Devora Vanesa Gorostegui

Licenciatura en Orientación Familiar

Materia: Derecho de Familia

Docente: Lorena Bolzon
Alumna: Devora Vanesa Gorostegui
Fecha de entrega: Periodo recuperatorio antes del 15/02/2020

El divorcio

Cuando fundamos una familia lo hacemos con el deseo de que esta sea
para siempre. Esto le sucedió a Carla y Andrés, ellos comenzaron a soñar con
tener una casa, hijos y un proyecto de vida juntos. Desde el amor han decidido
casarse y comenzaron con los preparativos para festejar su nueva aventura. Es
ese día en el que se unen las familias de Carla y Andrés y forman un gran
equipo donde solo quieren la felicidad de ambos. En este hermoso camino que
han decidido tomar, las buenas noticias empezaron a llegar. Luego de algunos
años tuvieron dos hijos; Martha y Juan. Se mudaron, lograron asentarse
laboralmente y formar una hermosa familia. Después de un tiempo comenzaron
las disputas y no todo fue armonía. La comunicación era escasa y ya no había
un proyecto que los una, sus deseos no coincidían y todo cambió. La
comunicación era escasa y Carla y Andrés comenzaron a distanciarse, no solo
entre ellos sino que el conflicto también se expandió hacia los padres de ellos
ya que cada uno tomó partido por sus respectivos hijos. Sus niños comenzaron
a sentir el distanciamiento de sus padres y Andrés tomó la decisión de
separarse.
 Devora Vanesa Gorostegui

Esta misma historia podría haber tenido un final distinto dependiendo en

la época en la que se origine, ya que las leyes han cambiado y eso nos ha
permitido avanzar.
En 1968 se dicta la ley 17.711 que reformo el código civil, donde se
incorporó el artículo 67 bis por el cual se introdujo el proceso de divorcio no
vincular por mutuo consentimiento o por presentación conjunta. i
En el año 1984 comenzó a tratarse una ley que sería popularmente
denominada y reconocida como la “Ley de Divorcio” que fue sancionada en
1987. Esa ley fue la 23.515.1 En esta ley se incluyó la posibilidad de
divorciarse, es decir, separarse disolviendo el vínculo matrimonial existente.
Esta ley fue un gran avance pero también perjudico las relaciones familiares ya
que, además de necesitar al menos 3 años de casados, los cónyuges tenían
que buscar una razón para poder pedir el divorcio. Esa razón podía ser
adulterio, abandono del hogar, injurias, entre otras. Todas estas causas
hicieron que la separación sea dolorosa y alimentara el conflicto entre los
cónyuges, ya que la necesidad de buscar en el otro alguna causa de
separación hizo que las relaciones terminen de romperse perjudicando a la
familia.
Si Carla y Andrés hubiesen decidido separarse en esta época su
relación seria una relación llena de conflictos, donde lo importante no es
divorciarse sino ganar una batalla. Todo es disputa y el fin es encontrar en el
otro el error para tener una razón concreta para divorciarse. Por otro lado,
Andrés no hubiese podido hacerlo sin el consentimiento de Carla ya que si una
de las dos partes no quiere separarse no se lleva a cabo el divorcio.
A partir de la nueva ley que se sancionó el 1 de agosto del 2015, el
divorcio se hizo más amigable, menos cruento y salvaje haciendo que las
relaciones mejoren. Es muy difícil la instancia de divorcio teniendo en cuenta
que los cónyuges tuvieron un proyecto en común y fundante en donde este
proyecto desaparece, por lo tanto es muy positivo este cambio de ley ya que de
esta forma, la ruptura jurídica se hace menos dolorosa y traumática.
En la actualidad no necesitamos causales de divorcio, tampoco es
necesario que el matrimonio tenga al menos tres años de antigüedad y solo
con que una de las partes quiera separarse ya se hará efectivo, con la
condición de que este pedido se acompañe con una propuesta que indique la
distribución de bienes, el cuidado personal de los hijos, el régimen de
comunicación, la cuota alimentaria, la situación con la vivienda familiar, etc.
Más allá de que la pareja se separe, ambos siguen siendo padres y es
importante que en esta nueva etapa se pueda vivir en armonía y que la
comunicación pueda ser fluida, para que no exista un desgaste en el proceso
judicial. En este proceso veo muy beneficioso que la justicia esté presente en
esta nueva etapa, acompañando a los cónyuges a resolver su separación y a
ordenar su futuro sin que tenga que existir un conflicto como causa, sino que
sea una decisión en donde se respete la integridad de ambos y también la de
los hijos en el caso de que existiesen.
Esta integridad es respetada a partir de salvaguardar la intimidad de
las personas, todos poseemos derechos a tener nuestra intimidad y no ser
objeto de interferencias arbitrarias de nuestra vida privada; a diferencia de la
antigua ley en donde cada uno contaba y mostraba intimidades de la otra parte,

1
Unidad 4, Fin del matrimonio y disolución de la comunidad de bienes.
 Devora Vanesa Gorostegui

es decir, de la familia y de las relaciones. Esta situación generaba más

discordia y humillación.
En este caso imagino una situación distinta en donde se puede tomar
una decisión unilateralmente, por lo tanto Andrés no necesitaría que Carla esté
de acuerdo. Tampoco hace falta buscar un motivo de divorcio, es ahí donde
cada uno muestra sus miserias y genera más discordia a la relación, esa
relación que hoy puede terminar pacíficamente sin necesidad de buscar en el
otro algún motivo para llevar a cabo el divorcio. Esto ayuda a que la familia
pueda llegar a esta instancia, igualmente dolorosa, pacíficamente sin
necesidad de poner a nadie de un lado o del otro. Sin necesidad de buscar
culpables sino buscar la mejor forma de llegar a un acuerdo pensando en
aquellas personas que alguna vez han decidido fundar una familia desde el
amor, pensando en aquellas personas que han tenido hijos y que quieren lo
mejor para ellos. El divorcio no tiene que sacar lo peor de Andrés y Carla, sino
que tiene que mostrar lo mejor de cada uno de ellos y desde el amor que
alguna vez tuvieron, llegar a un acuerdo. Esta reforma de ley ha logrado un
gran cambio y nos permite crecer como personas y pensar que no todo debe
terminar en un conflicto sino que se puede llegar a una resolución sin lastimar a
nadie ni ser lastimado emocionalmente.

Bibliografía:

- Unidad 4, Fin del matrimonio y disolución de la comunidad de bienes.

- Disolución del matrimonio
- El divorcio sin expresión de causa y los deberes y derechos
matrimoniales del nuevo código. Kemelmajer.
- El código civil y comercial y daño moral con motivo del divorcio
vincular.
i
Unidad 4, Fin del matrimonio y disolución de la comunidad de bienes.