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FRANCOANGELI
Il volume è stato pubblicato con un contributo del Dipartimento di Scienze Storico-So-
ciali, Filosofiche e della Formazione dell’Università degli Studi di Siena.
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Lavori in corso
6
Al servicio del rey. Reclutamiento y transporte de
soldados italianos a España para luchar en la
Guerra contra Portugal (1640-1668)
Antonio José Rodríguez Hernández∗
∗
UNED, Madrid. Abreviaturas utilizadas: AGS=Archivo General de Simancas,
GA=Guerra Antigua, E=Estado, CMC=Contaduría Mayor de Cuentas, SP=Secretarias Provin-
ciales, AHN=Archivo Histórico Nacional (Madrid), BN=Biblioteca Nacional (Madrid),
Leg.=Legajo, Ms.=Manuscrito.
1
A. J. Rodríguez Hernández y P. Rodríguez Rebollo, Entre la guerra y la paz: La Guerra
de Restauración portuguesa en Extremadura y las negociaciones de paz con Portugal (1640-
1668), en Iberismo. Las relaciones entre España y Portugal. Historia y tiempo actual, Llerena,
2007, pp. 141-154.
229
Antonio José Rodríguez Hernández
2
G. Parker, El ejército de Flandes y el Camino Español 1567-1659, Madrid, 1991, pp. 66-
67. (primera edición en inglés en 1972, con el título: The Army of Flanders and the Spanish
Road, 1567-1659: The logistics of Spanish Victory and Defeat in the Low Countries Wars,
Cambridge, 1972).
3
Una buena reflexión sobre el tema la podemos ver en: L. Ribot, Las Naciones en el Ejér-
cito de los Austrias, en A. Álvarez-Ossorio y B. García García (eds.), La Monarquía de las Na-
ciones. Patria, nación y naturaleza en la Monarquía de España, Madrid, 2004, pp. 653-677.
4
El Consejo de Estado decía de españoles e italianos en 1648: «pues son estas dos naciones
los fundamentos de aquel exercito (de Flandes)». AGS, E, Flandes Leg. 2.068. El Conde de
Fuensaldaña decía en 1654: «españoles y italianos es la fuerza deste exercito para dentro y fue-
ra del país». Carta del Conde de Fuensaldaña, Bruselas, 26 de enero 1654. AGS, E, Flandes
Leg. 2.083.
5
Según Parker, los primeros italianos llegaron a Flandes hacia 1580: Parker, El ejército de
Flandes y el Camino Español, cit., Apéndices A y C, pp. 321-322 y 328-329.
6
Para saber más sobre el reclutamiento de italianos para Flandes ver: A.J. Rodríguez
Hernández, España, Flandes y la Guerra de Devolución (1667-1668). Guerra, reclutamiento y
movilización para el mantenimiento de los Países Bajos españoles, Madrid, 2007, especialmen-
te pp. 138-144, y también: D. Maffi, Cacciatori di Gloria. La presenza degli italiani
nell’esercito di Fiandre (1621-1700), en «Guerra e pace in età moderna. Annali di storia milita-
re europea», 1 (2008), pp. 73-104.
230
Al servicio del rey
7
A. Espino López, Las tropas italianas en la defensa de Cataluña, 1665-1698, en «Investi-
gaciones Históricas», 18 (1998), pp. 51-74.
8
L. White, War and government in a Castilian province: Extremadura 1640-1668, Tesis docto-
ral inédita de la Universidad de East Anglia, 1985, tabla 8.2, pp. 495-497.
9
S. Estébanez Calderón, De la conquista y pérdida de Portugal, volumen I, Madrid, 1885.
Reedición en: S. Estébanez Calderón, Obras completas, volumen II, Madrid, 1955, Apéndice E,
pp. 84-86.
10
Plano del Reencuentro de Montijo, original realizado hacia 1655. R. Sánchez Rubio, I.
Testón Núñez y C. M. Sánchez Rubio, Imágenes de un Imperio Perdido. El atlas del Marqués de
Heliche, Badajoz, 2004.
11
White, War and government, cit., tabla 8.2, pp. 495-497.
12
Carta del Consejo de Guerra al Marqués de Leganés, Gobernador del ejército de Extre-
madura, 19 de diciembre 1649. AGS, GA, Libro Registro 216 f. 19. Relación de lo que se pue-
de reformar en la frontera de Extremadura, 1649. AGS, GA, Leg. 1.717.
13
Muestra del ejército de Extremadura, mayo 1654. AGS, GA, Leg. 1.911.
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Antonio José Rodríguez Hernández
14
Carta del Consejo de Guerra al Duque de San Germán, 23 de noviembre 1655. AGS, GA,
Libro 250 f. 103v.
15
Muestra del ejército de Extremadura, julio 1655. AGS, GA, Leg. 1.896.
16
Consulta del Consejo de Estado, 22 de febrero 1660. Consulta de la Junta de Estado, 8 de
marzo 1660. AGS, E, Leg. 3.378.
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Al servicio del rey
ban parte de los costes del mismo17. Sin riesgos aparentes en el horizonte, y
con la necesidad de formar prácticamente de la nada un ejército en la frontera
portuguesa profesional, eficiente y de naciones, el ejército de Milán debía ser
reducido hasta los 4.000 infantes y 2.000 caballos, a parte de las guarniciones
de los castillos. Dentro de la infantería, los que debían quedarse en Lombardía
eran las tropas más fiables y las que en aquellas latitudes eran más difíciles de
conseguir: fundamentalmente los españoles. Éstos se verían acompañados por
2.000 plazas de caballería, de alta calidad y veterana, tanto de la caballería del
Estado, como de efectivos alemanes, napolitanos y borgoñones que formaban
parte de las unidades montadas del ejército18. El reajuste hacia esta cifra fue
rápido. De febrero de 1660 a mayo las bajas de las tropas no fueron cubier-
tas19, y en septiembre se embarcaron los primeros hombres para España, tres
Tercios de infantería lombarda junto con otros tres regimientos alemanes, y un
pequeño grupo de españoles, todos ellos veteranos fogueados durante los úl-
timos y duros años del conflicto20. Los primeros en partir desde el puerto de
Finale fueron los Tercios de Francesco Gattinara (Marqués de Sartirana), Jo-
seph Fossan (Giuseppe Fossani) y Antonio Trotto, que contaban con 2.139
plazas de infantería lombarda, transportados a España en las galeras de las
escuadras de Génova, Nápoles y Sicilia, y en navíos particulares fletados para
la ocasión21. El transporte fue algo accidentado, y cerca de Cádiz dos de los
galeones, en los que venía embarcada parte de la infantería, se hundieron al
llegar a la bahía un recio temporal. De las 3.700 plazas que más o menos se
17
D. Maffi, La Cittadella in Armi. Esercito, società e finanza nella Lombardia di Carlo II
1660-1700, Milán, 2010, pp. 17 y ss.; L. Ribot García, Milán, Plaza de Armas de la Monar-
quía, en «Investigaciones Históricas», 10 (1990), pp. 221-223.
18
Consulta del Consejo de Estado, 22 de febrero 1660. Junta de Estado, 8 de marzo 1660.
AGS, E, Milán Leg. 3.377 f. 5 y 19. Copia de la carta de su majestad para el Conde de Fuensal-
daña, Madrid, 27 de marzo 1660. AGS, E, Milán Leg. 3.378 f. 262. Al final esto terminó ocur-
riendo, y ya en el verano de 1661 el ejército quedó reducido a 3.322 infantes y 2.019 caballos.
Muestras del ejército de junio y julio 1661. Carta del Duque de Sermoneta, Milán, 6 de mayo
1661. AGS, E, Milán Leg. 3.378 f. 245-246 y 88. De hecho el Duque de Sermoneta, apoyando
esta medida de dejar prácticamente sólo infantería española, decía: «Que los lombardos en
tiempo de paz solo sirven para destruir el país, sólo de españoles y napolitanos se puede fiar».
19
Resumen de la muestra que se tomó a la infantería y caballería en 24 de febrero 1660.
AGS, E, Milán Leg. 3.377 f. 19. También sobre la reducción de los efectivos del ejército de
Milán: Maffi, La Cittadella in Armi., cit., pp. 46-47.
20
Sobre la guerra en el milanesado durante la década precedente: D. Maffi, Il Baluardo del-
la Corona. Guerre, esercito, finanze e societá nella Lombardia seicentesca (1630-1660), Flo-
rencia, 2007.
21
Relación de los oficiales y soldados de los infrascritos seis Tercios y regimientos que pa-
san a servir a España, 17 de agosto 1660. Relación de la muestra que se ha pasado en el hospital
de la Marina, 11 de septiembre 1660. Mapa para la embarcación de la infantería, 10 de sep-
tiembre 1660. AGS, E, Leg. 3.377.
233
Antonio José Rodríguez Hernández
juzgaba que traían la expedición sólo se había pasado muestra a 2.978, por lo
que se juzgaba que cerca de 700 hombres habían perecido ahogados, aunque
en este caso la peor parte se la llevaron los alemanes22. Para que los hombres
descansasen, se determinó que las tropas se acuartelasen en Andalucía durante
todo el invierno, para que al comienzo de la campaña siguiente pudieran pasar
a Extremadura a luchar contra los portugueses23.
La desmovilización del ejército de Milán continuó durante 1661, hasta el pun-
to de que su infantería quedó reducida a las unidades españolas y otros pequeños
contingentes de soldados irlandeses y borgoñones, mientras que su caballería
quedó en la mitad que dos años antes. La expedición naval de mayo de ese año
llevó a España desde el puerto de Finale otros dos Tercios de infantería napolitana
de aquel ejército, los del Marqués de Torrecuso y Carlos Tuffo, con unas 1.508
plazas, además de otros dos regimientos alemanes, 1.351 plazas de caballería sin
un pie – organización – de nación fija, siendo fundamentalmente italianos, alema-
nes, borgoñones y españoles, algo que concuerda con los orígenes de los apellidos
de los capitanes24, y 71 especialistas para la artillería, de varias nacionalidades, la
mayoría de origen italiano. En total se embarcaban 4.244 personas – 2.449 de in-
fantería y 1.317 de caballería, 71 de artillería y 407 entre mujeres y niños –, aun-
que desconocemos el origen nacional de las familias25. Todos fueron embarcados
en 6 navíos 2 polancas y 1 saetía, además de en 6 galeras que conducía el Duque
de Tursis. Los navíos llegaron a Cádiz el 19 de junio, mientras que las galeras lo
hicieron al día siguiente. Aunque algunos hombres debieron desembarcar, la
mayoría de las tropas pasaron a Sevilla por el río el día 25 de junio en los mismos
22
Consulta del Consejo de Guerra, 29 de noviembre 1660. AGS, GA, Leg. 1.956. Minuta
del Consejo de Estado al gobernador de Milán, Madrid, 5 de diciembre 1660. AGS, E, Milán,
Leg. 3.461 f. 173.
23
Carta del Consejo de Guerra al Duque de San Germán, Capitán General del ejército de
Extremadura, Madrid, 27 de mayo 1660. AGS, GA, Libro 268 f. 79. Consulta del Consejo de
Guerra, 18 de febrero 1661. AGS, GA, Leg. 1.996.
24
Sobre la complicada reforma de la caballería: AGS, E, Leg. 3.378 f. 260, 272, 278-282 y
284. Finalmente los desmontados pasaron a España organizados en 5 compañías de las del
Estado, 4 de las de Nápoles, 3 de borgoñones y 4 sacadas de los regimientos alemanes reforma-
dos: Relación del número de los soldados en que quedan los infrascritas compañías de caballos
que pasan a España según la muestra que se les ha pasado en 12 de julio 1660. AGS, E, Leg.
3.378 f. 286.
25
Consulta del Consejo de Estado, 19 de julio 1661. Relación de los oficiales y soldados
que están alojados para pasar a España, 28 de abril 1661. Relación de los oficiales y soldados
que se han presentado en la muestra tomada en el Finale, 10 de mayo 1661. Relación de la
muestra que se ha tomado a la gente que pasa a España, mayo 1661. Relación de los víveres,
bastimentos, municiones que se han embarcado, 12 de mayo 1661. AGS, E, Leg. 3.378. Rela-
ción de los oficiales y demás gente que en virtud de orden del Duque de Sermoneta van a servir
a España, 30 de junio 1660. AGS, SP Leg. 1.862 f. 242. Carta del Consejo de Guerra al Duque
de Medinaceli, 25 de mayo 1661. AGS, GA, Libro 268 f. 190v.
234
Al servicio del rey
26
Relación de los oficiales de primera plana y soldados que han pasado muestra en 23 junio
de 1661 en el sitio de Bonanza a bordo de las embarcaciones que pasan a Sevilla, Cádiz, 30 de ju-
nio 1661. Consulta del Consejo de Guerra, 13 de julio 1661. AGS, GA, Leg. 1.980. Relación de la
gente que ha venido de Milán a servir a Extremadura en la artillería del ejército, 27 de julio 1661.
AGS, GA, Leg. 1.998. Gaceta nueva (Impresa), nº7, hasta mediado el mes de mayo de 1661. Ga-
ceta nueva, nº8, hasta 25 de junio de 1661. Biblioteca Nacional, Madrid, MS. 2.388 f. 169 y 173-
175.
27
Carta de don Juan de Austria, Arronches, 19 de julio 1661. Certificación de la gente que
tiene el Tercio del Marqués de Torrecuso, hecha por su Sargento Mayor, Alburquerque, julio
1661, en italiano. AGS, GA, Leg. 1.980.
28
Carta del Conde de Peñaranda, Nápoles, 14 de octubre 1659. AGS, E, Nápoles, Leg.
3.283 f. 10.
29
Consultas del Consejo de Estado, 28 y 29 de enero 1660. Carta del Conde de Peñaranda,
Nápoles, 14 de diciembre 1659. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.283 f. 63, 64 y 65.
235
Antonio José Rodríguez Hernández
30
Cartas del Conde de Peñaranda, Nápoles, 1 de marzo, 26 de abril y 22 de mayo 1660.
Consultas del Consejo de Estado, 22 de junio, 15 de julio y 27 de agosto 1660. AGS, E, Nápo-
les, Leg. 3.283 f. 76, 98, 122, 97, 106 y 120.
31
Relación de los oficiales y soldados del Tercio de infantería italiana del Maestre de Cam-
po don Manuel Carrafa, Gibraltar, 1 de agosto 1660. AGS, GA, Leg. 1.955. Carta del Príncipe
de Montesarchio, Cádiz, 13 de agosto 1660. Relación de la infantería que se ha presentado…,
Gibraltar, 1 de agosto 1660. AGS, GA, Leg. 3.439.
32
Orden Real, Madrid, 10 de julio 1660. AGS, GA, Leg. 1.969. Carta del Consejo de Guer-
ra al Príncipe de Montesarchio, tras carta de éste del 1 de julio, Madrid, 19 de julio 1660. AGS,
GA, Libro 268 f. 104v.
33
Carta del Consejo de Guerra al Conde de Villahumbrosa, Asistente de la ciudad de Sevil-
la, 29 de octubre 1660. AGS, GA, Libro 268 f. 133v.
34
Orden Real, Madrid, 28 de octubre 1660. AGS, E, Nápoles Leg. 3.283 f. 191.
236
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35
Junta de Armadas, 25 de enero 1661. AGS, GA, Leg. 3.444.
36
No sabemos la fuerza de esta compañía, aunque debía estar muy mermada. Su capitán,
mientras tanto, había ido a la corte a pretender, en donde quedó convaleciente sin poder retomar
el mando de sus hombres. Orden del Consejo de Guerra, 3 de mayo 1661. AGS, GA, Libro 268
f. 179.
37
Instrucción que se dio al Marqués de Bayona, Nápoles, 9 de julio 1661. AGS, E, Nápo-
les, Leg. 3.286 f. 146. Instrucción para los capitanes que fuesen de guarda con el Duque de
Lenuchi, sin fecha. AGS, SP Leg. 30.
38
Orden Real, Madrid, 3 de abril 1662. AGS, GA, Leg. 2.020. Junta de Armadas, 23 de ju-
nio 1662. AGS, GA, Leg. 3.449.
39
Carta de don Juan de Austria, Badajoz, 7 de mayo 1662. AGS, GA, Leg. 2.000.
237
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40
Consulta del Consejo de Guerra, 1 de junio 1662. Carta de don Juan de Austria, Jurome-
nha, 26 de mayo 1662. AGS, GA, Leg. 2.000.
41
Muestra pasada al ejército de Extremadura en sus cuarteles, 26-28 octubre 1662. AGS,
GA, Leg. 2.006.
42
Hasta ese momento había servido en la caballería del ejército de Cataluña: Carta de don
Diego Sarmiento a don Blasco de Loyola, Madrid, 8 de enero 1661. AGS, GA, Leg. 1.933.
43
En 1664 este había servido durante 28 años, 6 meses y 20 días en Milán, Cataluña, Nápoles
(durante la recluta de su unidad) y la Armada del Mar océano, habiendo empezado sus servicios
como soldado, para pasar a ser sargento, alférez, capitán de infantería napolitana, Sargento Mayor,
Teniente de Maestre de Campo General y Maestre de Campo. Con valentía se había destacado en
numerosas acciones bélicas, peleado fundamentalmente en el Estado de Milán en más de 24 oca-
siones desde el combate de Tornavento –como él señalaba– además de destacarse en la defensa de
Valencia de Poo, y participar en los sitios de Barcelona y Gerona: Consulta del Consejo de Guer-
ra, 26 de noviembre 1664. Resumen de las relaciones de servicios de los sujetos que han concurri-
do a la pretensión del Tercio de infantería napolitana. AGS, GA, Leg. 3.465.
238
Al servicio del rey
44
Consultas del Consejo de Estado, 3 de marzo y 24 de mayo 1662. Cartas del Conde de
Peñaranda, Virrey de Nápoles, Nápoles, 23 de enero y 27 de abril 1662. AGS, E, Nápoles Leg.
3.285 f. 8, 16, 9 y 17. Consulta del Consejo de Italia, 19 de mayo 1662. AGS, SP Leg. 30.
45
Consulta del Consejo de Estado, 24 de mayo 1662. AGS, E, Nápoles Leg. 3.285 f. 16.
46
Consulta del Consejo de Estado, 28 de mayo 1662. AGS, E, Nápoles Leg. 3.285 f. 24.
47
Gaceta nueva (Impresa), Nº4, de los sucesos políticos y militares sucedidos en la mayor
parte de Europa y África, de fin de abril hasta 23 de Junio de 1662. Madrid, Julián de Paredes,
1662. BN, Madrid, Ms. 2.389 f. 310-113.
48
Carta de don Juan de Austria, Badajoz, 14 de julio 1662. AGS, GA, Leg. 2.029.
49
Muestra pasada al ejército de Extremadura en sus cuarteles, 26-28 octubre 1662. AGS,
GA, Leg. 2.006.
239
Antonio José Rodríguez Hernández
timos reinos quedó anulada. Pese al revés, la Corona insistió en que en Lom-
bardía y Nápoles se debía continuar alistando el mayor número de gente posi-
ble, consignándose el dinero necesario para la recluta de Milán a cargo de las
arcas napolitanas y sicilianas. De esta manera se pretendía que los Tercios que
servían en Extremadura conservaran su pie, esperando que la recluta estuviese
lista para incorporarse al ejército en el mes de marzo, lo que suponía que debía
partir de Italia a comienzos del año. Incluso en Nápoles se intentó reclutar 500
albaneses, y que de la caballería del reino se enviaran a España 400 soldados
desmontados, escogidos de entre los mejores que hubiera, teniendo éstos que
ser solteros. Pero dicha prevención era demasiado complicada para llevarla a
cabo, por lo que debió desestimarse50. En Nápoles el reclutamiento de infantería
continuó sin tregua de la mano de Paolo Gualtieri, que había llegado al reino
meses atrás. Éste pudo salir en el mes de junio con su Tercio, compuesto por
cerca de 800 infantes, que según Peñaranda serían más aptos para servir en la
Armada que «para echarlos a tierra», signo evidente de que el virrey no se fiaba
de que los nuevos reclutas no desertasen en masa de camino a Extremadura,
como venía siendo habitual, por lo que al embarcarse en la Armada y acuarte-
larse en los alojamientos cerrados de Cádiz las fugas serían menos graves. Los
hombres iban embarcados en la escuadra del Príncipe de Montesarchio, llegada
a Nápoles a principios de ese año, y compuesta por tres navíos y un patache,
acompañados por un navío mercante de flete que llevaba un cargamento de
pólvora para España. También se realizaron reclutas para la guarnición de la
Armada de Montesarchio, aunque de una manera diferente. A su llegada ésta
traía varías compañías de infantería formadas a través de los tradicionales servi-
cios de tropas de las provincias vascas51. Al menos 250 de estos «vizcaínos»,
como les llamaba Peñaranda, fueron convencidos para que entraran a servir en
el Tercio fijo de españoles del reino, falto de reemplazos, formándose otras cua-
tro compañías nuevas de infantería napolitana, cada una de 80 infantes, para su-
stituirlos e incrementar la guarnición de los navíos. En total la expedición lle-
vaba unos 1.120 infantes, parte de los cuales, en principio, serían destinados a
Extremadura, mientras que las cuatro compañías sueltas se quedarían agregadas
50
Consultas del Consejo de Guerra, 18 y 28 de agosto 1662. AGS, GA, Leg. 2.002. Consultas
del Consejo de Estado, 20 y 29 de julio, y 25 de noviembre 1662. Orden Real, Madrid, 9 de abril
1662. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.285 f. 139, 138, 93 y 105.
51
Sobre el servicio de los contingentes vascos en la Armada: Junta de Armadas, 11 de julio
1662. AGS, GA, Leg. 3.449.
240
Al servicio del rey
52
Consultas del Consejo de Estado, 15 y 30 de junio, 9 de agosto 1663. Cartas del Conde
de Peñaranda, Nápoles, 1 y 20 de junio 1663. Carta del Príncipe de Montesarchio, Alicante, 20
de julio 1663. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.286 f. 55, 57, 66, 58 y 68.
53
Sobre los planes de bloqueo marítimo y la actuación naval durante la guerra con Portu-
gal: R. Valladares, La dimensión marítima de la empresa de Portugal. Limitación de recursos y
estrategia naval en el declive de la Monarquía Hispánica (1640-1668), en «Revista de Historia
Naval», 51 (1995), pp. 19-31.
54
Carta del Conde de Peñaranda, Nápoles, 20 de junio 1663. Carta del Príncipe de Monte-
sarchio, Alicante, 20 de julio 1663. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.286 f. 68 y 67.
55
Junta de Armadas, 20 de agosto 1663. AGS, GA, Leg. 3.456. Consulta del Consejo de
Guerra, 14 de septiembre 1663. AGS, GA, Leg. 2.029.
56
Relación de la infantería que tiene la Armada conforme a las últimas muestras, 1665.
AGS, GA, Leg. 3.473.
57
Minuta del Consejo de Estado al Duque de Sermoneta, Madrid, 18 de agosto 1661. AGS,
E, Milán, Leg. 3.461 f. 249.
241
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58
Consulta del Consejo de Estado, 6 de diciembre 1661. Carta del Duque de Sermoneta,
Milán, 19 de septiembre 1661. AGS, E, Milán, Leg. 3.378 f. 252 y 253. Consulta del Consejo
de Estado, 26 de diciembre 1661. AGS, E, Milán, Leg. 3.378 f. 25 y 34.
59
Orden Real, Madrid, 28 de octubre 1660. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.283 f. 191.
60
Este veterano militar había empezado a servir en Milán desde 1644, destacandose en la
defensa de Cremona, y luchando tanto en el estado de Milán como en los presidios toscanos.
Relación de servicios del Maestro de Campo Conde Theodoro Barbo, 1676. Archivio di Stato
di Palermo, Reale Segreteria, Dispacci Guerra 143 f. 69.
61
Consulta del Consejo de Estado, 26 de diciembre 1661. AGS, E, Milán, Leg. 3.378 f.
254.
62
Consulta del Consejo de Guerra, 16 de diciembre 1661. AGS, GA, Leg. 1.982. Consultas
del Consejo de Estado, 24 de mayo y 4 de septiembre 1662. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.285 f. 25
y 34.
242
Al servicio del rey
63
Copia de la carta del Veedor General del ejército de Milán, Diego Patiño, a don Blasco
de Loyola, Milán, 4 de marzo 1662. Papel de don Blasco de Loyola, Aranjuez, 7 de mayo 1662.
AGS, GA, Leg. 2.020.
64
Relación de lo que ha montado el gasto de la leva de la gente del Tercio de infantería
lombarda del Maestre de Campo el Marqués de Cassin, Milán, 21 de agosto de 1662. Relación
de los oficiales y soldados que se han presentado en las infrascritas compañías de infantería
lombarda del Tercio del Maestre de Campo Marqués de Cassin en la muestra que se tomo en
final en 13 de abril 1662, y en 18 del se embarcaron para España. AGS, SP Leg. 30.
65
Según la Gaceta, esta unidad tendría 1.200 infantes, pero sin duda la fuente propagandística
infló un poco su número: Gaceta nueva (Impresa), Nº4, de los sucesos políticos y militares suce-
didos en la mayor parte de Europa y África, de fin de abril hasta 23 de Junio de 1662. Madrid, Ju-
lián de Paredes, 1662. BN, Madrid, Ms. 2.389 f. 310-113.
243
Antonio José Rodríguez Hernández
244
Al servicio del rey
dos toscanos que se realizaría por medio de Marco Alessandro del Borro
(también en ocasiones denominado Borri), oficial de origen toscano que ser-
vía en España71. La propuesta se había gestado en el propio ejército de Extre-
madura, siendo secundada a instancias de don Juan de Austria y del Duque de
San Germán. En octubre de 1662 del Borro pasaba a la Corte para ajustar la
materia, tras la aprobación de la recluta por parte de los Consejos de Estado y
de Guerra. Éstos dieron orden al virrey de Nápoles para que entregase a del
Borro los despachos necesarios, asegurase su colaboración y financiase el re-
clutamiento y transporte de los hombres. La patente de Maestre de Campo se
despacharía en Madrid, aunque las restantes se expedirían en Nápoles. Se
formaría un Tercio de 1.000 soldados toscanos en 11 compañías, que se debe-
rían reclutar por este oficial tanto en Piombino como en los estados adyacen-
tes a Florencia, siendo lo más sencillo arbolar las banderas en Puerto Hércules
y Orbitello, donde no habría problemas, mientras que en otros lugares el re-
clutamiento podría realizarse de manera más soterrada. La materia no dejaba
de ser algo espinosa por las posibles reticencias del Gran Duque de la Tosca-
na, pero como hacía referencia el Consejo de Estado, en los presidios de la
Toscana no era necesario pedir el beneplácito del Gran Duque, porque era re-
galía de los propios presidios levantar gente, excusándose el Consejo de pedir
este permiso. Pese a ello, el Virrey de Nápoles escribiría a este príncipe para
intentar fomentar su colaboración72.
71
Este sujeto, emparentado con el más conocido general imperial el Marqués Alessandro
del Borro, había llegado a España de su mano, después de que éste se alistará en el bando
español en 1648, con la Paz de Westfalia. El Marqués del Borro se desplazó a la Península,
aceptando un puesto de importancia en el alto mando del ejército de Cataluña. Con él llegaban
otros oficiales italianos, alemanes y españoles que habían combatido en Alemania durante la
Guerra de los Treinta Años, ya que en Viena formalizó un asiento con el embajador español pa-
ra traer a España especialistas en artillería, fortificaciones y otros menesteres. En 1649 el Mar-
qués del Borro llegó a Cataluña, con él viajaba Marco Alessandro del Borro, un joven capitán
que sólo podía demostrar dos años de experiencia en Alemania, pero que entendía la «teórica
del ingeniero militar» y diseñaba bien, además de hablar varios idiomas. En 1661 don Juan de
Austria, que lo conocía tras ser Capitán General del ejército de Cataluña, reclamaba su presen-
cia en Extremadura, ya que por aquel entonces era ya Teniente de Maestre de Campo General,
y un ingeniero entendido en fortificación: Cuentas de las levas efectuadas por el Conde de Lu-
miares, embajador en Viena, noviembre 1648-febrero 1656. AGS, CMC 3ª época Leg. 3.148.
Junta de Guerra de España, 24 de noviembre 1649. AGS, GA, Leg. 1.717. Carta de don Juan de
Austria, Arronches, 28 de junio 1661. AGS, GA, Leg. 1.980.
72
Consulta del Consejo de Guerra, 22 de noviembre 1662. Nota de las levas de gente que
su majestad ha resuelto se hagan en diferentes partes para el ejército de Extremadura y del dine-
ro mandado proveer para ellas, Madrid, 12 noviembre 1662. AGS, GA, Leg. 2.005. Carta de
don Juan de Austria, Badajoz, 18 de octubre 1662. Consultas del Consejo de Estado, 26 de sep-
tiembre y 25 de noviembre 1662. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.285 f. 95, 42 y 93.
245
Antonio José Rodríguez Hernández
A pesar de que del Borro llegó a Italia poco después, su recluta se fue re-
trasando. En verano de 1663 escribía a Madrid aludiendo a que su leva estaba
lejos de cumplirse, culpabilizando al Virrey de Nápoles de que el alistamiento
no estuviera avanzado. Del Borro usaba sus contactos en Madrid, y el patro-
nazgo que ejercía sobre él Don Juan de Austria, para presionar indirectamente
a Peñaranda a fin de que éste destinase importantes sumas para su recluta, de-
sviándolas de las que se necesitaban en Nápoles para todas las prevenciones
que se le exigían desde Madrid. Felipe IV ordenó que rápidamente se envia-
sen asistencias para agilizar el reclutamiento, ya que era capital que la unidad
estuviese en España en febrero de 1664, para participar a tiempo en las opera-
ciones de la campaña militar en Extremadura. Al contratiempo económico
también se le unía que el propio del Borro había padecido una enfermedad
que le impidió realizar sus funciones, aunque pronto pudo recobrarse73. El pa-
norama internacional cambió en Italia, por lo que durante 1664 fue necesario
reforzar los presidios toscanos con algunas tropas desde Nápoles, aunque
rápidamente los temores españoles se demostraron inciertos, pese a lo cual
esto supuso que el Tercio de toscanos no pudiera salir de los presidios hasta
bien avanzado el año74. El 27 de septiembre Marco Alessandro del Borro y
531 de sus hombres se embarcaban en Nápoles en 5 navíos de flete que tam-
bién llevaban trigo para España, haciéndose a la vela al día siguiente. En la to-
scana dejaba a la mitad de su unidad con el Sargento Mayor, ya que no había
más espacio en los buques75. Estos hombres permanecieron alojados en los
presidios toscanos, desde donde se fueron embarcando con posterioridad, en
pequeños contingentes, en navíos de flete que transportaban granos a la penín-
sula desde Nápoles, aunque no fue fácil concertar el transporte, ante la falta de
mercantes76. Al final éste se pudo ajustar con diversos navíos que trabajaban
con el puerto de Liorna, en especial barcos de pabellón holandés y genovés.
Los navíos cargados de grano salían desde distintos puertos napolitanos y de
camino a España pasaban por la toscana a recoger los restos de la recluta rea-
lizada allí por del Borro. Los barcos tardaban en muchos casos más de un mes
73
Carta del secretario don Diego de la Torre, Madrid, 21 de julio 1663. Junta que se tiene
en presencia del sr don Juan, Buen Retiro, 29 de septiembre 1663. Orden Real, Madrid, 24 de
octubre 1663. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.286 f. 202, 81 y 183.
74
Carta del Conde de Peñaranda, Nápoles, 17 de diciembre 1663. Consultas del Consejo de
Estado, 10 de febrero y 1 de marzo 1664. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.287 f. 9, 36 y 24.
75
Consultas del Consejo de Estado, 11 de octubre y 10 de diciembre 1664. Junta de Provi-
siones, 10 de noviembre 1664. Cartas del Cardenal de Aragón, Virrey de Nápoles, Nápoles, 14
de octubre 1664. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.287 f. 101, 126, 125 y 127 y 129.
76
Cartas del Cardenal de Aragón, Nápoles, 6 de diciembre 1664 y 19 de febrero 1665.
Consultas del Consejo de Estado, 28 de febrero y 19 de marzo 1665. AGS, E, Nápoles, Leg.
3.288 f. 28, 31, 54 27 y 53.
246
Al servicio del rey
en llegar a los presidios toscanos, costeando gran parte del reino de Nápoles,
ya que algunos debían cargar el grano en la costa adriática. Las tropas se fue-
ron embarcando para Cádiz en seis barcos diferentes, todos holandeses salvo
uno que era danés. En total iban para España 562 plazas de infantería recogi-
das en Portolongone y Puerto Hércules, que embarcaron a partir de mediados
de diciembre de 1664 hasta el 21 de abril de 1665, cuando se despachó la úl-
tima compañía77.
Marco Alessandro del Borro llegó a Cádiz a finales de 1664, demasiado
tarde para que su unidad fuese útil en el ejército, por lo que el Tercio se acuar-
teló en el Reino de Sevilla a la espera de que el resto de efectivos llegasen.
Pero lo cierto es que no se esperaba demasiado de estos hombres, no tanto por
su valía, sino porque al desembarcar no pudieron ser pagados, ante la carencia
general de dinero. Por ello se creía que entre ellos habría muchas deserciones,
y que los toscanos cometerían tropelías en su camino hacia Extremadura, co-
mo otras unidades alemanas estaban haciendo, ensañándose con la población
civil para conseguir de ellos lo que de la administración no podían obtener78.
La reincorporación del resto de las compañías al Tercio tras su llegada a la
península no dejó de ser complicada, al estar éstas muy divididas. Las tropas
hicieron un viaje largo en navíos mercantes, muy poco apropiados para el
transporte de tropas, por lo que los hombres venían agotados, habiendo falta-
do en muchos casos bastimentos durante el viaje, lo que obligó a que las com-
pañías permanecieran en Gibraltar o Cádiz durante meses hasta estar listas pa-
ra ser conducidas a Extremadura79.
La vía primordial para el reclutamiento de italianos era la vía directa, es de-
cir, el reclutamiento de contingentes por orden real en los territorios italianos de
la monarquía mediante la acción de los virreyes o gobernadores, todo gestiona-
do a través de los oficiales de las nuevas unidades, ya fueran éstos veteranos del
ejército o nobles sin servicio alguno. Realizar reclutamientos en territorios en
donde el rey de España no era soberano era más complicado, de ahí la utili-
zación – en este caso obligatoria – de otros métodos como los asientos. En este
tipo de contratos, un particular se comprometía a reclutar cierta cantidad de
hombres a cambio de dinero80. Durante este periodo sólo en una ocasión se re-
77
Consulta del Consejo de Estado, 12 de abril 1665. Carta del Cardenal de Aragón, Nápoles,
28 de febrero 1665. Relación individual de la cebada, trigo, pólvora, cuerda y gente que se ha en-
viado a España… AGS, E, Nápoles, Leg. 3.288, f. 68, 69 y 104.
78
Consulta del Consejo de Guerra, 16 de enero 1665. AGS, GA, Leg. 2.083. Cómputo de la
infantería y caballería que se supone para el ejército de Extremadura, 1665. AGS, GA, Leg.
2.107.
79
Consulta del Consejo de Guerra, 13 de abril 1665. AGS, GA, Leg. 2.083.
80
Sobre este sistema: L. Ribot, Types of Armies: Early Modern Spain, en P. Contamine
(Coord.), War and competition between States, Oxford, 2000, pp. 52-55. F. Andújar Castillo,
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248
Al servicio del rey
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Antonio José Rodríguez Hernández
89
Sobre la formación de los Tercios Provinciales: Junta de Guerra, 24 de agosto 1663. Jun-
ta del Consejo de Guerra sobre la forma de ajustar la dotación de los Tercios españoles por
Reinos y provincias, 14 septiembre 1663. AGS, GA, Leg. 2.029. J.L. Bermejo Cabrero, Aspec-
tos Jurídicos e Institucionales del Antiguo Régimen en España, Madrid, 1985, pp. 89-102.
90
Órdenes del Consejo de Guerra, 29 de septiembre 1663. AGS, GA, Libro 282, f. 40. Jun-
ta que se tiene en presencia del Sr. don Juan, Buen Retiro, 29 de septiembre 1663. Consulta del
Consejo de Estado, 27 de septiembre 1663. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.286, f. 81 y 83.
91
Consulta del Consejo de Estado, 12 de junio 1666. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.289, f. 63.
250
Al servicio del rey
251
Antonio José Rodríguez Hernández
bloquear Portugal por mar. En marzo de 1664 salía de Mesina la Nao Vitoria,
pertrechada a cargo del reino para incorporarse a su llegada a Cádiz a la Ar-
mada del Mar Océano. En ella venían más de 80 marineros y oficiales de mar,
además de 240 infantes sicilianos en dos compañías, totalmente equipados y
amunicionados. Al tenerse noticia de que habían llegado a Alicante, se dio or-
den para que el navío se enviase a Cádiz, decidiéndose que la infantería ser-
viría en la Armada, donde sería más apropósito que en Extremadura95.
En Nápoles el reclutamiento continuó durante 1665, especialmente tras las
órdenes cursadas para que se levantasen 1.000 infantes para Flandes, que se
enviarían allí a través del Camino Español, cruzando Borgoña, teniendo tam-
bién Nápoles que financiar los reclutamientos que se efectuaban en Milán. Al
mismo tiempo, a comienzos de 1665, llegó al reino el Duque de Canzano con
órdenes para reclutar gente para el Tercio de infantería que mantenía en el
ejército de Extremadura, por lo que desde Madrid se pedía al virrey que cuida-
ra también de que esta leva se completase con éxito96. Aunque los despachos
que traía Canzano eran claros al respecto, y pretendían la total colaboración
del Virrey, especialmente la económica, esta no se llegó a producir del todo.
El Cardenal de Aragón veía difícil la recluta, «por no ser tan fáciles aquí (en
Nápoles) las levas», como reconocía. Aunque apoyaría al Duque de Canzano
con dinero y medios, intentado que éste pudiera partir cuanto antes con al me-
nos 300 reclutas para llegar a tiempo a Extremadura y poder participar en la
campaña militar de la primavera siguiente, veía difícil que esto no perjudicase
la recluta que se hacía para Flandes97. Pero lo más arduo era el transporte a
Flandes de los italianos que se pretendían reclutar, lo cual no sólo era compli-
cado, sino demasiado caro, ya que la mayor parte de los gastos deberían ser
proveídos por las arcas napolitanas, al igual que parte de los desembolsos de
la recluta de los lombardos98.
La recluta para Extremadura fue la primera en concluirse, ya que debía
estar en España a finales de marzo. El Duque de Canzano se embarcó a me-
diados de ese mes en un navío mercante genovés con destino Cádiz, acom-
95
Orden Real, Madrid, 5 de junio 1664. Relación de lo que trae la Nao Vitoria, Mesina, 28
de marzo 1664. AGS, GA, Leg. 2.074.
96
Cartas del Cardenal de Aragón, Virrey de Nápoles, Nápoles, 27 de diciembre 1664 y 10
de enero 1665. Consultas del Consejo de Estado, 28 de febrero 1665. AGS, E, Nápoles Leg.
3.288 f. 18, 35, 32 y 34.
97
Carta del Cardenal de Aragón, Nápoles, 10 de enero 1665. AGS, E, Nápoles Leg. 3.288 f.
37.
98
Carta del Cardenal de Aragón, Nápoles, 19 de febrero 1665. Carta de don Luis Ponce de
León, Gobernador de Milán, 28 de febrero 1665. Copia de la Carta del Conde Francisco Casate
para don Luis Ponce, Lucerna, 20 de enero 1665, y su traducción del italiano. AGS, E, Nápoles
Leg. 3.288 f. 41, 42, 43 y 44.
252
Al servicio del rey
pañado por 180 soldados, vestidos y armados, y algunos oficiales más, por lo
que en total serían unas 200 plazas. La leva se pudo hacer en tan poco tiempo
gracias a la colaboración de las provincias, que en muchos casos ayudaron a
que «algunos de inquieta vida» se alistaran y abandonasen así el reino99.
La recluta para Flandes comenzó poco después, y a pesar de las pocas ex-
pectativas se fue realizando a buen paso. Para asegurar su logro, el virrey in-
tentó monopolizar el reclutamiento, por lo que avisó a Madrid de los inconve-
nientes de que en el reino se reclutase un Tercio a cargo de un particular, el
Sargento Mayor Simonetto Rossi, por lo que consiguió que la disposición se
anulase. De hecho el virrey informaba a Madrid que los naturales del reino no
se movían por los puestos que esta clase de reclutamientos producían, por lo
que era conveniente que se continuaran con las fórmulas habituales, intentan-
do captar voluntarios y aplicar malhechores y bandidos. El problema más gra-
ve fue sin duda el transporte, determinándose finalmente – ante la imposibili-
dad de poder hacer el trayecto a pie, mediante el camino español –, que serían
enviados por mar a la península en las galeras, y desde allí harían el resto del
trayecto en la Armada de Flandes100.
A principios de junio el Cardenal de Aragón avisaba de que ya tenía alista-
dos para Flandes cerca de 800 hombres, esperando la fórmula para llevarlos ha-
sta Milán, ya que durante el verano las costas mediterráneas estaban plagadas
de corsarios musulmanes101. Las dificultades continuaron durante los meses si-
guientes, ante la incapacidad para transportar las tropas por mar y el problema
de cómo enviarlos a Flandes, si por mar o por tierra. Al final la lógica se im-
puso, y nuevamente se reconocía que debían quedarse mejor en la península pa-
ra luchar contra los portugueses, aunque esta opción no se tomó de una manera
definitiva hasta el verano, habiéndose perdido mucho tiempo en la materia. En
un primer momento, los hombres se debían embarcar en las galeras de la escua-
dra del reino. A finales de 1665 el Cardenal de Aragón volvía a informar a Ma-
drid que tenía ya reunidos 800 efectivos para Flandes, por lo que claramente el
reclutamiento se había detenido ante los problemas surgidos. En febrero ya
afirmaba tener 1.000, pero llevaban demasiado tiempo reclutados, por lo que la
99
Cartas del Cardenal de Aragón, Nápoles, 19 de febrero y 13 de marzo 1665. Consulta del
Consejo de Estado, 31 de marzo 1665. Relación individual de lo que se ha enviado desde Nápoles
a España… AGS, E, Nápoles Leg. 3.288 f. 59, 60, 78, 58 y 104.
100
Carta del Cardenal de Aragón, Nápoles, 13 de marzo 1665. Consultas del Consejo de
Estado, 16 y 20 de abril 1665. AGS, E, Nápoles Leg. 3.288, f. 73, 78, 70 y 77.
101
Cartas del Cardenal de Aragón, Nápoles, 1, 14 y 17 de junio, y 20 de agosto 1665. Con-
sultas del Consejo de Estado, 30 de junio y 30 de julio 1665. AGS, E, Nápoles Leg. 3.288, f.
92, 147, 163,193, 90 y 153.
253
Antonio José Rodríguez Hernández
102
Cartas del Cardenal de Aragón, Nápoles, 1 de diciembre 1665, 3 de febrero, 12 de junio,
3 de julio y 1 de agosto 1666. Consultas del Consejo de Estado, 10 y 16 de enero, 27 de julio
1666. AGS, E, Nápoles Leg. 3.289, f. 14, 49, 74, 91, 75, 4, 13 y 73.
103
Orden a los generales de las galeras de Nápoles, Génova y Cerdeña, Madrid, 8 de junio
1666. AGS, E, España, Leg. 2.684.
104
Consultas del Consejo de Estado, 22 de octubre y 11 de noviembre 1666. Carta de don Pe-
dro de Aragón, Nápoles, 11 y 28 de septiembre y 9 de octubre 1666. Relación de lo que se ha pro-
veído el Sr. don Pedro de Aragón en diferentes partes, desde el 8 de abril de este año de 1666 que
tomo posesión de este gobierno. AGS, E, Nápoles Leg. 3.289, f. 101, 103, 102, 104, 105 y 109.
Consulta del Consejo de Italia, 20 de noviembre 1666. Relación de lo que se ha proveído el Sr.
don Pedro de Aragón en diferentes partes desde 8 de abril de 1666, Nápoles, 8 de octubre 1666.
AGS, SP Leg. 34.
105
Orden Real, Madrid, 8 de enero 1667. AGS, GA, Leg. 2.154. Consulta del Consejo de
Guerra, 5 de enero 1667. AGS, GA, Leg. 2.136.
106
Carta de don Pedro de Aragón, Nápoles, 27 de noviembre 1666. AGS, E, Nápoles Leg.
3.290, f. 12.
254
Al servicio del rey
que los recelos no harían que la unidad se desbaratara antes de partir. La noche
del 5 de marzo salieron de Nápoles 4 navíos de flete que se dirigían a Cádiz.
Tres de ellos irían primero a los presidios de la Toscana para recoger 650 solda-
dos del Tercio de Jacinto Suardo de Mendoza, de la recluta realizada para Flan-
des, que se encontraban allí en ese momento. El cuarto navío a su salida de
Nápoles llevaba ya en su bodega 150 infantes de la leva de 500 que se ofreció
levantar en el reino. A finales de ese mismo mes se pudo ajustar el flete de los
otros 350 infantes de esta leva, por lo que pudieron despacharse en navíos mer-
cantes a finales de ese mes, llegando a España a lo largo del mes de mayo107.
La primera expedición tuvo problemas durante la travesía, y uno de los cuatro
navíos, un patache, se apartó del grupo en el Golfo de León durante una tormenta,
naufragando poco después en las costas de Denia. El barco genovés transportaba
dos compañías de infantería del Tercio de Jacinto Suardo, que tendrían entre las
dos cerca de 200 efectivos entre oficiales y soldados. Aunque en el siniestro no se
ahogaron demasiados soldados, muchos terminaron huyendo. A su llegada a Ali-
cante, en donde se ordenó embarcarlos de nuevo para Cádiz, las compañías
habían perdido 30 de sus 141 soldados, todos ellos huidos108. Pero el principal
problema fue mantener a las tropas en Cádiz, a la espera de tomar una decisión
sobre donde enviarlos. Las cuatro compañías sueltas que traían los 500 hombres
de recluta fueron enviadas a Extremadura para unirse a los Tercios napolitanos
veteranos, mientras que el Tercio de Suardo de Mendoza quedó en Cádiz a la
espera de navíos para ser embarcado a Flandes, ya que se había prometido a los
hombres que ese sería su destino, a pesar de los enormes gastos y de la poca utili-
dad de tener a unas tropas alojadas en Cádiz a la espera de embarcarse109.
Con el comienzo de las hostilidades entre España y Francia el panorama
reclutador cambió mucho. Mientras que en Milán debían reclutarse tropas pa-
ra la propia defensa del estado, a Nápoles llegaban peticiones de diversos lu-
gares para reclutar. Por un lado desde Milán se pedía el envió de dinero y un
contingente de 2.000 hombres, algo que al final no se realizó debido a lo bre-
ve que fue la contienda, llegando desde Cataluña una petición parecida.
107
Carta de don Pedro de Aragón, Nápoles, 8 y 15 de enero, 5 y 12 de marzo 1667. Consul-
tas del Consejo de Estado, 14 y 15 de enero, 16 y 26 de abril y 5 de mayo 1667. Relación del
estado de la Real Hacienda en este reino, Nápoles, 1667. AGS, E, Nápoles Leg. 3.290, f. 27, 2,
44, 48, 10, 51, 43, 47, 57 y 36. Consulta del Consejo de Estado, 24 de mayo 1667. AGS, E,
España Leg. 2.686. Carta del consejo de Guerra al Duque de Medinaceli, Madrid, 12 de julio
1667. AGS, GA, Libro 307, f. 4v.
108
Carta del Duque de Medinaceli, Puerto de Santa María, 24 de abril 1667. AGS, GA,
Leg. 2.134. Carta del secretario don Diego de la Torre, Madrid, 26 de abril 1667. AGS, GA,
Leg. 2.154. Carta del Marqués de Leganés, Alicante, 5 de julio 1667. AGS, GA, Leg. 2.160.
109
Junta de Provisiones, 15 de septiembre 1667. Carta de los oficiales reales, Puerto de
Santa María, 4 de septiembre 1667. AGS, GA, Leg. 2.136.
255
Antonio José Rodríguez Hernández
110
Cartas de don Pedro de Aragón, Virrey de Nápoles, Nápoles, 11 de junio, 10 de julio y 17
de agosto 1667. Copia de la carta de don Luis Ponce para don Pedro de Aragón, Milán, 1 de ago-
sto 1667. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.290 f. 101, 110, 126, 127 y 128.
111
Orden Real, Madrid, 8 de noviembre 1667. Copia de la Consulta del Consejo de Guerra, 2
de noviembre 1667. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.290 f. 161 y 162. Cartas de don Pedro de Aragón,
Nápoles, 20 de septiembre, 31 de diciembre 1667, 29 de febrero y 16 de junio 1668. Consultas del
Consejo de Estado, 24 y 29 de abril 1668. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.291 f. 16, 29, 53, 128, 44 y 66.
Consulta del Consejo de Guerra, 17 de enero 1668. AGS, GA, Leg. 2.161. Consultas del Consejo
de Guerra, 19 y 26 de septiembre 1668. AGS, GA, Leg. 2.165. Carta del Duque de Osuna, 26 de
agosto 1668. AGS, GA, Leg. 2.161. Carta del Consejo de Guerra al Duque de Osuna, Gobernador
del ejército de Cataluña, 9 de septiembre 1668. AGS, GA, Libro 300 f. 50. Título de Maestre de
Campo del Tercio de infantería napolitana que ha venido de Nápoles a Cataluña, Madrid, 29 de
diciembre 1668. AGS, GA, Libro 309. Relación de los servicios del Maestre de Campo don Do-
mingo Pinatelo, 30 enero 1672. GA, Servicios Militares, Leg. 16 f. 122.
256
Al servicio del rey
112
Junta de Armadas, 8 de junio 1664. Relación de los bajeles que se pueden aplicar a la
conducción de infantería de Italia, de los portes de cada uno, y la que en ellos se podrá embar-
car demás de su tripulación. AGS, GA, Leg. 3.465. Junta de Provisiones, 22 de junio 1664.
AGS, GA, Leg. 2.054. Carta de don Luis Ponce, Gobernador de Milán, Milán, 4 de julio 1664.
AGS, GA, Leg. 2.075.
113
Carta del Secretario don Blasco de Loyola, Madrid, 25 de marzo 1664. AGS, E, Nápo-
les, Leg. 3.287 f. 154.
114
Puntos resueltos para el ejército de Extremadura, para el otoño, 10 agosto 1664. AGS,
GA, Leg. 2.080.
115
Consejo de Guerra, 16 de enero 1665. AGS, GA, Leg. 2.083.
257
Antonio José Rodríguez Hernández
116
Cuentas del pagador don Luis Carlos de San Martín, 1665. AGS, CMC 3ª época, Leg.
2.655 f. 8. Cartas del Consejo de Guerra al Duque de Medinaceli, Capitán General del Mar
Océano y Costas de Andalucía, 22 de mayo y 28 de septiembre 1665, y carta al Asistente de Sevil-
la, 20 de octubre 1665. AGS, GA, Libro 281 f. 68v, 201 y 219.
117
Relación de la gente que permanece alojada fuera de Extremadura, noviembre 1665.
AGS, GA, Leg. 2.086.
118
Cartas del Consejo de Guerra al Duque de Medinaceli, 22 de septiembre y 20 de octubre
1665. AGS, GA, Libro 281, f. 197v y 223. Junta de Provisiones, 18 de octubre 1665. AGS, GA,
Leg. 2.083. Consultas del Consejo de Guerra, 25 de noviembre y 9 de diciembre 1665. AGS,
GA, Leg. 3.472 y 2.084. Carta del Duque de Medinaceli, Puerto de Santa María, 6 de diciembre
1665. AGS, GA, Leg. 3.481. Orden Real, Madrid, 5 de noviembre 1665. Orden de la Reina
Gobernadora, Madrid, 20 de noviembre 1665. AGS, GA, Leg. 2.101. Carta del Consejo de
Guerra al Duque de Medinaceli, 7 de diciembre 1665. AGS, GA, Libro 282 f. 136. Consulta del
Consejo de Estado, 14 de septiembre 1665. Carta del Marqués de Castel-Rodrigo, Gobernador
de los Países Bajos, 14 de octubre 1665. AGS, E, Flandes, Leg. 2.104. Fe de oficios del capitán
Antonio Cabezal. AHN, E, Leg. 1.285-1.
258
Al servicio del rey
119
Cartas del Cardenal de Aragón, Nápoles, 12 de octubre 1665. AGS, E, Nápoles, Leg.
3.288, f. 184 y 185. Orden Real, Madrid, 28 de diciembre 1666. AGS, GA, Leg. 2.126.
120
Relación del sueldo del año 1666, Milán, 1 de enero 1666. AGS, SP Leg. 1.862, f. 2.
121
Consulta del Consejo de Estado, 13 de abril 1666. Cartas de Pedro de Aragón, Virrey de
Nápoles, Nápoles, 12 de junio, 3 de julio y 1 de agosto 1666. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.289 f. 51,
74, 88 y 75. Consulta del Consejo de Estado, 16 de mayo 1666. AGS, E, España Leg. 2.684. Carta
del Contador Principal al Rey, Milán, 28 de junio 1666. Relación de los oficiales, soldados y bor-
rados que ha habido en las infrascritas 12 compañías de infantería lombarda levantada para Flan-
des por la muestra que se les ha formado en 30 de abril de 1666. Relación de la muestra que se ha
pasado en Alejandría a las infrascritas 6 compañías de infantería italiana que pasan al Finale en 22
de mayo de 1666. Relación de la muestra que se ha pasado en el Finale a 29 de mayo de 1666 a
las infrascritas compañías de infantería italiana sueltas que han venido del Estado de Milán a re-
forzar el presidio de esta plaza. AGS, SP Leg. 1.862 f. 77, 81, 82 y 83.
122
Consulta del Consejo de Estado, 3 de junio 1666. AGS, E, España Leg. 2.684.
123
Carta del Contador Principal, Milán, 24 de diciembre 1666. Muestra pasada en el Final,
en 18 de diciembre 1666, a las 12 compañías de infantería italiana sueltas que pasan a Flandes.
Relación de la muestra que se ha pasado en Alejandría, en 25 de noviembre, a las 12 compañías
de infantería lombarda que pasan a Flandes. AGS, SP Leg. 1.862 f. 131, 132 y 133.
259
Antonio José Rodríguez Hernández
124
Carta del Marqués de Asentar, 7 de enero 1667. AGS, E, España Leg. 2.686. Consultas
del Consejo de Estado, 14 de enero y 16 de abril 1667. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.290 f. 10 y 43.
125
Rodríguez Hernández, España, Flandes y la Guerra de Devolución, cit., pp. 138-144.
126
Relación de los oficiales y soldados de toda la infantería y caballería del ejército que se
presentaron en la muestra que se les ha pasado en 18 de febrero de 1666. Relación de la mue-
stra que se ha pasado en Alejandría, en 5 de abril 1666, a las infrascritas 10 compañías de in-
fantería italiana suelta que se han de pasar a España. Relación de las 10 compañías de infantería
italiana suelta que pasan a servir a su majestad a España, Finale, 29 de abril 1666. AGS, SP
Leg. 1.862 f. 78, 79 y 80.
127
Carta del Conde de Cabañas, Cádiz, 24 de junio 1666. AGS, GA, Leg. 3.482.
128
A su paso por Alessandria las compañías tenían 100 soldados, 542 soldados y al menos 123
borrados, es decir soldados que faltaban al número original, por lo que más del 18% de los efectivos
habían abandonado sus compañías. AGS, SP Leg. 1.862 f. 79 y 80.
260
Al servicio del rey
era los capitanes. Los que reclutaron para Flandes tenían un origen social muy
variado, destacando entre los doce sujetos cinco condes, un marqués y un ca-
ballero. En cambio, entre los capitanes que reclutaron para España no adver-
timos ningún noble titulado. No sabemos muy bien el motivo de ello, aunque
podía ser el mayor atractivo que tenía Flandes, y el poco que tenían las guer-
ras peninsulares, en donde el servicio era mucho más duro.
Con el comienzo de la Guerra de Devolución, Lombardía continuó apor-
tando tropas, aunque esta vez para Cataluña, algo que ya se había prometido
al Capitán General del principado, para así reforzar la presencia militar de
aquella frontera. El 8 de agosto de 1667 las galeras de la escuadra de Génova
desembarcaron en Barcelona 772 plazas de infantería lombarda y 63 artille-
ros129. Estos hombres se unieron a los 200 soldados italianos del Tercio de de
Gerónimo Dualdo Ales que se mantenían en el ejército de Cataluña, unidad
que no se había vuelto a reclutar desde la Paz de los Pirineos130.
129
Orden Real, Madrid, 15 de agosto 1667. AGS, GA, Leg. 2.152. Consulta del Consejo de
Guerra, 19 de agosto 1667. AGS, GA, Leg. 2.135. Cartas del Consejo de Guerra al Duque de
Osuna, Capitán General del ejército de Cataluña, Madrid, 16 de abril y 26 de agosto 1667.
AGS, GA, Libro 282 f. 142 y 178.
130
Consulta del Consejo de Guerra, 31 de marzo 1667. Carta del Duque de Osuna, Barce-
lona, 18 de marzo 1667. AGS, GA, Leg. 2.132.
131
Consulta del Consejo de Guerra, 10 de septiembre 1664. AGS, GA, Leg. 2.055. Orden
Real, Madrid, 12 de septiembre 1664. AGS, GA, Leg. 2.074.
261
Antonio José Rodríguez Hernández
132
Consulta del Consejo de Guerra, 26 de noviembre 1664. Resumen de las relaciones de
servicios de los sujetos que han concurrido a la pretensión del Tercio de infantería napolitana.
AGS, GA, Leg. 3.465. Relación de Servicios de don Antonio Simoneta Ponce de León, Barón
de Santa Cristina, 20 de noviembre 1664. AGS, GA, Servicios Militares, Leg. 7 f. 34.
133
Carta del Barón de Santa Cristina, Puerto Real, 15 de febrero 1665. AGS, GA, Leg.
3.481. Carta del Vizconde de Cabañas, Cádiz, 1 de febrero 1665. Relación de los oficiales
mayores, oficiales y soldados que del Tercio del Maestre de Campo Barón de Santa Cristina de
infantería napolitana, uno de los de la Armada del Mar Océano se presentaron en muestra que
se les paso en 26 de enero de 1665 en la villa de Puerto Real, Cádiz, 1 de febrero 1665. AGS,
GA, Leg. 3.480. Gasto de una leva de infantería napolitana, 27 de octubre 1665. AGS, GA, Li-
bro 281 f. 229.
134
Muestra tomada al ejército de la Frontera, Huelva, 5 de noviembre 1666. AGS, GA,
Leg. 2.111.
135
De esta manera, en 1648 se reclutó en Madrid una compañía de infantería de naciones
con píe italiano. Patente para el Teniente Thomás de Juan, Madrid, 24 de febrero 1648. AGS,
GA, Libro 209, f. 4.
136
Consulta del Consejo de Guerra, 14 de marzo 1666. AGS, GA, Leg. 2.112.
262
Al servicio del rey
137
En 1650 se reclutaron 80 italianos a costa de un particular para formar una compañía de ca-
ballería italiana para el ejército de Cataluña, y al año siguiente otros tantos: Patente de capitán de ca-
ballos a don Septimio Uberti y Aldeseo, 16 de noviembre 1650. Carta del Consejo de Guerra a don
Diego Sarmiento, Comisario General de la Caballería e Infantería, 9 de diciembre 1650. AGS, GA,
Libro 225 f. 10, y libro 223 f. 85. Patente para el capitán don Lucas Palavecin, Madrid, 4 de junio
1651. AGS, GA, Libro 225 f. 24v.
138
Orden Real, Madrid, 20 de noviembre 1667. Memorial de don Francisco Ricca. AGS,
GA, Leg. 2.152.
139
D. Maffi, Un bastione incerto? L’esercito di Lombardia tra Filippo IV e Carlo II (1630-
1700), en García Hernán y Maffi (eds.), Guerra y sociedad en la Monarquía Hispánica, cit.,
Volumen I, pp. 501-536, en especial pp. 530-531.
263
Antonio José Rodríguez Hernández
140
Maffi, Cacciatori di Gloria, cit., pp. 87-96; Idem, La Cittadella in Armi, cit., pp. 129 y
ss.
141
Cédula del Rey al Conde de Castrillo, Virrey de Nápoles, Madrid, 19 de julio 1660.
AGS, SP Leg. 141.
142
Así, por ejemplo, Luigi Poderico gozaba de 2.000 ducados de renta por vía de enco-
mienda como Maestre de Campo General. Cédula Real al Conde de Castrillo, Madrid, 4 de
abril 1661. AGS, SP Leg. 142.
143
De esta manera al Maestre de Campo don Marzio Orilla se le negó dicha plaza, aunque
tras un año de suplicas e intentos consiguió el nombramiento, ya que había servido al rey en sus
ejércitos durante más de 20 años. Consultas del Consejo de Italia, 18 de abril y 10 de noviem-
bre 1665, 1 y 22 de junio 1666. AGS, SP Leg. 34. El Maestre de Campo Camilo Dura también
consiguió el nombramiento poco después, alegando sus 18 años de servicio en el ejército y que
otros veteranos oficiales napolitanos del ejército de Extremadura habían conseguido el nom-
bramiento, como Antonio Guindazo o Marzio Orilla. Consulta del Consejo de Italia, 28 de sep-
tiembre 1666. AGS, SP Leg. 34. Con posterioridad, en 1693, Marzio Orilla será nombrado Ca-
pitán General de la Artillería de Nápoles: R. de Salas y Cortés, Memorial histórico de la artille-
ría española, Madrid, 1831, p. 69.
264
Al servicio del rey
144
A don Settimio Uberti le bastó con haber servido en el ejército 3 años para conseguir un
nombramiento. De hecho este primer servicio como capitán de caballos lo realizó a su costa,
pagando la recluta de su compañía, la cual se mantuvo en el ejército de Cataluña poco más de
3 años antes de ser reformada. Tras servir al Duque de Osuna en su etapa como virrey de Sici-
lia, consiguió en 1660 ser nombrado gobernador de la ciudad de Bitonto, en la Apulia napolita-
na. Relación de servicios del capitán de caballos corazas don Septimio Uberti, Nápoles, 7 de ju-
lio 1661. AGS, SP Leg. 142.
145
Consulta del Consejo de Italia, sobre el decreto de 14 de noviembre de 1661. AGS, SP
Leg. 30.
146
Carta del Conde de Peñaranda, Virrey de Nápoles, 17 de diciembre 1663. AGS, E,
Nápoles, Leg. 3.287 f. 9.
147
Razón de las partidas gastadas por cuenta de los efectos de este año de 1668 tocantes a al
Real Hacienda, y exigencias de ella, en este reino. Para enviar a su Majestad, con carta del 12 de
mayo 1668. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.291 f. 105. Durante la década de 1650 el coste aceptado por
la Corona por cada hombre que entregaban en el frente los Corregidores era de 250 reales de vel-
lón, precio en el que iba incluido el vestido de munición: Instrucciones para el repartimiento gene-
ral de 1649. AGS, GA, Libro 209.
265
Antonio José Rodríguez Hernández
148
Consulta del Consejo de Estado, 27 de enero 1664. Relación de la leva que se hizo en las
dos Calabrias, y el tiempo y dinero que ha costado, Nápoles, 17 diciembre 1663. AGS, E,
Nápoles, Leg. 3.287 f. 7 y 11.
149
La sociología de los condenados a servir en el ejército en España era muy variada. Así Gio-
vanni de Massielo fue condenado en 1660 por el Tribunal de la Vicaría de Nápoles a servir en el
ejército 7 años tras prometer el matrimonio a una mujer y no cumplir con lo acordado. Pese a la pena,
tras servir 4 años en Extremadura consiguió la redención a cambio de dar un hombre en su lugar, ob-
teniendo la libertad algo tras abonar los gastos equivalentes a los soldados comprometidos. Consulta
del Consejo de Italia, 7 de octubre 1664. Carta de don Iñigo de Zarate, Madrid, 19 de octubre 1664.
AGS, SP, Leg. 33.
150
Instrucción que se dio al Marqués de Bayona, Nápoles, 9 de julio 1661. AGS, E, Nápo-
les, Leg. 3.286 f. 146.
151
Colección de Documentos Inéditos para la Historia de España, Tomo 23, Madrid, 1853,
pp. 529 y ss.
152
Carta de don Pedro de Aragón, Virrey de Nápoles, Nápoles, 1 de agosto 1666. AGS, E,
Nápoles, Leg. 3.289 f. 75.
266
Al servicio del rey
153
Orden Real, Madrid, 8 de noviembre 1667. Copia de la Consulta del Consejo de Guerra,
2 de noviembre 1667. AGS, E, Nápoles, Leg. 3.290 f. 161 y 162. Consulta del Consejo de
Guerra, 17 de enero 1668. AGS, GA, Leg. 2.161. Junta de Armadas, 25 de enero 1661. AGS,
GA, Leg. 3.444.
154
Carta de don Pedro de Aragón, Virrey de Nápoles, Nápoles, 1 de agosto 1666. AGS, E,
Nápoles, Leg. 3.289 f. 75.
155
Relación de servicios del Sargento Mayor Joseph de Lobueno. AHN, E, Leg. 1.311-2.
Relación de servicios de Ignacio Melone. AHN, E, Leg. 1.312-2. Relación de servicios del
Maestre de Campo Vicencio Femiano. AHN, E, Leg. 2.015.
156
Un buen ejemplo es Scipion Brancaccio, que aunque comenzó ya como capitán, destacó
en sus más de 34 años de servicio a la monarquía, luchando en Flandes y en Hungría: Relación
de servicios del Sargento General de Batalla y Teniente General de la Caballería del ejército de
Flandes don Scipion Brancaccio, 1701. AHN, E, Leg. 1.285. Otro militar destacado que empezó
como capitán fue el Barón de Santa Cristina: Relación de Servicios de don Antonio Simoneta
Ponce de León, Barón de Santa Cristina, 20 de noviembre 1664. AGS, GA, Servicios Militares,
Leg. 7 f. 34.
267
Antonio José Rodríguez Hernández
157
Tras su muerte, Carlos Tuffo había servido a la monarquía a lo largo de 39 años, la mi-
tad de ellos como oficial en el ejército, ya que su primer puesto fue capitán de caballos. A su
vuelta a Nápoles, tras la licencia oficial de don Juan de Austria, en 1662, consiguió el gobierno
de la provincia de L’Aquila, presidente de la Catanzaro, General de artillería, Gobernador de
las Armas de las dos provincias de Calabria y gobernador de la plaza de Rijoles. Puestos, que
junto con el nombramiento de consejero de Colateral, consiguió gracias a sus servicios milita-
res y a sus orígenes familiares: Relación de los servicios del difunto General de la Artillería
Don Carlos del Tuffo, Marqués del Tuffo. AHN, E, Leg. 2.015.
158
Así Orazio Coppola comenzó a servir de soldado en la compañía de su hermano Andrea,
futuro Duque de Canzano, Maestre de Campo de uno de los Tercios formados en 1662, sin que
hasta ese momento ninguno hubiera servido nunca en el ejército. Combatió en el frente extre-
meño hasta mediados de 1667, consiguiendo en tan sólo cinco años ser capitán de infantería,
para pasar a ser poco después Sargento Mayor, todo a la sombra de su hermano, y en su misma
unidad. Relación de servicios del Maestre de Campo don Oracio Coppola, 1686. AHN, E, Leg.
1.289-2.
159
Sobre este tema en el ejército: L.A. Ribot García, Las Provincias italianas y la defensa
de la Monarquía, en «Manuscrits», 13 (1995), pp. 97-122, aquí: p. 106. Sobre los jenízaros en
la administración: A. Álvarez-Ossorio Alvariño, Naciones mixtas. Los jenízaros en el gobierno
de Italia, en Álvarez-Ossorio y García García (eds.), La Monarquía de las Naciones, cit., pp.
597-649.
160
Minutilo había empezado a servir como simple soldado en la infantería española del
estado de Milán, puesto que ocupó durante más de 8 años. Después consiguió hacerse con una
patente de capitán de las que el Virrey Conde de Peñaranda concedió durante 1660, gracias se-
guramente a sus contactos. Pese a todo, por lo que conocemos, era uno de los oficiales con más
años de servicio antes de ser capitán de infantería napolitana: Relación de servicios del Maestre
de Campo Don Álvaro Minutilo Quiñones, Caballero de la Orden de San Juan, del Consejo Co-
lateral de Nápoles y Nieto y Heredero de los servicios del Señor Don Álvaro de Quiñones, Ca-
ballero que fue del Hábito de Santiago, Comendador de Aguilarejo, el Primer Teniente General
de la Caballería de las Órdenes y del Consejo de Guerra de S.M. y Colateral de Nápoles. AHN,
E, Leg. 2.015.
161
F. Andújar Castillo, Entre la corte y la guerra. Militares italianos al servicio de España
en el siglo XVIII, en «Guerra e pace in età moderna. Annali di storia militare europea», (2008),
pp. 105-134, aquí 107. Sobre el papel de la aristocracia en Milán: Maffi, La Cittadella in Armi,
268
Al servicio del rey
ción sea demasiado general y algo simplista. Si bien es cierto que la mayor
parte de los cargos los obtuvieron jóvenes nobles, alcanzando la mayoría su
puesto sin servicio previo alguno, el reclutamiento de nuevas unidades no pa-
rece que recayera en ellos directamente, y tampoco que tuvieran que formar
sus Tercios a sus expensas. Los contactos y el séquito de un noble podía ayu-
dar a que su unidad se completase más rápidamente, alistándose algunos de
sus vasallos y feudatarios, pero no parece que eso fuera suficiente para cum-
plir con una recluta. Domenico Pignatelli, pese a sus elevados orígenes, fue
incapaz de reclutar durante 1668 los 200 hombres a los que se comprometió, a
pesar de permanecer en el reino durante 9 meses162. De esta manera parece
que – al menos durante esta época –, el reclutamiento no tiene excesivos to-
ques feudales, y el batir del tambor, junto con la aplicación de bandidos y de-
lincuentes, fueron las fórmulas más eficaces y extendidas para reclutar, aun-
que el escalafón de las nuevas unidades sí que tuvo una estructura noble y
feudal, permaneciendo en la cúspide muchos aristócratas.
El servicio de la alta nobleza napolitana en el ejército estuvo bien conside-
rado, pero no parece que ésta tuviera que aportar mucho, o recurrir a la vena-
lidad, para conseguir los honores y cargos. A veces parece que aspiró a conso-
lidar su posición y riqueza a cuenta del ejército, sin tener por ello que aportar
nada a cambio. Frente a ello la Corona pretendía mantener ocupados y conten-
tos a los nobles napolitanos. La salida de éstos del reino tenía un interés dual.
El reino se beneficiaba de la salida de jóvenes aristócratas que turbaban la
tranquilidad del reino, pudiendo éstos atraer a otros, recibiendo a cambio nue-
vos puestos y honores que a su vuelta podían encumbrar su posición, consi-
guiendo la Corona fidelizar a la nobleza por el camino. Muchos de los jóvenes
nobles aspiraban a una posición de mando privilegiada, pero también un ele-
vado sueldo más allá del de Maestre de Campo163.
cit., pp. 118 y ss.; G. Hanlon, The twilight of a military tradition. Italian aristocrats and Euro-
pean conflicts, 1560-1800, Londres, 1998; C. Donati, L'idea di Nobiltà in Italia. Secoli XIV–
XVIII, Roma, 1988.
162
Relación de los servicios del Maestre de Campo don Domingo Pinatelo, 30 enero 1672.
GA, Servicios Militares, Leg. 16 f. 122.
163
En 1668 dos de los elegidos como mandos de nuevos Tercios reclamaban a la Corona,
además de su sueldo, otros 400 escudos al mes de ayuda de costa, algo desorbitado y a todas
luces inaceptable. Ambos eran jóvenes que nunca antes habían servido en el ejército –los Prín-
cipes de San Jorge y Belvedere–, que exigían esas cantidades por ser descendientes de impor-
tantes familias nobles del reino. El chantaje no fue aceptado, pese a las instancias del virrey,
que recomendaba la concesión de estas ayudas por ser ambos sujetos de «bonísimas prendas y
de las primeras casas del Reino de Nápoles». Éste también tenía la esperanza que a imitación de
éstos salieran otros «caballeros mozos por capitanes, y entre ellos algunos que son soldados,
ymportando mucho purgar aquella ciudad destos sujetos por los malos efectos que resultan de
la ociosidad en que se hallan»: Consulta del Consejo de Estado, 27 de junio 1668. Carta de don
269
Antonio José Rodríguez Hernández
Pedro de Aragón, Virrey de Nápoles, 30 de noviembre 1667. Memorial del Príncipe de San
Jorge. Memorial del Príncipe de Belvedere. AGS, E, Nápoles Leg. 3.291 f. 108, 112, 113 y
109.
164
Carta del Consejo de Guerra al Marqués de Caracena, 24 de agosto 1665. AGS, GA, Li-
bro 281 f. 166v.
165
Carta del Duque de Sermoneta, Gobernador de Milán, Milán, 3 de mayo 1661. Traduc-
ción de la consulta del senado de Milán hecha al Duque de Sermoneta, 2 de mayo 1661. AGS,
E, Milán, Leg. 3.378 f. 96 y 97.
166
Orden al Duque de Tursis, Buen Retiro, 23 de julio 1663. AGS, GA, Leg. 2.047.
270
Al servicio del rey
algo más, y concertar cada recluta por 6 reales de a ocho167, ajustando con los
capitanes que se encargasen también de armar a sus hombres. Se reconocía a su
vez que los capitanes tenían la obligación de socorrer cada día a sus soldados,
por lo que si se les daba cuartel, concediéndolos alojamiento ordinario, el gasto
sería mucho menor. En total se calculaban los costes en 6.000 reales de a ocho
para el reclutamiento, 1.000 para socorrer a los hombres durante su viaje hasta
el puerto de Finale, 6.000 para dar una paga a la tropa antes de embarcarse,
5.000 para la compra de bastimentos para 40 días de viaje y otros 8.000 por el
transporte en navíos mercantes, a razón de 8 reales de plata por cabeza. En total
el reclutamiento de 1.000 infantes estaba estimado en 26.000 reales de plata168.
Dentro de este cómputo el reclutamiento era un gasto más que asequible, lo que
podría ocultar la venalidad, aunque a pequeña escala.
El análisis de los servicios de muchos de los oficiales podría confirmar
esta práctica, pero entre los oficiales lombardos no encontramos tanta homo-
geneidad, lo que hace difícil comprobarlo, ya que podemos ver algunos que su
primer servicio era el de capitanes de una compañía que ellos mismos levan-
taban, pero también verdaderos soldados de oficio. Un ejemplo de esto lo en-
contramos en don Tommaso Casnedi, caballero originario de Milán, hijo de
Francesco Maria Casnedi, Proveedor General del ejército y los presidios del
Estado de Milán. Su posición económica y sus contactos le permitieron en
1665 salir de Milán como capitán de una compañía de infantería que el mismo
levantó, su primer puesto en el ejército169. Otros, en cambio, eran verdaderos
soldados de oficio, que tuvieron una dilatada carrera militar marcada por la
profesionalidad y los amplios servicios en el ejército, lo que a la postre les
llevará a ascender dentro del escalafón militar. Entre ellos destacan personajes
como Giovanni Barbiano, Conde de Belgioioso170, o Fabio Bonamico171.
167
En otras ocasiones la cantidad fue algo menor, ya que en la leva realizada entre 1661-62
se concertó con cada capitán la entrega de 5 escudos por cada uno de los 70 hombres que
debían aportar para sus compañías: Relación de lo que ha montado el gasto de la leva de la gen-
te del Tercio de infantería lombarda del Maestre de Campo el Marqués de Cassin, Milán, 21 de
agosto de 1662. AGS, SP Leg. 30.
168
Copia de parecer del Sr. Marqués de Mortara sobre la leva que se ha de hacer, 1662.
AGS, E, Nápoles, Leg. 3.285 f. 140.
169
Relación del Maestre de Campo don Tomas Casnedi, 1678. AHN, E, Leg. 1.947.
170
Este había empezado a servir en Milán en 1637, dentro de la infantería alemana. De
hecho llegó a Extremadura en uno regimiento de esta nacionalidad, para ser ascendido en 1664
a Maestre de Campo de un Tercio lombardo: Fe de oficios del Conde de Belgioioso, 1673.
AHN, E, Leg. 1.285-1.
171
Natural de Voghera, asentó como soldado en 1646. En 1651 fue nombrado alférez, y po-
co después capitán. En 1666 se le nombró por su veteranía Sargento Mayor de uno de los Ter-
cios lombardos del ejército de Extremadura. El siguiente ascenso, el de Maestre de Campo, lo
conseguirá en 1675, tras casi 30 años de servicio, sirviendo en ese momento en el ejército de
271
Antonio José Rodríguez Hernández
9. Conclusiones
En total fueron unos 20.000 los italianos que llegaron a la península duran-
te estos 9 años (1660-68), una media nada despreciable, algo superior a los
2.000 efectivos anuales. La cifra es bastante reveladora, no tanto por su
cuantía, sino porque de apenas nos han llegado referencias de este notable
esfuerzo militar de las provincias italianas de la monarquía, que aportaron no
sólo hombres, sino también barcos, dinero, granos y pertrechos. Éstas colabo-
raron en un conflicto intenso y que desgastó Castilla, pero poco conocido por
la historiografía. Cuantitativamente este esfuerzo militar no es comparable a
otros anteriores, pero sí que se nos muestra muy representativo. Fueron más
los soldados italianos que llegaron a Flandes entre 1567 y 1609, 44.368172,
una media anual de poco más de 1.000, por lo que el aporte a la guerra con
Portugal fue más intenso. Pero a la altura de la segunda mitad del siglo XVII
la peste, las revueltas, y el empeoramiento de las condiciones económicas hi-
cieron que Italia no pudiera aportar lo mismo, algo que nos demuestra el
análisis de las aportaciones del reino de Nápoles. Entre 1635-1658 el reino
envió más de 37.000 soldados a Milán, pasando una parte de éstos a otros
frentes173. Eso significa una media anual de unos 1.500 hombres, cifra supe-
rior a los 1.000 que salieron anualmente para España durante el periodo de
1660-68, lo que demuestra un claro debilitamiento del reino, en donde había
menos hombres que reclutar.
En cuanto al origen geográfico de los soldados, podemos observar en el
gráfico adjunto la preponderancia de los napolitanos, seguida muy de cerca
por los lombardos, pese a que la Lombardía española tenía unas bases hu-
manas mucho más reducidas que el reino de Nápoles, lo que indica una
mayor militarización de esa sociedad, mucho más acostumbrada a la guerra.
El contingente siciliano es anecdótico y poco importante, algo que contrasta
con la importancia del reino, que pese a sus dimensiones, y a estar bastante
poblado, no aportó demasiados hombres, ya fuera a tenor de quedar reserva-
do en caso de cualquier invasión musulmana o extranjera, o fundamental-
mente por lo poca colaboración del reino y los pocos voluntarios que él
siempre se encontraban.
Flandes: Relación de servicios de don Fabio Bonamico, Maestre de Campo de un Tercio de infan-
tería Italiana del ejército de Flandes, 1686. AHN, E, Leg. 1.285.
172
Parker, El ejército de Flandes y el Camino Español, cit., Apéndice C, pp. 328-329.
173
Maffi, Il Baluardo della Corona, cit., pp. 145-146.
272
Al servicio del rey
Toscanos Sicilianos
1093 240
6% 1%
Lombardos
7299
39%
Napolitanos
8147
44%
Piemonteses y
Saboyanos
1853
10%
273
Antonio José Rodríguez Hernández
274
Al servicio del rey
275