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Aptitudes, actitudes y valores de los jóvenes ingenieros

para triunfar en la empresa

La charla fue impartida por Juan Llimona, anteriormente responsable de selección de Dopp.

En su puesto de trabajo, se encargaba de la selección para las empresas de aquellos perfiles que
considere los mejores profesionales para cada uno de los puestos de selección requeridos.

Antiguamente, los puestos de trabajo se anunciaban por prensa. Además, se seguía un proceso
de head hunting, es decir, de búsqueda específica de elementos directivos, los cuales son
perfiles muy demandados y difíciles de encontrar.

Dentro del mercado laboral, se pueden diferenciar distintos organismos o circunstancias en las
que poder desarrollar la carrera laboral:

• Empresa privada
• Administraciones públicas
• Autónomos (trabajo por cuenta ajena)
• Desempleo (situación de no trabajo)
• Extranjero

Como responsable de procesos de selección, uno puede llegar a observar el distinto desempeño
en la carrera laboral de las personas. El por qué ocurre es una de las cuestiones claves para
alcanzar la cima.

Lo primero que debemos tener en cuenta es que nuestro desarrollo vital y profesional lo
gestionamos nosotros mismo, dependiendo de nosotros sobreponerse a las dificultades que
encontremos en nuestro camino.

Alcanzar la cima podría traducirse como triunfar, que a su vez podría decirse que es ser exitoso
o feliz, ¿pero existe alguna diferencia entre ambos conceptos o van ligados?.

Si se tiene éxito (en el marco profesional habitualmente), se puede no llegar a ser feliz, por lo
que además suele ser complicado mantener dicho éxito.

Si se tiene felicidad, el tenerla ya es en sí un éxito, aunque no se encuentre uno en el máximo


desarrollo profesional.

De todas formas, no tiene por qué ser incompatible alcanzar ambos estados, el del éxito y la
felicidad. Además, es necesario enfrentar continuamente ante el espejo ambos conceptos para
no tender a sobrevalorar o minusvalorar cualquiera de ellos.

Uno de los conceptos claves para alcanzar un equilibrio en el desarrollo de uno mismo es
conseguir el equilibrio en tres aspectos fundamentales: los seres queridos (afecto), el trabajo y
uno mismo (salud, etc.). El fallo de uno de esos tres (su pérdida) provoca el colapso.

Para conseguir este equilibrio, empezando por la pata del trabajo, es necesario conjugar
aspectos principales y transversales en el ámbito profesional.

Los aspectos principales están ligados al conocimiento (¿qué sabes?), la aptitud (¿qué aspectos
cognitivos poseo?) y las habilidades (¿qué es lo que sabes hacer?).
Los aspectos transversales están ligados a las actitudes, los intereses y los valores, aspectos
todos ellos cuya necesidad es independiente del puesto de trabajo o a lo que nos dediquemos.

Actualmente, parece que la concepción del éxito se basa en la obtención de logros externos y
materiales y se olvida un estilo de vida equilibrado e integral, reflejado en la siguiente pirámide:

Misticismo

Autodesarrollo

Necesidades Sociales

Necesidades Básicas

Para ser exitoso, es fundamental sentirnos bien y exitoso con nosotros mismos sin necesitar la
aprobación del resto.

Este diagrama también refleja las situaciones que se pueden encontrar en el desarrollo
profesional y vital:

Lo que te gusta y lo
PASIÓN
que se te da bien

Lo que te gusta y lo
que el mundo MISIÓN
necesita

Por lo que te pueden


pagar y lo que se te PROFESIÓN
da bien

Por lo que te pueden


pagar y lo que el VOCACIÓN
mundo necesita

Por último, se muestra un listado de características que son buscadas en los profesionales:

Entusiasmo Polivalencia-Flexibilidad-Adaptabilidad
Iniciativa-Interés Resiliencia
Perseverancia-Superación Motivación-Ilusión
Compromiso-Lealtad-Fidelidad Responsabilidad
Humildad-Docilidad Confianza en uno mismo
Ética-Moral Creatividad-Curiosidad-Innovación

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