EL MENTOREO JUVENIL

1 Timoteo 4: 11-12: Esto manda y enseña. Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé
ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, fe y pureza.

Introducción: La palabra mentor, tiene su origen en el poema la Odisea, escrita por

Homero en el Siglo VIII a.C. Se le adjudicaba a un anciano que cuidó de Telémaco, quien
era hijo Ulises, un héroe que partiendo a la guerra de Troya no volvió. Esto provocó que
Telémaco siendo educado y guiado por Mentor partieran por toda Grecia buscando el
paradero de su padre. Con el tiempo dejó de ser un nombre propio a ser un nombre común,
denominado a toda aquella persona que guía a otra.

En palabras de David Kornfield1, un mentor cristiano es alguien que cree en otra persona,
visualiza posibilidades más allá de lo que la persona percibe, la apoya y nutre, la desafía y
la levanta para su pleno potencial dentro de los propósitos de Dios.

El Apóstol Pablo y el mensaje del Evangelio: En el capítulo 4: 11-12 de 1 de Timoteo, El

gran apóstol Pablo se dedica a aconsejar al joven Timoteo, quien para ese momento era un
pastor y anciano (por jerarquía en cuanto al liderazgo) en la comunidad cristiana de Éfeso.
Para este entonces Pablo se había convertido en “punta de lanza” para transmitir el mensaje
del Cristo resucitado. Por lo que para asegurarse de que dicho mensaje se perpetuara y se
mantuviera en su esencia, surgía la necesidad de mentorear al joven Timoteo.

Al igual que hoy, este mensaje del evangelio que cambia y transforma, permanecerá vivo y
en su esencia, utilizando la herramienta del mentoreo hacia los jóvenes y adolescentes,
provocando así la perpetuidad del mensaje y la transformación de los portadores del
mensaje. Es decir, para que el mensaje del Evangelio no muera, sino que siga trascendiendo
y transformando es necesario el mentoreo hacia las personas, en este, caso hacía los jóvenes
y adolescentes.

El joven Timoteo: En los versículos 11 y 12 del capítulo 4, encontramos frases como:

“Esto manda y Enseña” … “ninguno tenga en poco tu juventud” … “se ejemplo”, frases
que denotan una llamada de atención con el objetivo de animar al joven Timoteo, ya que el
líder de los pastores de Éfeso, a pesar de ser joven entre muchos ancianos, tenía un
personalidad reservada y tímida2, por lo que estas enérgicas frases, son escritas por Pablo
con la intención de fortalecer su espíritu y animarlo a seguir firme en su ministerio.

1
Coordinador Internacional de MAPI, cuyo equipo ofrece entrenamiento a pastores y líderes, mantienen una red de apoyo a más de 1500 pastores en todo el Brasil, Bolivia, Portugal. Autor de más
de 20 libros.

2
Comentaristas como Matthew Henry, W. Hendriksen, y Robert Diameson, concuerdan que Timoteo tenía entre 34 y 38 años de edad (considerado en ese tiempo, dentro del rango de la juventud) y que era de
personalidad reservada y tímida.
En medio de una sociedad posmoderna, el individualismo ha querido tomar ventaja, cada
vez son menos las personas que se interesan emocional y espiritualmente por otras. Como
lo expresa Gabriel Salcedo3: “nos hemos abandonados unos a otros y esto ha producido una
epidemia de solitarios”, se consideran a los jóvenes y adolescentes como inmaduros,
personas que quieres estar solas, con una personalidad cambiante y sin mucho que aportar
en la iglesia. Sin embargo, los mentores juveniles se están dando cuenta de que donde la
mayoría ve algo perdido, ellos encuentran una oportunidad para ayudarlos a sacar lo mejor
de sí, a guiarlos, a descubrir sus fortalezas y ayudarlos con sus debilidades, así como Pablo
fue con Timoteo.

Pablo, un mentor diferente: El apóstol Pablo no es un mentor como los que muchas veces
se conocen ahora, personas que se encargan solo de manipular con tal de cumplir las metas
de algún ministerio o de alguna actividad, al contrario, Pablo está interesado en promover el
Evangelio y que este permanezca, pero también está interesado en que el joven Timoteo
crezca como persona. Es decir, Pablo ama verdaderamente a Timoteo. Versículos anteriores
al 11 y 12, Pablo aconseja a Timoteo a que deseché todo tipo de fábulas y doctrinas que se
están levantando en la comunidad cristiana de Éfeso. Pero después se refiere
específicamente a él y le dice: Timoteo tu eres capaz de ser un buen ejemplo, al hablar, al
comportarte, en amar a tu prójimo, en mantener una fe con firmeza y fidelidad, y en
mantenerte puro.

Pablo está consciente de que hay muchas personas que hablan, pero sus frutos los
contradicen, por eso está la presente necesidad de no solo equiparlo para enseñar y dirigir a
los demás pastores, sino también para llevar una vida acorde a lo que predica, es decir, que
crezca en el ministerio, pero también en su vida personal.

Invito a los mentores juveniles a seguir el ejemplo de Pablo. Los adolescentes y jóvenes son
mentoreados para llevar una vida cristiana y no solo para desarrollar talentos dentro de la
iglesia, el trabajo de un mentor no solo se refleja cuando sus mentoreados saben ejecutar un
instrumento en la iglesia, sino cuando saliendo de ella saben vivir conforme a la Palabra de
Dios. Y para eso se necesita un acercamiento verdadero hacia ellos, ser objetivos al
momento de guiarlos, conocerlos y crear un ambiente de confianza para que ellos puedan
crecer integralmente.

Conclusión.

Dentro de una sociedad que promueve la relatividad y destrucción de los valores cristianos,
sigue habiendo la necesidad de que personas que mentoreen a los jóvenes y adolescentes,
con pleno conocimiento de que lo que están haciendo tendrá influencia para el resto de su

3
Gabriel Salcedo es un educador, comunicador, y escritor argentino. Autor del libro: Líderes Modelos, donde abarca el tema del mentoreo juvenil.
vida. Con la ayuda de Dios, podremos ayudar a muchos “Timoteos” a dar lo mejor de sí y
ser personas de bien.