Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
En zonas muy frías, se debes procurar plantar el bambú antes de la llegada del otoño,
ya que la planta necesita tiempo para endurecerse antes de que comiencen las heladas.
La mayoría de variedades de bambú prefieren los climas tropicales, pero existen algunas
variedades más resistentes al frío o al calor.
Asegúrate que el sitio donde quieres sembrar bambú reciba al menos 8 horas de sol al
día.
Algunas especies tropicales pueden requerir de sombra durante las altas temperaturas.
El bambú necesita de riegos constantes, pero sus raíces son muy sensibles al agua
estancada.
Además, el bambú es capaz de absorber altas cantidades de agua, por lo que no debe de
ser regada en exceso.
En climas templados y secos, las semillas de bambú y los primeros brotes se deben regar
diariamente.
Cuando el bambú ha madurado, basta con regar una vez a la semana si el clima es
templado, y cada tercer día si el clima es caluroso y con mucho viento.
El bambú se adapta a una gran variedad de suelos, siempre y cuando tengan un buen
drenaje, pues son muy sensibles al agua estancada.
Evita también los suelos pedregosos o pastosos, así como aquellos que son relativamente
impermeables.
Los restos de césped constituyen uno de los mejores mantillos orgánicos para el bambú,
los ayudan a mantener su desarrollo bajo control y pueden protegerlo de amenazas
potenciales. Además, son ricos en nitrógeno y sílice.
2) Las semillas de bambú se tienen que limpiar y dejar secándose al sol por un par de
horas.
3) Coloca las semillas a una profundidad máxima de 3 cm y cúbrelas con una capa
ligera de mantillo y tierra.
Si siembras varios bambúes, asegúrate de dejar una distancia de entre 1 y 1.5 metros entre
cada uno.
4) Mantén el terreno húmedo, evitando que se formen charcos.
Llénalos con una mezcla de 8 partes de tierra superficial, 1 parte de ceniza y 1 parte de
viruta de pino o cascarilla de arroz. Asegúrate que la tierra quede suelta y no contenga
piedras ni grumos.
Recuerda que el bambú tarda tiempo en empezar a crecer, pero cuando lo hace su explosión
es impresionante. Crece realmente rápido. Hay que tener paciencia durante un tiempo.
Al principio, muchas horas de luz puede secar la tierra y es fundamental que el bambú esté
continuamente húmedo.
8) Cuando surjan los primeros brotes, reduce la cantidad de riego a una vez por semana
en climas templados o cada tercer día si el clima es caluroso y con mucho viento.
Si siembras bambú mediante esquejes, lo mejor es que provengan de una planta con menos
de 3 años de edad.
También es recomendable utilizar la parte media alta del tallo, donde aparecen dos nudos
completos y la mitad de un tercero. Hay que comprobar que estos nudos no estén dañados.
9) Aplica un poco de arcilla húmeda en el borde cortado de bambú, pero sin que llegue
a cubrir totalmente el agujero.
10) Inmediatamente deberás plantarlo de forma vertical, dejando el entrenudo fuera de la tierra.
11) Si has sembrado en semillero, el bambú estará listo para trasplantarse a los 4
meses, cuando alcancen entre 40 y 60 cm de altura.
12) Ten en cuenta que la mayoría de especies de bambú requieren de tiempo para
fortalecer su sistema radicular y su tallo, por eso debemos esperar tanto tiempo.
Si trasplantas en tierra, procura dejar una distancia de 1 a 1.5 metros entre cada bambú.
13) El agujero a donde trasplantes el bambú debe tener aproximadamente el doble de
ancho de la masa de la raíz del bambú.
Recuerda hidratar bien la tierra y abonarla con materia orgánica a la hora de transplantar.
El sistema de raíces del bambú es superficial, además de que crece muy alto y muy
rápidamente.
Como consecuencia, se puede dañar fácilmente por vientos fuertes. Necesitarás una barrera
para evitar que esto suceda.
La manera más sencilla de protegerlo es ubicándolo justo detrás de los árboles de tu jardín.
Probablemente necesites cortarlo para evitar que las cañas se aglomeren y corten el
suministro de nutrientes.
Retira las ramas viejas y maltratadas del bambú una vez al año. Realiza el corte justo sobre
el nódulo, para que pueda crecer de nuevo.
16) Procura nunca retirar las hojas que están más cerca de la raíz, ya que estas ayudan a
mantenerlas protegidas y húmedas y son esenciales para reponer los nutrientes del suelo que
ayudan a promover el desarrollo.
El bambú es resistente a la mayoría de plagas y enfermedades, así que solo necesitas aplicar
un pesticida o fungicida si se desarrolla algún problema.