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LAS TELECOMUNICACIONES EN EL ESPACIO

Las técnicas aplicadas e introducidas en el espacio geográfico provocan dentro del


sistema mundo cambios profundamente sociales y tecnológicos. Hay que destacar, la
presencia histórica del hombre sujeta a las acciones creadoras y productoras de objetos
técnicos funcionales para su posterior utilización. Según el filósofo alemán Marx, K. (2003,
p.112) dice: Pues, en primer término, el trabajo, la actividad vital, la vida productiva
misma, aparece ante el hombre sólo como un medio para la satisfacción de una necesidad,
de la necesidad de mantener la existencia física. La vida productiva es, sin embargo, la vida
genérica. Es la vida que crea vida.

A través de los tiempos las técnicas innovadoras han convivido con aquellas ya
incorporadas y manejadas por la humanidad. Cabe indicar, que a lo largo de los siglos las
herramientas laborales y operarias han asistido al hombre por sus reales practicidades en el
entorno. Continuamente, se involucra un conocimiento en el diseño de objetos técnicos,
preparándose globalmente las sociedades para atender futuros y considerables conflictos.
Habermas, J. (1984, p.55) afirma:

La técnica es en cada caso un proyecto histórico-social; en él se proyecta lo que una


sociedad y los intereses en ella dominantes tienen el propósito de hacer con los hombres y
con las cosas.

Hoy día, los objetos técnicos modernos han facilitado una mejoría en las formas de
organización espacial, fabricándose no solo a gran escala sino para acelerar el ritmo y la
velocidad existencial del individuo. Un ejemplo, lo representan las telecomunicaciones, que
son en la llamada globalización una bien proporcionada revolución científico-
comunicacional de alcances geográficos altamente efectivos. Pool, I. (1993, p.31)
argumenta:

El término nuevas tecnologías de comunicación es una forma abreviada de referirse


a veinticinco dispositivos principales, incluidos la televisión por cable, las grabadoras y los
discos de video, los satélites, el telefax, las redes de computadoras, el procesamiento de
información por computadoras, los interruptores digitales, las fibras ópticas, los láseres, la
reproducción electrostática, la televisión de pantalla grande y alta definición, los teléfonos
móviles y los nuevos procedimientos de impresión.

Los objetos técnicos en telecomunicaciones son interdependientes con las relaciones


sociales y el espacio geográfico. Lógicamente, se genera sobre las comunidades el
nacimiento de nuevos signos y simbolizaciones en la percepción psicológica del sistema
donde tienen su establecimiento. Las sociedades asumen el fenómeno de
telecomunicaciones como algo que les permite resolver con prontitud problemas y
contratiempos, afectando todo tipo de órdenes como: política, cultura, economía, ecología,
entre otros.

El ser humano utiliza áreas como laboratorio para la construcción y reproducción


masiva de objetos técnicos multimedia, los cuales, absolutamente tendrán un efecto
ambiental. El escenario transforma su esencia alterando el campo físico-natural, donde se
perciben contemporáneamente preocupaciones e incertidumbres en materia climatológica.

Las telecomunicaciones son vistas como un progreso por el salto dado en la


precisión de enfermedades epidemiológicas para administrar la salud pública. También,
representan modos de entretenimiento y son a su vez, una causa letal en la absorción o
consumo exagerado tanto del tiempo personal como colectivo. Pool, I. (1993, p.226)
refiere:

Las telecomunicaciones perfeccionadas tienen tanto que aportar a la productividad,


al adelanto científico y técnico, a la seguridad internacional y al esparcimiento que sólo
será cuestión de tiempo que los gobiernos renuentes vean lo conveniente de actuar del
mismo modo como han estado haciéndolo los gobiernos progresistas.

La implementación conjunta de nuevas habilidades y destrezas permite a los grupos


sociales obtener un nivel superior al que le antecedía. Por esa razón, las naciones en
distintas edades pueden diferenciarse unas con otras cuando se compara el grado de
desarrollo técnico especializado. Sin embargo, estos elementos recientes juegan papel
importante en el cuadro militar para instaurar un dominio del espacio vital. Hardt, M y
Negri, A. (2002, p.318)
Los poderes de la ciencia, el conocimiento, el afecto y la comunicación son las
fuerzas principales que constituyen nuestra virtualidad antropológica y que se despliegan
por la superficie del imperio. Este despliegue se extiende por los territorios lingüísticos
generales que caracterizan las intersecciones entre la producción y la vida. El trabajo se
hace cada vez más inmaterial y realiza su valor a través de un proceso singular y continuo
de innovación en la producción; la fuerza laboral se vuelve cada vez más capaz de
consumir o usar los servicios de la reproducción social de maneras más refinadas e
interactivas.

En conclusión, los aparatos en telecomunicaciones han suministrado una respuesta


distinta al espacio tangible, modificando su espíritu e identidad con la ciencia estimulando
planes vanguardistas y gnoseológicos. Así mismo, estas generaciones avanzadas han
asumido el reto de descubrir lo desconocido, orientando cooperativamente esfuerzos por
ampliar los encuadrados conocimientos científicos y otras gamas de equipamiento técnico.

Para terminar, las ciudades urbanísticas constituidas por infraestructuras envenenan


la atmosfera frecuentemente, debido al dióxido de carbono que despiden los innumerables
automóviles conducidos apresuradamente en múltiples vías. Finalmente, la ecología ha
registrado y evaluado aspectos perjudiciales promovidos por tecnologías digitales,
ocasionando graves eventualidades como las contaminaciones de diverso tipo, donde el
ente antrópico es principal responsable en ese deterioro del planeta.
REFERENCIAS

Habermas, J. (1984). Ciencia y técnica como ideología. Editorial Tecnos. España

Hardt, M y Negri, A. (2002). Imperio. Ediciones Paidós. Argentina.

Marx, K. (2003). Manuscritos de economía y filosofía. Editorial Alianza. España

Panikkar, R. (1999). El espíritu de la política. Ediciones península. España

Pool, I. (1993). Tecnología sin fronteras. Fondo de Cultura Económica. México

Popper, K. (1994). En busca de un mundo mejor. Ediciones Paidós. España

Sánchez, J. (1990). Espacio, economía y sociedad. Siglo XXI de España Editores.


España
Stiglitz, J. (2006). Como hacer que funcione la globalización. Taurus. España

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