Sei sulla pagina 1di 5

Perséfone

Estatua que representa a Isis-Perséfone con un sistro, hallada en el templo de los dioses egipcios
de Gortina y conservada en el Museo Arqueológico de Heraclión. 180-190 d. C.

En la mitología griega, Perséfone (en griego antiguo, Περσεφόνη Persephónē) es hija de Zeus y de
Deméter. La joven doncella, también llamada Kore, se casa con Hades y se convierte en la reina del
Mundo de los muertos además de una diosa. La forma romana del nombre Proserpina procede de
la forma dialectal de este nombre en las ciudades eólicas y dóricas de la Magna Grecia. El
personaje de Perséfone fue reinterpretado de muchas formas que no coinciden con la figura de la
diosa en la Grecia antigua, por ejemplo, en el Renacimiento.

Etimología

La diosa es conocida con dos nombres distintos, no relacionados etimológicamente: Perséfone y


Kore (griego antiguo Κόρη). La forma Kore es simplemente el nombre común κόρη para designar a
una doncella o mujer joven, lo que evidentemente guarda relación con el significado del nombre
de su madre Deméter.1

En la literatura épica el primer nombre tiene la forma jónica Persephonē (Griego antiguo
Περσεφόνη) y (especialmente en Homero) Persephoneia (Περσεφονεία,2 Persephoneia). En otros
dialectos el nombre tiene distintas formas que no son simples variantes dialectales: Persephassa
(Περσεφάσσα), Persephatta (Περσεφάττα), además de Periphona (Πηριφόνα) y Phersephassa
(Φερσέφασσα). Toda esta variedad de formas sugiere un origen pregriego del nombre.3 En el
Crátilo Platón la llama Ferepafa (Pherepapha, Φερέπαφα), y lo explica con una etimología ad hoc
«porque es sabia y toca lo que se mueve».

Persephatta (Περσεφάττα) se interpreta como «la que aventa el grano», relacionándola con el
sánscrito parsa, «haz de grano» y un segundo elemento que tendría en indoeuropeo la forma *-
gʷʰn-t-ih} de la raíz *gʷʰen "golpear".4

Otra etimología propone explicarlo como 'φέρειν φόνον', pherein phonon, «(la que) trae la
muerte».5

En una tablilla de griego micénico en Lineal B de Pilos datada entre 1400-1200 a. C., (PY Tn 316)
John Chadwick encuentra el nombre (como pe-re-*82 o pe-re-swa) de una diosa *Preswa que
podría ser identificada con la oceánide Persa, hija de Océano, y sugiere una posible conexión con
el primer elemento del nombre "Perséfone".678

Visión general

La figura de Perséfone es actualmente muy conocida. Su historia tiene un gran poder emocional:
una doncella inocente, el dolor de una madre por el rapto y el regreso de su hija. También es
citada con frecuencia como un paradigma de los mitos que explican procesos naturales, con el
descenso y el regreso de la diosa provocando el cambio de estación.

Pero los griegos también conocían otra faceta de Perséfone. Ella era además la terrible Reina de
los inframundos, cuyo nombre no era seguro pronunciar en voz alta y a la que se referían como
«La Doncella». En la Odisea, cuando Odiseo viaja al Inframundo, alude a ella como «Reina de
Hierro». Su mito central, aun con toda su familiaridad emotiva, era también el contexto tácito de
los extraños ritos iniciáticos secretos de regeneración de los misterios eleusinos, que prometían la
inmortalidad a sobrecogidos participantes: una inmortalidad en el mundo subterráneo de
Perséfone, en un banquete con los héroes bajo su pavorosa mirada.9

El mito del rapto

Óleo en lienzo, obra de Niccolò dell'Abbate: Rapto de Proserpina (Ratto di Proserpina). Museo del
Louvre.

Grabado de 1690, obra de Johann Ulrich Krauß (1655-1719): Las compañeras de Perséfone son
transformadas en sirenas.

Y él [Zeus] fue a la cama de la abundante Démeter, quien concibió a Perséfone, la de blancos


brazos, robada por Hades del lado de su madre.

Hesíodo, Teogonía, 912

La mayoría de las fuentes clásicas consideran a Perséfone como hija de Zeus y Deméter, pero la
Biblioteca mitológica de Apolodoro recoge una versión alternativa que indica que era hija de Zeus
y Estige.10

Sin embargo, Deméter no tenía una posición estable en el Olimpo. Solía vivir muy lejos de los
demás dioses, siendo una diosa de la naturaleza anterior a plantar semillas y cultivar plantas. En la
tradición olímpica fue cortejada por los dioses Hermes, Ares, Apolo y Hefesto, pero ella rechazó
todos sus regalos y alejó a su hija de la compañía de los dioses. Así, llevaba una vida pacífica hasta
que su hija Perséfone se convirtió en la reina del inframundo, lo que, según los mitógrafos
olímpicos, no sucedió hasta que Hades la raptó y la llevó allí con él. Perséfone estaba recogiendo
flores con algunas ninfas (Atenea y Artemisa, según el himno homérico, o Leucipe, o algunas
Oceánides), en un campo en Enna cuando Hades apareció, emergiendo de una grieta del suelo. Las
ninfas fueron castigadas siendo transformadas en las Sirenas por no haber intervenido. La vida
quedó paralizada mientras la desolada Deméter buscaba por todas partes a su hija perdida.
Hécate había oído sus gritos y sugirió a Démeter hablar con Helios, el sol, que todo lo ve, para que
le contase lo que había pasado.

Finalmente, Zeus no pudo aguantar más la agonía de la tierra y obligó a Hades a devolver a
Perséfone, enviando a Hermes para rescatarla. La única condición que se puso para liberar a
Perséfone fue que no probase bocado en todo el trayecto, pero Hades la engañó para que comiese
seis, o cuatro según las fuentes, semillas de granada, que la obligaban a volver cada año un mes
por cada semilla. En algunas versiones, Ascálafo contaba a los demás dioses que Perséfone se
había comido voluntariamente las semillas de granada. Cuando Deméter y su hija estaban juntas,
la tierra florecía de vegetación. Pero durante seis meses al año, cuando Perséfone volvía a los
infiernos, la tierra se convertía de nuevo en un erial estéril. Fue durante su viaje para rescatar a
Perséfone del inframundo cuando Deméter reveló los misterios eleusinos. En una versión
alternativa, Hécate rescató a Perséfone. En la versión más antigua la temible diosa Perséfone era
la propia Reina del Inframundo.11

En algunas versiones Deméter prohíbe a la tierra dar frutos, en otras está tan ocupada buscando a
Perséfone que no se ocupa de ella, y en algunas la profundidad de su desesperación hace que
nada crezca.

El número de semillas comido por Perséfone cambia también de unas versiones a otras, a menudo
en relación con la duración del invierno en la zona de procedencia de la historia.

Este mito puede ser interpretado también como una alegoría de los rituales matrimoniales de los
antiguos griegos, que sentían que el matrimonio era una especie de rapto de la novia de su familia
por parte del novio, y este mito puede haber explicado los orígenes del ritual del matrimonio. La
más popular explicación etiológica de las estaciones puede haber sido una interpretación
posterior.

Otros mitos sobre Perséfone

Perséfone, como reina del Hades, sólo mostró clemencia una vez. Debido a que la música de Orfeo
era tan arrebatadoramente triste, permitió que éste se llevase a su esposa, Eurídice, de vuelta al
mundo de los vivos con la condición de que ella caminase tras él y él nunca intentase mirarla a la
cara hasta que estuviesen en la superficie. Orfeo accedió pero falló, al mirar atrás, casi al final del
recorrido, para asegurarse de que su esposa le seguía, perdió a Eurídice para siempre.
Perséfone también figura en la historia de Adonis, el consorte sirio de Afrodita. Cuando Adonis
nació, Afrodita lo tomó bajo su protección y fue hechizada por su belleza sobrenatural. Afrodita se
lo dio a Perséfone para que lo cuidara, pero ésta también quedó asombrada por su belleza y
rehusó devolvérselo. La discusión entre las dos diosas fue resuelta por Zeus o Calíope, quien
decidió que Adonis pasase cuatro meses con Afrodita, cuatro con Perséfone y los cuatro restantes
del año solo.

También departió con Psique cuando esta bajó al inframundo a buscar un cofrecito que Afrodita la
había mandado a buscar.

Cuando Hades persiguió a una ninfa llamada Mente, Perséfone la convirtió en una planta de
menta.

Perséfone era el objeto del cariño de Pirítoo. Su amigo Teseo y él prometieron casarse con sendas
hijas de Zeus. Teseo escogió a Helena, la secuestró con la ayuda de Pirítoo y decidió retenerla
hasta que tuviese la edad de casarse. Dejaron a Helena con la madre de Teseo, Etra, y viajaron al
inframundo, reino de la elegida de Pirítoo, Perséfone, y del marido de ésta, Hades, quien fingió
ofrecerles hospitalidad y preparó un banquete. Tan pronto como la pareja se sentó, las serpientes
se enroscaron en torno a sus pies, atrapándolos. Teseo fue finalmente rescatado por Heracles.

El matrimonio formado por Perséfone y Hades fue estéril. En cambio Perséfone fue seducida por
su propio padre en forma de serpiente y tuvo un hijo: Zagreo, que fue asesinado por los Titanes a
instancias de Hera. No obstante, en un fragmento de Esquilo se dice que a veces se consideraba a
Zagreo como hijo de Hades.12 Por otra parte, un himno órfico hace a Perséfone madre de
Melínoe, tras haber cohabitado con Zeus,13 y la Suda indica que Macaria era hija de Hades,
aunque sin mencionar quien era su madre.14

Era frecuente referirse a Perséfone y su madre Deméter como aspectos de la misma diosa, y eran
llamadas «las Deméters» o simplemente «las diosas». La historia del rapto de Perséfone era parte
de los ritos de iniciación en los misterios eleusinos.

Investigaciones modernas sobre Perséfone

¿Perséfone anterior a Grecia?

Muchos investigadores modernos han argumentado que el culto a Perséfone fue una continuación
de la adoración que ya se le profesaba en el Neolítico o en la civilización minoica. Entre los
clasicistas, esta tesis ha sido defendida por Günter Zuntz15 y cautamente incluida por Walter
Burkert en su definitivo libro La religión griega.

Por otra parte, el mitólogo Károly Kerényi ha vinculado a Perséfone con Ariadna, y ha sugerido su
identificación con la anónima «señora del laberinto» de Cnosos.16

Por otra parte, la hipótesis de un culto universal a la Madre Tierra ha estado bajo creciente crítica
en los últimos años. Para saber más sobre esta controversia, vea el artículo Diosa Madre.

Vida, muerte y resurrección

Inspirados por James Frazer, Jane Ellen Harrison y los mitólogos modernos, algunos investigadores
han etiquetado a Perséfone como una deidad de vida, muerte y resurrección.

Potrebbero piacerti anche