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Estudio Multicéntrico sobre Actitudes

y Normas Culturales frente a la Violencia


(proyecto ACTIVA): metodología
Marco Fournier,1 Rebecca de los Ríos,2 Pamela Orpinas 3
y Leandro Piquet-Carneiro 4

RESUMEN El propósito de este artículo es describir las bases conceptuales y los métodos empleados en el
estudio multicéntrico ACTIVA, así como el proceso que se cumplió en las diferentes etapas de
la investigación. Se brinda información general sobre el enfoque, diseño y métodos que se apli-
caron en las ciudades que participaron en el estudio: San Salvador, El Salvador; San José,
Costa Rica; Cali, Colombia; Caracas, Venezuela; Salvador de Bahía y Río de Janeiro, Brasil; San-
tiago, Chile y Madrid, España. Los objetivos del estudio fueron: 1) analizar y comparar entre
ciudades la prevalencia de conductas agresivas verbales y físicas hacia los niños, la pareja y
personas que no son miembros de la familia; y 2) identificar factores personales, ambientales y
socioeconómicos asociados con estas conductas violentas. El propósito del proyecto ACTIVA
fue generar información que ayudara a orientar políticas y programas para la prevención de la
violencia en las ciudades y brindar criterios para la toma de decisiones, así como recabar infor-
mación que sirviera de base para evaluar políticas y programas de prevención. Para cumplir
con los objetivos propuestos se procedió a elaborar y validar un cuestionario común, que se
aplicó, mediante el método de entrevista cara-cara, a los residentes de hogares particulares ur-
banos entre los 18 y 70 años de edad. La muestra fue seleccionada en cada ciudad mediante un
muestreo multietápico, estratificado y por conglomerados, y proporcionada según los estratos
socioeconómicos y la densidad de la población y sin reemplazo o sustitución. La muestra final
estuvo compuesta por 10 821 personas. En general, los porcentajes de respuesta se encontra-
ron comprendidos entre los límites establecidos, salvo algunas excepciones. En San José, Río
de Janeiro y Madrid el tamaño de la muestra final fue ligeramente menor del esperado. Se re-
gistraron mayores rechazos en varones jóvenes adultos de los estratos altos, por lo cual en las
muestras se observó una sobrerrepresentación de mujeres con predominio de los estratos medio
y bajo. A manera de conclusiones se exponen los alcances y limitaciones, tanto del enfoque
como de los métodos del estudio. Se destacan las aportaciones que brindan los estudios de este
tipo cuando se efectúan análisis comparativos que permiten identificar las diferencias y seme-
janzas que se expresan en diferentes centros urbanos. Se indica que con el método propuesto es
posible analizar la asociación entre las conductas violentas y diferentes factores de riesgo y atri-
butos a nivel individual en un momento particular en el tiempo. Sin embargo, se advierte que
este diseño tiene limitaciones a la hora de establecer relaciones causales y que no permitió eva-
luar el contexto en que se manifiesta y desarrolla la violencia en cada situación particular.

1 Instituto de Investigaciones Psicológicas, Universi- 2 Asesora Regional de Investigaciones en Salud 3 Universidad de Georgia, Departamento de Promo-
dad de Costa Rica, San José, Costa Rica. Dirección Pública, Coordinación de Investigaciones, Divi- ción de la Salud y Conductas Saludables, Athens,
postal: Instituto de Investigaciones Psicológicas, sión de Salud y Desarrollo Humano, Organización Georgia, EUA.
Ciudad Universitaria Rodrigo Faio, San José, Costa Panamericana de la Salud, Washington, D.C., Es- 4 Departamento de Ciencias Políticas, Universidad
Rica. Tel./Fax: (+506) 224-1844. Correo electrónico: tados Unidos de América. de São Paulo, SP, Brasil.
mfournie@cariari.ucr.ac.cr

222 Rev Panam Salud Publica/Pan Am J Public Health 5(4/5), 1999


La violencia es reconocida como un ben en el cuadro 1. En el diagrama se ampliado, adaptado e incluso reinter-
obstáculo para el desarrollo de las na- muestra la función que desempeñan pretado por los investigadores. Una
ciones y una amenaza para la salud las actitudes y aptitudes tanto en el muestra de ello se puede apreciar
pública en la Región de las Américas comportamiento violento como en el en los artículos que integran esta
(1). Para aliviar el problema de la agre- pacífico. En cada caso, el ambiente monografía.
sión interpersonal y la lesión intencio- produce una situación a la cual res- El propósito de este artículo es des-
nal se han elaborado y ejecutado di- ponden el agresor y la víctima. Si la cribir los métodos empleados en el es-
versos programas en la Región (2, 3). situación despierta una reacción emo- tudio multicéntrico ACTIVA, así como
Sin embargo, es preciso profundizar cional de enojo o frustración o una ne- el proceso que articuló las diferentes
en el conocimiento y la comprensión cesidad urgente de responder, la se- etapas de la investigación. Se brinda
de la compleja trama de factores socio- lección de respuestas conductuales se información sobre el diseño, el desa-
económicos, psicosociales y culturales guiará por actitudes hacia tales res- rrollo del instrumento y sus compo-
que se asocian con la violencia y fun- puestas y por su aceptabilidad social o nentes finales, así como sobre el pro-
damentar un enfoque integrado de moral (normas), así como por las ex- ceso de selección de la muestra y la
prevención. En 1996, la Organización pectativas de eficacia personal (capaci- recolección de datos en las ocho ciuda-
Panamericana de la Salud (OPS) ini- dad) para actuar de forma agresiva o des que participaron en América La-
ció una investigación cooperativa y pacífica. El alcohol, las emociones, el tina y España.
multinacional denominada proyecto estrés y otros factores pueden modifi-
ACTIVA, destinada a evaluar actitu- car el procesamiento de la información
des y normas culturales relacionadas y los procesos de evaluación de la acti- MATERIALES Y MÉTODOS
con la violencia en ciudades de Amé- tud, por ejemplo, al bajar los umbrales,
rica Latina y España. Los objetivos de limitar las opciones o impedir el razo- El proyecto ACTIVA es un estudio
la investigación fueron: 1) analizar y namiento. Los factores ambientales, transversal en el cual se utilizó un
comparar entre ciudades la prevalen- como la disponibilidad de armas y la cuestionario común y el método de
cia de conductas agresivas verbales y privación económica, también influi- entrevista estructurada cara-cara a
físicas hacia los niños, la pareja y per- rán en los tipos de comportamiento residentes de hogares particulares ur-
sonas que no son miembros de la fami- que se elijan para hacer justicia o para banos. Las entrevistas se llevaron a
lia, y 2) identificar factores personales, autoprotegerse (8). cabo en ocho ciudades metropolitanas
ambientales y socioeconómicos aso- El modelo fue revisado por el grupo de América Latina y España: San Sal-
ciados con estas conductas violentas. de los investigadores participantes, vador, El Salvador; San José, Costa
El propósito general del proyecto quienes analizaron sus ventajas y li- Rica; Cali, Colombia; Caracas, Vene-
ACTIVA fue generar información que mitaciones. Este enfoque teórico, que zuela; Salvador de Bahía y Río de Ja-
ayudara a orientar políticas y progra- representa una corriente de pensa- neiro, Brasil; Santiago, Chile, y Ma-
mas para la prevención de la violencia miento dentro de las ciencias de la drid, España.
en las ciudades y brindar criterios para conducta, ofrece un análisis de las ca- Aunque la violencia asume dife-
la toma de decisiones, así como reca- racterísticas y atributos de los indi- rentes formas y manifestaciones, la in-
bar información que sirviera como viduos que son entendidos como fac- vestigación se limitó al análisis de la
línea de base para evaluar políticas y tores protectores o de riesgo para la violencia física interpersonal, entendida
programas de prevención. adopción de conductas y prácticas para fines del estudio como el uso in-
El proyecto ACTIVA tuvo como re- violentas o no violentas. Se reconoce tencional o la amenaza de usar la fuerza
ferente inicial la teoría del aprendizaje que con este enfoque se pueden orien- física que ejerce una persona para cau-
cognitivo (4–6), que ha servido como tar intervenciones para modificar acti- sar daño físico a otra, a un grupo de perso-
base de diversos programas de promo- tudes, desarrollar habilidades indivi- nas o al patrimonio personal o social. De
ción de la salud (7). En este estudio se duales en la resolución de conflictos acuerdo con los objetivos propuestos,
partió de un primer modelo para en- interpersonales, controlar factores de la violencia interpersonal se evaluó a
tender los procesos que conducen o no riesgo y prevenir conductas agresivas. nivel de la pareja, de adultos hacia
a la violencia, el cual orientó la elec- Aunque esto se valora como una ven- niños y de adultos hacia personas des-
ción de los conceptos que se pretendía taja del enfoque para intervenir a nivel conocidas. Los espacios evaluados se
medir en esta investigación. Este mo- individual, el enfoque presenta limi- circunscribieron a los niveles domés-
delo, basado en la teoría de Bandura taciones para comprender y analizar tico, comunitario y social. Quedó ex-
sobre el comportamiento humano, fue la violencia como expresión social de cluida la evaluación de la violencia
desarrollado por el profesor Alfred desigualdades y de otro orden de con- ejercida por instituciones y organiza-
McAlister (figura 1). Una descripción flictos y determinantes que trascien- ciones de diferente índole, la violencia
detallada del modelo se encuentra en den el nivel psicosocial y el de los psicológica y la violencia sexual. Tam-
el protocolo del proyecto ACTIVA (8). comportamientos de los individuos. poco se consideraron las manifestacio-
Las definiciones de los componentes Aunque este modelo orientó el estu- nes de violencia en el lugar de trabajo
centrales de este modelo se descri- dio en sus grandes componentes, fue ni en las escuelas.

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FIGURA 1. Modelo para entender los procesos psicológicos y sociales que gobiernan la violencia

El medio ambiente determina disponibilidad y restricciones.

Percepción Interpretaciones
(cognitivas)

Intención
Medio ambiente:
• Físico, social y Consecuencias
simbólico 1 Reacciones Respuestas
• Familia 2 emocionales conductuales
• Grupo de pares Situaciones
• Escuelas y sucesos
de conflicto Intención Intención
• Comunidad
• TV, cine, radio
3 4
5 6

Normas y Autoeficiencia,
actitudes aptitud

Modelos Procesos de aprendizaje


sociales
(consecuencias
observadas)

Procesamiento de información Retroalimentación sobre


sobre aprendizaje vicariante aprendizaje mediante las
(observación) acciones

1 La interpretación de un conflicto depende de las creencias y valores que influyen en la atribución, por ejemplo, cuando una intención de provocación se
infiere selectivamente a grupos.
2 La codificación de la información, la atribución y otras aptitudes cognitivas determinan cuán acertadamente se interpreta la situación de conflicto.
3 Dependiendo de las actitudes hacia la emoción y sus expresiones, algunas interpretaciones podrían desembocar en sentimientos de cólera y
pesadumbre.
4 La aptitud de autocontrol cognitivo y emocional puede inhibir o aumentar la intensidad de la reacción y la posibilidad de responder.
5 Las respuestas preferidas se determinan mediante las normas y actitudes percibidas sobre su utilidad, propiedad, y demás.
6 La selección de la respuesta se hace según las aptitudes reales y la autoeficiencia percibida para realizar la conducta con efectividad y corrección.

Fuente: Ref. 8.

El cuestionario ACTIVA Centro Colaborador de la OMS sobre centrales, seleccionar indicadores


Promoción de la Salud de la Universi- para estos constructos, y definir los
En enero de 1996, el grupo de inves- dad de Texas en Houston, con objeto métodos empleados en el estudio.
tigadores5 participó en un primer taller de establecer el modelo descrito en la Partiendo de este modelo teórico y
de trabajo auspiciado por la OPS y el introducción, definir los constructos basándose en una combinación de ele-
mentos tomados de estudios anterio-
5 El estudio partió en la fase de planificación con la estas ciudades se realizaron pruebas del cues- res, el equipo de investigadores iden-
participación de 10 ciudades de América Latina y tionario. Posteriormente, se incorporó al estudio la tificó, adaptó y elaboró preguntas para
el Caribe (San Salvador, El Salvador; San José, ciudad de Madrid, España. La encuesta solo se
Costa Rica; Cali, Colombia; Caracas y Maracaibo, llevó a cabo con los métodos y la muestra total es- el cuestionario ACTIVA. El cuestio-
Venezuela; Lima, Perú; Salvador de Bahía y Río de perada en siete ciudades de América Latina y Es- nario se diseñó con el fin de cuantifi-
Janeiro, Brasil; Santiago, Chile y La Habana, paña. En Austin y Houston, Texas, se administró
Cuba); dos de Estados Unidos (Austin y Houston, una versión resumida y modificada del cues- car variables psicosociales asociadas
Texas) y una de Canadá (Vancouver). En todas tionario y la encuesta se realizó por teléfono. con la violencia, específicamente las

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CUADRO 1. Definición de conceptos del modelo para entender los procesos psicológicos y sociales que gobiernan la violencia. Proyecto
ACTIVA, 1997

Concepto Definición

Conflicto Situaciones y sucesos que pueden provocar violencia debido a problemas en las relaciones entre individuos y grupos
Interpretación Proceso mediante el cual una persona que se encuentra en conflicto comprende determinados sucesos y situaciones
Reacción Consecuencia emocional de la interpretación del conflicto
Respuesta Comportamiento real que produce el conflicto, ya sea de tipo violento o no violento
Normas Reglas implícitas o explícitas de un grupo sobre los comportamientos, valores o creencias aceptados
Actitudes Evaluaciones relativamente permanentes, ya sean positivas o negativas, sobre personas, grupos, objetos o ideas
Aptitud Capacidad para hacer algo, lo que incluye operaciones cognitivas internas y capacidades conductuales relacionadas
Autoeficacia Juicio sobre la capacidad personal para comportarse de cierta forma, para interpretar situaciones complejas o para controlar las
reacciones emocionales
Intención Conocimiento sobre cómo se comportará una persona, cómo realizará una operación cognitiva determinada (interpretación), o cómo
experimentará o expresará una emoción en particular

normas, actitudes y habilidades aso- de los ítemes y el coeficiente de confia- Estas transformaciones obligaron a
ciadas con conductas de agresión y bilidad (alfa de Cronbach) de cada es- desarrollar una segunda prueba piloto
de victimización. Se identificaron va- cala. Además de hacer el procesamiento que se realizó en San Salvador, San
riables que intervienen en la relación estadístico de la información recolec- José, Río de Janeiro y Lima. En cada
entre los componentes psicosociales y tada, los investigadores de cada ciudad ciudad se escogieron ocho segmentos
las conductas agresivas o de victimiza- escrutaron los resultados con los entre- censales al azar y en cada uno de ellos
ción, entre ellas, atributos sociodemo- vistadores y, en algunos casos, constitu- se entrevistó a 10 personas, una por
gráficos, condiciones socioeconómicas, yeron grupos focales con expertos. vivienda, utilizando cuotas de sexo y
características familiares, confianza en Con la información de esta primera edad. Al igual que en la primera etapa,
las instituciones, exposición a la televi- aplicación se celebró la segunda reu- se calculó la distribución de frecuen-
sión, embriaguez y tenencia de armas nión en San José, Costa Rica, en la cual cias para los ítemes, el nivel de homo-
de fuego. asesores e investigadores de los países geneidad y la confiabilidad de las esca-
Para garantizar la utilización de un participantes debatieron durante una las. Puesto que el tamaño de la mayoría
cuestionario estandarizado para los di- semana los alcances de los resultados de las escalas se redujo, y con el fin de
ferentes países participantes, así como e introdujeron los cambios necesarios. hacer comparaciones con los resulta-
para evaluar sus ventajas y limitacio- Como resultado de los análisis de la dos obtenidos en la primera etapa, los
nes, se procedió a probar el cuestiona- primera versión del cuestionario se índices de confiabilidad se ajustaron
rio en tres pruebas piloto. Los investi- realizaron cambios sustanciales. Espe- mediante la fórmula de la profecía de
gadores alcanzaron un consenso con cíficamente, se redactaron de nuevo Spearman-Brown (9). En esta segunda
respecto a una primera versión del algunas de las preguntas con el propó- versión, las escalas mostraron una
cuestionario en la reunión que se cele- sito de garantizar un equilibrio entre mejor consistencia interna, a excepción
bró en Houston. Este primer cuestiona- los contenidos de cada escala con res- de las escalas de habilidades y violen-
rio se probó en las siguientes ciudades: pecto a situaciones personales, comu- cia hacia los niños, por lo que en estos
Houston, San Salvador, San José, Cali, nitarias e institucionales, así como dos casos se decidió retornar a la es-
Caracas, Maracaibo, Río de Janeiro, para garantizar mayor coherencia con- tructura original.
Salvador de Bahía, Santiago y Vancou- ceptual. Además, se modificó el orden En una nueva reunión, también cele-
ver. En cada ciudad se entrevistó a un de las secciones, para dejar para el brada en San José, se elaboró una ter-
total de 60 personas. Se seleccionaron final aquellas que se referían a con- cera versión con algunas modificacio-
20 estudiantes universitarios, 20 perso- ductas directas del entrevistado, por nes en cuanto a la estructura de algunas
nas de hogares de clase media o baja, y considerarlas más amenazantes para de las escalas. El tercer cuestionario se
20 pacientes que acudieron a consultas la persona. En función de los análisis puso a disposición de todos los investi-
externas de hospitales públicos. En realizados y del modelo teórico de gadores y se organizó un proceso de
cada uno de estos tres grupos se tra- base, se procedió a reestructurar un análisis y debate por correo electrónico.
bajó con cuotas de edad y sexo. conjunto diferente de escalas, combi- En esta etapa el proceso se centró espe-
Las bases de datos de todas las ciuda- nando muchos ítemes originales con cialmente en el ordenamiento de las es-
des se combinaron en un solo archivo. nuevos elementos redactados por el calas del cuestionario, la conformación
Se calculó la distribución de frecuencias equipo de investigadores. Por último, final de cada sección y la redacción de
de cada pregunta para determinar el se redujo el número de preguntas de la los ítemes, especialmente en lo que res-
nivel de variabilidad logrado. Por aña- mayoría de las escalas a fin de reducir pecta a su corrección gramatical y filo-
didura, para cada una de las escalas se la duración de la administración de los lógica. En cada ciudad se elaboró una
calcularon el grado de homogeneidad cuestionarios. lista de propuestas y sugerencias, que,

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a su vez, se organizaron en una tabla de un niño a su cargo, se escogió sión de conductas violentas de una
resumen, ordenadas por escalas y por aquel que hubiese cumplido años tercera persona y con seis, el grado
preguntas. El resumen fue entonces más recientemente. La escala con de acuerdo o desacuerdo con con-
sometido a la consideración de cada que se evaluaron las conductas ductas violentas específicas.
investigador y, por consenso, se definió agresivas de los padres hacia los 8. Relaciones intergrupales (RI). Para
la versión número cuatro y definitiva hijos estuvo constituida por tres evaluar las tendencias hacia la dis-
del cuestionario. preguntas (gritar con rabia, pegar criminación por clase social, reli-
Los indicadores y la fuente utilizada una palmada, pegar con un objeto gión, grupo étnico e ideas políticas
para elaborar los indicadores, así como duro). Estas preguntas se basaron se formularon cuatro preguntas.
el cuestionario con las preguntas co- en el conflict tactic scale, escala ela- Con una de ellas se evaluó el grado
munes para todos los países, se en- borada por Straus (11). Con una de acuerdo con el derecho a sacar a
cuentran en los apéndices 2 y 3 de esta cuarta pregunta se estimó la fre- ciertos grupos del vecindario.
monografía, respectivamente. La ver- cuencia con que se aplica un mé- 9. Confianza en instituciones (IN). Por
sión definitiva del cuestionario quedó todo de disciplina no violento. medio de siete preguntas se eva-
estructurada en 15 dimensiones, que 3. Violencia entre parejas (PA). Aque- luó el nivel de eficiencia percibido
se describen a continuación. llos entrevistados que vivían en el con respecto a siete diferentes ins-
momento de la entrevista con su tituciones relacionadas con la justi-
1. Atributos personales, socioeconómicos pareja respondieron a tres pregun- cia criminal y los medios de comu-
y familiares (DE). Se incluyeron tas referentes a la frecuencia con nicación. Como base se utilizó la
preguntas relacionadas con las que habían agredido a la pareja y a Encuesta Social General de los
características del entrevistado y tres preguntas sobre la frecuencia Estados Unidos (13).
su familia. En concreto, la estruc- con que fueron víctimas de agre- 10. Actitudes sociales (AS). Las actitu-
tura familiar se estableció conside- sión por la pareja (gritar, pegar des hacia el sistema social y el nivel
rando el número de miembros y su una cachetada, pegar con un ob- de anomia del entrevistado se eva-
posición dentro del núcleo fami- jeto duro). Estas preguntas tam- luaron mediante cinco preguntas,
liar, así como el parentesco con el bién se basaron en la escala elabo- utilizando como base el Latino-
jefe de hogar, el sexo, la edad, el rada por Straus (11). barómetro (14).
nivel educativo y la percepción de 4. Otras conductas violentas hacia per- 11. Aceptación del uso institucional de
ingresos por trabajo de cada uno sonas fuera de la familia (OC). Por la fuerza (RN). Con tres preguntas
de los miembros. Se evaluaron asi- medio de cuatro preguntas, basa- se evaluó el grado de aceptación
mismo el grado de hacinamiento y das en la escala de Straus (11), se o rechazo de medidas guberna-
la asistencia a la escuela de los ni- evaluó la frecuencia con que el en- mentales violentas contra otros
ños menores de 12 años. En cuanto trevistado había agredido a perso- países o contra grupos internos, y
a las características del entrevis- nas fuera del núcleo familiar. si la presencia militar en las calles
tado, se obtuvo información con 5. Normas sociales y culturales (NO). El es necesaria.
respecto a la edad, el estado civil, nivel de aceptación o rechazo de 12. Normas familiares (NF). Las normas
la situación laboral, la nacionali- diferentes normas sociales asocia- familiares y, en concreto, si el cas-
dad, la religión y la raza. En esta das con el uso de la violencia con- tigo corporal se usó contra el en-
sección se incluyeron las siguien- tra la pareja y contra los niños, así trevistado en su infancia se eva-
tes variables conductuales: exposi- como la aceptación de la violencia luaron mediante dos preguntas.
ción a la televisión, gusto por pro- o ilegalidad en la sociedad, se eva- 13. Uso de armas (AR). La utilización
gramas violentos y frecuencia de luaron mediante 12 preguntas, al- de armas de fuego en el hogar y
embriaguez. La pregunta sobre gunas de las cuales se basaron en fuera de este, así como el deseo de
embriaguez se basó en una en- el estudio de Cohen y Nisbett (12). tenerlas, se evaluaron con cuatro
cuesta del Centro para el Control 6. Habilidades (HA). Para evaluar el preguntas.
y la Prevención de Enfermedades grado de autoeficacia que mani- 14. Victimización (VI). Para evaluar
(CDC) de los Estados Unidos de festó poseer el entrevistado para experiencias de victimización o de
América (10). resolver conflictos de forma no violencia del entrevistado, desde
2. Violencia física y castigo corporal de violenta en situaciones específicas robo a mano armada hasta suici-
menores (NI). Se indagó la respon- se emplearon cinco preguntas. dio u homicidio de un familiar, se
sabilidad del entrevistado en el cui- 7. Actitudes de aprobación de la violen- formularon 11 preguntas.
dado de sus hijos o de otros niños. cia (AC). Mediante 11 preguntas se 15. Efectos de la violencia (OP). Por úl-
Si el entrevistado era responsa- evaluó la aprobación de conductas timo, se formularon nueve pre-
ble de niños entre 2 y 15 años, se violentas específicas. Esta dimen- guntas adicionales para evaluar la
evaluó la frecuencia de distintas sión se estructuró en dos partes: sensación de inseguridad y miedo
prácticas disciplinarias y castigos. con cinco preguntas se evaluaron que percibe el entrevistado en
Cuando el entrevistado tenía más el grado de aprobación y compren- su comunidad y el cambio en las

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prácticas cotidianas de vida como proporcional según la situación socio- se siguió un muestreo sistemático de
consecuencia de la violencia. La económica y la densidad de población los renglones de la tabla de miembros
utilización de estas preguntas se y sin reemplazo o sustitución. Este del hogar según el procedimiento esta-
dejó a la discreción de los investi- proceso de selección fue seguido en blecido en el protocolo (8). En otras se
gadores de cada ciudad que parti- todas las ciudades con excepción de seleccionó en cada hogar a una per-
cipó en el estudio. Cali, razón por la cual se realizaron sona entre las edades comprendidas
ajustes en la muestra de esta ciudad. mediante un muestreo aleatorio sim-
En el apéndice 1 de esta publicación se ple. En la ciudad de Río de Janeiro se
Área geográfica de interés, presentan los cuadros donde se re- censó a todas las personas entre los
población del estudio y tamaño sume la información principal del 18 y 70 años residentes en los hogares
de la muestra muestreo seguido en cada ciudad. particulares seleccionados y luego se
Aunque el muestreo varió en algu- procedió a seleccionarlas al azar.
El análisis realizado en el estudio se nas ciudades, en la mayoría de ellas la La muestra final estuvo compuesta
concentró en el fenómeno de la violen- selección se hizo en las siguientes eta- por 10 821 personas. En general, los
cia interpersonal urbana. La población pas. Primero, se seleccionaron las uni- porcentajes de respuesta se encontra-
de interés estuvo comprendida por dades más pequeñas de la división po- ron comprendidos entre los límites es-
hombres y mujeres, nacionales y ex- liticoadministrativa de la ciudad. Para tablecidos salvo algunas excepciones.
tranjeros, que fuesen residentes habi- ello, se definió el número de unidades En San José, Río de Janeiro y Madrid el
tuales en los hogares particulares de las de la división politicoadministrativa tamaño de la muestra final fue ligera-
áreas metropolitanas de las ciudades de la región metropolitana que debe- mente menor del esperado. Se regis-
seleccionadas. En algunas ciudades la rían ser incluidas en la muestra. Se es- traron mayores rechazos en adultos
solicitud de consentimiento e informa- tipuló que el número de unidades no jóvenes varones de los estratos altos,
ción de los padres o tutores de menores podría ser menor de 50% de todas las por lo cual en las muestras se observa
fue un requisito legal. Por tal motivo y unidades. A las dos unidades de ma- una sobrerrepresentación de mujeres
para evitar sesgos en las respuestas, yor población se les asignó siempre con predominio de los estratos medio
se optó por establecer como límite infe- una probabilidad de selección igual a y bajo (cuadro 3). Se decidió no ajustar
rior de edad los 18 años. Por razones 1. Segundo, con los segmentos censales la muestra por sesgo de selección, dado
de acceso y condiciones de salud, se de las unidades seleccionadas se con- que se consideró cuestionable aceptar
acordó fijar el límite superior de la formaron, como mínimo, tres estratos como válido el supuesto implícito de
edad del entrevistado en 70 años, socioeconómicos (bajo, medio y alto). dicho ajuste, es decir, dar por hecho
aunque cabe señalar que en la pobla- Para determinar la clasificación de los que las personas que no contestaron se
ción de interés de la ciudad de Cali se segmentos por estratos, se siguieron comportarían y contestarían igual a las
incluyó a personas desde los 15 años los criterios establecidos por las direc- personas que sí contestaron.
de edad cumplidos, y en la ciudad de ciones de estadísticas y censos. Los cri-
Madrid no se definió un límite supe- terios utilizados por cada país fueron
rior de edad. diferentes y la estratificación a priori Recolección y procesamiento
Los criterios para definir el tamaño no se llevó a cabo en todas las ciu- de datos
de la muestra se establecieron con el dades. En el cuadro 2 se resumen los
objeto de conseguir una confianza en la criterios y técnicas utilizadas en cada La recolección de la información
estimación de proporciones poblacio- ciudad. Tercero, en cada estrato se varió de ciudad en ciudad. Se inició en
nales de 95% o, en otras palabras, de li- seleccionaron aleatoriamente los seg- Cali en julio de 1996 y finalizó en San-
mitar el error de estimación a 5%. Para mentos censales con peso proporcional tiago en marzo de 1997. La duración
realizar este cálculo se aceptó un efecto a la población (proportional population media del trabajo de campo fue de
de diseño igual a 3. El tamaño de selection o PPS). Cuarto, se seleccio- aproximadamente 8 semanas.
muestra necesario fue de 1 200 perso- naron 10% de los hogares con arreglo En todas las ciudades se trabajó con
nas para cada ciudad. Dado que se pre- al número total de viviendas en el seg- entrevistadores capacitados para reali-
vió un diseño sin sustitución, se aceptó mento. De acuerdo con la descripción zar las encuestas a domicilio y para el
como porcentaje de falta de respuesta cartográfica de Estadísticas y Censos, manejo ético y técnico de las entrevis-
el comprendido entre 25 y 35%, sobre se seleccionaron las viviendas me- tas. Cada equipo fue sometido a un
todo en los estratos medios y altos. diante muestreo aleatorio simple o sis- proceso cuidadoso de capacitación,
temático y, preferiblemente, por mues- que incluyó el análisis y el consenso de
treo sistemático. Cada hogar de las los objetivos generales del estudio,
Selección de la muestra viviendas seleccionadas se debía con- una revisión de cada elemento del
tactar. Quinto, se seleccionaron las per- cuestionario y una revisión del pro-
La muestra fue seleccionada me- sonas en el hogar. En esta etapa hubo cedimiento de selección de los entre-
diante un muestreo multietápico, variantes según las ciudades. En algu- vistados en cada hogar. Se preparó
estratificado y por conglomerados, nas (San José, San Salvador, Santiago) además una guía del entrevistador

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CUADRO 2. Marcos muestrales, definición de unidades de selección y criterios de estratificación socioeconómica por ciudad. Proyecto
ACTIVA, 1997

Ciudad Marco Unidad primaria


(Área geográfica) muestral de muestreo Estratificación socioeconómica, criterios y procedimientos

Salvador, Bahía Censo Demográfico de Segmentos censales Renta de los domicilios (estrato alto: más de 50% de los hogares
(Región Metropolitana) Brasil (1991) agrupados en áreas con ingreso > 5 salarios mínimos; estrato bajo: más de 50% de
los hogares con ingreso ≤ 2 salarios mínimos; estrato medio:
mezcla de ingresos altos y bajos)
Cali Cartografía censal del Manzanas Postestratificación a partir del índice de clasificación de la
(Ciudad de Cali) Departamento Nacional Dirección Nacional de Estadísticas (DANE). No definió estratos
de Estadística (1993) para la selección.
Caracas Muestra Maestra de Segmento censal Indicador de Necesidades Básicas Insatisfechas, con
(Área Metropolitana) Viviendas de Venezuela postestratificación
Madrid Censo de Población del Segmento censal Índice del Departamento de Estadísticas del Ayuntamiento de
(Municipalidad de Madrid) Ayuntamiento de Madrid Madrid compuesto por desempleo, ocupación, escolaridad,
(1996) categoría profesional, valor del suelo y vehículos.
Río de Janeiro Censo Demográfico de Segmento censal Renta del jefe del hogar, promedio de años de educación del jefe
(Región Metropolitana) Brasil (1991) de hogar y hacinamiento (estrato alto: renta promedio = 6,1
salarios mínimos; estrato medio: 4,4 salarios mínimos; estrato
bajo: 1,9 salarios mínimos)
San José Censo de Población Segmento censal Regresión multivariante con tenencia de artefactos eléctricos,
(Región Metropolitana) (1984) y proyecciones del ocupación y escolaridad del jefe.
CELADE (1995)
San Salvador V Censo de Población Segmento censal Indicador de Necesidades Básicas Insatisfechas.
(Área Metropolitana) Postestratificación
Santiago Censo de Población y Segmento censal Escolaridad, ocupación, calidad de la vivienda, hacinamiento, y
(Gran Santiago) Vivienda (1992) equipamiento de la vivienda.
Fuente: Informes sobre la muestra de cada ciudad.

que incluía por escrito una descrip- El proceso de recolección tuvo dos Bajo la coordinación de la OPS se hizo
ción detallada del cuestionario, del etapas de supervisión. La primera se un trabajo minucioso de revisión y
procedimiento de selección y de los realizó directamente en el campo, limpieza de la base de datos regional
mecanismos idóneos para abordar la donde personal especializado coor- en el cual participaron todos los inves-
resistencia y el rechazo parcial o total dinó, revisó y orientó el trabajo en el tigadores. Los análisis de los resulta-
(15). Esta guía se utilizó en todas las lugar de la obtención de datos. La se- dos y los datos que se consignan en
ciudades. gunda se llevó a cabo en las respecti- esta publicación se elaboraron a par-
A cada participante se le explicó el vas oficinas, donde cada cuestionario tir de la base de datos compilada
motivo de la encuesta y la forma como completo fue sometido a una revisión ACTIVA (16).
se iban a utilizar los datos. También se rigurosa para garantizar que estuviese
le explicó que la encuesta era anónima, totalmente contestado, que el proceso
que la participación debía ser volunta- de selección hubiese sido adecuado y ALCANCE Y LIMITACIONES
ria, y que podían negarse a responder que las respuestas contaran con la co-
cualquier pregunta o detener la entre- herencia necesaria. Para ambas etapas El proyecto ACTIVA es un estudio
vista en el momento que lo deseara. Se se elaboró una guía escrita destinada a transversal que permitirá establecer
obtuvo el consentimiento verbal de orientar el trabajo de supervisión (15). una línea de base para evaluar futuros
cada entrevistado. Cuando los investi- Sobre la base de un programa esta- proyectos de prevención de la violen-
gadores identificaron situaciones de blecido para tales fines, cada investiga- cia y analizar asociaciones entre las
riesgo, de posible maltrato o de abuso dor construyó su base de datos para conductas violentas y otros tipos de va-
infantil o de otro miembro de la fami- cada ciudad y realizó un análisis de in- riables y dimensiones socioculturales y
lia, se procedió a asesorar a las vícti- congruencias y la correspondiente lim- ambientales. Los métodos empleados
mas sobre mecanismos y opciones de pieza de datos. Posteriormente, todas en este estudio han permitido construir
atención. Además, estas personas fue- las bases de datos se compilaron en diversas escalas e indicadores que po-
ron remitidas a personal profesional una sola base regional con las varia- drán utilizarse en otras investigaciones
especializado. bles comunes a todas las ciudades. en el área. El haber sido probados en

228 Fournier et al. • Estudio Multicéntrico sobre Actitudes y Normas Culturales frente a la Violencia
CUADRO 3. Descripción de la muestra por ciudad. Proyecto ACTIVA, 1997

Salvador, Rio de San San


Bahía, Cali, Caracas, Madrid, Janeiro, José, Salvador, Santiago,
Brasil Colombia Venezuela España Brasil Costa Rica El Salvador Chile
n % n % n % n % n % n % n % n %

Muestra/tasa de respuesta 1 384 76 2 288 85 1 297 82 1 105 63 1 114 64 1 131 86 1 290 81 1 212 86
Sexo
Hombres 633 45,7 1 061 46,4 506 39,0 430 38,9 484 43,4 479 42,4 576 44,7 567 46,8
Mujeres 751 54,3 1 227 53,6 791 61,0 675 61,1 630 56,6 652 57,6 714 55,3 645 53,2
Edad
18–24 311 22,5 516 22,5 281 21,7 221 20,0 202 18,1 227 20,1 268 20,8 247 20,4
25–44 713 51,5 1 205 52,6 642 49,5 479 43,3 523 46,9 492 43,5 646 50,1 602 49,7
45–64 322 23,3 493 21,5 312 24,1 318 28,8 326 29,3 329 29,1 318 24,7 301 24,8
65–70 38 2,7 75 3,3 62 4,8 87 7,9 63 5,7 83 7,3 58 4,5 62 5,1
Estrato social
Alto 113 8,2 221 9,9 30 2,3 219 19,8 161 14,5 154 13,6 163 12,6 168 13,9
Medio 507 36,6 926 41,5 314 24,2 661 59,8 303 27,2 577 51,0 457 35,4 349 28,8
Bajo 764 55,2 1 084 48,6 953 73,5 225 20,4 650 58,3 400 35,4 670 51,9 695 57,3
Escolaridad
Primaria completa o
menos 492 36,2 725 32,2 242 18,7 407 37,1 662 59,7 335 29,6 515 40,4 239 19,7
Secundaria 609 44,8 1 204 53,4 548 42,3 359 32,7 241 21,7 388 34,3 417 32,7 623 51,4
Universitaria o técnica 259 19,0 324 14,4 507 39,1 332 30,2 206 18,6 408 36,1 342 26,8 350 28,9
Estado civil
Soltero 516 37,3 718 31,4 419 32,3 408 37,0 311 27,9 325 28,7 351 27,2 320 26,4
Casado 466 33,7 695 30,4 544 42,0 584 52,9 544 48,8 590 52,2 558 43,3 722 59,6
Unión libre 204 14,8 643 28,1 142 11,0 27 2,4 127 11,4 75 6,6 261 20,2 63 5,2
Separado/divorciado 117 8,5 145 6,3 154 11,9 40 3,6 77 6,9 91 8,0 75 5,8 63 5,2
Viudo 80 5,8 86 3,8 37 2,9 45 4,1 55 4,9 50 4,4 45 3,5 44 3,6
Situación laboral
Ocupado 803 59,9 1 355 59,2 819 63,1 487 46,5 678 61,2 595 52,6 889 69,0 646 53,3
Desocupadoa 159 11,9 205 9,0 117 9,0 156 14,9 95 8,6 45 4,0 69 5,4 66 5,4
Estudiante 79 5,9 87 3,8 66 5,1 133 12,7 32 2,9 95 8,4 66 5,1 126 10,4
Pensionado 134 10,0 61 2,7 0 0,0 98 9,4 93 8,4 113 10,0 58 4,5 71 5,9
Trabajo del hogar 165 12,3 580 25,3 295 22,7 173 16,5 209 18,9 283 25,0 207 16,1 303 25,0
Raza
Blanco 360 26,3 923 40,5 581 44,9 1 020 98,6 587 53,6 815 72,2 263 20,4 746 61,8
Mestizo 51 3,7 920 40,4 453 35,0 5 0,5 56 5,1 164 14,5 826 64,0 361 29,9
Mulato 597 43,6 200 8,8 225 17,4 3 0,3 254 23,2 119 10,5 107 8,3 33 2,7
Negro 273 20,0 185 8,1 25 1,9 4 0,4 120 11,0 10 0,9 46 3,6 8 0,7
Indigena 8 0,6 42 1,8 6 0,5 0 0,0 4 0,4 10 0,9 30 2,3 30 2,5
Asiático 7 0,5 5 0,2 2 0,2 3 0,3 0 0,0 3 0,3 3 0,2 1 0,1
Otro 72 5,3 2 0,1 3 0,2 0 0,0 74 6,8 8 0,7 15 1,2 28 2,3
a Desocupado: Persona que no trabaja y que no ha buscado ocupación.

diferentes países facilita su aplicación tes ciudades, posibilita no solo el estu- res pruebas para el establecimiento de
en otras zonas de América Latina. Se dio individual del fenómeno de la vio- acciones e intervenciones de corto y
consideraron indicadores familiares y lencia en cada ciudad, sino sobre todo mediano plazo.
de los hogares que permitirán introdu- la comparación de los resultados entre Los métodos empleados en el pro-
cir algunas dimensiones del contexto y los diferentes centros urbanos. La va- yecto ACTIVA presentan algunas limi-
superar en parte los análisis de los es- riabilidad de la intensidad con la que taciones. Primero, el estudio permite
tudios tradicionales con datos exclusi- se presenta la violencia en distintas extraer conclusiones sobre las conduc-
vamente individuales. ciudades permite llevar a cabo compa- tas, actitudes y otras variables notifica-
Es importante resaltar los alcances raciones de enorme interés análitico y das por los entrevistados que pueden
análiticos de este estudio. La rigurosi- conceptual. El análisis comparativo no reflejar las prevalencias reales en la
dad en el diseño del instrumento, en la entre ciudades constituye una aporta- población. Las magnitudes y los nive-
obtención de la muestra y en el pro- ción fundamental para entender las di- les de las conductas determinadas me-
ceso de obtención de la información, mensiones actitudinales, conductuales diante la encuesta fueron las notifica-
así como el hecho de que se haya utili- y culturales que prevalecen en los me- das por los entrevistados y, por tanto,
zado un método estándar en diferen- dios urbanos y brinda mayores y mejo- han de considerarse como estimaciones

Rev Panam Salud Publica/Pan Am J Public Health 5(4/5), 1999 229


de parámetros de referencia y no como socioeconómico, edad y sexo. Este pro- ligrosas, puesto que el peso relativo de
prevalencias reales en la población. blema no puede resolverse mediante cada una de las muestras no representa
Aunque se procuró controlar el efecto ajustes estadísticos y es preciso tenerlo las enormes diferencias poblacionales
de la deseabilidad social en las respues- en cuenta al realizar los análisis y ex- entre las ciudades participantes. Es
tas, las características del tema investi- traer las conclusiones. decir, los datos pueden combinarse con
gado hacen suponer que debido a este Tercero, no se pueden generalizar los fines comparativos, pero no con fines
efecto se pudo subestimar la dimensión resultados del proyecto ACTIVA a toda de generalización.
del problema. Segundo, todos los estu- la Región. El estudio no pretende ob- Finalmente, cabe advertir que con el
dios tuvieron diseños muestrales simi- tener una representatividad de toda método propuesto es posible analizar
lares, aunque no se aplicaron en todos América Latina. Las ciudades que inter- la asociación entre las conductas vio-
las mismas fases. Además, la selección vinieron lo hicieron exclusivamente por lentas y diferentes factores de riesgo y
tanto de las unidades intermedias disponibilidad y posibilidades materia- atributos a nivel individual en un mo-
como finales del muestreo se realizó les y, por consiguiente, la muestra re- mento en el tiempo. Sin embargo, este
siguiendo principios probabilísticos. gional ha de considerarse estrictamente diseño tiene limitaciones para estable-
Sin embargo, en la conformación de la intencional. Del mismo modo, el sumar cer relaciones causales y no permite
muestra final se introdujeron sesgos de los datos de las ocho ciudades para es- evaluar el contexto en que la violencia
selección como resultado de la falta de tablecer resultados generales puede se manifiesta y desarrolla en cada si-
respuesta, que fue selectiva por estrato tener consecuencias metodológicas pe- tuación particular.

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230 Fournier et al. • Estudio Multicéntrico sobre Actitudes y Normas Culturales frente a la Violencia
ABSTRACT The purpose of this article is to describe the conceptual bases and methods used in the
ACTIVA multicenter study, as well as the process employed in the different stages of
the research. General information is given on the approach, design, and methods that
Multicenter Study: were applied in the cities that participated in the study: San Salvador, El Salvador;
Cultural Norms and Attitudes San José, Costa Rica; Cali, Colombia; Caracas, Venezuela; Salvador, Bahia, Brazil;
Toward Violence (ACTIVA Rio de Janeiro, Brazil; Santiago, Chile; and Madrid, Spain. The objectives of the study
were to: (1) analyze and compare among cities the prevalence of verbal and physical
project): methodology aggressive behaviors toward children, the spouse or other partner, and persons out-
side the family; and (2) identify personal, environmental, and socioeconomic factors
associated with these violent behaviors. The purpose of the ACTIVA project was to
generate information to help guide violence-prevention policies and programs in the
cities and to provide criteria for decision-making, as well as to obtain baseline data to
use in evaluating prevention policies and programs. To achieve the proposed objec-
tives, a single, common questionnaire was prepared and validated. The questionnaire
was used in face-to-face interviews with residents of private urban homes who were
between 18 and 70 years old. The sample was selected in each city through stratified
multistage sampling of clusters proportionate to the socioeconomic strata of the gen-
eral population and without any substitutions. The final sample consisted of 10 821
people. In general, the response rates were within the established limits. Exceptions
included San José, Rio de Janeiro, and Madrid, where the size of the final sample was
slightly smaller than anticipated. More young men of higher socioeconomic strata de-
clined to participate, so that the samples had an overrepresentation of women from
medium and lower strata. The article concludes with a description of the scope and
limitations of the study, in terms of both the approach and methods. With their com-
parative analyses, studies of this type can contribute to identifying the differences and
similarities between cities. The article shows that with this method it is possible to an-
alyze how violent behaviors are associated with different risk factors and individuals’
characteristics, at a point in time. However, this design is limited in terms of estab-
lishing causal relationships, and it did not allow an evaluation of the context of every
specific instance of violence.

Rev Panam Salud Publica/Pan Am J Public Health 5(4/5), 1999 231

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