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Qué es el fuego?, - es la primer pregunta que nos debemos hacer para entender
todo el proceso, desde la combustión (emisión de calor y luz), y donde
usualmente un sinnúmero de sustancias se oxidan a temperaturas ordinarias o
suficientemente elevadas, produciéndose cada vez más calor por unidad de
tiempo, hasta alcanzar niveles que se sostienen por si misma en el medio de
reacción por el calor que produce.
Es lo mismo que sucede con el cuerpo humano, que necesita aire, alimento y
temperatura normal del cuerpo, así como un sistema circulatorio para vivir. Y el
fuego también, necesita de aire, combustible, temperatura de llama adecuada y
un sistema de reacciones en cadena sin impedimentos para quemar todo lo que
encuentra a su paso.
Edgardo R. Menéndez
Asesor en Prevención de Accidentes Página 1 de 6
de incendios la temperatura de inflamación de los materiales, la temperatura de
ignición, y los límites de explosión, etc.
Como podrán apreciar, dichas pruebas es lo que asegura la calidad del agente
extintor, y del equipo en forma integral, así como la eficiencia en la operación,
que permitirá extinguir exitosamente fuegos incipientes en cada uno de los tipos
de fuego a los cuales está probada su aplicación. Cuanto mayor es la clasificación
numérica del extintor, tanto mayor será el fuego que extinguió. Por tal motivo es
importante y cobra vigencia el exigir al adquirir uno, tenga aprobaciones y
certificación de laboratorios reconocidos.
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extinguir algún conato de incendio, ya que no se mantiene en forma original, ha
sido adaptado, y no tiene certificación por la recarga.
Precaución – Es importante conocer que hay en plaza una gran cantidad de extintores
que requerirían una revisión exhaustiva, no solo porque ya han cumplido con un
tiempo extremo de uso (pese a que los materiales de construcción antiguos fueran
más nobles), pero que pierden su capacidad para cumplir con las pruebas mínimas
requeridas de presión por fatiga del material, y ello puede traer aparejado graves
accidentes e injurias al personal.
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conocimiento cabal le permitirá hacer dicho trabajo con antelación, cuidando
perfectamente los detalles de funcionalidad, estética y seguridad.
La frecuencia está establecida como mínimo cada tres meses (Normativa UNIT
607/2001), aunque debería hacerse con más frecuencia en caso de alta frecuencia
de incendios, peligros graves, susceptibilidad al pillaje o acciones maliciosas,
posibilidades de robo, ubicación de los extintores que lo hagan susceptibles a
daños, posibilidades de obstrucciones físicas o visuales, y exposición a
temperaturas o atmósferas anormales.
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funcionamiento entre las fechas establecidas de recarga y/o vencimiento del
producto/ equipo para efectuarle un mantenimiento preventivo; y de acuerdo al
ambiente al cual está expuesto (extintores de base líquida y a bordo de buques –
anualmente; extintores de base seca – cada dos años) para asegurar el correcto
funcionamiento del equipo.
Por ejemplo, hay otros extintores que han sido soldados en alguna parte del
recipiente o los cilindros (porque antes se permitía o por que se acudió a personal
no competente. inclusive los de anhídrido carbónico, nitrógeno y aire
comprimido), ó cuando la rosca del recipiente esté dañada, la manija de acarreo
o soporte para colgar se encuentre rota; el cilindro deformado, o haya sufrido
daños o quemado en un incendio, o no haya
sido aprobado por un laboratorio
reconocido, todas son causas para dar de
baja un extintor.
Y a ello hay que agregarle las mangueras y accesorios, que también deben ser
probados en su conjunto; realizarse los debidos registros y por último, asegurar
que el operador esté debidamente calificado y entrenado.
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Qué se puede agregar al tema? – Debe desarrollarse un plan de combate de
incendios en el que se considere los siguientes puntos: peligros y combustibilidad
de los elementos; efectos de la distribución física y facilidad de los accesos;
fraccionamiento de los materiales, cantidad, clase, valor y otras características
que puedan ser importantes considerar del lugar y las personas.
Considerar los agentes extintores de última generación como son los compuestos
halogenados, inerte y otros agentes limpios; líquidos químicos aplicados a muy
alta presión. O mismo, los productos de mayor potencial extintor que permiten
extinguir fuegos más grandes con un mismo operador, un recipiente más chico, y
por ende más económico.
Y la verdadera ecuación de Beneficios vs. Costo en verdad pasa por plantearse los
problemas cuando son menores, los podemos controlar, y gastamos menos. Por
eso la prevención, el planeamiento, el diseño, el cumplimiento de normativas, el
mantenimiento de los sistemas, la educación y el entrenamiento es lo que nos
dará mayores dividendos y separarán en la secuencia de eventos la fatídica hora
del incendio de nuestras vidas.
Aportes de:
Edgardo R. Menéndez
Asesor en Prevención de Accidentes
EMail: edgardomenendez@gmail.com