PSICOLGIA TRANSPERSONAL.

MARIA TERESA MORALES MENDEZ

GRUPO 601

¿Quién soy yo?

Organismo y energía que piensa y siente, que ha viajado y que conoce parte del mundo,
aunque este sea muy pequeño. Saberes acumulados, experiencias y aprendizajes. Afán de
crecimiento y mejora.
Chacras
Tenemos centros de energía que entra y sale de nuestro cuerpo. Cuando aprendemos a
identificar estos centros, podemos personalmente generar estrategias para organizar y entender
nuestras emociones, cambiar nuestros pensamientos y por ende, modificar nuestro camino de
vida y lo que hacemos para lograr nuestras metas.
El Poder
Hace muchos años que considero que tengo el poder de hacer las cosas que verdaderamente
me propongo. Soy una persona que me gusta prepararme, saber, rodearme de personas que
construyen, esa vibración es la que me ha permitido salir en situaciones complicadas de vida,
afrontar aquellos retos que en ocasiones se presentan repentinamente. Siempre me digo, YO
PUEDO.
La verdad
Hablar con la verdad es algo que para mí es importante siempre, bajo ninguna circunstancia
puedo justificar el uso de las mentiras y prefiero tanto decir siempre la verdad como que siempre
me hablen con la verdad. A veces duele escuchar ciertas cosas o decirlas, pero es preferible vivir
de la verdad, ya que la mentira se hace una costumbre muy perversa y no alimenta nuestro ser
interior. Nos hace seres viles y aún más vulnerables.
El dinero
Personalmente he aprendido que es necesario desprenderse de algunas creencias tóxicas con
respecto al dinero, por ejemplo, creemos que siempre podremos agar después, creemos que el
dinero es sucio o solo se obtiene a través de cosas negativas o relacionadas con la delincuencia,
el dinero es solamente para algunas personas, no puedo tenerlo todo, el dinero, así como llega se
va, “algo va a llegar y de la nada me volveré millonario”. Todas estas ideas son erróneas y hay
que modificarlas para poder tener una relación más sana con el dinero. Hace un par de años
vengo haciendo cosas para sanear de a poco mis carencias y para tener una mejor relación con el
dinero: entender que la abundancia no es una cantidad sino una sensación. El dinero fluye, pero
hay que aprender a conservarlo, retenerlo, quedártelo. Entender que no tengo que ser otra
persona para ser abundante. Diariamente aprendo a sentirme abundante y me repito “todas mis
necesidades son y serán cubiertas. Todo se va a acomodar con mi trabajo y mi esfuerzo”
La importancia del amor
Para mí, el amor es el sentimiento y la fuerza que une todo aquello que no se le puede
encontrar una explicación. Es crecimiento, abundancia, superioridad, tranquilidad absoluta, paz y
felicidad encarnada en un solo sentimiento. Creo que cuando el ser humano siente amor por lo
que hace o por alguna persona, incluso y sobre todo por sí mismo, puede acceder a la realización
de todo lo que se proponga con los mejores resultados. Me parece que el mejor estado de una
persona es cuando está enamorada.
Razón y amor
Mientras el amor es pura emoción, la realidad en ocasiones nos obliga a frenar un poco estas
emociones a través de lo que nos dicta nuestra mente, la razón. Es importante que busquemos un
balance entre ambas, hay momentos en los que podemos ser muy duros con otras personas en un
afán de ser totalmente razonables, pero no tomamos en cuenta ni nuestros sentimientos ni los de
los otros. Por el contrario, en ciertos momentos tendemos a dejarnos llevar por sentimientos de
amor profundo, aunque la razón nos muestre algún camino distinto. Ninguna de estas dos
posturas extremas nos ayuda en nuestro crecimiento personal, sino que nos detienen en nuestro
crecimiento. Hay que tratar de ser amorosos pero conscientes de nuestra realidad.
Culpa y amor
Existe la culpa adaptativa y desadaptativa, es la desadaptativa la que provoca emociones
displacenteras que es con las que debemos trabajar como psicólogos. La culpa resulta de la
percepción o autovaloración negativa de un evento. Cuando se percibe como algo malo, surge
una emoción negativa y esta se puede extender por mucho tiempo. Debemos a partir de nuestros
juicios morales establecer lo que no está bien y sobre todo lo que sí es nuestra responsabilidad,
más que culpa, para que nuestras decisiones no nos generen sufrimiento posterior.
 Matrimonio interior
El matrimonio interior se refiere a ser congruentes. Muchas veces tratamos de aparentar que
vivimos de alguna manera que no creemos que sea la correcta por no quedar mal con los demás.
Es importante distinguir entre las cosas que realmente somos y nos pertenecen de las cosas que
sólo hacemos para cumplir las expectativas de los demás. Cuando nos relacionamos con otros es
importante que sepamos muy bien que hay en nuestro interior y que eso mismo lo llevemos a la
práctica exterior, ya que muchos de los conflictos personales que cargamos a cuestas solo son
porque queremos cumplir las expectativas que otros tienen de nosotros en los diferentes roles que
jugamos en esta vida.
Sexo
Es una forma de comunicación profunda que busca recuperar la unidad. Se dice que el sexo
tiene importancia a nivel sagrado y a nivel divino ya que en él se aloja la energía sagrada, básica
y fundamental de la vida, cuando se encuentra conectada con el amor es una energía primordial
que busca la unión trascendental. En mi experiencia personal he tenido oportunidad de conocer
un poco sobre el sexo tántrico que busca el aprovechamiento de todo nuestro espíritu, energía y
cuerpo en el acto de compartir energías vitales. Creo que si las personas tuvieran un poco de
preparación en este tema la convivencia sexual y de pareja sería mucho más plena y satisfactoria
en varios niveles.
Ni locura, ni muerte ni homosexualidad
La clasificación es una tarea que el hombre practica desde hace muchos años, con el afán de
descubrir, categorizar y, por ende, conocer. Cuando aplicamos etiquetas y clasificamos a las
personas no todas las consecuencias son positivas o con mero afán de conocimiento, sino que en
el ser humano hemos sido testigos de cómo las etiquetas se usan para separar y discriminar. Por
eso es importante valorar a las personas por su esencia y no por sus gustos o preferencias e
incluso por sus padecimientos, sino como seres humanos que tienen formas distintas o incluso
más extensas de conocer el mundo.
El pedir, el poder de la oración.
Personalmente he experimentado el poder de la oración y del saber pedir. No soy una persona
que me consideraba religiosa por muchos años, a pesar de ser parte de una familia
profundamente católica, sin embargo, hace un poco más de un año mi hermano tuvo que pasar
por una cirugía bastante peligrosa y el pronóstico de su salid con vida y recuperación apenas
tenían un pequeño porcentaje, sin embargo, era la única salida posible. Una vez que la familia y
amigos se fueron enterando de lo critico de la situación pues obviamente se acercaron a nosotros
y aun quienes no eran creyentes o pertenecían a otras religiones nos acompañaron con sus
pensamientos, círculos de oración y en algunos casos ofrecieron misas durante la cirugía de mi
hermano. Nuestra sorpresa fue que no solamente salió con vida, sino que tuvo una recuperación
bastante extraordinaria con respecto a lo que se pronosticaba. Su enfermedad es muy fuerte y
tristemente tuvo una recaída medio año después, sin embargo, desde aquel entonces he cambiado
mis creencias personales y hago peticiones diarias de vida y agradecimientos constantes porque
fui testigo de la magnitud y fuerza de los pensamientos conjuntos de salud. El momento que más
me marco fue cuando una de mis amigas más cercanas que es atea me dijo…. Hermana,
pediremos por su salud con muchas fuerzas por que la fe hace que ocurran milagros. Y así lo
vivimos, como un milagro.
La muerte, la vida, una experiencia.
Lo importante de todos los elementos que revisamos a lo largo de este libro es que, nos
ayudan para descubrir nuestro sentido de la vida, nuestros objetivos, pero sobre todo es una
invitación para seguir evolucionando, poner atención en aquellas cosas que hemos dejado
estancadas en nuestra vida y que tratemos de darle un giro más positivo a nuestra vida,
desarrollas la capacidad de tener una vida más tranquila, más amable y sobre todo de hacer un
bien a los que nos rodean con el objetivo de tener experiencias más pacíficas y redituables
emocional, espiritualmente y hasta económicamente. Somos seres que nos desenvolvemos en
varias esferas y debemos tratar de ser los mejores en cada una de ellas.