República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria

Universidad Fermín Toro

NUCLEO – ARAURE – PORTUGUESA

Problemas y
Ambigüedades

PARTICIPANTE:

María Ortega CI: 18.928.249

RELACIONES INDUSTRIALES
 Araure, mayo de 2017

PROBLEMAS Y AMBIGÜEDADES DE LAS RELACIONES INDUSTRIALES

Las relaciones industriales y su conceptualización por mucho que se

haya tratado de mejorar ha sido afectado a través de su uso por unas pocas
ambigüedades, aunque no se les considere de especial trascendencia. Se
trata de ciertas distorsiones sobre el alcance de la profesión o sobre la
denominación misma, que se han generado en la actividad cotidiana de la
empresa y generan no poca confusión. Entre estos problemas y
ambigüedades se pueden destacar:

LA CONFUSIÓN DE LA PARTE CON EL TODO:

Es frecuente que se considere las relaciones industriales como algo

sinónimo de la administración de personal o de la administración de recursos
humanos. Esta distorsión proviene de confundir la parte con el todo. Desde
un punto de vista académico y profesional, la administración de personal no
es sino una parte de las relaciones industriales, la que se refiere y se ocupa
de las relaciones de personal dentro de las actividades de la empresa.

Lo mismo se puede decir de las relaciones sindicales (o sindicato

laborales), son únicamente una parte de las relaciones industriales, la que
comprende el estudio, análisis y resolución de los problemas que surgen en
las relaciones entre la empresa, o sus representantes, y el sindicato o sus
representantes. La principal institución laboral dentro de esta área, es la
negociación colectiva.

Se debe mencionar que, aun cuando esta tercera posibilidad no se

suele dar tan comúnmente, se cometería el mismo error al confundir las
relaciones industriales con las relaciones institucionales, que no son sino una
parte también de las relaciones de trabajo en la empresa, las que se ocupan
de las relaciones entre la empresa y el gobierno (sean estas de índole legal o
meramente institucional), entre la empresa entre sí, o entre las empresas y
otras agencias laborales o económicas.

En Venezuela ha arraigado en gran medida esta confusión, debido

principalmente al hecho de que los primeros expertos en el campo de las
relaciones industriales se formaron empíricamente en los departamentos de
personal de las empresas petroleras multinacionales, asimilando sin
cuestionamiento alguno las denominaciones en uso.

Es importante destacar que, el jurista francés H. Francois Koechlin

establece tres grandes áreas de relaciones industriales, a nivel de la
empresa moderna, las cuales son:

৴ Las relaciones interiores de la empresa o de personal que

comprenden las relaciones de la compañía o institución con sus
empleados o asociados;

৴ Las relaciones exteriores de la empresa, o institucionales, que

comprenden las relaciones de la compañía o institución con las
autoridades gubernamentales del trabajo, con el público en general, y
con agentes o agencias de trabajo (proveedores, clientes, instituciones
empresariales, etc.);

৴ Las relaciones mixtas, parte internas parte externas, como lo son las
relaciones de la empresa con sus obreros sindicalizados y los
sindicatos que los representan.

LA CONFUSIÓN ENTRE LA FUNCIÓN GENERAL Y LAS SUB-

FUNCIONES:
 Como otra distorsión que se ha generalizado a través de los manuales
de administración de personal, de planificación de recursos humanos, de
comportamiento organizacional, etc., es la de confusión entre la
denominación global de las relaciones industriales y las denominaciones que
expresan sus contenidos funcionales, o ciertas filosofías y corrientes teorías.

Hay quienes confunden las relaciones industriales con las relaciones

humanas, cuando estas no son sino una corriente histórica, basada en las
experiencias de Elton Mayo, que enriquece los contenidos de las relaciones
industriales.

Otros identifican que, la función general de relaciones industriales con

algunas de las sub-funciones que están comprendidas en la misma, no en
forma aislada sino como un todo.

Así, por ejemplo, la contratación y control de personal, que cobra todo

su sentido cuando se la ve complementada con otras sub-funciones inter-
relacionadas, no menos importantes, como lo son la capacitación y el
adiestramiento, la seguridad industrial, el desarrollo de carrera, etc.

CONFUSIÓN ENTRE LAS RELACIONES INDUSTRIALES Y RELACIONES

PÚBLICAS:

La confusión entre dos profesiones, tan distintas, como lo son las

relaciones industriales y relaciones públicas, se debe a que algunos
egresados de ambas disciplinas utilizan el termino ¨relacionista¨ para
expresar en forma breve el sentido de su profesión.

En ninguna de las dos profesiones, el termino ¨relacionista¨ expresa

bien la función principal de las misma, pero mucho menos en el caso de los
licenciados en relaciones industriales. En todo caso, nada ayuda a la
diferenciación de ambas profesiones.
OMISIÓN DE LA DIMENSIÓN ¨MACRO¨ DE LAS RELACIONES
INDUSTRIALES:

En este caso, quizás, lo que más perjudica a la disciplina y profesión

de las relaciones industriales es el proceso omiso que se hace de su alcance
social, es decir, de su dimensión a un nivel macro.

Hay disciplinas como la economía que dejan muy en claro con tratado
especializados, esos dos ámbitos que se conocen como micro y macro nivel:
la micro-economía enfrenta, estudia, plantea y trata de resolver los
problemas económicos a nivel de la empresa; mientras la macro-economía
hace lo propio a nivel social, nacional e internacional.

De esta forma, la función del economista en la empresa es reconocida

por lo que se refiere a las estimaciones presupuestarias, los cálculos de
inversión y rentabilidad, etc.; pero también lo es, a nivel de políticas y
decisiones del estado, o de la sociedad global, por lo que se refiere a la
determinación de la rata de crecimiento económico optima, de las medidas
para el control de la inflación, o para salir al paso de los problemas
monetarios tanto en el ámbito nacional como internacional.

Se debe mencionar que, las relaciones industriales con frecuencia, se

ven únicamente vinculadas a las actividades administrativas en el seno de la
empresa, donde han alcanzado ya un reconocimiento importante. Pero es
raro encontrar el mismo reconocimiento a nivel de los problemas socios
laborales que se plantean en la sociedad global.

En muchas ocasiones, son los políticos quienes toman decisiones que

dicen relación a problemas laborales de cierta complejidad, no solo a nivel de
políticas generales u orientadoras, como puede ser la conveniencia de una
ley sobre el salario mínimo vital o de aumento general de sueldos, sino
descendiendo también al nivel profesional y técnico, ( referentes a la manera
de llevar a cabo las estimaciones porcentuales de los aumentos, el
establecimiento de las categorías de puestos, etc. ), que implica un conjunto
de conocimientos propios de los expertos en relaciones industriales, de los
cuales estos ( los políticos ) carecen.

Conviene, por tanto, recordar que a las relaciones industriales, a un

nivel macro, le compete el estudio, análisis, planteo y resolución de
problemas socio laborales, tales como el desempleo, los estudios de
mercado, la planificación nacional de recursos humanos, el análisis de las
consecuencias sociales de la implantación de tecnología avanzadas, la
formación para el trabajo, la remuneración justa, el control del deterioro del
salario real, la enunciación e implementación de políticas salariales y
sociales, etc.

DIVORCIO DA LAS RELACIONES INDUSTRIALES Y RELACIONES DE

PERSONAL:

Como se conoce en la actualidad, las relaciones industriales realiza

una importante labor que se desarrolla en el campo de los recursos
humanos, el capacitar, seleccionar, entrenar, adiestrar, perfectamente a la
fuerza laboral adecuadamente a los trabajadores para su amplio desarrollo
tanto en lo personal como en la Producción y Productividad de la empresa,
utilizando los métodos y técnicas más avanzados para los fines de la
Promoción Humana.

Pero durante la década de los años 1990, se hace patente algo, que
ya venía incubándose por años en los estados unidos y otras sociedades
post-industriales, el divorcio de las relaciones industriales y las relaciones de
personal, que por muchos años se habían identificado profundamente.