodapié, se encuentra separado del piso en el centro lo cual indica que la viga ha cedido, se revisan plantas superiores y se evidencia que en los pisos superiores ha ocurrido lo mismo ocasionando que cada viga transmita a la viga inferior su propia carga, generando que la de planta baja cargue con todo el peso de las plantas superiores ya que por debajo de ella no había otro muro, sino que se encontraba el garaje, como se observa en el siguiente esquema. En este tipo de deformaciones, la primera parte de la deformación se realiza con más violencia y transcurrido un tiempo baja la velocidad con la que se produce la deformación, aunque esta se siga produciendo. Razón por la cual a los 5 años de que se comenzó a producir la deformación la parte más intensa de la deformación ha pasado y se debe hacer un seguimiento de las fisuras, si la fluencia deja de progresar se reparan pero si continua avanzando es probable que se deba reforzar la viga de la planta baja.
Ejemplos de tracción.
Cuando hablamos en materia de construcción, existen diversos
ejemplos de tracción que se pueden destacar, entre los cuales podemos mencionar una viga sometida a flexión, ya que cuando una viga soporta el valor de una carga, esta tiende a flexionarse, generando la resistencia a la flexión y a su vez, de tracción, ya que este es un esfuerzo combinado de compresión y tracción. Como podemos observar en la siguiente imagen, cuando una viga sufre flexión, una parte de la viga presenta resistencia a la compresión y la otra, resistencia a la tracción. Otro ejemplo de tracción en materia de construcción son los cables de los puentes colgantes, ya que el principal sostén de dichos puentes son los cables que están sujetos a torres o pilares para poder resistir el peso del tablero inferior del puente a través del cual circula el trafico mediante la resistencia a la tracción de dichos cables tal como se muestra en la siguiente imagen.