TEMA 11. ÁREA DE FINANCIACIÓN E INVERSIÓN.

1. Fuentes de financiación de la empresa

Son fuente de financiación los recursos líquidos o medios de pago a disposición de la empresa para hacer
frente a sus necesidades dinerarias.

Los recursos financieros de la empresa se pueden clasificar según cuatro criterios:

a. Clasificación según el plazo de devolución de las fuentes financieras:

– fuentes de financiación a corto plazo (inferior al año: crédito de los proveedores, préstamos
bancarios, etc.)
– fuentes de financiación a largo plazo (el plazo de devolución es superior al año: préstamos a largo
plazo y empréstitos, recurso propio de la empresa como el capital y reservas)
b. Clasificación según tenga una procedencia externa a la empresa o bien se haya generado
internamente por su actividad normal:
- financiación interna: los beneficios no distribuidos, reservas, y las cuotas de amortización y provisiones.
- Financiación externa: el capital social, los préstamos, los créditos de funcionamiento de la empresa, etc.
c. Clasificación en función si los medios de financiación pertenecen a los propietarios de la empresa o
bien pertenecen a personas ajenas a la empresa:
- medios de financiación propios: como el capital y las reservas.
- Medios de financiación ajenos: como los préstamos, créditos y empréstitos, ya sean a corto o a largo plazo.
2. Fuentes de financiación según la titularidad
Las fuentes de financiación se agrupan en recursos propios y recursos ajenos. Ver tabla.
Propios con carácter externo Capital, subvenciones recibidas
Recursos propios Propios con carácter interno Autofinanciación de enriquecimientos: reservas
(autofinanciación) autofinanciación de mantenimiento: amortización, provisiones
A largo plazo Préstamos a largo plazo, empréstitos de obligaciones, leasing y renting
Recursos ajenos A corto plazo Créditos y préstamos a corto plazo, créditos de proveedores,
descuento de efectos, factoring y confirming
2.1. Recursos propios o financiación propia.

La financiación propia sólo recurso más estables de que dispone la empresa, porque no se han de devolver en
toda la vida empresarial. Pero tienen más riesgos porque, en caso de quiebra, los socios son los últimos en
recibir la parte correspondiente de la liquidación de la empresa, ya que, en primer lugar, se ha de atender a
todos los acreedores.

Los recursos propios se pueden dividir en dos categorías:

- Recursos propios con carácter externo.

Estos están constituidos por el capital social, las ampliaciones del capital social y las subvenciones concedidas
por las administraciones públicas.

El capital social está formado por las aportaciones de los socios y las sucesivas ampliaciones de capital. Las
aportaciones pueden provenir de personas individuales, de empresa, de grupos de empresa o de sociedades
de capital de riesgo (SCR).

Las subvenciones concedidas por las administraciones públicas son los fondos que recibe la empresa de forma
gratuita destinado al fomento de una determinada actividad.

- Recursos propios con carácter interno o autofinanciación.

La autofinanciación de acción interna está formada por los fondos que se generan en la empresa como
consecuencia de su actividad. Se distinguen dos tipos de autofinanciación: