Esquizofrenia

Es un trastorno mental que generalmente aparece en la adolescencia tardía o en la edad

adulta temprana. Cambia la forma en que una persona piensa y se comporta. Caracterizada
por delirios, alucinaciones y otras dificultades cognitivas, la esquizofrenia a menudo puede ser
una dificultad de por vida.

Antes de profundizar en este interesante tema, me gustaría hablar sobre su historia. Eugen
Bleuler, un psiquiatra y eugenista suizo, introdujo el término "esquizofrenia" al mundo en una
conferencia en Berlín el 24 de abril de 1908. Tenía la intención de describir la separación de la
función entre la personalidad, el pensamiento, la memoria y la percepción. La enfermedad
siempre ha existido solo que se le dio un nombre a principios del siglo XX. Se dice que en el
papiro de Ebers, un tratado médico egipcio de conocimientos herbales que data de alrededor
de 1550 aC, apareció la medicina natural relacionada con la esquizofrenia. Sin embargo, otras
investigaciones no han sugerido ninguna conexión.

Los síntomas se describen en términos de síntomas positivos, negativos y cognitivos. La

mayoría de las personas con esquizofrenia experimentan síntomas tanto positivos como
negativos.

Los síntomas positivos están relacionados con la psicosis, una ruptura con la realidad. Los
pacientes pueden experimentar alucinaciones o delirios, o ambos simultáneamente. Las
alucinaciones son donde alguien ve, oye, huele, prueba o siente cosas que no existen fuera de
su mente. La alucinación más común es escuchar voces. Las alucinaciones son muy reales para
la persona que las experimenta, a pesar de que las personas a su alrededor no pueden
escuchar las voces o experimentar las sensaciones.

Por otro lado, un engaño es una creencia sostenida con completa convicción, a pesar de que se
basa en una visión equivocada, extraña o poco realista. Puede afectar el comportamiento de la
persona. Los delirios pueden comenzar repentinamente o pueden desarrollarse durante
semanas o meses. Las formas comunes de delirios son:

• Delirio persecutorio: es un conjunto de condiciones delirantes en las cuales las personas

afectadas creen que están siendo perseguidas. En la mayoría de los casos, las personas piensan
que el daño está ocurriendo o que va a ocurrir.

• Delirios grandiosos: esta es la creencia de que eres una persona importante, poderosa o
famosa.

• Inserción del pensamiento: si los pensamientos de uno no son propios, sino que pertenecen
a otra persona y se han insertado en la mente.

• Transmisión de pensamiento: es la creencia de que otros pueden escuchar o son conscientes

de los pensamientos de un individuo.

Alguien con esquizofrenia también puede experimentar un lenguaje desorganizado, como

incoherencia, perseveración (la repetición de palabras), descarrilamiento frecuente (tocar
ideas no relacionadas o asociadas libremente) o ensalada de palabras (una mezcla ininteligible
de palabras sin sentido o inventadas). Pueden mostrar un comportamiento desorganizado,
incluido el estupor o la rigidez extrema. Los síntomas negativos incluyen:

• Avolición: es la disminución de la motivación para iniciar y realizar actividades intencionales

autodirigidas.
• Anhedonia: es la incapacidad de experimentar placer.

• Retiro social: falta de interés en estar con otras personas.

• Dificultad para prestar atención.

• Apatía: es la falta de sentimiento, emoción, interés o preocupación por algo.

• Aplanamiento afectivo: ausencia de expresiones emocionales, vocal y lenguaje corporal.

• Alogia: reducción en el habla, se utilizan pocos detalles al comunicarse.

A pesar del impacto de la genética, aproximadamente el 20% del riesgo de la enfermedad

proviene de factores ambientales. Estos factores incluyen, ser criado en una ciudad, ciertas
infecciones, la edad de los padres de una persona, el consumo de cannabis durante la
adolescencia y la mala nutrición durante el embarazo. Factores como la privación de oxígeno,
la infección, el estrés materno prenatal en la madre durante el desarrollo fetal, pueden
provocar un ligero aumento en el riesgo de esquizofrenia más adelante en la vida. Otros
factores que juegan un papel importante incluyen el aislamiento social y la inmigración
relacionados con la adversidad social, la discriminación racial, la disfunción familiar, el
desempleo y las malas condiciones de vivienda.

Un psiquiatra o psicólogo puede diagnosticar esta enfermedad mental. No hay prueba objetiva
o biomarcador para confirmar el diagnóstico. En cambio, un profesional de salud mental
evaluará al paciente y descartará otras condiciones físicas y psicológicas. Una vez
diagnosticado, un plan de tratamiento que incluye medicamentos y psicoterapia. La
esquizofrenia se diagnostica según los criterios del Manual diagnóstico y estadístico de los
trastornos mentales (DSM) publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría o la
Clasificación estadística internacional de enfermedades y problemas de salud relacionados
(ICD) publicada por la Organización Mundial de la Salud. Las personas que sufren esquizofrenia
tienden a tener uno o más trastornos que pueden incluir un trastorno de ansiedad como el
trastorno de pánico, un trastorno obsesivo compulsivo, un trastorno depresivo o un trastorno
por uso de sustancias. Todos ellos deben ser tratados por separado.

La esquizofrenia generalmente se trata con una combinación individual de terapia oral y

medicina. Existen diferentes tipos de psicoterapia:

• Psicoterapia individual: durante las sesiones, un terapeuta o psiquiatra y enseñar a la

persona cómo lidiar con sus pensamientos y comportamientos.

• Terapia cognitiva conductual (TCC). Esto puede ayudar a la persona a cambiar su

pensamiento y comportamiento. Un terapeuta les mostrará formas de lidiar con las voces y las
alucinaciones.

• Terapia de mejora cognitiva (CET). Este tipo de terapia también se llama remediación
cognitiva.

También encontrará diferentes tipos de terapia psicosocial:

• Capacitación en habilidades sociales.

• Rehabilitación.

•Educación familiar.
• Grupos de autoayuda.

• Atención especializada coordinada (CSC): es para personas que experimentan un episodio de

psicosis por primera vez. Es un enfoque de equipo que combina medicamentos y terapias
psicológicas.

Vivir con esquizofrenia puede ser muy exigente, pero cuidar su propia salud también puede
facilitar el tratamiento de su condición y ayudar a reducir la ansiedad, la depresión y la fatiga.
Puede ayudarlo a tener una mejor calidad de vida y a ser más activo e independiente.
Aprender a reconocer los signos de malestar puede ayudarlo a controlar su enfermedad. Los
signos pueden incluir perder el apetito, sentirse ansioso o estresado, o haber alterado el
sueño. Muchas personas con esquizofrenia experimentan períodos de depresión. No ignore
estos síntomas. Si la depresión no se trata, puede empeorar y conducir a pensamientos
suicidas.