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Informal
María Eugenia Villamizar – Medición del sector informal
DANE
El término sector informal fue acuñado por primera vez por la OIT en 1972 en su misión
a Kenya; para describir una serie de empleos intensivos en mano de obra, baja
productividad y reducidos niveles de ingresos.
Lo cual se suponía era un fenómeno temporal que desaparecería tan pronto se alcanzaran
mayores niveles de desarrollo económico. Contrario a estas predicciones, las actividades
informales continuaron creciendo a un ritmo tan acelerado; que la mayor parte de la
ocupación en muchos de los países denominados en “vía de desarrollo” la generó este
sector.
La importancia del tema y el interés de los países por conocer el tamaño, las
características, interrelaciones y dinámicas de lo informal; ha llevado a varios intentos de
clasificaciones que permitan no sólo su medición sino su comparación.
Por ejemplo, las clasificaciones propuestas por el Programa Regional de Empleo para
América Latina y el Caribe – PREALC – y el avance técnico y metodológico; que
introdujo la Decimoquinta Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo de 1993
(CIET-93).
El tamaño de la empresa.
Servicio doméstico.
Ésta es una categoría importante para muchos países que, ha venido cambiando de
modalidad a medida que ha avanzado el proceso de urbanización. De empleadas
domésticas internas en un solo hogar se ha pasado a la modalidad del trabajo por días en
uno o varios hogares, lo que las asemeja más a trabajadoras por cuenta propia y en la
práctica causa confusión en su clasificación.
La definición de sector informal adoptada por la CIET-93; estuvo enmarcada bajo los
criterios del Sistema de Cuentas Nacionales desarrollado por la Naciones Unidas en 1993
-SCN-93, con el fin de:
2. Facilitar la comparación de las estadísticas del sector informal con otras estadísticas
sociales y promover la integración estadística.
Bajo estos términos la CIET-93 adoptó una definición general y una definición operativa
que facilitara la medición de este sector.
De acuerdo con esto, la población ocupada en el sector informal se definió como todas
las personas que durante el periodo de referencia estaban empleadas en una unidad de
producción con ciertas características, independientemente de su posición ocupacional
dentro de ella.
Bajo este marco existe diferencia entre personas ocupadas en la informalidad a las
personas empleadas bajo condiciones informales de empleo, las cuales se pueden dar
independientemente del sector.
Las preguntas adicionales incluidas para la caracterización del empleo fueron concebidas
bajo el criterio de sector informal de PREALC y hacen referencia al tamaño de la
empresa, antigüedad en el empleo, sitio donde se realiza el trabajo, días trabajados a la
semana, afiliación a la seguridad social y algunas características del trabajo
inmediatamente anterior.
Esta prueba hizo parte del Proyecto Interregional sobre el Sector Informal Urbano –
INTERSIU -, adelantado con la cooperación técnica de la OIT en tres países del mundo:
Manila (Filipinas), Dar es Salam (Tanzania) y Bogotá (Colombia).
Esta encuesta se realizó en dos fases: la primera, con el fin de identificar las personas
potencialmente pertenecientes al sector informal, para lo cual, por oportunidad y costo,
se aplicó un módulo en la Encuesta de Fuerza de Trabajo de diciembre de 1994.
La gran ventaja de este método consiste en poder captar todas las unidades informales,
incluyendo aquellas que se desarrollan al interior de la vivienda (segmento no visible del
sector informal) o las actividades móviles que se realizan en vehículos, kioscos, o
distribución puerta a puerta.
A las unidades de producción consideradas como potencialmente informales se les filtró de acuerdo
con dos criterios: la naturaleza jurídica del negocio y el tipo de contabilidad.
Esta definición permite diferenciar los negocios informales de las unidades productivas
denominadas “microempresas”, puesto que una unidad pequeña no necesariamente es
informal, y viceversa.
Esta metodología aplicada en algunos países de África, consiste en una extensión de las
encuestas mixtas a tres fases:
Primera Fase
En esta primera fase de la medición del sector informal, realizada a hogares con el fin de
identificar unidades de producción o empresas de los hogares no fácilmente identificable;
por otros medios para conformar el directorio.
Segunda Fase
Tercera Fase
En esta medición del sector informal, se vuelve a los hogares con el fin de establecer el
valor del consumo y las razones de compra en los sectores informal y formal.
A todos ellos se les aplicó una encuesta a profundidad para obtener información detallada
de las unidades de producción; y de los trabajadores que tenían vinculados. Esta
información permitió su clasificación entre formales e informales.
La ventaja indudable de esta metodología para la medición del sector informal, es que
permite tener información sobre todo el universo del sector de pequeñas empresas.