SUPER FE CAPAZ DE ROMPER TECHOS

¿Qué significa súper fe?

Esto es una fe que va más allá de lo que nosotros pensamos, una fe que es superior a nuestra
propia mentalidad humana y yo creo que Dios quiere eso.
Marcos 2:1-12
“Capaz de romper techos”
La súper fe que rompe techos
Quiero hablar de 3 cosas que sucedieron en esa casa donde sucedió el milagro, 3 cosas que Dios
quiere que sucedan en nuestras vidas.
¿Que era Capernaum? Fue una ciudad que empezó a ser construida antes de Cristo, su base era la
pesca y tuvo más o menos unos 1500 habitantes y más o menos un porcentaje grande estaba en
aquella casa.
En esta ciudad sucedió algo que no había sucedido en otros lugares.
Dios quiere que sucedan cosas en esta iglesia que jamás han sucedido y que tú no has pensado.
Pero…
¿Qué fue lo que sucedió en esta casa que fue capaz de producir una fe capaz de romper techos?
PRIMERO: La gente fue atraída por montones, a causa de la predicación de Jesús
“E inmediatamente se juntaron muchos, de manera que ya no cabían ni aun a la puerta; y les
predicaba la palabra.” Marcos 2:2
El pueblo quería estar allí porque estaba pasando algo que nunca había pasado, milagros estaban
sucediendo. Dios quiere que haya multiplicación en esta iglesia, que los jóvenes se junten y
tengan ese anhelo de buscar su presencia, Dios quiere mucho más en este lugar, Dios quiere
jóvenes llenos de fe.
Este pueblo estaba allí porque Dios estaba interesado en hacer algo en ellos.
Si nosotros tenemos fe, Dios hará, habrá multitudes de jóvenes que quieran buscar su presencia,
pero si no tenemos fe, nada pasará, seguiremos en la misma situación.
Por ello, pensemos en grande, ampliemos nuestra visión, salgamos de nuestros límites, soñemos
en grande. Creamos en que Dios nos ha hecho un llamado en grande, nos ha llamado como
iglesia, para ser una iglesia en grande, una iglesia llena de su presencia, del mover de su Espíritu,
pensemos con la mentalidad de Cristo.
Pensar con la mentalidad de Cristo es creer que somos más que vencedores, cree en lo que te dice
Dios, cree en que Dios tiene algo grande para ti y es que tu papá quiere lo mejor para ti, quiere
verte feliz.
El pueblo se juntó en esa casa porque estaba la presencia de Jesús, por eso sí queremos que
nuestro ministerio crezca, debemos tener la presencia del Espíritu Santo en nuestras vidas,
enamorarnos de la presencia de Dios cada vez más, rendir nuestras vidas ante su trono, con el
objetivo de que otros jóvenes se enamoren de su presencia. Necesitamos la presencia de Dios en
nuestras vidas, en nuestra familia, en cada área y situación de nuestras vidas
Pero a veces dejamos la presencia de Dios en un segundo o tercer lugar, Moisés dijo, si tú
presencia no va conmigo no iré a ningún lado. Tenemos que atraer la presencia de Dios a
nuestras vidas.
Pero no solo la presencia de Dios estaba en esa casa, también estaba la palabra, pues Cristo les
predicaba y eso cambia, transforma y renueva, pues, aunque muchos no entendían la palabra,
esta entro en sus corazones y empezó a hacerse rema llevando a qué cada vez más se juntara más
gente
“Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.” Romanos 10:17
La palabra debe ser predicada, pues ese es nuestro llamado, nuestro propósito, cada uno de
nosotros somos llamados a hacerlo; por eso le pido a cada uno de los líderes de células que cada
vez que se reúnan pidan para que la palabra que se lleva sea una palabra que edifique, que
cambie, que transforme.
Por eso es tan importante el buen funcionamiento de las células en el crecimiento de nuestro
ministerio juvenil, puesto que allí crece la fe y se edifican los jóvenes.
En cada momento de nuestras vidas tenemos que vivir la palabra
Por eso, te animo a que traigas un invitado especial el próximo sábado
SEGUNDO: Estuvieron dispuestos a pagar el precio
Los cuatro amigos, representan la fe para sanar a otros. Dios quiere que tú seas como estos 4
personajes que son capaces de orar por otros, de luchar por otros para que sean sanados, el
paralítico representa a esa persona que necesita ser llevada espiritualmente, porque él no puede
solo, el necesita de otros que lo guíen, que oren, que escuchen, que aconsejen, que ayunen. Él
quería el milagro, pero no podía solo.
Muchachos, allí a fuera a jóvenes que necesitan ser llevados, que necesitan ser ayudados por cada
uno de nosotros, hay muchos jóvenes que necesitan de un amigo que lo animen. Tal vez tú dices,
Yosed, yo llamo, yo he invitado muchas veces, pero nada.
Muchachos, estos 4 amigos representan el sacrificio, representan a alguien que estuvo
dispuesto a orar.
Yo doy gracias a Dios por la persona que me insistió para que yo viniera a la iglesia porque desde
ese día entro la salvación a mi vida y a mi casa.
Tú estás aquí porque hubo alguien que oro por ti, tu mamá, tu papá, tus amigos…
Por eso a la persona que vayas a invitar el próximo sábado, tú tienes que orar por ella, tienes que
insistir, tienes que pagar el precio para que se pueda cumplir el propósito en esa persona.
¿Qué sucedió cuando dejaron a este hombre en el suelo? Jesús le dijo: Tus pecados te son
perdonados.
Esto muestra que Jesús en lo primero que está interesado es en sanar el corazón.
Saben, dos cosas sucedieron cuando los cuatro amigos hicieron su trabajo:
1. Hubo una revelación de Jesús como su sanador
2. Levántate y anda, ocurrió un milagro
¡Eso es lo que Dios quiere hacer! Hacer un milagro en nuestras vidas

TERCERO: Estar dispuestos a romper el techo

Ellos no se quedaron ahí, ellos rompieron el techo, sobrepasaron obstáculos, ellos llegaron
después de un largo camino, cansados y lo primero que vieron fue una gran multitud de gente, no
podían pasar, después de mucho esfuerzo ellos no dijeron hasta aquí llegamos.
Y es que muchos se quedan allí, por eso no invitamos a otros, por eso no vemos el milagro de su
presencia en nuestras vidas y es por eso por lo que seguimos así.
Pagamos el precio, cargamos la camilla, pero cuando vemos el obstáculo, cuando vemos el techo,
no somos capaces de romperlo.
El techo representa tu problema, tu situación, representa aquello que no te deja ver tu milagro,
aquello que no te deja ver a Cristo.
Dios quiere que hoy rompas el techo de incredulidad, el techo de decir, no puedo.
Hoy hay una palabra de parte de Dios en donde te dice que, si tú rompes el techo de tu situación,
de tu problema, Dios hará el milagro en tu vida, en tu familia, traerá sanidad en tu corazón, así
como lo hizo con el paralítico.
Muchachos, muchos nos hemos quedado a medias y cuando vemos el techo, las mentiras de
Satanás nos hacen creer que no se puede seguir, que es imposible cumplir sueños, cumplir el
ministerio.
¿Qué techos el enemigo ha puesto en nuestra vida?
¡Rompe los techos!
Porque hasta que no rompas el techo de la incredulidad, no podrás ver la luz del milagro de Dios
en tu vida
Ellos rompieron el techo, sin importar lo que sucediera