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CAPACIDAD DE INSERTAR A LOS JOVENES EN LA DIVERSIDAD CULTURAL

DE SU PROPIO PAIS.

Para buscar la disertación de los jóvenes en la diversidad cultural de


Colombia, debemos empezar tomando conciencia de las riquezas,
patrimonios, razas, y demás cosas que poseemos, aprender a sentir y
darnos el valor y orgullo que merecemos como colombianos, como el
nombre de diferentes culturas concretadas en un solo país, como el
portador de distintas voces, razas y tradiciones. Ser capaces de
defender, cuidar, y mostrar sin pena o temor alguno nuestra historia
pasada para poder escribir la futura, dándole sentido y valor a las
tradiciones y enseñanzas que desde el hogar de cada uno aprendemos,
demostrando y actuando en cualquier parte del mundo la verdadera y
positiva cultura que Colombia es capaz de evidenciar, siendo así una
impresión acertada de lo que somos, de lo que tenemos, y lo que
defendemos convirtiéndonos en ejemplo digno de la igualdad
pluricultural que podemos tener.

Estrategias:
1. DEJAR DE SER INDIOS ACULTURIZADOS: muchos recordamos este
término como algo denigrante para nosotros, nombrados así por
nuestros primero conquistadores, pero dejando un recuerdo grande en
nosotros. Con esto busco hacerles énfasis en que nos falta mucho para
saber de verdad como respetar, cuidar y valorar nuestra cultura, porque
de nada nos sirve tener avaneces múltiples en la ciencia, la tecnología,
proyectos a nivel mundial, entre otros; si no podemos emplear todo esto
en la construcción de nuestra cultura, porque mantenemos nuestra
mente en la misma frase y conciencia de “EL PROBLEMA SOY YO, ME
SALVO YO, EL RESTO VERA”. Como jóvenes tenemos el deber de
concientizar al resto del país de que el país es de TODOS, necesitamos
crear una cultura a nuestra propiedad, a nuestras regiones, nuestros
espacios, nuestros patrimonios y demás, aprendiendo aún más del
respeto que tienen las tribus indígenas de nuestro propio país de estos
espacios.

2. DEFIENDO MI RAZA, DEFIENDO MI SER: somos muy ignorantes y


cerrados ante las demás persona que no estén en nuestro entorno, pues
al ser algo que no nos afecta directamente no lo vemos como un
problema, siendo este tema algo que nos incluye a absolutamente
todos. Debemos aprender a aceptar a todos los que hacen parte de mi
país y mi lugar de entorno puesto que la desigualdad, discriminación y
demás forma de desprecio hacia alguien de nuestro propio país nos hace
fieles seguidores de la guerra interna en cada sector de nuestro entorno.
Cambiemos nuestra mentalidad teniendo en cuenta que algo que nos
define y nos contribuye mucho como colombianos es nuestra raza, pues
nuestro país posee una gran diversidad de esta, haciendo creer que
somos de los países más “tolerantes” y con un estados altísimo de
igualdad sin prueba alguna de esto, pensando así, deberíamos deducir
que nuestra raza y su variedad es sentido de orgullo, pues cada uno
aporta algo positivo a nuestra construcción, porque de la raza viene la
tradición y cultura y jamás hará falta aprender algo de ambas cosas.
Todos tenemos una identidad que nos diferencia pero a la vez nos une y
nuestro objetivo debería ser aminorar la desigualdad y discriminación
frente a nuestros propios compañeros y demás, ya que, no puedes
hablar de la semilla si solo conoces el fruto, ni mucho menos comerte el
fruto sin conocer el bien o mal que te hará.

3. MANTENGO MI PAIS: debemos buscar por medio de la conciencia


colectiva, un mantenimiento colectivo de nuestros objetivos y metas,
debemos enseñar y construir un país que acepta las diferencias más
mínimas para que las grandes sean algo que solo se deba objetivar y
trabajar, no juzgar a los demás por su apariencia u decisiones que tome
consigo mismo, dejar de lado y no apoyar las cosas negativas que
podemos llegar a encontrar de nuestro país en bocas de personas que
no son de acá e inclusive de boca de personas con nuestra nacionalidad,
preservar los lugares que más nos identifican y enorgullecen y ante todo
la pasividad y respeto en cuanto a los pensamientos e ideologías de
cada persona pues todo aportan a algo a nuestro país, desde la mujer
indígena con sus tejidos representando su cultura, hasta el joven que
toma el arte en grafitis que saben abrir mentes en vez de ojos.

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