Sei sulla pagina 1di 3

LA EDUCACION COOPERATIVA

La educación constituye un tema importante para todas las ramas de la economía social:
cooperativas, mutuales, fundaciones, asociaciones.
El precedente más significativo sobre enseñanza de cooperativismo en establecimientos de
educación es la Ley 1420 de Enseñanza Común, promulgada en 1884, cuyos artículos 42 y
52 respectivamente establecen el fomento de las “sociedades cooperativas de educación” y de
“asociaciones y publicaciones cooperativas de la educación común”.
Cabe señalar que las provincias avanzaron sobre el tema, más allá de la nación, incorporando
el cooperativismo al quehacer de la educación sistemática. En el orden provincial, el
precedente más antiguo sobre educación cooperativa es la Ley 5.111 de la Pcia. de Bs. As. del
año 1946.

La educación cooperativa ha sido tempranamente reconocida como “regla de oro” de las


cooperativas y consagrada como principio fundamental por la Alianza Cooperativa
Internacional, en el marco de las tres formulaciones de los principios cooperativos hasta ahora
realizadas, tanto en 1937, 1966, como en 1995i.
Ello obedece a que, para satisfacer sus necesidades a través de cooperativas, las personas
asociadas organizan y administran empresas que les proporcionan servicios en base a su
propio esfuerzo y ayuda mutua.
Como son los mismos asociados quienes constituyen esas empresas, contribuyen a formar su
capital, las dirigen a través de sus representantes y controlan democráticamente su
funcionamiento, es la educación cooperativa, el instrumento que puede capacitarlos para que
desempeñen adecuadamente sus funciones de deliberación, dirección y control de sus
operaciones.
Por otra parte, la difusión de la educación cooperativa en los establecimientos escolares y su
práctica a través del funcionamiento de cooperativas escolares estimula a los alumnos a
desempeñarse como futuros asociados y dirigentes de cooperativas, propendiendo a la
formación en los aspectos intelectual, moral, social, democrático y económico.
La educación cooperativa debe dirigirse tanto hacia los asociados como a los dirigentes
elegidos por ellos, a su personal administrativo o técnico y a la población en general. Debe ser
promovida por las mismas cooperativas y las entidades que las agrupan, empleando distintos
sistemas como cursos, conferencias, bibliotecas, mesas redondas o seminarios, edición de
1
libros, revistas, folletos y otras publicaciones, promoción de comisiones, utilización de
medios audiovisuales y otros métodos educativos.
En nuestro País las cooperativas, federaciones y confederaciones, fomentan la educación
cooperativa por su propia convicción y porque así lo determina la Ley.

Así lo exige el artículo 2 inciso 8 de la Ley 20.337 que las rige, complementando la
regulación del tema con otras tres disposiciones contenidas en la misma Ley general de
Cooperativas: art. 40 inciso 3, 42 inciso 3 y 46.
Luego de declarar que el fomento de la educación constituye un rasgo esencial de estas
entidades, es de reiterar que la Ley articula una serie de disposiciones encaminadas a hacer
efectiva esa nota, que de otra manera, podría quedar en mero enunciado sin resonancia
práctica.
El artículo 42 inciso 3 arbitra los recursos necesarios para la actividad educativa, que deben
destinarse a un Fondo de Educación y Capacitación Cooperativas.
Para la efectiva utilización de ese fondo y evitar que se vaya engrosando sin afectación a su
destino específico, el artículo 46 establece que deberá invertirse anualmente, es decir durante
el transcurso del ejercicio siguiente al de su constitución.
Señala CRACOGNA que el circuito de normas legales se cierra con el artículo 40 inciso 3
que prescribe que la memoria anual debe informar acerca de la utilización de ese fondo. De
esa manera todos los asociados pueden conocer el destino de dichos fondos y la asamblea
puede ejercer también en esta materia su facultad de pronunciarse sobre lo actuado por el
consejo de administraciónii.
La Autoridad de Aplicación de la Ley de Cooperativas ha dictado, entre otras, las siguientes
normas reglamentarias con relación a la aplicación del Fondo de Educación y Capacitación
Cooperativas: Resolución SAC 577/84 y Resolución INAES 1918/04.

También el Estado apoya la educación cooperativa, con el propósito de estimular la


organización de estas entidades y contribuir a la elevación del nivel de vida y al bienestar
general.
Históricamente, en el orden nacional se ha sancionado la Ley de Educación Cooperativa N°
16.583 (decreto reglamentario N° 12.038) en 1964, que en su articulado declara de “alto
interés nacional la enseñanza de los principios del cooperativismo” y establece “la inclusión
en los planes y programas de los establecimientos educacionales de su dependencia, de la
2
enseñanza teórica-práctica del cooperativismo”. Entre sus fundamentos esta norma señala
que el cooperativismo es “una auténtica expresión de democracia y una escuela práctica para
el ejercicio de las virtudes cívicas”.
Aún cuando el objetivo fue ambicioso, imponiendo al Ministerio de Educación Nacional la
responsabilidad de instrumentar los sistemas de enseñanza en materia cooperativa, lo cierto es
que la Ley 16.583 no fue implementada en la práctica.

A esta Ley nacional, se agregan numerosas leyes provinciales que han consagrado similares
disposiciones en vinculación con la enseñanza teórico-práctica del cooperativismo en las
escuelas y la promoción de cooperativas escolares en sus respectivas jurisdicciones.
En 1986 por Resolución del Ministerio de Educación y Justicia de la Nación se aprobó la
Resolución N° 1599 referente a la “Reglamentación de Cooperativas Escolares” para los
establecimientos de nivel primario y medio de jurisdicción nacional. También en ese año el
Poder Ejecutivo Nacional aprobó por Decreto N° 2176 la nueva reglamentación de la Ley de
educación cooperativa N° 16.583.

Por Ley 23.427 se crea el Fondo para Educación y Promoción Cooperativa que establece una
“contribución especial” a modo de aporte compulsivo sobre el capital de las cooperativas, el
cual es administrado por el INAES en la parte correspondiente a la Nación.

Finalmente, según la Ley de Educación Nacional N° 26.206, artículo 90 el Ministerio de


Educación, Ciencia y Tecnología promoverá, a través del Consejo Federal de Educación, la
incorporación de los principios y valores del cooperativismo y del mutualismo en los procesos
de enseñanza aprendizaje y la capacitación docente correspondiente, en concordancia con los
principios y valores establecidos en la Ley N° 16.583 y sus reglamentaciones. Asimismo,
establece que se promoverá el cooperativismo y el mutualismo escolar.

i
KAPLAN DE DRIMER, Alicia. “Educación Cooperativa dentro de una política de educación”. Cuadernos de
Economía Social. IAIES, V.8, Pág. 93
ii
CRACOGNA, Dante, “Comentarios a la Ley de Cooperativas”, página 56.

Potrebbero piacerti anche