Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
METODOLOGÍA
maestreado.
posteriormente pulidas.
111-3 SEPARACIÓN
inferior a estos límites, por lo que los granos de este tamaño no eran —
Fe.
bonatos,fundamenta I mente.
t a l e s como (O, 3-0, 4} y (O, 4- O, 5), con el fin de estudiar las diferencias en
(Ver apart. ¡V- 1-3-10). El estudio óptico real izado se Umita, pues, a -
t a t i v o de minerales mayoritarios.
-c) Los parámetros de las micas asociadas a la clorita, que pudieran ofre
y paragonita.
han realizado con un aparato Phillips PW~ 1 050 utí I izando agregados orteri
Filtro de Ni.
Se han realizado sobre laminas delgadas sin cubrir, en las cuales se habían
tro de forma que los rayos incidieran precisamente sobre la zona seleccí_o
o o
Una exploración entre 58,5 y 62 , recoge las r e f l e x i o n e s 060 de la c l o r i t a ,
INTENSIDADES.
a j u s t a r í a para cada muestra, de forma que los picos aparezcan del máximo
es siempre la mayor.
QK*t,
la ctorita.
I
57
blancas.
mentó en e s t a s determinaciones.
entre los diferentes fi losil icatos en base a un diagrama de AO. Pero como
danle, sino que es el objeto principal del mismo. Por otra parte, el ca—
minar todos los poderes reflectantes sobre el las. Esto permite por otra
parte, utilizar las reflexiones más intensas de los f¡ losil icatos, no sólo -
para determinar sus proporciones entre sí, sino también respecto al res-
como la 4, 45.
ra estas mezclas se han uti I izado una mica y una clorita que presenta-
TABLA HI-1
Cuarzo 4, 26 1
Mica 5, 00 0, 65
Paragoni ta 4, 82 0,6
Cloríta 4,7 0,8
Calcita 3, 03 3
Dolomita 2, 89 3
Feldespatos 3,2-3,4 3
Hemati tes 2,69 2, 25
Anffboles 8,4 3,6
Estos poderes r e f l e c t a n t e s son válidos para muestras, tales como las es-
cri terios:
c) Evitar et uso de reflexiones muy afectadas por las frecuentes sus ti tu—
clones ¡somórficas de los fi losi! ¡catos. Por esta razón, se rechazan las
que todos los minerales presentan una crí stani I idad muy elevada y por tan
to la anchura de (os picos es muy pequeña, al par que muy semejante pa_
llas que daban lugar a errores más bajos respecto a las fórmulas obterví-
d = 14, 52 % - O, 14 Al
001 total
pesados.
i
Los parámetros de las micas b y diferencia angular d Mosc. - d
o 001 001
Paracj. , se u t i l i z a n como medida de las condiciones termodinámicas de for_
MEDIDAS DE RAYOS X.
de Rayos X;
do basal.
tantes se optaba por uno u otro valor de acuerdo con el color de interfe-
rencia de la muestra.
en torno a O, 14.
Fe = O, 14 Fe total
IV VI 3-r
Al = Al -f r-e (Por compensación de cargas)
Al' V + A» = Al total
V!
Mg-fFe-*- A l = 6
Al t o t a l
Al - ——-— - - f o , 07 Fe t o t a l
2
•. Al tota
Al — O, 07 Fe t o t a l
Si- 4 - Al
Mg = 6 - Fe - Al '
del Si.
volumen determinado.
ra Ca y Mg y Cs para Na y Ka.
3+ 2+
El Fe se calculo por diferencia entre Fe total y
del C. S. L C.
65
DO EN ÁTOMOS PESADOS.
nes extremas.
dez de los datos de Albee y permite a su ve¿ aportar otros nuevos que -
los complementan.
rencia. La ta.bla 111-2, recoge estos diez tipos con sus correspondientes
_m£L_i¿
, . . . Signo , Signo,
Tipo Color de interferenci a (2) Foto(s) óptico elom/íicion x i
°x••
.i
er +
1 Amarillo 1 — orden 0, 3 0
2 Gris 1 + 0, 88 0, 1
3 Verde Grisáceo 2 + 1, 16 o,c
4 Verde 3-4 + 1,38 0, !
5 Verde Marrón 5 + 1, 53 o,
6 Marrón Verdoso 6 + 1, 72 0, 1
7 Marrón ' 7-8-9 + 1,90 0,2
e Isótropas 2, 16 0,
9 Violetas 10 •f 2, 32 0, 1
10 Azules 1I + 3, 06 o, ;
color verde, llegando a ser este bastante fuerte para cloritas con altos va_
lores de Fe.
(a) Ib)
íondi j »
pt (dominio
¡I dtbll y//,
771
r ,.*tU
¿./ £¿
/. ¿A./¿
/ / ¿^•>
son frecuentes (as muestras con pleocroismo débil o nulo. Por encima de
corresponde a muestras que por tener poco Fe son casi incoloras y por tan
torno de la región del cambio de signo, donde los tres índices de refracción
como fuertes.
i
El contenido en Fe medio correspondiente a este color de interferencia es -
J a Fig. III-3-a como límite entre pleocroismo fuerte y débil. De esta forma, t
la intensidad del pleocroismo puede servir para matizar algo más los valo
ximo y blanco verdoso (en muestras con signo óptico 4- } o amarillo verdoso
nido en Fe.
SAD QS_.
que aparecen a ángulos más elevados y próximos entre sí. Por o t r a par-
de preparación de muestra.
O t r a fuente de error procede de! uso de coordenadas atómicas únicas,
a 111-7).
tre capas propuestas por Bailey ( 1976), asignando las diferencias entre -
tos espaciados básales utilizados y el considerado por este autor ( 14, 3A)
ca.
Ix
|Fy I V iy
fectameníe v a l i d a e s t a simplificación.
4 -
CLÜRiTA TRJOC7AEDHICA
CLORtTA TRlOCTAEDRlC A
5 6
00* '00>
005'
CLORÍTA TRIOCTAEORÍCA
basal de la c l o r i t a estudiada.
senté estudio.
Mediante la expresión:
ool
= K
00
ool
De todas formas, el método, aun con las mejoras introducidas, tiene aún
2001
100
100
OCT-DI
BftU-TBi
ocr-oí
BftU-TBl
• 14.42 A
"001
C A P I T U L O IV
te y muestra a muestra^de todos los datos obtenidos. Pensamos que tal for_
«ra de presentar los resultados, aparte de ser tediosa, impide una compren
-^ capítulo.
tar nada personal sobre el tema y todos los datos expuestos están toma -
ligación sobre los Mantos Alpujarrides del tercio central de las Cordille-
la 1;50.000: 1054 ( Vfel e z - M & l a 9aj Elorza y G. Dueñas); 1055 (Motril; Avidad
tos e s t á formado por una secuencia más o menos parcial de una serie tipo
formación carbonatada cal ¡ zo-dol omt tí ca, mas o menos me t amor f i zada
pr- :- es más cua reí t i c a , aunque no I leg¿i a presentar cuarci tas propia-
de un numero variable de mantos. Dichos mantos han sido definidos con nom
bres locales en las diversas áreas en que han sido estudiados. l_a fabla
\V~ 1 recoge los mantos definidos en las diversas regiones de los aipujárrj_
sición. Cada f i t a corresponde a cada uno de los cuatro grupos definidos por
Aidaya et al (1981).
i .\h_ii -\- r
A l i u i j -i'-,
I .. I l.'r'i ,..kn-.i
•a. oí'-*»
PcrtaliM
Tr«vuii>|iti? I ct Uf.in
^...Hu tt)irli.ii-.i
Vil.... ...
La correlación entre los mantos de las diversas zonas para constituir estos
pectivas sucesiones, hace válida una regla con escasas salvedades; segün
_j—Cjjar. Sus mantos son los menos metamórfi eos. l_a superficie de corri -
espesor y son las menos recristal izadas de los Alpujárrides. Como puede
Ballabona-Cacharón.
El Grupo G u a da] fe o está constí luido por mantos que se superponen a los
Gorgoracha'
menos.
Ua posición tectónica del Grupo no es del todo claro. Se sitúa casi siem
tos del Grupo Guadaifeo descansan siempre los de Almijara, mientras que
to.
ctusiones se puede encontrar en la hoja 20-41 (La Peza) del Mapa Geoló-
9 co de España E. 1:50.000.
» correspondientes
-
a tres etapas de deformación, D j , D2 , 03 . Durante es_
C lorf tolde
Andalucita
el microplegado de Si crenulada.
Con estas mismas condiciones se alcanza la fase 03, que da lugar a cris_
sión, que cada vez se hace más débil en el curso de D2 hasta sufrir una
brusca caída al final de e s t a fase. Por tanto, son los minerales crista-
entre otros).
nas en los dominios de los mantos que hoy se sitüan en el Grupo Almi-
gran tamaño en las zonas en que se han realizado los muéstreos objeto de
este estudio que pudieran provocar inversiones y/o repeticiones de los ma_
cuarzo paralelos u oblicuos de bajo ángulo a S>2- E' cuarzo puede estar
acompañado por otros minerales tales corno albita, mica blanca, calcita,
metamorfismo de b i o t i t a ) .
roca de caja.
Manió d« Alcóiar.
Uns de Venia de Pabia y Canillas.
Complejo Nevado-F'lóbride
Monto de lo H e r r a d u r a . Monto de Norváez
- Un.d*la Tejido y escama deCalixto'
Manto de Carbonates
Monto d«l Zujerio
Monto dt L0|or
:,.^T<Í'J
<'*»*»Htí'*t
1. 4 > i « . i a ó ii u
...^
¿'mufle Cor
'(OJUGLU oup|p ua uopBLUJOj puní |rj Bisa ap a j u a j s t x a o]uaiiUBJO|.}.e ootun
J ¡a jod sopej!|
se¡ A (696 L ' P ^ e p i v ) e / ^ e P l V ' J JQd ope ¡pnjsa oiuatue} idoie opis eq ajjoo
ns ap ofeqap uod
ap OJUB^ |B
odnuo
A S B J u Jj ap sauopBtujoj t*Z~t-AI
95
¡V-l-2-1-2 Grupo C o n t r a v i e s a
-Murtas (MU). Este corte se extiende en dirección S-N desde las cerca -
IV-1-2-1-3 Grupo A l m i j a r a
dura y Salobreña:
S del pueblo de O t f v a r .
trprnej_a_m_grfj_srnoj
IV-1-2-3 Piloncillos
ESTUDIADAS
Este es pues el ünico valor de tales datos, ya que el carácter del mues-
una mayor riqueza en c l o r i t a , por ser las más apropiadas para nuestro es_
I ¡dad.
nalizadas. Hay que señalar que no se han llevado a cabo análisis químicos
IA
I 1. ."»
-'. n
u, mi
i, '•>*.
1 HM
•'t, .'.'»
n, /<>
0, rts
n. o?
I '- (.. ( I) 5, ftH J, 7J 1, "u
tras estudiadas.
MI' Al • • ¿i Ik-i 1 I
Ca y Mg.
Respecto a la distribución de filos! M e a t o s , hay que señalar que, mientras
Martín Ramos y R. Gal leqo, í ' 976), a partir de datos de Vetde (1967) y