La autorización para enajenar gravar o dar en arrendamiento por largo tiempo
viene de menores la tenemos en el libro IV de los actos no contenciosos del Código de Procedimientos Administrativos Comunes.
Se presenta una solicitud expresando las causas o razones que exijan o
legitimen estas medidas, se acompañan los documentos necesarios y se ofrece información sumaria. Se oye al Ministerio Público quien puede opinar que se accede o se deniegue. En caso de ser negativa la opinión considero que el Notario debe suspender las diligencias y remitir el expediente al Juzgado correspondiente para que los interesados continúen su solicitud en sede Judicial, si el asunto se tramita ante el Juez la opinión del Fiscal no es vinculante y el Juez puede resolver favorablemente aun contra la opinión del Fiscal.
La ley recomienda que al conceder la autorización se fije un plazo para que se
haga uso de ella; sino se fijare plazo se entiende caducado en el término de seis meses (artículo 1046 y 1047 del Código Procesal Penal). Los padres no pueden enajenar ni gravar los bienes de los hijos sujetos a patria potestad, ni contraer en nombre d ellos obligaciones que exceda los límites de una administración normal, sino por causa justificada de absoluta necesidad y utilidad en beneficio del menor, previa autorización del Tribunal competente o de un Notario habilitado y con la intervención del Ministerio Público (artículo 192 del Código de Familia). En el caso de bienes muebles no será necesaria la autorización cuando su valor no excediere de mil lempiras (L.1000.00).
El tutor también necesita autorización judicial o notarial para enajenar o gravar
bienes inmuebles o derechos reales del menor o incapacitado; para dar los primeros en arrendamiento por más de tres años, o con anticipo de renta por más de un año; para hacer o reconocer mejoras que no sean necesarias para constituir servidumbres pasivas, y en general, para celebrar otra clase de contratos que afecten el patrimonio del pupilo siempre que pasen de quinientos lempiras (L.500.00). los contratos a que nos referimos no pueden ser prorrogados (artículo 300 numeral 1 del Código de Familia).
Es importante recordar que de acuerdo a la ley de tradición de bienes inmuebles
los menores están exentos del pago de traición de bienes inmuebles a título oneroso (artículo 3 numeral 2 del Decreto de creación del Impuesto de Tradición de Bienes Inmuebles). En sede judicial se ha estilado últimamente la intervención de una Trabajadora Social, para determinar si existe necesidad económica para la autorización de la venta. Esto es en todo caso ilegal, pues no existe Ley que así lo obligue.