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Condiciones para establecer estándares mínimos que aseguren el correcto

desarrollo del primer semestre académico


Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
Marzo 2020

Introducción:

El presente documento surge a partir de la preocupación compartida por los Centros


de estudiantes que componen la Federación de estudiantes de la PUCV respecto al inicio
del año académico 2020 utilizando la modalidad online, en el contexto de la crisis sanitaria
mundial debido al CODVID-19.
El modelo educativo chileno en todos sus niveles no está preparado para la
modalidad online de enseñanza, tanto por la inexistente preparación de la mayoría docentes
como por la insuficiente cantidad de plataformas virtuales destinadas por cada plantel
educativo para este propósito.
La FEPUCV diseñó un catastro único que buscaba diagnosticar la manera en que se
han llevado a cabo las clases bajo esta modalidad, obteniendo, hasta la fecha, 4812
respuestas. La sensación general respecto a las clases online son de insatisfacción,
principalmente porque no tienen una planificación adecuada, están fuera del alcance de
aquéllos estudiantes de situación vulnerable, no se condicen con la calidad educativa que
debiera proteger y entregar la PUCV, entre otras. El formulario continúa abierto recibiendo
respuestas.
Adicionalmente, el Consejo General de estudiantes diagnosticó las principales áreas
que son necesarias de abordar definiendo, en conjunto con la Vicerrectoría académica, el
plan de acción para poder llevar a cabo el semestre académico a pesar de todas sus
dificultades. La propuesta estudiantil es la siguiente:

1) Semana libre de actividades académicas para generar una correcta


planificación

Entendiendo la contingencia nacional, es que creemos que no hay otra opción que realizar
clases en modalidad online, sin embargo, estas fueron instruidas por la Universidad a los
docentes y estudiantes sin una planificación previa de las mismas unidades académicas, lo
que ha generado problemas tales como:

a) Choque de horarios.
b) Imposibilidad de acceder a las clases porque los profesores no poseen acceso a las
herramientas necesarias para ello.
c) Arbitrariedad en la metodología utilizada para su realización.
d) Gran número de profesores sin capacitación previa en el uso de herramientas online.
e) No existe un catastro por unidad académica para identificar a los estudiantes con
problemas de acceso (sin computador, internet, o ambos).
f) Improvisación de estrategias pedagógicas.
g) Improvisación de actividades para compensar actividades prácticas perdidas.
h) Hay casos donde no se han iniciado la actividad docente, ya que ​no es ​obligatorio
impartir las clases mediante videoconferencia. Hay profesores que solo han
habilitado el aula y suben material, sin ninguna explicación de ello.
i) Calendarios evaluativos improvisados, problema de acceso, entre otros

Estamos convencidos de que todos estos problemas podrían disminuir en el corto


plazo si existiera una concreta articulación y planificación previa de las unidades
académicas, las cuales creemos necesitan el tiempo para evaluar las dos semanas de
clases online que ya se han se han desarrollado para identificar las principales falencias y
discutir estrategias para eliminarlas o disminuirla, acción que no podrán concretar si en
paralelo deben realizar clases. Esta coordinación es esencial e implica la relación directa
entre los centros de estudiantes o representantes de cada carrera con los docentes (jefatura
de docencia) entendiendo que a través de ellos podrá obtenerse la información estudiantil
de primera fuente.

El Consejo no está de acuerdo con que se siga midiendo la efectividad o no de los métodos
con las clases en marcha, ya que perjudica irreparablemente el aprendizaje, obstaculizando
la entrega de conocimiento de las diversas áreas.

2) Flexibilidad y estandarización del régimen evaluativo (de preferencia


diseñado por profesionales de la educación).

El semestre pasado (2° semestre 2020) uno de los problemas más comunes fue el
poco o nulo criterio de parte de algunos docentes a la hora de evaluar. Si bien los casos
eran puntuales también era una situación que se repetía en más del 70% de las carreras de
la PUCV. Por este motivo creemos pertinente ​estandarizar ​la metodología de evaluación y
los criterios de la misma , esto ​adaptado a cada disciplina y área del conocimiento , es
preponderante para los estudiantes de toda la universidad ​claridad , transparencia y
homogeneidad​ en la forma y el criterio a la hora de ser evaluados.
Proponemos la creación inmediata de una mesa de trabajo que busque generar un
Protocolo de evaluaciones que atiendan a la contingencia (y que se adapte al formato
online) evitando perjudicar de esta manera a nuestros compañeros y compañeras y
evitando la reprobación masiva de las asignaturas a razón del descriterio de algunos
docentes.

3) Asistencia libre a las cátedras

Si bien entendemos que el proceso de aprendizaje requiere de la presencia de él y


la estudiante en el aula hoy esa situación ​debe ser flexible debido a los múltiples problemas
que acarrear la modalidad online (imposibilidad de conectarse por mala señal de internet o
por no tener internet, problemas de hardware o ausencia de este, entre otras). Es necesario,
a la vez, que los y las docentes cuenten con un catastro previo de estudiantes que tengan
problemas de conexión a internet y que pudiesen ver interrumpida o impedida su
participación en la actividad.
Consideramos además que, atendiendo a la contingencia no se justifica la
obligatoriedad de asistencia a las asignaturas, ya que es un hecho que las y los estudiantes
podrán tener mayores dificultades en varios ámbitos, ya sea económico, de salud, laborales,
entre otros, siendo lo académico un factor de estrés que podría traer aparejado problemas
en la salud mental de los mismos.
Además proponemos que las clases sean grabadas y subidas a alguna plataforma
web. Este espacio virtual de almacenamiento seguro deberá ser acordada entre los
docentes y estudiantes, pudiendo ser de audio o vídeo, dependiendo de la naturaleza de
cada asignatura para que la ausencia a la clase no suponga un impedimento para el
aprendizaje.

4) Retiro total y parcial sin expresión de causa durante todo el semestre


académico

Esta medida fue adoptada el año 2019 en común acuerdo con la Rectoría debido a
que atravesamos como comunidad universitaria una situación similar a la que hoy nos toca
vivir. Entendiendo que durante este semestre las tasas de reprobación y/o deserción
podrían ser altas debido a que algunos estudiantes no tendrán acceso correcto al material
de estudio, por los problemas técnicos que pudiesen derivar de su conexión a internet, etc
es que solicitamos que se active para todos los estudiantes que deseen solicitarlos los
retiros parciales y totales sin expresión de causa aparte del retiro que la Universidad
considera habitualmente. Este trámite será realizado de manera online por el estudiante que
lo requiera y estará disponible durante todo el semestre académico.

5) Exámenes

En aquellas asignaturas y casos en que los y las estudiantes deban rendir examen
se considerará un período excepcional para las personas que por razones de su conexión a
internet, imposibilidad de acceder a un aparato tecnológico o ambas no pudieran rendirlo en
el periodo que corresponde. Las autoridades de las Unidades académicas deberán cumplir
el rol fundamental de averiguar las razones por las cuales los estudiantes no rindieron las
evaluaciones (entendiendo que si no pudieron rendir el examen debido a las falencias ya
mencionadas tampoco dispondrán de los medios para notificar a los docentes a cargo de la
asignatura de esta situación).

6) Sanciones académicas

Mientras dure la modalidad online de enseñanza en la Universidad NO se aplicarán


sanciones académicas a los y las estudiantes, por lo que ningún estudiante quedará en
condición de eliminación por el hecho de reprobar asignaturas. Las asignaturas reprobadas
durante los semestres online no se contabilizarán en el caso de solicitudes futuras de
terceras o cuartas oportunidades.

7) Becas internas
Las becas de mantención que entrega la PUCV (Beca de Alimentación PUCV, Beca
de Residencia, Beca de Estudios, Beca de Padres y madres) y que son financiadas con
recursos propios se mantendrán durante todo el semestre académico, aunque existiese
interrupción obligatoria de éste a propósito de la pandemia. Este punto tiene por objetivo
que las y los estudiantes más vulnerables puedan mantener el apoyo institucional durante el
año entendiendo la difícil situación que atraviesa la sociedad.

8) Creación de beca transitoria de acceso universal

Durante el último tiempo hemos identificado a estudiantes que no cuentan con los
medios necesarios para poder participar de clases online, por lo que evalúan congelar sus
estudios. No podemos permitir que la desigualdad aleje de la carrera universitaria a
estudiantes sólo por no contar con los medios para igualarse con sus compañeros y
compañeras. Es por esta razón que proponemos la creación de una beca transitoria de
emergencia que facilite las herramientas a aquellos estudiantes que hoy no cuentan con
acceso a las clases online, ya sea porque no cuentan con la conexión a internet o porque no
tienen los medios tecnológicos para hacerlo. Esta beca considerará la entrega en domicilio
de los estudiantes de un chip con internet (compatibles para Android y Iphone) cuya
duración será de 6 meses a partir de la contratación del servicio.
La coordinación en la asignación y entrega de estos chip estará a cargo de la Unidad
de bienestar estudiantil (quienes cuentan con los antecedentes socioeconómicos y datos
personales de los estudiantes) en coordinación con la Federación de estudiantes de la
PUCV (quienes podrían aportar datos que no estuviesen considerados por la Universidad).

9) Rebaja proporcional del arancel

Atendiendo a la disminución de la calidad educativa y de que la Universidad durante


el tiempo que dure la alerta sanitaria incurrirá en considerables ahorros de presupuesto al
no utilizar sus instalaciones físicas para el desarrollo de las actividades académicas,
prácticas y administrativas es que creemos ​indispensable la rebaja proporcional del
arancel de la carrera, ​entendiendo que nos ajustamos al contexto mundial sin desconocer
que vemos afectada gravemente la entrega en la calidad de la educación y que la
inactividad en las instalaciones de la misma disminuirá los costos que generalmente la
Universidad asume para entregar los conocimientos en aula.

De ser rechazada esta opción durante el primer semestre 2020, se aplicará la rebaja
durante el segundo semestre lectivo.

Esta petición no es conjugable con la rebaja de presupuestos para materiales de


trabajo aúlico ni el despido de personal docente a honorarios, ni funcionarios que presten
servicios a la universidad, que el estudiantado considera parte indispensable de la
comunidad universitaria.

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