Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Una de las definiciones de normal dice que se trata de “la actividad mental por medio de la cual el
conocimiento, la habilidad, los hábitos, las actitudes e ideales son adquiridos, retenidos y utilizados,
originando progresiva adaptación y modificación de la conducta. Es un término que se le da a una persona
que supuestamente no cuenta con ninguna discapacidad”.
Es curioso porque todos, en mayor o menor grado contamos con alguna cuestión negativa aunque no sea una
discapacidad en un sentido estricto; bien sabido es que no existe la perfección en el terreno de lo humano. Es
cierto que algunas patologías son más visibles o ruidosas y hay otras que pasan más desapercibidas.
Tal vez un posible sentido del paso por esta vida sea mejorarnos como personas, modificando esas cosas
negativas que nos hacen sufrir y dañan a quienes nos rodean.
Otra definición: “Se dice de lo que se halla en su estado natural. Que sirve de norma o regla. Regular,
ordinario.”
Y que es una norma? Es un “ordenamiento imperativo de acción que persigue un fin determinado con la
característica de ser rígido en su aplicación. Regla, disposición o criterio que establece una autoridad para
regular acciones de los distintos agentes económicos, o bien para regular los procedimientos que se deben
seguir para la realización de las tareas asignadas. Se traduce en un enunciado técnico que a través de
parámetros cuantitativos y/o cualitativos sirve de guía para la acción. Generalmente la norma conlleva una
estructura de sanciones para quienes no la observen”.
¿Qué es la patología?
Patología es un término que proviene del griego: estudio (logos) del sufrimiento o daño (pathos). Tiene que
ver con la parte de la medicina encargada del estudio de las enfermedades en su más amplio sentido, es
decir, como procesos o estados anormales de causas conocidas o desconocidas.
Ahora bien, entonces esto tiene algo que ver la salud y la enfermedad. ¿La salud sería lo normal?
La pregunta surge porque la definición de patología menciona ciertos estados anormales.
Alguien sano no es solamente aquel que no esta enfermo, sino estaríamos definiendo la salud por la ausencia
de enfermedad. Cuando una persona puede poner a jugar su deseo tanto en el ámbito laboral como en lo
afectivo, esto es apasionarse en el trabajo y en el amor en lugar de padecerlos, podríamos pensar en alguien
sano.
La psicopatología psicoanalítica, que estudia el terreno de las enfermedades psíquicas, distingue tres
entidades:
Neurosis (Neurosis Obsesiva, Histeria, Fobias)
Psicosis (Paranoia, Esquizofrenia)
Perversión (Sadismo , Masoquismo)
Podríamos preguntarnos si hay algún lugar para lo normal porque pareciera que todo es patología.
El interrogante surge porque la cuestión de la normalidad está instalada en el discurso. Todo el tiempo
escuchamos hablar de “personas normales”, “familias normales”, “situaciones normales”.
Hará referencia a que algunas variables estén medianamente controladas. Que algunas cosas estén en su
lugar
Cuando todo es caos y lo que debería estar en un lugar está en otro totalmente opuesto, la patología se
instala.
Cuando en una familia cada uno ocupa su lugar, la cosa puede marchar bastante bien. No es lo que pasa en
la mayoría de los casos, por eso es que los psicoanalistas y psiquiatras tenemos trabajo, aunque deberíamos
tener más ya que hay mucha gente que sufre en silencio o en ocasiones hablan con quien no corresponde.
Muchas veces me he preguntado si lo más parecido a la normalidad sería la neurosis.
La neurosis conlleva un enorme sufrimiento para la persona que la padece y para quienes padecen a esa
persona, Freud lo nombraba como miseria neurótica.
Los sujetos neuróticos en su mayoría, además de vivir quejándose todo el tiempo y poniendo la causa de sus
males afuera, hacen lo imposible por no conectarse con aquello que no anda bien en sus vidas o aquello que
falta, ese vacío que es imposible de llenar y es fuente de angustia. Para evitar ese sentimiento se fuma, se
come en exceso, se bebe demás y no precisamente agua o gaseosas, también se consumen drogas,
psicofármacos, algunos trabajan y/o juegan compulsivamente; etc.
Normal me suena a algo del orden de la estandarización, del uniformar, de borrar las diferencias y también a
un estado ideal.
TEORÍA COGNITIVA
Ponen énfasis en la actividad mental humana y sus productos; es decir, el conocimiento. Parte del principio
que el niño es un ser que busca activamente conocimiento y, por tanto, se halla en un proceso constante de
autoconstrucción, hace planes, tiene objetivos, recuerdos y que puede librarse de ciertos sesgos y prejuicios a
la hora de realizar su propia elaboración de la realidad (Belloch y Cols. 1977).
La forma en que pensamos acerca de las situaciones radica en nuestras creencias, expectativas y
sentimientos que influyen en lo que aprendemos y en cómo lo aprendemos. Por esto los psicólogos
cognoscitivistas se interesan en los procesos mentales superiores del individuo: memoria, atención,
percepción y concentración. De esta forma se explica la conducta en función de las experiencias, información,
impresiones, actitudes, ideas y percepciones de una persona y de la forma en que ésta los integra, organiza y
reorganiza.
Entonces, la meta final del desarrollo cognitivo en el ser humano es conseguir una organización psicológica
que le proporcione la máxima capacidad operativa para así adaptarse y resolver cuantas situaciones y
problemas planteo el entorno, tanto físico como psicosocial en el que éste situado.
En consecuencia, el objetivo de la psicopatología cognitiva es el análisis de las estructuras y los procesos de
conocimiento que controlan la aparición de los comportamientos y las experiencias extrañas o anormales que
se hace equivalente a la disfunción cognitiva.
TEORÍA PSICODINÁMICA
Johnson y Cols; 1992 sostienen que la teoría psicodinámica tiene en cuenta el
desarrollo, estructura y dinámica de la personalidad. Supone que el niño debe superar con éxito fases
sucesivas de su persona, las cuales son decisivos para su bienestar social y emocional. A estas fases se les
llama etapas psicosexuales y constan de los períodos de desarrollo oral, anal, fálico y genital.
Durante los mismos, las sensaciones placenteras se concentran en distintas áreas o zonas erógenas del
cuerpo humano y el niño debe llegar a dominar habilidades específicas en cada una de ellas.
Considera que la naturaleza de los procesos de enfermedad psicológica, así como los síntomas de un
padecimiento físico provienen de una patología física. Establece que los síntomas de una enfermedad mental
son consecuencias de problemas psicológicos profundos, tales como conflictos reprimidos, experiencias
traumáticas o fijaciones en determinadas etapas del desarrollo psicosexual.
TEORÍA BIOLÓGICA
La perspectiva biológica asume, como principio fundamental, que el trastorno mental es una enfermedad, al
igual que cualquier otra enfermedad física. En consecuencia, las alteraciones psicopatológicas se producen
porque existen anormalidades biológicos subyacentes (genéticas, bioquímicas, neurológicos, etc.). Por tanto,
según esta teoría, el tratamiento debería centrarse en corregir tales anormalidades orgánicas. (Belloch y Cols.
1997).