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Lección 5
¿Se somete a la enseñanza, disciplina y gobierno de la iglesia y
promete trabajar por su pureza y paz?
La última pregunta tiene que ver con la organización interna que Dios ha
dispuesto en su iglesia y la pureza y paz de la misma. En primer lugar,
aunque la iglesia no es el lugar principal en donde se recibe la enseñanza
(es el hogar), sí es la que regula y supervisa lo aprendido.
Dios ha dado a algunos el enseñar las Escrituras de una manera que son
responsables ante Dios y están llamados a apoyar a los demás en sus
conocimientos sobre la Biblia.
Pero Dios no llama solamente a una persona para que gobierne la iglesia,
sino que cada iglesia tiene un cuerpo de ancianos u obispos, llamados
por Dios para que dirijan su iglesia, y son apartados e instaurados en sus
puestos por el Espíritu Santo. Ellos deben cumplir los requisitos dados por
Dios mismo.
Eso no significa que debes obedecer siempre y todo lo que los ancianos
digan. Puede ser que ellos no estén enseñando o mandando lo que dice
la Biblia. En tal caso no obedezcas, porque hay que obedecer a Dios antes
que a los hombres.
Dios mismo está usando a los ancianos, por amor al que está pecando.
A nosotros los ancianos nos manda corregir con mansedumbre, así como
él hace. ¡Qué tierno es el Señor y qué bueno al cuidarnos por medio de
los ancianos y de la disciplina!