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“Año de la Universalización de la

Salud”

Invalidez del
Matrimonio
Derecho
de
FACULTAD DE DERECHO Familia
Docente: Columba María Del Socorro Melania Del Carpio Rodríguez
3RO “A”
INTEGRANTES:
-William Daniel Lipa Flores
-Brenda Gabriela Huaracha Araoz
-Brhitney Ariane Huillca Merma
-Gabriela Estheicy Flores Pacheco

2020
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

ÍNDICE
1. CUESTIONES GENERALES:.........................................................................................1
1.1. Concepto y Definición:...............................................................................................2
1.2. Doctrina jurídica:.......................................................................................................3
2. LA NULIDAD MATRIMONIAL:....................................................................................5
2.1. Naturaleza Jurídica:...................................................................................................6
2.2. Causales:.....................................................................................................................7
2.3. Jurisprudencia:...........................................................................................................9
3. ANULABILIDAD MATRIMONIAL:............................................................................10
3.1. Concepciones:...........................................................................................................10
3.2. Naturaleza Jurídica:.................................................................................................11
3.3. Causales:...................................................................................................................12
3.4. Efectos:......................................................................................................................16
3.5. Jurisprudencia:.........................................................................................................18
4. MATRIMONIO ILÍCITO:..............................................................................................20
4.1. Naturaleza Jurídica:.................................................................................................20
4.2. Casos y Efectos:........................................................................................................22
5. CUESTIONES PROCESALES:......................................................................................25
6. Bibliografía.......................................................................................................................29

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

1. CUESTIONES GENERALES:
Al desarrollar el tema de la invalidez del matrimonio, es propio, dar un breve
alcance a manera sucinta de lo que es el matrimonio. Entonces, el matrimonio se
es sabido que es la unión voluntaria entre un varón y una mujer, ambos con
capacidad, bajo una serie de formalidades solemnes al momento de su
celebración, resultando en el nacimiento de deberes y derechos comunes,
personales e igualitarios entre los nuevos cónyuges.
Ahora bien, la institución del matrimonio cuenta con una doble naturaleza, la
cual va a ser de relevancia para el desarrollo del siguiente trabajo, siendo una la
naturaleza de acto jurídico de la misma, por lo que para su validez y finalidad
debe reunir los requisitos necesarios exigidos por ley, y la otra, la de una
relación continua la cual crea el estado matrimonial donde se desarrollan
plenamente los derechos y los deberes adquiridos por los cónyuges. 1
Al hablar de “invalidez del matrimonio” se entiende que se tomará en relevancia
una de las dos naturalezas del matrimonio, la cual es el matrimonio como acto
jurídico. A continuación, ahondaremos más sobre el concepto de “invalidez” y
de “Invalidez del matrimonio” propiamente dicho.

1.1. Concepto y Definición:


Antes de entrar al tema de la Invalidez del matrimonio, primero hay que
distinguir entre lo válido y lo inválido en materia del acto jurídico, pues
como mencionamos anteriormente analizaremos esta invalidez en base a la
naturaleza del matrimonio como acto jurídico.
Entonces, tenemos que el acto jurídico en general puede ser válido e
inválido, cada uno una serie de requisitos impuestos por loa ley o las partes.
Primeramente, un acto jurídico es válido siempre y cuando cumpla con todos
los requisitos exigidos por ley, sean estos de carácter general o de carácter
particular para determinados actos jurídicos, en suma a ello, también debe
cumplir con los requisitos voluntariamente añadidos por las partes, pero, no
solo estos dos postulados hacen válido a un acto jurídico, pues deben carecer
de vicios.
De no cumplir con los requisitos por ley o parte, o si estos cuentan con
vicios, entonces el acto deviene en un inválido. La reunión de estos
1
[ CITATION Ber04 \l 10250 ]

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

requisitos da como resultado la existencia válida del acto. En todo caso, para
ser más precisos respecto a la invalidez de un acto jurídico, podemos decir
que todo acto jurídico puede devenir en inválido si es que la ley lo determina
o priva de sus efectos normales, por ausencia de uno de sus elementos
esenciales, por ser contrario al ordenamiento jurídico violando sus normas
imperativas (hablamos en especial de los actos ilícitos) y, por último, si es
que va en contra del orden público y las buenas costumbres. Hay que tener
en cuenta que el hecho de que un acto no sea válido no significa,
necesariamente, que sea ineficaz, pues pueden darse casos en los que un acto
inválido pueda ser eficaz, pero esto recae en un campo más amplio respecto
a la eficacia del acto jurídico.
Al momento de devenir en inválido un acto jurídico, este puede ser
declarado de nulo o anulable. En caso de la nulidad, el acto sería ineficaz
(esto en un deber ser), y en el caso de la anulabilidad, donde el acto jurídico
corre con la amenaza de ser ineficaz. Respecto a estos dos puntos, ya los
analizaremos juntamente con el tema del matrimonio.
Entrando más en el tema, al llevar el tema de la invalidez al matrimonio, nos
encontramos con una serie de diferencias, pues el matrimonio no es un
simple acto jurídico, sino que tiene ciertos caracteres que lo hacen distinto.
Al hablar del matrimonio hablamos de un acto jurídico en el que no reina la
autonomía de la voluntad de las partes, esto una vez ya formados, pues antes
ya depende de la voluntad de los interesados para formarse. Una vez ya
constituido el matrimonio, solo los derechos y deberes relativos al
patrimonio están a voluntad de los cónyuges (por la sociedad de gananciales
o la separación de patrimonios). Fuera de esta excepción, los derechos y
deberes familiares ya dejan de depender de la autonomía de la voluntad,
siendo imperativos impuestos por el ordenamiento jurídico.

1.2. Doctrina jurídica:


En cuanto a la distinción del acto jurídico en general con el acto jurídico
familiar y su naturaleza jurídica, Zannoni comenta al respecto:
“En cuanto atañe a la naturaleza propia, el acto jurídico familiar se
distingue del acto jurídico en general en que mientras este es fuente de
relaciones jurídicas autónomas (referente a la autorregulación de los

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

intereses privados, patrimoniales en general, pero en todo caso


disponibles) el acto jurídico familiar no constituye autorregulación
autónoma de intereses desvinculados de estatutos legales imperativos,
generalmente de orden público, sino que tales intereses aparecen
subordinados al concepto superior de interés familiar que inspira a
dicho instituto”. Sin embargo, la noción de interés familiar no impide
que la noción del acto jurídico sea preservada en el derecho de familia.
“Existe autonomía privada en el derecho de familia, aun cuando el
contenido de las relaciones jurídicas sea, en mayor o en menor medida,
indisponible”.2
Como se dijo anteriormente, lo que diferencia o, al menos, resalta al
matrimonio de los demás actos jurídicos es la naturaleza del mismo, pues
este tiene mayor relevancia para el estado, por tanto aquí se ve drásticamente
reducida la autonomía de la voluntad, propia de todo acto jurídico, más que
nada en contratos de naturaleza civil o patrimonial, donde la formación y
condiciones de los mismo queda a libre arbitrio de las partes, cosa no
sucedida en el matrimonio, pues la condiciones del mismo no está en
decisión de las partes, en este caso cónyuges, sino que están en base a la
norma con el fin de proteger a la misma y al menor.

Podemos concluir de esa parte que, en la invalidez del matrimonio, a


diferencia de la invalidez del acto jurídico en general donde predominan los
intereses particulares, aquí la ley es la que lo promueve y lo protege, con el
fin de conservar su esencia y que así pueda cumplir con sus finalidades, esto
porque el matrimonio, y, en consecuencia, la familia, son instituciones
naturales y fundamentadas en la sociedad. O, dicho en otras palabras, lo que
diferencia al matrimonio de los demás actos jurídicos es el interés general
que sobre este recae, siendo el resto de actos simple interés particular.3
En consonancia con la teoría propuesta por Zannoni, en Perú se optó por
seguir esta corriente, prueba de ello es el Cas. N° 2220-2005 Puno, el cual
dice lo siguiente:

2
[ CITATION Edu13 \l 10250 ]
3
[ CITATION Aní15 \l 10250 ]

4
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

“La invalidez del matrimonio no tiene un tratamiento similar al de la


invalidez de los actos jurídicos, dado que si bien el matrimonio comparte
todos los elementos del acto jurídico no es únicamente un acto jurídico,
sino que su naturaleza y efectos trascienden a esta como instituto natural
y fundamental de la sociedad; así, la invalidez del matrimonio, de
acuerdo a la doctrina, se encuentra sujeta a principios tales como el
favor matrimonio, esto es, la actitud o predisposición del legislador a
conceder un trato especial de protección al matrimonio en orden a la
conservación de su esencia y mantenimiento de sus finalidades; por cuya
razón, la nulidad y anulabilidad del matrimonio contemplan sus propias
causales…“
Como alcance, es la propia naturaleza de la institución del matrimonio, lo
que hace que su invalidez sea distinta del acto jurídico en general, pues una
diferencia a dejar en clara para el desarrollo de los siguientes temas es que,
no hay nulidad ni anulabilidad del matrimonio si no hay un texto legal que lo
declare.

2. LA NULIDAD MATRIMONIAL:
Entrando al tema de la nulidad matrimonial, esta esta es de gran relevancia, pues
el peso que trae consigo no es particular, sino es de interés general, pues, si
comparamos, una nulidad de cualquier contrato no trae mayor importancia,
mientras que en el caso de matrimonio nos encontramos con la destrucción de
una familia. Si bien recordamos, mencionamos que no siempre se va a asociar la
invalidez con la ineficacia en un acto jurídico, pues existían casos en los que un
acto declarado inválidos puede ser eficaz, bien, la nulidad del matrimonio es uno
de esos casos peculiares.
El matrimonio nulo no adolece de ineficacia absoluta, ya que este produce
efectos jurídicos en los hijos y los mismos cónyuges, tanto como si fuese un
matrimonio válido disuelto por divorcio, esto en acorde de la buena fe, pues si
uno de los cónyuges actuó de mala fe, el matrimonio no produce efectos en su
favor, pero sí en favor del otro y de los hijos. Ahora bien, ¿Quién puede invocar
la nulidad de matrimonio? Esto lo puede hacer el Ministerio Público y
cualquiera con el legítimo interés. Si la nulidad del matrimonio es manifiesta, el
juez puede declararla de oficio, en cambio, si el matrimonio se disuelve, el

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

Ministerio Público no puede intentar seguir con la nulidad, menos el juez podrá
declarar de oficio su nulidad, limitación inexistente en el acto jurídico en
general, pues en estos, aunque se acuerdo la disolución del contrato, aún quedan
los efectos retroactivos, por lo que se seguiría el proceso. Otra diferencia es el
tiempo de prescripción de la acción de nulidad de matrimonio, pues el tiempo de
prescripción del acto jurídico en general es de 10 años, mientras que en el
matrimonio este tiempo es inextinguible.
En consonancia a lo anteriormente dicho, comenta Augusto César Bellucio
citando el Tercer Pleno Casatorio Civil, Cas. 4664 – 2010 – Puno:
“La naturaleza de los derechos en juego en las acciones de estado de
familia, y en especial la circunstancia de que el interés general esté
vinculado con su resultado, hacen que los procesos en que ellas se
deducen queden sujetos a características especiales que en alguna
medida, los diferencian de las demás, aun cuando dichas características
no sean propias exclusivamente de ellos, sino que puedan ser
compartidas por otros”; en tal sentido, si bien las relaciones derivadas
del vínculo conyugal o del parentesco son tratadas como relaciones
privadas, estas, en su mayoría están determinadas o dominadas por
normas de orden público, precisamente para impedir la
desnaturalización de los fines familiares.”
Es oportuno hacer una distinción entre nulidad de matrimonio y el divorcio,
pues parece obvia porque ambos prácticamente alcanzan el mismo fin que es dar
por terminado el matrimonio, pero tiene efectos distintos, siendo que el divorcio
implica partir de la validez del matrimonio, sea por alguna falta concurrida en
algún cónyuge o por decisión, la cual tiene eficacia jurídica desde resolución
firme que la declare, obrando de manera ex nunc. Mientras que con la nulidad de
matrimonio se da desde su existencia, sea por impedimentos absolutos o
relativos, vicios en el consentimiento o inobservancia de formalidades de orden
legal, las cuales lo invalidan ex tunc.
Respecto a la diferencia entre la nulidad y la anulabilidad del matrimonio, el
maestro Cornejo Chávez afirma:
“… nota que diferencia la nulidad de la anulabilidad en la ley peruana se
funda en el hecho de que mientras la invalidación del casamiento nulo es

6
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

requerida por un interés social, a la subsistencia de un matrimonio anulable


solo se opone un interés privado. Mientras en el primer caso, la sociedad
peligra más o menos seriamente en su estabilidad, por lo cual es preciso
desembocar en una declaración de invalidez; en el segundo, si el interés
particular no se siente bastante ofendido, la sociedad tolera y aun busca la
subsistencia del vínculo, en aras de la estabilidad familiar.”

2.1. Naturaleza Jurídica:


En el proceso de nulidad del matrimonio nos encontramos con una serie de
principios que son de vital trascendencia, cabe aclarar que estos también son
observados en la anulabilidad del matrimonio:
 El Principio de Legalidad: No existen otras causales de nulidad para
el matrimonio fuera de la ley, en lo que respecta a este punto en el
artículo N° 274 del Código Civil. Estas están referidas a la falta de
aptitud nupcial (la enfermedad mental, sordomudez, ciegosordez,
ciegomudez, ligamento matrimonial, parentesco, crimen, impubertad
legal, la sanidad nupcial, rapto y la impotencia), a los defectos del
consentimiento (la falta de facultades mentales por una causa
pasajera, el error, la intimidación) y a la inobservancia de la forma
prescrita (celebración del matrimonio sin observar las formalidades
establecidas por ley o ante un funcionario incompetente. 4
 El principio de socialización: Este con el fin de evitar todo tipo de
desigualdades que afecten el correcto desarrollo o resultado en el
proceso, en especial en este tipo de proceso para los cónyuges,
aunque este principio se tome en cuenta en todo proceso en general.
Esto en base al principio establecido en el Artículo VI del Código
Procesal Civil.
 El principio del Favor Matrimonii : Este principio es el responsable
por el cual la nulidad y la anulabilidad en el matrimonio sean
distintos de la nulidad y la anulabilidad en los actos jurídicos en
general, pues aquí nos encontramos con un acto excepcional, donde
predomina el interés de mantener la estabilidad del matrimonio ante
el interés de los cónyuges, con el fin de evitar la radical y retroactiva

4
[ CITATION Aní15 \l 10250 ]

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

desaparición de la situación jurídica del matrimonio y de los efectos


que trae.5

2.2. Causales:
En el Código Civil en el artículo N° 274 habla sobre las causales de nulidad
del matrimonio, las cuales desarrollaremos de modo sucinto a continuación:
 Sobre el enfermo mental: Esto pese a que la enfermedad se
manifieste después del acto, o tenga tiempos lúcidos el contrayente,
cuando el enfermo recupera a plenitud sus facultades la acción le
corresponde a él como afectado caducando al año. Esto es
indiscutible, pues no puede haber matrimonio sin voluntad, y el
demente no la tiene.
 Sobre el sordomundo, ciegosordo y ciegomudo : Esto por el hecho de
la dificultad de expresar su voluntad, y como ya dijimos, sin voluntad
no hay matrimonio, esto se puede solucionar si se halla una manera
por la que pueda expresar su voluntad de manera indubitable.
 Sobre el casado: Esto siguiendo la costumbre cristiana occidental que
acoge la monogamia. Ahora en caso que el que era casado ya no lo es
porque su matrimonio se extinguió no está prohibido de contraer
nuevo matrimonio. Respecto al cónyuge del desaparecido que
hubiera contraído matrimonio, el nuevo cónyuge puede accionar,
pero solo en el tiempo mientras no se declare la muerte presunta.
 Sobre el matrimonio de consanguíneos o afines en línea recta: Esto
en base a razones de orden público familiar, morales, biológicas y
sociales.
 Sobre el matrimonio de los consanguíneos en 2do y 3er grado de la
línea colateral: Aquí son razones de orden moral y social en caso del
2do grado y en canso del 3er grado se convalida con la dispensa
judicial de parentesco. Esto incluye a los adoptados. (Art N° 242 inc
5)
 Sobre el matrimonio de los afines en segundo grado de la línea
colateral: Esto solo aplica en caso el anterior matrimonio se haya
disuelto por divorcio o si el ex-cónyuge aún vive, pero si el anterior
5
[ CITATION Hen59 \l 10250 ]

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

cónyuge a muerto o si el matrimonio fue disuelto por inválido si se


podrá contraer el matrimonio.
 Sobre el matrimonio del condenado por homicidio doloso de uno de
los cónyuges y del procesado por esta causa con el sobreviviente: El
caso de que: “Juan mata al esposo de Luisa (autor, cómplice o
instigador), el matrimonio entre juan y luisa es inválido”. Esta causal
se complementa con el Art. N° 242 inc. 6
 Cuando se celebra el matrimonio con prescindencia de los trámites
establecidos en los artículos 248 a 268: Aquí hay que tener en cuenta
que el matrimonio es un acto diferenciado del resto de actos, pues el
orden jurídico establece su celebración, siendo un acto jurídico de
tinte ad solemnitatem.
 Sobre el matrimonio, que ambos actuando de mala fe lo celebren ante
un funcionario incompetente: De ser con buena fe, el matrimonio
simplemente es anulable. Los funcionarios competentes para esta
labor están en los artículos 259, 260, 261, 262, 263 y 268.

Respecto a los efectos que estos generan, va a depender mucho de si los


contrayentes actuaron de buena o de mala fe. Primero, si se actuó de mala fe,
o sea, los conyugues conocían el impedimento o el vicio afectado en el
matrimonio. Se declara la nulidad del matrimonio, esto con efectos
retroactivos, entonces el matrimonio se considera como si nunca hubiera
existido, extinguiéndose la sociedad conyugal, desaparece el parentesco por
afinidad, fenece la sociedad de gananciales y los hijos adquieren la calidad
de extramatrimoniales (Art 318 inc. 1 CC). Sin embargo, subsiste la
obligación mutua de alimentar y educar a los hijos, teniendo esto: igualdad
de derechos y los padres igualdad de obligaciones.
En caso de haber buena fe entre los contrayentes, el matrimonio invalidado
produce los efectos de un matrimonio válido disuelto por divorcio. Y si solo
uno actuó con buena fe, el matrimonio producirá efectos en su favor.

2.3. Jurisprudencia:
- NULIDAD DEL MATRIMONIO DEL CASADO (BÍGAMO)

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

«... El artículo 274 del Código Civil establece las causales de invalidez
relacionadas con la aptitud nupcial, y precisamente en su inciso 3º, señala
que es nulo el matrimonio del casado (bígamo), toda vez que éste tiene
impedimento para celebrar nuevo matrimonio, fundado en la necesidad de
conservar el tipo universal de la familia monogámica; sin embargo, dicha
causal de nulidad establece las excepciones que implica que la bigamia
pierda las características de un matrimonio nulo, restringiendo solamente en
tales supuestos la legitimidad para obrar a favor del segundo cónyuge,
cuando el primer cónyuge del bígamo ha muerto; si el primer matrimonio ha
sido invalidado o disuelto por divorcio; el nuevo matrimonio contraído por el
cónyuge de un desaparecido sin que se hubiera declarado la muerte presunta
de éste y J...] el matrimonio contraído por el cónyuge de quien fue declarado
presuntamente muerto...»

CAS. N° 3001-2003 / MOQUEGUA. SALA CIVIL PERMANENTE.


Corte Suprema, pub. El Peruano 30.05.2005, p. 14152.

- EN CONSONANCIA CON LA TEORÍA PROPUESTA POR


ZANNONI, EN PERÚ SE OPTÓ POR SEGUIR ESTA
CORRIENTE, PRUEBA DE ELLO ES EL CAS. N° 2220-2005
PUNO, EL CUAL DICE LO SIGUIENTE:

“La invalidez del matrimonio no tiene un tratamiento similar al de la


invalidez de los actos jurídicos, dado que si bien el matrimonio comparte
todos los elementos del acto jurídico no es únicamente un acto jurídico, sino
que su naturaleza y efectos trascienden a esta como instituto natural y
fundamental de la sociedad; así, la invalidez del matrimonio, de acuerdo a la
doctrina, se encuentra sujeta a principios tales como el favor matrimonio, esto
es, la actitud o predisposición del legislador a conceder un trato especial de
protección al matrimonio en orden a la conservación de su esencia y
mantenimiento de sus finalidades; por cuya razón, la nulidad y anulabilidad
del matrimonio contemplan sus propias causales… “

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

3. ANULABILIDAD MATRIMONIAL:
3.1. Concepciones:
Se puede decir que la anulabilidad se presenta cuando falte un presupuesto
de validez, o bien, cuando un elemento esencial está precisamente viciado; la
anulabilidad es un mecanismo de protección jurídica para cautelar la libertad
y el conocimiento de una parte que participó en dicho acto, pero en una
situación de disminución de voluntad. Los impedimentos operarán como
causas de invalidez o se dará la aplicación de sanciones civiles personales
posteriores. Es así que después de analizarse los elementos de existencia del
matrimonio, debe evaluarse los requisitos de validez y si faltan uno o más de
estos supuestos, la ley declara la invalidez del matrimonio, concurriendo
anulabilidad del matrimonio. La nulidad y anulabilidad del matrimonio
tienen matices propios y peculiares características; sin embargo, su régimen
jurídico no difiere del establecido para los actos jurídicos (Libro Segundo del
CC); las normas ahí consideradas serán de aplicación siempre que no existan
normas especiales que se contrapongan (convalidación)6

3.2. Naturaleza Jurídica:

 La anulabilidad se produce por la falta de un elemento no esencial que la


hace ineficaz relativamente. Esta figura se da en un contexto de cuán
importante es que las parejas se conozcan, al igual que las familias para
saber con quién se va a unir y prevenir una descendencia sana.
 El matrimonio se consagra con las formalidades de fondo y forma que
exige la ley, pero posteriormente al matrimonio puede ser susceptible de
ser anulado si existen las causales preceptuadas en el artículo 277 del
Código Civil.
o Las causales de anulación son vicios originarios al momento de la
celebración del acto jurídico matrimonial, existen en el momento
en que este es otorgado, la sentencia que anula es constitutiva, ya
que a partir de esta el matrimonio pierde validez y la anulación
produce sus efectos jurídicos con carácter retroactivo.

6
Torres Vásquez, Aníbal. Acto Jurídico. Ob. cit., p. 822.

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

 Según el principio de promoción del matrimonio: impregna al régimen


legal de invalidez del matrimonio de características que, al haberse
celebrado con algún vicio, se invalide:
a. Carácter taxativo: las causales establecidas en el código, ello impide
que mediante la interpretación se pueda extender la invalidez de los
supuestos de hecho no comprendidos en causas legales.
b. Expresa reserva de la ley sobre la pretensión: es decir, como ocurría
en el caso de nulidad que podía ser interpuesta por cualquier
interesado (incluyendo el Ministerio Publico), en la anulabilidad se
da en aquellos casos exista reserva (interés legítimo de acuerdo a las
causales del artículo 277 del Código Civil, solo le corresponde al
cónyuge o cónyuges afectados interponer una demanda por causal)
c. Previsión legal de expresos plazos de caducidad: vencido el plazo
queda convalidado la figura que se interponga (Si el cónyuge al que
la ley le reserva la pretensión quiere seguir casado, simplemente no
ejerce la pretensión y deja transcurrir el plazo de caducidad)

3.3. Causales:

En el artículo 277, se presentan 8 causales por las que es anulable el


matrimonio:
1. Del impúber. La pretensión puede ser ejercida por él luego de llegar a
la mayoría de edad, por sus ascendientes si no hubiesen prestado
asentimiento para el matrimonio y, a falta de éstos, por el consejo de
familia. No puede solicitarse la anulación después que el menor ha
alcanzado mayoría de edad, ni cuando la mujer ha concebido. Aunque
se hubiera declarado la anulación, los cónyuges mayores de edad
pueden confirmar su matrimonio. La confirmación se solicita al Juez de
Paz Letrado del lugar del domicilio conyugal y se tramita como proceso
no contencioso. La resolución que aprueba la confirmación produce
efectos retroactivos.
o Nuestro ordenamiento jurídico ha visto necesario que los menores
de edad deben contar con el asentimiento expreso de las personas
legitimadas para tal fin, estos son: los padres, los abuelos a falta

12
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

de los padres, y el juez a falta de los anteriores. El juez puede


otorgar la denominada dispensa judicial de impubertad con el
requisito que el contrayente tenga como mínimo dieciséis años de
edad.
o De acuerdo con el principio de promoción del matrimonio,
nuestro Código Civil permite la convalidación de la unión
matrimonial del impúber, y si fue invalidado, posteriormente los
cónyuges una vez alcanzada la mayoría de edad pueden confirmar
su matrimonio, no siendo necesario contraer nuevas nupcias. El
Juez de Paz emite una resolución a partir de la solicitud de los
contrayentes, y esta aprueba la convalidación, así surte efectos
retroactivos.
o ¿Por qué no se puede solicitar anulación cuando la mujer ha
concebido?: Se obedece a dos razones: la necesidad de amparar al
hijo y el hecho de que la pubertad efectiva de los esposos deja sin
efecto la presunción legal de su impubertad.
2. De quien está impedido conforme el artículo 241, inciso 2. La acción
sólo puede ser intentada por el cónyuge del enfermo y caduca si no se
interpone dentro del plazo de un año desde el día en que tuvo
conocimiento de la dolencia o del vicio.
o Básicamente de aquel contrayente que padece de enfermedad
crónica, contagiosa y transmisible por herencia, o vicio que
implique un peligro para la prole.
o Para poder invocar esta causal es necesario probar la existencia
de una enfermedad que revista este inciso y que lógicamente
implique un peligro para la descendencia.
o Borda cita un ejemplo: “Supóngase que una persona contrae
matrimonio con un enfermo de sífilis. Por amor, guarda silencio,
emprende una vida de peligros y abnegación. Quizá contrae ella
misma la enfermedad, y luego de una larga convivencia tiene
hijos, sanos o enfermos. ¿Puede el juez, en contra de la voluntad
de ambos, declarar la nulidad? ¿Puede hacerlo por pedido de
parientes interesados quizá en excluir al abnegado cónyuge de

13
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

una futura sucesión? Esta intromisión en un hogar ya formado,


con taras o sin ellas, pero de todos modos respetable, es
intolerable”7.
3. Del raptor con la raptada o a la inversa o el matrimonio realizado con
retención violenta. La acción corresponde exclusivamente a la parte
agraviada y sólo será admisible si se plantea dentro del plazo de un año
de cesado el rapto o la retención violenta.
o Debe existir violencia física y moral al momento de la
celebración del acto. La violencia física es la “fuerza irresistible”
ejercida sobre uno o ambos contrayentes para obtener la
celebración del acto; por otro lado, la violencia moral implica
inspirar a uno de los cónyuges amenazas, un temor fundado de
sufrir un mal inminente y grave en su persona, libertad, honra o
bienes, o de su cónyuge, descendientes o ascendientes, de tal
manera que se le conmine a celebrar el acto matrimonial8
o Se prueba con una denuncia policial.
4. De quien no se halla en pleno ejercicio de sus facultades mentales por
una causa pasajera. La acción sólo puede ser interpuesta por él, dentro
de los dos años de la celebración del casamiento y siempre que no haya
hecho vida común durante seis meses después de desaparecida la causa.
o Respecto a supuestos de recuperación a plenitud de las facultades
mentales del cónyuge enfermo, se alega que esto constituye un
supuesto en el cual la causal de nulidad se convierte en una causal
de anulabilidad.
o Es posible la convalidación (confirmación tácita) cuando el
cónyuge afectado hace vida común con el otro durante los seis
meses siguientes a la desaparición de la causal; y también
(convalidación vía caducidad), por el transcurso de dos años de
celebrado el matrimonio.
5. De quien lo contrae por error sobre la identidad física del otro
contrayente o por ignorar algún defecto sustancial del mismo que haga
insoportable la vida común. Se reputan defectos sustanciales: la vida
7
BORDA, Guillermo A. Tratado de Derecho Civil. Familia. Ob. cit., p. 165.
8
BELLUSCIO, Augusto César. Manual de Derecho de Familia. Ob. cit., 2002, pp. 228 y 229.

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

deshonrosa, la homosexualidad, la toxicomanía, la enfermedad grave de


carácter crónico, la condena por delito doloso a más de dos años de
pena privativa de la libertad o el ocultamiento de la esterilización o del
divorcio. La acción puede ser ejercitada sólo por el cónyuge
perjudicado, dentro del plazo de dos años de celebrado.
o El error es esencial cuando recae sobre la identidad del otro
cónyuge, cuando el error es tal que torne insoportable la vida en
común al cónyuge engañado. El cónyuge que engaña actuó con
dolo, que implica toda aserción de lo que es falso o disimulación
de lo verdadero, cualquier artificio, astucia o maquinación que se
empleó para conseguir la celebración del matrimonio.
o La presente causal analizada busca invalidar el matrimonio
celebrado por error en el cónyuge de buena fe; es decir, el error
en el cónyuge perjudicado, quien tiene la reserva de la acción
para ejercitarla en un plazo de dos años de celebrado el
matrimonio. Sin embargo, puede darse el caso que conociendo el
error en que se incurra con la persona, el matrimonio pueda ser
convalidado por el transcurso del plazo de caducidad.
o Cabe resaltar, respecto a la “conducta deshonrosa”, el Tribunal
Constitucional ha señalado que se encuentra directamente
vinculado a la buena reputación: “En esta causal debe apreciarse
por el juzgador no sólo el honor interno sino el honor externo de
la víctima, es decir, la opinión que tengan los terceros sobre su
anterior, o presente, o futura aceptación de la conducta
deshonrosa de su cónyuge”.
6. De quien lo contrae bajo amenaza de un mal grave e inminente, capaz
de producir en el amenazado un estado de temor, sin el cual no lo
hubiera contraído. El juez apreciará las circunstancias, sobre todo si la
amenaza hubiera sido dirigida contra terceras personas. La acción
corresponde al cónyuge perjudicado y sólo puede ser interpuesta dentro
del plazo de dos años de celebrado. El simple temor reverencial no
anula el matrimonio.

15
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

o Para que la amenaza pueda ser invocada como causal de invalidez


del matrimonio, debe ser grave; es decir, suscitar tal temor por el
peligro que entraña, que resulte decisiva en la determinación de la
voluntad.
o Respecto a la legitimidad para ejercer la acción, nuestro Código
Civil reserva la acción al cónyuge agraviado, quien ha sido objeto
de intimidación, y caduca si no se interpone dentro del plazo de
dos años de celebrado el matrimonio.
7. De quien adolece de impotencia absoluta al tiempo de celebrarlo. La
acción corresponde a ambos cónyuges y está expedita en tanto subsista
la impotencia. No procede la anulación si ninguno de los cónyuges
puede realizar la cópula sexual.
o La impotencia es un impedimento matrimonial sustentado en que
uno de los fines del matrimonio es la unión de los sexos
(procreación o satisfacción).
o La impotencia a que la ley se refiere es la imposibilidad de
realizar el acto sexual (impotentia coeundi), y no la imposibilidad
de generar (impotentia generandi), que es esterilidad9
o El ejercicio de la pretensión corresponde solo a ambos cónyuges
y está expedita en tanto subsista la impotencia; no procediendo la
anulación, si ninguno de ellos puede realizar la cópula sexual.
8. De quien, de buena fe, lo celebra ante funcionario incompetente, sin
perjuicio de la responsabilidad administrativa, civil o penal de dicho
funcionario. La acción corresponde únicamente al cónyuge o cónyuges
de buena fe y debe interponerse dentro de los seis meses siguientes a la
celebración del matrimonio.
o Cuando el matrimonio ha sido contraído ante un funcionario
incompetente a sabiendas de que lo era, es nulo; pero cuando uno
de ellos o los dos ignoraban tal incompetencia, el matrimonio
deviene simplemente en anulable.
o La acción, queda reservada solo al cónyuge de buena fe o ambos
si los dos la hubieran tenido; y caduca si no se plantea dentro de

9
BELLUSCIO, Augusto César. Manual de Derecho de Familia. Ob. cit., p. 341.

16
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

los seis meses siguientes a la celebración del matrimonio, sin


perjuicio de la responsabilidad administrativa, civil o penal del
funcionario que intervino indebidamente.

3.4. Efectos:

 Produce efectos civiles respecto de los cónyuges y de los hijos, si se contrajo


de buena fe. Si se contrajo de mala fe, solo los produce respecto al cónyuge
de buena fe y de los hijos. Produce los efectos de un matrimonio válido
disuelto por divorcio frente a los que hayan actuado de buena fe.
 La acción debe de interponerse dentro del plazo establecido por la ley; en
caso se derive a una indemnización, la acción solo la puede ejercer el
cónyuge que actuó de buena fe, que se vio perjudicado por la invalidez del
matrimonio por la actuación de su consorte. Si bien es cierto que la
reparación del daño abarca el aspecto moral de la persona, nada restringe que
también puede abarcar los daños de tipo patrimonial (daño emergente o lucro
cesante) o extrapatrimonial (daño moral o daño a la persona), siempre que se
acredite cada supuesto en forma debida. (corresponde al interés privado o
particular, respecto a la necesidad de amparar la buena fe de los cónyuges)
 La producción de los efectos del matrimonio invalidado, desde su
celebración hasta la fecha en que la sentencia que lo invalida quede firme, se
da como si fuese un matrimonio valido disuelto por divorcio: los efectos son
reconocidos a favor de los hijos y del cónyuge o cónyuges que hayan
actuado de buena fe.
 Supuestos en los que se flexibiliza sus efectos jurídicos o incluso en los que
pueda superarse o subsanarse: La existencia de un impedimento trae consigo
la contingencia de una causa de invalidez, es decir, existe algún vicio en la
celebración del matrimonio y se consolida si es que las causales de
anulabilidad son invocadas y acreditadas, mientras tanto el matrimonio
conserva su plena validez y eficacia.
 No se transmite a herederos, pero estos pueden continuar con la acción
iniciada por el causante. La sentencia que declara la invalidez del
matrimonio tiene carácter constitutivo, en la medida en que el matrimonio

17
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

pierde validez a partir de tal sentencia. La invalidación funciona con efecto


retroactivo y destruye todas las consecuencias que el acto hubiera producido.

18
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

3.5. Jurisprudencia:
EXP. N.º 02445-2008-PA/TC - LIMA

CLARA RIVEROS

VDA. DE AMAYA

RESOLUCIÓN DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Lima, 7 de diciembre de 2009     

VISTO

El recurso de agravio constitucional interpuesto por doña


Clara Riveros Vda. de Amaya contra la resolución S/N de la Sala de
Derecho Constitucional y Social de la Corte Suprema de la República, de
fojas 82, su fecha 13 de setiembre de 2005, que confirmando la apelada
declaró improcedente la demanda de autos; y,

ATENDIENDO A

1.      Que con fecha 15 de agosto del 2006 la recurrente interpone


demanda de amparo con el objeto de que se repongan las cosas al estado
anterior a la expedición Resolución S/N de fecha 13 de setiembre del
2005, dictada por la Sala Civil de la Corte Suprema de la República en
los seguidos por doña Celia Rosa Cabos Malón Díaz en su contra y en
contra de don Santos Tomás Amaya Chiclayo,  sobre nulidad de
matrimonio. A criterio de la demandante, dicha resolución vulnera sus
derechos de defensa y a la igualdad procesal, pues declara indebidamente
improcedente el recurso de casación que interpuso (casación N.ª 1805-
2005- La Libertad). En efecto, sostiene que no se ha considerado que en
el proceso antes señalado se ha aplicado indebidamente el artículo 274,
inciso 3 del Código Procesal Civil, y tampoco se ha tomado en cuenta la
caducidad que está prevista en la ley para los casos de anulabilidad de
matrimonio.

2.      Que con fecha 18 de octubre del 2006 la Tercera Sala Civil de la


Corte Suprema de Justicia rechaza la demanda por haberse verificado que
la recurrente no cumplió con el mandato dispuesto, de adjuntar

19
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

documento que acredite que la resolución cuestionada ha quedado


consentida o ejecutoriada. La Sala revisora confirma la resolución
apelada por similares argumentos.

3.      Que si bien en el presente caso se alega la vulneración de los


derechos de defensa y a la igualdad procesal, de la revisión de los
actuados se aprecia que las instancias judiciales han dado respuestas
motivadas a los argumentos que la recurrente reproduce ahora en su
escrito de demanda, sin que de ello pueda desprenderse ninguna
violación manifiesta a los derechos que el recurrente invoca.

4.      Que la resolución N.º 72, de fecha 7 de junio del 2005, señala que
“estando probado por la partida de matrimonio de fojas 2 que don
Santos Tomás Amaya Chiclayo tuvo las primeras nupcias con la
demandante doña Celia Rosa Cabosmalón Díaz en la
Municipalidad  Distrital  de  Guzmango el 14 de octubre de 1945;
mientras que conforme a la partida de matrimonio de fojas 3 se acredita
el segundo matrimonio de don Santos Tomás Amaya Chiclayo con la
demandada doña Clara Riveros Neyra, matrimonio éste, que se celebró
el 20 de setiembre de 1984, lo que significa que el segundo matrimonio
debe anularse por mandato expreso de la ley derogada, aplicada por
temporalidad”. Asimismo, respecto a la supuesta caducidad alegada, se
sostiene que “la acción de nulidad de matrimonio no caduca a tenor del
artículo 276 del Código Civil vigente y que no estamos frente a una
causal de  anulabilidad  de matrimonio como pretende hacerlo aparecer
la demandada en su escrito de apelación”.

5.      Que en el contexto descrito este Colegiado considera que no existe


ninguna vulneración a los derechos fundamentales alegados, y que, al
revés de ello, se evidencia que, lo que se pretende en el fondo es utilizar
la vía residual del proceso de amparo como una instancia adicional a las
ordinarias, a efectos de prolongar el debate sobre cuestiones que ya han
merecido respuesta debidamente motivada por parte de los órganos
judiciales competentes, lo que no es objeto ratione materiae de un

20
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

proceso de tutela de los derechos fundamentales, como es el proceso


constitucional de amparo.

6.      Que en consecuencia no apreciándose que los hechos ni la


pretensión de la demanda incidan sobre el contenido constitucionalmente
protegido de los derechos que se invoca, este Colegiado considera que en
el caso de autos resulta de aplicación el inciso1) del artículo 5º del
Código Procesal Constitucional.

Por estas consideraciones, el Tribunal Constitucional, con la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Perú

RESUELVE

Declarar IMPROCEDENTE la demanda de amparo. 

Publíquese y notifíquese. 

SS. VERGARA GOTELLI - MESÍA RAMÍREZ - LANDA ARROYO -


BEAUMONT CALLIRGOS - CALLE HAYEN - ETO CRUZ -
ÁLVAREZ MIRANDA

4. MATRIMONIO ILÍCITO:
4.1. Naturaleza Jurídica:
Los impedimentos impedientes (impedimenta, impedianta o prohibentia) son
los que afectan la regularidad de la celebración del matrimonio sin provocar
la invalidez, pero en caso de contraerse pase a la existencia de la norma
prohibitiva, se resuelven con sanciones para los contrayentes. Son también
denominados impedimentos prohibitivos en tanto no afectan presupuestos de
validez, de modo que si el matrimonio se celebra el acto es válido, aunque
por haber sido celebrado irregularmente conlleva sanciones para los
contrayentes, generalmente de naturaleza patrimonial (ZANNONI).
Algunos opinan que estos impedimentos pueden determinar la prohibición
legal de un matrimonio siempre que para ello se hagan valer antes de su
celebración, pero, que luego de efectuado no pueden invocarse para pedir su
nulidad (ENCICLOPEDIA OMEBA).

21
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

Por otro lado, es pertinente señalar los motivos por los que es que al
legislador a previsto estos supuestos. En el sistema juridico peruano la
familia y el conjunto de normas que la tratan tienen un carácter especial al
estar influenciadas por conceptos que no son necesariamente jurídicos sino
que, por el contrario, responden a conceptualizaciones multidisciplinarias
influenciadas por la religión, la moral y la ética. Estas es una institución que
tiene la forma bajo la influencia de las concepciones religiosas, políticas,
sociales y morales de cada periodo histórico; la presencia de la costumbre, la
especialidad de los derechos subjetivos familiares, la restricción de la
autonomía de la voluntad acompañado por el rigor, solemnidad y formalismo
en la celebración de ciertos actos jurídicos; las normas imperativas y de
orden público, la primacía del interés familiar y social frente al interés
individual consagran al Derecho de familia como un Derecho sui géneris, de
singular especialidad y exclusivamente aplicable a los hombres.
Los criterios religiosos fueron base de la normativa familiar. Religión y
familia se presentan como dos instituciones complementarias entre sí. Como
declaró Rizzardo, el Derecho de familia está profundamente influenciado por
las ideas religiosas, la familia es una preocupación constante de todas las
religiones, especialmente de las que tienen como su base el cristianismo.
Existen normas en el Derecho de familia que establecen limitaciones,
dejando la moral y la ética como fuerzas coadyuvantes en las relaciones
familiares, la disuasión de la celebración de ciertos actos jurídicos familiares
(los impedimentos matrimoniales en el orden de la consanguinidad –tío
sobrina–, 274-5; los matrimonios ilícitos pero válidos, entre tutor y pupila,
curador y curada, del viudo que no inventaría bienes que administra de sus
hijos o la viuda que se casa sin acreditar su no preñez, 243, 1-2 y 3.
El doctor Cornejo Chávez señalo que el régimen jurídico del Estado
Peruano, precisa cuáles son esas diferentes formas de celebración, regula
todo su contenido (condiciones necesarias para casarse válida y lícitamente
-impedimentos dirimentes e impedientes y, por tanto, causales de nulidad,
anulabilidad e ilicitud del matrimonio.
En el código de 1936 se establecía como impedimento que hace el
matrimonio ilícito -pero no nulo ni anulable- el Código en su Art. 84

22
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

prohibía el matrimonio del tutor con el menor" durante el ejercicio del cargo
ni antes que estén judicialmente aprobadas las cuentas de la administración"
y sanciona esta infracción con la pérdida de la retribución que "le habría
correspondido sobre los bienes del menor".
El nuevo matrimonio del viudo requiere inventario previo de los bienes de
sus hijos o declaración jurada de que carecen de ellos; y el que se casare sin
observar esta disposición "perderá el usufructo que le corresponde sobre los
bienes de sus hijos (Art. 86). Para evitar confusión en la descendencia, "La
viuda no podrá contraer matrimonio, sino pasados 300 días de la muerte de
su marido, salvo que diere a luz", sancionando esta omisión con la pérdida
de los bienes del marido.
En resumen, el artículo 243 del Código Civil se ocupa de regular los
denominados impedimentos impedientes para contraer matrimonio.
Estableciendo una tercera clase de matrimonios: el ilícito, cuando se ha
celebrado entre personas a quienes la ley les prohíbe celebrarlo, es ilícito,
pero no nulo ni anulable, el matrimonio es válido.

4.2. Casos y Efectos:


Los matrimonios celebrados en infracción de los impedimentos especiales
son los que en la Doctrina se les califica con la denominación de ilícitos, que
por disposición del artículo 286, del C.C. de 1984, son válidos y que en
concordancia con los artículos 243 y 247 del C.C. son los siguientes:

a) TUTOR O CURADOR: Esta disposición está inspirada en el


Digesto, y se fundamenta en la necesidad de proteger los intereses del
menor frente a los posibles intereses de quien ha estado encargado de
administrarlos.
Este impedimento fue introducido en el Derecho Romano mediante un
Senadoconsulto de Marco Aurelio. En un inicio comprendió solo al
tutor y a su pupila, pero luego se extendió a los descendientes varones
del tutor, a su padre, e hijos adoptivos mientras estuviesen bajo su
patria potestad y a los herederos de éstos.
La doctrina señala que el impedimento está fundado en la necesidad
de evitar que pendientes las cuentas de la tutela, el tutor pudiere

23
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

obtener mediante el matrimonio una forma de liquidarlas en


condiciones sospechosas (ZANNONI).
Algunos autores opinan que éste es un impedimento relativo
temporario, pues se prohíbe el matrimonio de quien ejerce la tutela
con los que están sometidos a ella, y también de estos últimos con los
descendientes legítimos del primero que estén sometidos a su patria
potestad; y temporal porque caduca con la terminación de la tutela y
la aprobación de las cuentas respectivas (ENCICLOPEDIA OMEBA).
O como señala Cornejo Chávez con acierto “la garantía que se
encierra en este dispositivo consiste, como es notorio, en evitar que el
guardador inescrupuloso oculte bajo el disfraz del matrimonio el
malicioso manejado de los intereses del pupilo" (CORNEJO
CHÁVEZ).
Como excepción a la regla general, existe la autorización previa del
padre o la madre del sujeto a la guarda, pero para ello debe hacerse de
un modo formal, esto es, por testamento o por escritura pública.
Apuntan Díez Picazo y Gullón que “la desaparición de la prohibición
matrimonial de los tutores obedece a la escasa eficacia que había
tenido tal hecho de que, según las concepciones vigentes en el
momento actual, lo único que debe valorarse es si ha existido o no
vicio del consentimiento, por captación dolosa o por cualquier otra
forma de coacción o engaño. Si así fuese, el problema tendrá que
recibir su tratamiento a través de las normas generales sobre el
consentimiento matrimonial. Si el consentimiento matrimonial ha sido
pleno, no hay razón de peso para prohibir el matrimonio" (Diez Picaza
y GULLÓN).
Un tema no esclarecido y que merece serio es si el testamento puede
ser ológrafo o en sobre cerrado o si no necesariamente deberá constar
en escritura pública. Es claro que el dispositivo solo habla de
testamento en términos generales y que “no se debe distinguir allí
donde la ley no distingue; pero parece cuando menos cuestionable que
se exija en el texto, como alternativa, la escritura pública. Nosotros
nos inclinamos por la primera de estas tesis, pues el testamento

24
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

ológrafo debidamente protocolizado y el testamento en sobre cerrado


entregado al notario ofrecen mayor seguridad y garantía que el simple
documento privado.
Por cuanto se trata de un impedimento impediente o relativo, la
sanción que es pecuniaria, manifiestamente es insignificante e
irrisoria, puesto que solo da lugar a la pérdida de la retribución que
por su trabajo corresponde al tutor o curador infractor, sin perjuicio de
la responsabilidad derivada del desempeño del cargo.
En el Código Civil de 1936 la prohibición alcanzaba a los
descendientes, ascendientes, hermanos, cuñados y sobrinos del
curador (artículo 84).

b) VIUDOS Y DIVORCIADOS: El inciso 2 del artículo 243 tiene un


propósito similar al inciso 1, cual es la protección de los bienes de los
menores que vienen siendo administrados por el viudo o la viuda sin
que hayan hecho previamente inventario judicial, con dictamen del
Ministerio Público, o que preceda una declaración jurada de que no
tienen hijos bajo su patria potestad o de que estos hijos no tienen
bienes. La idea matriz es evitar la confusión de patrimonios. Como
el inciso 1, el impedimento es solo relativo y al no cumplirse se
impone una sanción que como en los casos anteriores es pecuniaria, y
consiste en la pérdida del derecho al usufructo que corresponde al
padre sobre los bienes de sus hijos. La finalidad de esta prohibición
es cautelar los bienes pertenecientes a los hijos de los viudos y
divorciados, y evitar la confusión de patrimonios.
El antecedente de este artículo está en el artículo 86 del Código Civil de
1936.
c) VIUDA Y DIVORCIADA: Conocido también como inobservancia
del luto por viudez, consiste en la obligación en la mujer de
abstenerse de realizar nuevo matrimonio, ¡con la finalidad de evitar la
“perturbatio sanguinis” o “turbatio sanguinis”, la que conduce a la
incertidumbre sobre la paternidad de la persona que pueda nacer; así,
si a la mujer se le permitiera casarse de nuevo antes de los 300 días

25
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

señalados por la ley, podría plantearse el problema de saber quién es


el padre del hijo.
El objetivo de este precepto, denominado por Díez Picazo "periodo
de luto", es evitar la confusión de paternidad durante dichos plazos,
esto es, la "turbatio sanguínís': Colocándose dentro de un criterio
lógico, el precepto dispone que el juez podrá dispensar el
denominado "plazo de viudez” si de acuerdo con las circunstancias
sea imposible que la mujer se halle embarazada, como sería el caso
de una prolongada ausencia del marido, o el dictamen de un
especialista. La prohibición que sanciona este inciso no rige en el
caso previsto por el inciso 5 del artículo 333, relativo al abandono
injustificado de la casa conyugal. Este precepto es también aplicable
a la presunción de paternidad del nuevo marido. Hasta antes de la
modificación de este inciso hecha por la Ley N° 27118, no se admitía
prueba alguna que permitiese a una mujer contraer matrimonio antes
de vencido el plazo de 300 días. Ahora se puede dispensar de dicho
plazo a la mujer que acredita no hallarse embarazada mediante
certificado médico expedido por autoridad competente. El
antecedente de este artículo es el artículo 85 del Código Civil de
1936. En el caso de las mujeres cuyos matrimonios fueron declarados
nulos o fueron disueltos por divorcio, el plazo se contaba desde que
quedó ejecutoriada la sentencia. En este caso la sanción pecuniaria
es más drástica, por cuanto la infractora pierde los bienes que hubiera
obtenido del marido a título gratuito, lo mismo sucederá por analogía
a la divorciada o a la que se anuló el matrimonio. También se trata de
resolver el problema de paternidad del hijo alumbrado por la viuda
durante el segundo matrimonio, pero antes de cumplirse los 300 días
de la disolución del matrimonio anterior aplicando al segundo marido
la presunción "paters".
De esta manera, podemos concluir que el matrimonio de quienes
están sujetos a los impedimentos impedientes tiene validez y son
sancionados en forma puramente patrimonial.

26
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

Héctor Cornejo Chávez, Régimen Matrimonial Peruano

5. CUESTIONES PROCESALES:
La pretensión de invalidez del matrimonio (nulidad o anulabilidad del mismo) se
tramita en vía de proceso de conocimiento por así disponerlo el artículo 281 del
Código Civil. Dicha vía procedimental tiene, pues, el trámite siguiente:

- Presentada la demanda, el demandado tiene cinco días para interponer tachas


(contra los testigos, documentos y medios de prueba atípicos) u oposiciones (a la
actuación de una declaración de parte, a una exhibición, a una pericia, a una
inspección judicial o a un medio de prueba atípico) a los medios probatorios,
contados desde la notificación de la resolución que los tienen por ofrecidos (art.
478, inciso 1, del C.P.C.).
- Dentro de los cinco días de notificada la resolución que admite las tachas u
oposiciones planteadas por el demandado, el demandante puede absolver tales
cuestiones probatorias (art. 478, inciso 2, del C.P.C.).
- Dentro de los diez días de notificada la demanda o la reconvención, el
demandado o el demandante, según el caso, puede interponer excepciones (como
las de incompetencia, incapacidad del demandante o de su representante,
representación defectuosa o insuficiente del demandante o del demandado,
oscuridad o ambigüedad en el modo de proponer la demanda, falta de
agotamiento de la vía administrativa, falta de legitimidad para obrar del
demandante o del demandado, litispendencia, cosa juzgada, desistimiento de la
pretensión, conclusión del proceso por conciliación o transacción, caducidad,
prescripción extintiva y convenio arbitral: art. 446 del C.P.C.)o defensas previas.
Así lo establece el art. 478, inciso 3, del C.P.C.
- Dentro de los diez días de notificada la resolución que corre traslado de las
excepciones o defensas previas planteadas por el demandado (en cuanto a la
demanda) o por el demandante (en cuanto a la reconvención), puede la parte
procesal de que se trate absolver dicho traslado (art. 478, inciso 4, del C.P.C.).
- Dentro de los treinta días de notificada la demanda, puede el demandado
contestarla y reconvenir (art. 478, inciso 5, del C.P.C.)
- Se tienen diez días para ofrecer medios probatorios si en la contestación de la
demanda o de la reconvención se invocan hechos no

27
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

expuestos en la demanda o en la reconvención según el caso, conforme al


artículo 440 del Código Procesal Civil. El referido plazo se contará a partir de la
notificación de la contestación de la demanda o de la absolución de la
reconvención, según el caso de que se trate (art. 478, inciso 6, del C.P.C.).
- Si se plantea reconvención, el demandante puede absolver su traslado dentro de
los treinta días de notificad a la resolución que corre traslado de la contestación
de la demanda y de la reconvención (art. 478, inciso 7, del C.P.C.).
- Se tienen diez días para subsanar los defectos advertidos en la relación jurídica
procesal, conforme al artículo 465 del Código Procesal Civil, según el cual:
a) tramitado el proceso conforme a la Sección Cuarta del Código
Procesal Civil («Postulación del Proceso») y atendiendo a las
modificaciones previstas para cada vía procedimental, el Juez, de
oficio y aun cuando el emplazado haya sido declarado rebelde,
expedirá resolución concediendo un plazo (de subsanación de
defectos), si los defectos de la relación fuesen subsanables, según lo
establecido para cada vía procedimental; y
b) subsanados los defectos, el Juez declarará saneado el proceso por
existir una relación procesal válida, en caso contrario, lo declarará
nulo y consiguientemente concluido. Ello según el art. 478, inciso 8,
del C.P.C.
- La audiencia conciliatoria se realiza dentro de los veinte días posteriores al auto
que declara saneado el proceso o subsanados los defectos advertidos en la
relación jurídica procesal (art. 478, inc. 9, del C.P.C.).
- En caso de no conciliar las partes sobre la totalidad de las pretensiones debatidas
en el proceso, la audiencia de pruebas se realiza dentro de los cincuenta días de
acontecida la audiencia de fijación de puntos controvertidos y saneamiento
probatorio (denominación subsidiaria ‘-le la audiencia conciliatoria cuando en
ésta no se produce la conciliación). Ello se colige del artículo 478, inciso 10, del
C.P.C.
- Se tienen diez días, computados desde realizada la audiencia de pruebas, para la
realización, si fuera el caso, de las audiencias especial y complementaria. La
audiencia especial se establece para la actuación de la inspección judicial, si las
circunstancias lo justifican (art. 208, antepenúltimo párrafo, del C.P.C.), la

28
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

fundamentación del dictamen respectivo por los peritos cuando la complejidad


del caso lo amerita (art. 265, parte final, del C.P.C.), la fundamentación del
dictamen pericial, si no se ha presentado, o en caso de haberse presentado
extemporáneamente o en caso de no asistir los peritos a la audiencia de pruebas
(art. 270 del C.P.C.), etc. Por su parte, la audiencia complementaria se establece
en el supuesto de promoción o cese del magistrado que dirigió la audiencia de
pruebas (art. 50, parte final, del C.P.C.); se establece también en la hipótesis de
realización de la audiencia de pruebas antes de que se produzca la integración
del litisconsorte necesario a la relación jurídica procesal, pero está condicionado
a que el último de los nombrados hubiese ofrecido medios de prueba (art. 96 del
C.P.C.). Así lo dispone el art. 478, inciso 11, del C.P.C.
- La sentencia se emite dentro de los cincuenta días posteriores a la conclusión de
la audiencia de pruebas (art. 478, inciso 12, del C.P.C.).
- La apelación de la sentencia se plantea dentro de los diez días de notificada la
sentencia, conforme al artículo 373 del Código Procesal Civil (art. 478, inciso
13, del C.P.C.), que establece lo siguiente:
a) la apelación contra las sentencias se interpone dentro del plazo
previsto en cada vía procedimental, contado desde el día siguiente a su
notificación;
b) concedida apelación, se elevará el expediente dentro de un plazo no
mayor de veinte días, contado desde la concesión del recurso, salvo
disposición distinta del Código Procesal Civil, siendo tal actividad de
responsabilidad del auxiliar jurisdiccional;
c) en los procesos de conocimiento y abreviado, el superior conferirá
traslado del escrito de apelación por un plazo de diez días;
d) al contestar el traslado, la otra parte podrá adherirse al recurso,
fundamentando sus agravios, de lo que se conferirá traslado al
apelante por diez días;
e) con la absolución de la otra parte o del apelante si hubo adhesión, el
proceso queda expedito para ser resuelto, con la declaración del Juez
superior en tal sentido, señalando día y hora para la vista de la causa;
y
f) el desistimiento de la apelación no afecta a la adhesión.

29
INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

Es de destacar que, conforme se desprende del artículo 281 del Código Civil,
además de las reglas correspondientes al proceso de conocimiento, le son aplicables
al proceso de invalidez del matrimonio (nulidad o anulabilidad del mismo), en
cuanto sean pertinentes, las disposiciones establecidas para los procesos de
separación de cuerpos o divorcio por causal, razón por la que tiene que tenerse
presente las reglas que integran el Capítulo Primero (« Separación de cuerpos») y el
Capítulo Segundo («Divorcio») del Título IV («Decaimiento y disolución del
vínculo») de la Sección Segunda («Sociedad conyugal") del Libro III («Derecho de
Familia») del Código Civil, y también las normas que conforman el Subcapítulo 1
(«Separación de cuerpos o divorcio por causal») del Capítulo II («Disposiciones
especiales») del Título I («Proceso de conocimiento») de la Sección Quinta
(«Procesos contenciosos») del Código Procesal Civil.10

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Mispireta Gálvez, C. (2003). “Indemnización por invalidez de matrimonio”. Lima: Gaceta


Jurídica.

10
[ CITATION Gal17 \l 10250 ]

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INVALIDEZ DEL MATRIMONIO

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