JOB 1:1-22; 2:11-13

Job es el ejemplo que leemos o citamos en momentos de dolor y desproposito en la vida. La

pregunta inmediata que aparece ante este relato es: ¿por qué tienen que sufrir las personas
justas? Uno puede decir “esta bien que sufran lo que hacen mal a otros” pero ¿por qué
tienen que sufrir las personas que han hecho bien en la vida? ¿no es acaso Dios injusto en
ello?

El libro de Job es conocido y referido como ejemplo del sufrimiento personal a diferencia
de un dolor nacional, que quiero decir, que hay sufrimientos nacionales, familiares y
personales. En el día de hoy no enfrentamos a una pena familiar, es decir, la partida de una
hermana que habia hecho bien a la familia.

Lo interesante de esta obra es que Job es un personaje histórico, real y como tal se puede
decir, que lo que él experiento nos servira de ejemplo ante el dolor.

Ahora continuamos con su historia. Después del dolor y sufrimiento de Job en el capitulo1
le visitan sus amigos (2:11-13) después de estar con él, comienzan sus intervenciones.
Los amigos en primera instancia son muy sabios ya que solo se sientan al lado del sufriente
para mostrarles sus condolencias. Tan grande era su dolor que solo le acompañan por siete
dias ya que el dolor de Job era muy grande. Hasta aquí podemos decir que todo andaba
bien, pero el problema empieza cuando los amigos comienzan a hablar.

El primero en tratar de dar una respuesta al sufrimiento y el dolor de Job es:

Elifaz: el es un sabio venerable y devoto, el cual tiene entendimiento penetrante
acompañado de compasión tierna; pero capaz a la vez de ser severo. Argumenta basándose
en la experiencia de sus largos años y los hechos.
Zofar: es más impetuoso, dejándose llevar por los arrebatos juveniles. Es un moralista
dogmático e intolerante de las ideas de Job
Bildad: es una persona sentenciosa, más erudita, conocedora de las tradiciones. Su discurso
es más cortes y su lenguaje más áspero que el de Elifaz.
Los tres amigos defienden la tesis tradicional, de que el padecimiento es la retribución
divina, es decir, Job sufre porque ha hecho algo malo. Tambien inteviene el cuarto amigo:
Eliú: es un joven arameo que procura ser más positivo y original. Desautoriza a Job y a sus
amigos justificando a Dios con una elocuencia difusa. Su alto concepto de sí mismo, se
destaca más que su capacidad intelectual. El libro muestra la equivocaion de los cuatros.

Pero finalmente ¿que es lo que podemos rescatar de esta situación que de una u otra manera
nos toca?. Debemos entender que Dios no se sujeta a nuestra manera de ver las cosas. El
sufrimiento no es exclusivamente señal de la retribución de Dios. Job no podía imaginar
que hubiera algún propósito divino digno detrás de su sufrimiento. La historia de Job
presenta un Dios libre para sorprender, corregir las distorsiones humanas y revisar los libros
escritos sobre él.
Uno se pregunta ¿Quién es Dios para hacer lo que hace?: y cuando hablamos de Dios
podemoss hacernos otra pregunta, pero ¿Quién es Dios? Y es aquí donde podemos hacer las
siguientes afirmaciones, primero Dios no tiene ningún origen, nadie lo creó y en
consecuencia, no es responsable frente a nadie. Además es un Dios autosuficiente, él no es
responsable frente a nosotros, no tiene necesidades y por lo tanto no depende de nadie, es
un Dios eterno y esto indica que podemos confiar que él permanecerá para siempre y por
lo tanto no morirá. Como consecuencia, no lo podemos eludir. Incluso si lo ignoramos
ahora, tendremos que encararlo en el porvenir. Pero no es el Dios relojero que le da cuerda
al reloj y lo deja andando, no, Dios es aquel que se mete en la historia, hace historia y se
mete en nuestras pequeñas o micro historias de vida.

¿Qué más podemos decir?: Que “El reconocer la soberanía de Dios en el sufrimiento
inevitablemente profundizara nuestra adoración y exaltación del Dios vivo y verdadero?
¿PORQUE? Porque si pensamos en un dios cuya voluntad es resistida, cuyos designios son
frustrados, cuyos propósitos son jaqueados, no tiene ningún derecho de llamarse Dios, y en
lugar de ser un objeto digno de nuestra adoración, sólo merece nuestro desprecio, pues no
es capaz de ejercer su soberanía, en cambio, un Dios que verdaderamente gobierna su
universo es un Dios que gozosamente deberíamos buscar, adorar y obedecer.
Tozer hace la misma puntualización. "Si todos los seres humanos de pronto se volvieran
ciegos, el sol seguiría iluminándolos de día y las estrellas de noche, ya que ni el sol ni las
estrellas se deben a los millones que se benefician de su luz. De la misma manera, si todos
los hombres de la tierra se hicieran ateos, esto no lo afectaría a Dios en absoluto. Él es
como es independientemente de toda otra cosa. Creer en él, no agrega nada a su perfección;
dudar de él, no le quita nada"

Entonces que podemos decir en un momento como este sacando la ilustracion del ejemplo
de Job:
Primero: que la estrategia de Satán con Job no era seducir a Job a cometer acciones
pecaminosas, inmoralidad, deshonestidad, violencia, sino tentarlo a cometer el pecado: no
ser leal a Dios.
Reflexión: Que aunque hoy es un momento emotivo, es el día del ultimo adios, hoy es el
día en que el cuerpo de nuestra hermana Gladys sera puesta en el sepulcro, es en este día
que el Señor llama al esposo, a los hijos, a los nietos/as y a toda la familia a mantenerse fiel
a Dios, a seguir creyendo que los pensamientos de Dios hacia nosotros no son de mal sino
de bien.
Las respuestas que podemos rescatar a traves de todo el trago amargo de Job son que 1)Job
presenta un retrato de Dios real, 2) Dios obrará el bien a través del sufrimiento, aun
cuando pueda odiarse cada momento de dolor, 3) Job no sufrió en silencio, expuso su
malestar. Dios invalidó sus quejas, pero no juzgó a Job por ellas y los grandes dichos en
esta historia o en este libro de la Biblia son, 1) Job dijo “Desnudo salí del vientre de mi
madre, y desnudo volveré allá” 2) Jehová dio, y Jehová quitó, sea el nombre de Jehová
bendito.
Invitamos a la familia en este día a seguir confiando en la soberania de Dios. Dios no es un
Dios macabro, sino uno que se duele con el dolor, ¿por qué no nos evita momentos como
estos? Porque pide que confiemos en él y esperemos que un día “Enjugará Dios toda
lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni
dolor; porque las primeras cosas pasaron” mientras esperamos ese día se nos invita a
confiar en ese Dios, se nos invita a seguir siendo leales.