INSTITUCION EDUCATIVA DIOCESANA JESUS ADOLECENTE

ELABORADO POR
jhoan Andrés arenas calderón

TRABAJO
AUTOESTIMA Y AUTOCONTROL

GRADO
9: A

MATERIA
GESTION EMPRESARIAL

CIUDAD
BUENAVENTURA, VALLE

2020
 INTRUDUCCION

La inteligencia emocional podría definirse como la capacidad que tiene una

persona de manejar, entender, seleccionar y trabajar sus emociones y las de
los demás con eficiencia y generados resultados positivos. Es decir, es la
habilidad para gestionar bien las emociones. Tanto la nuestras como las de
los demás. Una persona que se enfada fácilmente, que se pone triste con
frecuencia o que no controla sus impulsos, que los expresa con educación
siendo sincero, pero, a la vez, consiguiendo no afectar negativamente a la
gente que le rodea es inteligente emocionalmente.

Todas las personas, en algún momento de nuestras vidas, hemos cometido

algún error por nuestro estado emocional. Un examen reprobado, un día
pesado en el trabajo, una multa por pasarte un semáforo en rojo, un
malentendido con un amigo o una ruptura amorosa, por mencionar algunos,
son situaciones que nos alteran y tienen impacto directo en nuestro
temperamento y nos orillan a perder el control. Durante este texto se tratará
el autocontrol como una de las principales habilidades que conforman la
inteligencia emocional.
 DESARROLLO

El hablar de autocontrol no es un sinónimo de una cualidad innata que nos es

dada a algunas personas si y a otras no, mas bien, y es en este punto donde
se debería trabajar más, corresponde a una habilidad que se va aprendiendo
con el paso del tiempo. Lo difícil de esta situación es que nuestra sociedad no
suele auspiciar el control en las personas, nos dejamos llevar por los
momentos, por lo que queremos hacer sin pensar en las consecuencias a
futuro de nuestras acciones. Al hablar del autocontrol se suele mencionar
más el problema que la solución. Personalmente me parece que es muy
común ver gente empeñada en resaltar el daño que nos hacemos a nosotros
mismo y a los demás, en su lugar de ayudar a evitar situaciones que dañen a
terceros.

El temperamento y el carácter son dos peculiares que influyen fuertemente

en el autocontrol. La primera es genética, son patrones de conducta
predefinidos por la forma de ser de nuestros padres y familiares; mientras la
segunda es formada por experiencias y situaciones que nos van formando y
definiendo nuestra forma de ser.

Desde pequeños nos controlan, haz esto, no hagas aquello, etc. Pero esos
son controles y regulaciones extremas, hay veces que se nos escapan de las
manos y no sabemos como actuar, no podemos andar por la vida haciendo o
dejando de hacer cosas solo por que nuestros padres nos las enseñaron,
debamos preocuparnos de quienes somos, que queremos, que esperamos de
nosotros mismos, y en base a ello actuar. Pero, como siempre existe uno y
esta no es la excepción, también y al mismo tiempo debamos preocuparnos
de los demás, de no perjudicarlos con nuestras elecciones, de hacer valer lo
que yo quiero siempre y cuando no dañe al otro, no dañar lo que él quiere.
Para poder ser personas con autocontrol, primeramente, hay que
conocernos, hay que aceptar que tenemos un temperamento sensible, o que
conocernos, hay que aceptar que tenemos un temperamento sensible, o que
somos de carácter débil, por ejemplo. Los especialistas en técnicas de
autocontrol recomiendan, siempre que sea posible, no forzar el cuerpo ni la
mente. Cuando un individuo esta relajado, sereno y descansado, se
encuentra en mejores condiciones para enfrentar las dificultades. Por otra
parte, el autocontrol necesita del dialogo sereno, para evitar que la
confrontación derive en situaciones de violencia emocional o hasta física. La
paciencia resulta una virtud clave a la hora de autocontrolarse. Los psicólogos
enseñan a que una persona sepa perdonarse a si misma por sus fallos y
equivocaciones, lo que contribuye a su equilibrio interior y la prepara para
aceptar las debilidades y errores de los demás.

Además, cabe destacar que el principal enemigo del autocontrol son las ideas
irracionales, que ocasionan una falta de autovaloración, inseguridad,
dependencia psicológica y la necesidad de aprobación, por ejemplo. Estas
ideas incluso pueden ocasionar depresión.

Ser una persona con autocontrol es una de las cosas mas inteligentes,
hablando emocionalmente, que podemos hacer y ser. Una persona con
autocontrol es capaz de afrontar situaciones difíciles con mas eficiencia, pues
la apariencia ayuda a mantener la calma y actuar de la manera mas prudente
posible y pensar mejor una situación para poder tomar la decisión correcta o
que se acerque mas a nuestras convicciones. Este es un beneficio que va de
la mano con la mejora de nuestras relaciones sociales, porque una persona
calmada se relaciona más fácil, hace mas favorable el ambiente para la
convivencia, para el trabajo, para la recreación. Además, hablando de un
ambiente laboral, sirve para que la persona ``que se controla” sea vista como
un tipo de líder capaz de sobrellevar situaciones difíciles; alguien que, con su
perseverancia ayude a materializar la metas a largo y corto plazo de una
manera más segura.

Ser una persona de autocontrol te permite tener una inteligencia moral más
alta, es decir, te permite actuar con empatía de tal forma que seas capaz de
ver sentir lo que las personas afectadas con tu decisión, puede sentir. Esto
conlleva a un aumento en la autoestima, y por ende, una mayor felicidad.
Controlar las emociones es algo que requiere de tiempo. Pero que si se logra
hacer será de gran beneficio para ti.

INTRODUCION

Todos los seres humanos poseemos sentimientos, según su personalidad

puede manifestarlos en diferentes maneras. Muchas veces estas
manifestaciones dependen de otros factores, según el lugar físico,
sentimental y emocional, estos pueden influir positiva o negativamente en la
formación de la persona o sea en la autoestima.

Este tema es de mucha importancia debido niños y adolescentes los cuales

están pasando por una etapa “definir su personalidad”, tomando diferentes
modelos ya que nos relacionamos en distintos ámbitos, el tema es
importante para el desarrollo y la constitución de una buena vida.

El objetivo reconocer la importancia del conocimiento interpersonal e

impersonal desde la autoestima y los distintos tipos de comunicación los
cuales sirven como medio de expresión del comportamiento humano.
 DESARROLLLO

La autoestima es un concepto definido a partir de la psicología, y se entiende

como aquella imagen que se tiene sobre sí mismo, de este modo, se trata de
aquel complejo conjunto de valoraciones y sentimientos que hacemos de
nuestras personas en torno a nuestras características, habilidades y
capacidades. Dicho de otro modo, es la estima hacia si mismo, la propia
valoración.

Un aspecto muy importante de la autoestima radica en su formación. Se trata

de algo que se va desarrollando a lo largo de la vida a partir de las
experiencias que nos toca vivir y como estas nos hacen sentir con nosotros
mismos. De esta manera, no resulta sorprendente que algunas veces nos
veamos enfrentados a ciertas situaciones que nos hacen sentir un poco
tontos, o bien, los mejores para realizar cierta labor.

La forma en que se desarrolla la autoimagen de las personas resulta ser

crucial en la mayoría de los aspectos de su vida, ya que tienen una influencia
muy grande en la manera de enfrentar los diferentes retos que presenta la
vida y de las limitaciones que cada uno se impone a la hora de actuar. Una
persona con una buena o alta autoestima tiende a rendir mejor que una
persona de autoestima baja, ya que esta ultima se impone limitaciones que la
gran parte de las veces, solo se encuentran en su mente.
Como ya se mencionaba, la autoestima se va desarrollando poco a poco a lo
largo de las diferentes etapas de la vida, siendo una de las más importantes
la adolescencia. Es en esta etapa que las personas comienzan a configurar lo
que más tarde será su identidad, lo que le permite conocer con mayor
certeza sus verdaderas posibilidades como persona.

Además, a lo largo de este periodo será necesario contar con el apoyo de los
otros significantes y de buscar personas similares a fin de contar con pares y
un grupo al cual pertenecer. La forma en que se ha desarrollado la
autoestima durante la infancia, la que guarda estrecha relación con el amor y
apoyo proveído por la familia, le permitirá al adolescente superar esta etapa
de crisis con éxito, forjando una identidad y una identidad y una autoestima
solida que ampliaran sus posibilidades como individuo.