Decálogo del Sistema Preventivo

1. Que el amor mueva las manos y todo el cuerpo del educador, no sólo la
cabeza.
2. Conquistar con el amor.
3. Usar la metodología del amor cristiano.
4. Usar una palabra útil contra un comportamiento inútil.
5. Que el joven vea en la libertad las posibilidades de su futuro.
6. Enseñar las cosas prácticas con la caridad y no con el castigo.
7. Que el mal corregido se quede en el olvido para que el bien tenga su nido.
8. La prevención regala la amistad recíproca pues llega al corazón.
9. En las relaciones de amor no se suele mandar, todo es un (solo) favor.
10. Que la amistad con Dios sea el paradigma para la amistad con el joven.

Bienaventuranzas del Sistema Preventivo

1. Dichoso el que manifiesta su amor al joven, porque de éste logra recibir amor y
afecto.
2. Dichoso el que educa con el corazón, porque tiene del joven confianza y
amistad.
3. Dichoso el que se orienta por la caridad cristiana, así persuade al joven con el
testimonio de su fe.
4. Dichoso el que da su tiempo al joven, su presencia aleja la ocasión del mal.
5. Dichoso el que educa en la libertad, porque conoce las disposiciones sinceras
del joven y las orienta hacia el bien.
6. Dichoso el que emplea la caridad cristiana en lugar de la violencia y del
castigo, porque evita el mal dos veces.
7. Dichoso el que consuela y hace olvidar experiencias malas, pues abre el
corazón del joven a la misericordia de Dios.
8. Dichoso el que anticipa la corrección con la prevención, éste se hace amigo del
joven.
9. Dichoso el que cambia la relación de temor por la de amor, porque logra
disponer el corazón del joven a la generosidad.
10. Dichoso, pues, cuando tu relación de amor a Dios es la misma con el joven,
habrás alcanzado su salvación y la tuya.

Adriano Lima – BSP

 BIENAVENTURANZAS DEL SISTEMA PREVENTIVO
Criteriología Pedagógica Salesiana

1. Bienaventurados los jóvenes que perciben amor, pues serán felices hasta la
eternidad.
2. Bienaventurados los salesianos que tienen el corazón abierto, pues serán
amados.
3. Bienaventurados los salesianos que viven en la caridad, pues serán
recompensados.
4. Bienaventurados los salesianos que llevan una palabra de aliento, pues serán
dueños de los jóvenes.
5. Bienaventurados los salesianos que dan confianza y libertad, pues
encontrarán en los jóvenes el triunfo.
6. Bienaventurados los salesianos que, iluminados por la fe, alejan de los
jóvenes la violencia, el pecado, todo mal, pues encontrarán las puertas siempre
abiertas.
7. Bienaventurados los salesianos que cambian el temor por el amor, pues los
jóvenes olvidarán la tristeza.
8. Bienaventurados los salesianos que hablan al corazón, pues los jóvenes serán
sus amigos.
9. Bienaventurados los salesianos que saben obedecer, pues aprenderán a
amar.
10. Bienaventurados somos todos, porque Dios nos enseña el arte de penetrar en
el alma del educador.

José Roberto Patiño sdb

CRESCO