Sei sulla pagina 1di 1

El proceso de desarrollo de la lengua materna demora aproximadamente 3,5 años en un niño o

niña en adquirirse. La adquisición de la lengua materna, es el desarrollo de la competencia y


conocimiento lingüístico. La competencia lingüista, es la capacidad que posee el sujeto cognitivo
para comprender y producir secuencias de oraciones bien formadas, en cuanto el conocimiento
lingüístico, es la capacidad de usar la lengua a partir del manejo de los 5 componentes del
lenguaje; los cuales son: fonético, fonológico, morfosintáctico, semántico y pragmático. Además,
con este conocimiento es con el cual representamos nuestro pensamiento en secuencias sonoras
e interactuamos con nuestro entorno de manera oral.

El sujeto cognitivo construye su conocimiento a partir de la relación que establece con el medio
tanto afectivo, cultural, social e histórico. Para un adecuado desarrollo del lenguaje se requiere de
dos componentes que son de gran relevancia; los cuales son: el desarrollo cognitivo y el desarrollo
comunicativo.

El desarrollo cognitivo consiste en comprender y entender oraciones bien formadas, representar el


pensamiento en secuencias fónicas, también crear y distinguir categorías o unidades en cualquiera
de los componentes de la lengua. En cuanto el desarrollo comunicativo, permite influir en el
comportamiento de otros, facilita la interacción, permite el desarrollo de la identidad y también
intercambiar información en la interacción.

Todos los procesos mencionados anteriormente, son relevante para la adquisición de la lengua, los
cuales trabajan de manera simultánea y se requieren de unos a otros para el desarrollo del
lenguaje, siendo de gran importancia para el proceso madurativo del niño o niña en cuanto a su
adquisición de la lengua materna y desarrollo del lenguaje en cada una de las etapas, hasta
aproximadamente 6 o 7 años.

Haciendo referencia a lo anterior, todos los factores influyen y son relevantes en la orientación y
elaboración diagnóstica, ya que la evaluación diagnóstica consiste en analizar las dificultades de
lenguaje que pueda presentar el niño o niña de una manera precoz, para superar el trastorno del
lenguaje que pueda presentar, para someterlo/la a un proceso facilitador y habillitatorio del
desarrollo lingüístico, donde el niño o niña experimente las mismas etapas de la evolución
lingüística normal.

Pero para esto, es necesario establecer y tener en cuenta los procesos e hitos del desarrollo
normales que debe poseer cada niño o niña en cada etapa y edad, para poder identificar en qué
etapa del lenguaje se encuentra el niño o niña, si en la etapa prelingüística, en la etapa holofrásica
o en la etapa lingüística y poder comparar e identificar cuáles son las dificultades que presenta y
en qué área o componente del lenguaje se encuentra descendido o descendida.

Potrebbero piacerti anche