Sei sulla pagina 1di 1

*** km 11/85 págs.

5-6 Cómo hacer frente al desafío de testificar en edificios de apartamentos ***


TESTIFICACIÓN POR MEDIO DEL TELÉFONO
33
Tal vez sea posible obtener los nombres de los residentes de un edificio de apartamentos mediante el directorio
que se halla en el vestíbulo. Luego se puede consultar la guía telefónica para determinar los números de teléfono.
Donde esto no sea posible, por lo general se puede conseguir un directorio en la biblioteca local en el que se
alistan los nombres de los que viven en cada casa y apartamento del municipio. Se pueden copiar los nombres y
luego determinar los números de teléfono mediante la guía telefónica. Una vez que se hayan obtenido los
nombres y los números de teléfono, el superintendente de servicio puede ver que se organicen territorios
telefónicos.
34
Como en toda forma de nuestra testificación, es importante mantener un registro completo y exacto. Antes de
hacer una llamada telefónica, uno ya tiene el nombre, la dirección y el número telefónico de la persona, de manera
que esto se puede apuntar. Deje espacio para hacer anotaciones respecto a las cosas que interesen al amo de
casa, sus antecedentes, también sobre los asuntos que se consideren en la primera llamada y en las
subsiguientes.
35
Haga las llamadas solo a horas razonables. No deje sonar el teléfono continuamente. Con solo unos timbrazos
sería suficiente, puesto que en la mayor parte de los apartamentos la persona no está tan retirada del teléfono.
36
Puesto que la persona que contesta el teléfono no puede vernos, es necesario que hagamos que nuestra
llamada sea lo más personal posible. ¿Cómo? Primero, preséntese diciendo su nombre y apellido, y no solo su
nombre. Se añade mayor dignidad a nuestro mensaje si usamos nuestro nombre completo. Segundo, llame al
amo de casa por nombre con frecuencia durante la conversación. Tercero, asegúrese de que su voz suene
agradable y alegre, aunque siempre digna. Cuarto, hable despacio y articule claramente, más de lo que
acostumbraría normalmente. Quinto, sea breve y mencione la Biblia al principio de la conversación, quizás en las
primeras oraciones. Si el piensa que usted es un vendedor, aclare el asunto enseguida por medio de decir algo
como lo siguiente: “No estamos participando en ninguna campaña para reunir miembros ni tampoco para solicitar
dinero, más bien, nuestro motivo es amor a Dios y a nuestro semejante”.
37
Puesto que no puede ver la reacción en el rostro del amo de casa, trate de aprender a percibir la reacción de él
por el tono de la voz, para que sepa el curso que debe seguir la conversación.
38
Cuando la conversación va llegando a su conclusión, es bueno tener presente una pregunta en la que el amo
de casa pueda pensar, o decir algo que hiciera posible volver a llamar o hacer una visita personal. Por lo general,
la mayor parte de las personas evitan verse en el compromiso de aceptar la visita de un extraño, de manera que
una conclusión semejante a la siguiente parece apropiada: “Ha sido un placer hablar con usted. Usted tiene unos
puntos de vista interesantes con respecto a la vida, y su interés sincero en la Biblia es digno de encomio.
Visitamos a algunos de los vecinos en su edificio, y quizás en alguna ocasión pasemos para ver si usted está en
casa y así conocerle personalmente”.
39
Según su respuesta, podemos ofrecerle literatura y preguntar cuándo sería más conveniente pasar por su casa
con la literatura. O podríamos esperar hasta conocerle en persona.
40
Cuando encuentre a alguien interesado en el mensaje, es mejor conocer al amo de casa en persona después
de la primera o segunda llamada, más bien que hacer repetidas llamadas telefónicas. Esto se logra por medio de
tocar el timbre de su apartamento y decir que desearíamos presentarnos y saludarle. Mientras menos se hable por
el intercomunicador, mejor es.
41
El testificar por medio del teléfono puede dar buenos resultados como lo muestra la siguiente experiencia:
Cierto señor que vivía en un edificio de acceso controlado contestó la llamada telefónica que un
precursor le hizo y dijo: “Quizás esto le suene extraño, pero últimamente he experimentado algunos
problemas en mi vida y justo antes que usted llamara me preguntaba si realmente hay un Dios y si se
interesa siquiera en la humanidad”. Se hizo una cita para visitarle y había buenas probabilidades de que
se estableciera un estudio bíblico.

Potrebbero piacerti anche