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4 de diciembre de 1926

PLUS ULTRA "LA LATINA", FUNDADORA

L a escala de Jacob El convento de las Franciscas y el hospital de la Concepción


Oigo y leo qm "Zogoibi", la última novela de D. Enrique liarreta,
está iiray bien escrita. Gracias de nada, señores satisfechos. ¿E.s que
treinta años del arte por el arte Boa han simplificado tanto el alma
cjue aiitü tm libro como ésts no so nos ocurre sino que ss encuentra
bien «scrito? Alabado sea Dios porque se inventara la Imprenta en
f! «Iglo XY. Si "Zogoibi" se considerase en manuscrito, con el mé-
todo del arte puro, descartariamos de la novela el argtunento, por
úCr indiferente; lo que coatiene panorama cultural, por ser materia
extraña; los sentimientos qua la inspiran, porque los sentimientos
no soa pm-a estética, y nos quedaríamos perplejos antea las palabras
mismas, por su ambigüedad enáemojiiada. En una manaana, por
ejemplo, no sabríamos si preferir el sonido de sus tres silabas, man-
•?.-na, o la frut-ít evocada por citas ruidos, o sus asociaciones hístá-
icas: Eva, la serpienta y el Paraí.TO; París, Afrodita, Helena y
froya. AcabaricJiíos, para salir de dudas, por no ver en las palabras
.¡\M que sus caligramas, y reduciríamos el Juicio a dilucidar si el
Sr. Larreta es o no un iiendolista.
Por mi parte, profiero "Zogoibi" a "La ^otria de Don Ramiro",
con ser ésta la novela de lengua española que más me ha gustado
entre las publicadas en lo que va de siglo. El lenguaje es igualmente
bello en ambas; más clásico y despacioso en "La gloria"; más breve
y rápido en "Zogoibi". Pero el motivo de «La gloria" es de orden
intelectual. El no%'clista trata de explicarse la ruina de im Imperio
y especula sobre el exceso de celo por la pureza de la sangre. La
inspiración de "Zogoibi" es do otro género. La anima una intención I
profunda y elevada. El novelista realiza una obra de servicio social, f
La superioridad de «Zogoibi» sobre «La gloria" se funda en la pri-
macía de lo moral sobre lo intelectual. E s superior, porque lo inclu-
ye; pero lo intelectual, &a cambio, no incluye lo moral.
í a ai«umento tk "Zogoibi" p u d i « « parafrasearse de la "Celes-
tina"! F e é r i c o , de nt&le linaje, claro ingenio, gentil disposición, lin-
da crianta, no acostumbrado a refrenarse, preso en el amor de Lu-
cía, mujer m o » y piadosa, de espíritu elevado, sublimada en su reli-
gión, se deja arrastar de la fascinaclén sensual de una extranjera,
por lo que engaña a su amada en un boscaje de la I^mpa argentina, EL C50ÑVEKT0 DE I-A CONCEPC3IOS FRAKCISCA Y Eli H O S P I T A I J DE IÍA IÍATIÍÍA A PBIXOrPIOS DEL SIGIXJ PASADO
y viéndose un atardecer acechado por un bulto que imagina ene-
migo, arremete contra él, y al ver que había matado a Lucía busca Es curioso hacev notar que el a quien no i»areció bien la funda- cerca ya da la plaza del Arrabal, ra la rendición de la ciudad; pero obras de construcción duraron guos" ; se desconocen, MI fin, sus
su fin amargo y desastrado arrojándose sobre su cuchillo. arquitecto que trassara el actual ción del convento de la Concep- extiende la que llamamos Mayor, en marzo de 1501, escalando los ocno años mSs. Asi saDemos, por poesías latinas, que aun siendo
Esta admonici&a contra la lascivia nos es perennemente necesa- teatro de la Latina colocó en su ción Jerónima heclia por. doña y allí estableció a las monjas des- riscos de la sierra Bermeja, el ima cláusula de su testamento, que niña escribiera. Y de los retaJ>los,
ria. Como los pueblas del Norte han de corregirse su tendencia a ser fadiada un mirador de aparien- Beatriz Galindo. ahuciadas. Y su conciencia sere- general Ramírez y Ramírez de diera a conocer Ponz, el famoso cenotaftos, t a l l a s , mármoles y
brutos, ios del Mediodía no alcanzarán la altura de que capaces son cia conventual; tiene, como verá Curioso pleito el que mantuvie- na llegó a más aún: llegó a per- Madrid cayó muerto, y no venci- erudito, que Ramírez había desig- bronces que hubo en los dos con-
ron; púsose de parta del guardián donar al guardián de San Fran- do, en una celada de loa infieles. nado para construir el hospital a ventos desaparecidos, iqué se hi-
mientras no se decidan a sacarse los monos del cuerpo. No insisto el lector en el admirable dibujo de San Francisco ol cardenal Ji- Í cisco y a pactar con él y a fun- Aún quedó a la mujer sabedo- un arquitecto moro llamado Mae- zo? iDónde están? iQuién los
que ha reproducido el lápiz ágil
en esta moralidad porque tampoco el autor la subraya. Lo que fas- de Sancha, la misma construcción ménez de Cisneros; durante mu- <iar'otro convento para su Orden, ra el consuelo del tierno afecto, se Hazán. vendió y lucró?
cina a IWerico no és tanto la atracción seitóual de la extranjera quf tenía el mirador del «mvento chos meses, acaso, esta discordia instalando en el edificio de la pla- casi maternal, que le profesara la Muchos madrileños hemos ad- El padre Sigüenza, en su "His-
como el misterio de su extranjería. Y lo que convierte la aberración de la Concepción Jerénima, que apasionó la Corte y fué comidilja zuela de la Cebada unas monjitas Reina Isabel; pero no le sobrevi- mirado aún aquel edificio, si bien toria de la Orden de San Jeró-
de Federico en problema moral es que toda la América la padece, en allí fundara esta admirable mu- en las tertulias y murmuración franciscas que también recibieron vió esta amparo al correr de tres pocos vivirán aún que hayan al- nimo", nos habla de los dos se-
mayor o menor grado. Su alma está fuera de su centro porque lo jer, cuya memoria sobrevive con en los corrillos. Tenía doña Bea- el nombre prelativo de "Concep- años más. No necesitaban el Rey canzado a conocer el convento pulcros de mármol, labrados con
busca no en sí misma ni en Dios, sino en los encantos de algún país el alias o remoquete honroso de triz, a la sazón, veintinueve años; ción", que la doña Beatriz ante- Fernando ni Jiménez de Cisneros contiguo de la Concepción Fran- grotescos, según el estilo del tian-
extranjero. Los pueWos americana son sanos y patriotas. Todos ellos "la Latina", y de quien tanto que- tres hacía que encuadraban su pone en todas sus fundaciones. de sus letras ni de su talento; cisca y el de la Concepción Je- po del Renacúniento, alzados a
encuentran palabras elocuentes para expresar el culto de su tierra: da por indagar y por decir, aun i-ostro, hosco y severo, las tocas No es maravilla que tan acen- alejábanla de la Corte las envi' rónima, donde hoy se abre la ca- los lados del retablo mayor. Sobre
después de cuanto interesante, de la viudez. E r a el año 1504; drada resignación alienta en la dias de cuantos la conocieron en lle de este nombre. Recordamos sus tapas extendíanse sendas es-
curioso y hondo escribió Llanos y había pasado España por la trá- admirable salmantina, que fuera privanza. Dedicóse entonces la aquella graciosa portadita, que vi- tatuas yacentes: la del "Artille-
Buenos Aires—patria hernuyaa— gica, espantable hora do 'a muer- atribulada mujer a confortar su ro" y la de "la Latina». No los
Torriglia en su estudio titulado doctora sin birrete y consejera de mos desmontar piedra a piedra,
tiene h Pampa grandiosa. "Una consejera de Estado". te de la Roina Isabel, y la La- ánimo en estas obras de miseri- prometiéndose entonces que sería unió, sin duda, un matrimonio do
La Pampa tierw el ombú. reyes sin firma y sin preeminen-
Consejera de Estado, maestra tina" quedó sin amparo en la cias. El siglo nuevo, apenas lle- cordia y de piedad, cumpliendo alzada en cualquier otro lugar, amor; Ramírez y Ramírez era
Pero en cada estancia hay una mujer que no vive tranquila por de latín y camarera de la Reina Corte. gado en el redar del tiempo, la así la voluntad de su esposo. como ejemplar precioso de la ar- viudo ya cuando casó con doña
hallarse t a n lejos de Buenos Aires, y en cada cuadra de Buenos Católica, admirada en vbrtudes Ganado el pleito por c! guai-dian ha llenado de espanto y dejado quitectura madrileña. Descríbela Beatriz Galindo, a la que acaso
Raro temple el de estos hombres así un historiador: "Tenía el hos- doblara en edad. Más parece que'
Aires hay otra mujer, y acaso un hombre, que sueñan con París. Es tanto como en letras, viuda ya del do San Francisco, las monjitas en soledad. Al morir el anterior, do guerra, que mataban sin duelo
el quince de la Era cristiana, pital una bellísima portada de es- concertaran esta boda los propios
rentimicnto que conoce bien D. Enrique Larreta, porque si París fue- general Ramírez de Madrid, se- jerónimas tuvieron crae abandonar
abracóla por postrera vez su es-
en los combates y tenían la vio- tilo gótico con muchos rasgos mu- rayes, al lado de quienes desem.-
cretario del Rey Fernando, conse- el convento que doña Beatriz les lencia y la fuerza por norma de
i-a un pecado, necesitaría ir a Boma para que le absolviesen. E s la jero de Estado y Guerra, prez y había preparado en la esquina de poso, ido a la guerra para abatir dejares, un hueco con arco túmi- peñaban funciones similares y go-
herencia de soldados, de caballeros, de funcionarios, de inmigrantes capitán famoso de las tropas que su vida moral, y luego creían do apuntado, escudos de armas, zaban iguales afectos.
la calle de Toledo y la plazuela la felonía y soberbia de los moros apaciguar la cólera divina fun-
nostálgicos. El sentimiento que éstos enfocaban hacia su país nativo, cercaran y rindieran Granada, do la Cebada. Curioso desahucio, de la serranía de Ronda, que se imágenes piadosas y un grupo que La Revolución secularizó ambos
dando hospitales para curar heri- representa la Visitación sobre re-
.sus descendientes dirigen hacia la cultura que les es más extraña. asaltador osado de los castillos de que da idea de cómo las Ordenes habían sublevado. Durante año y dos y enfermos, y conventos para conventos; nuestro tiempo, para
Y a fuersa de curiosidad por lo extranjero, se exponen al reproche Alhabar y Cambil, cuyas guarni- religiosas recelaban unas do otras medio se sucedieron felices nue- pisas de fina labor, y una venta- ensanchar la calle de T(^edo, de-
recoger y recatar doncellicfis des- n a ; todo recuadrado por un arra-
(jue les hacía aquel pintor francés que se asombraba de que uno de ciones aprisionara enteras; alcai- y luchaban entre sí. No turbo el vas del "Artillero", que así apo- ei^añadas del mundo y de sus rribó el hospital de la Latina; una
daban al bravo guerrero ame- bá con el cordón franciscano."
cilos supiera más de la pintura de Barbisson que él mismo: "Mote ees de de la fortaleza de Salobreña, ánimo varonil de "la Latina esta falsedades. No es que "la Latina", horrenda casa moderna, almacén
que conquistara, no tuvo poder contrariedad. Hizo desalojar unas drentador de aqueüa morisma, en sus fundaciones, unieni el nom- de inquilinos; un teatro-cine y un
¿•ens lá n'ont done pas de paysl" bastante para contrarrestar la in- que no había olvidado cómo trece En él interior había una esca- "bar" se alzan sobre «1 solar de
casas que heredara del mayoraz- bre de su marido a la buena obra lera gótica con un notable pilaro-
¿Por qué no amar lo propio?, se ha dicho el Sr. Larreta. j P o r fluencia del g-uardián del conven- go de su esposo en la misma cade •tííos antes h. tomara ol puonta de las monjitas de la Concepciór?S
qué no trocar esta nostalgia en un amor a nuestras cosas que las to de San Francisco, allí cercr.no, de los dos ccmventos de Madrid, te de arranque de retorcidos ba-
do Toledo, en la acera izíiuierda, Málcga en osado asalto y forzá- el convento de Málaga y el hos- Francisca. Se conserva en la ^
vaya depurando y ennobleciendo hasta alzarlas a Dios? Un extran- quetones; había también algunos memoria de .la gente él reapodo de
jero dio ^ ejemplo, haciendo de la Pampa el escenario de una de las pital de la Concepción, que; aún bellos arte6<mado6 en las enferme-
ejciste, edUií»;{Kto áb m»y0^ en ia cías. _,.,,j; ,. • •. ,
la ftSMiado»», poiQoe jBl ,hosiHtal
contadas o&ras maestras de Ift litéfffttaa ttigleSá^ííbawtoai * t a oÉí' is ^ ^ ^ Í*J ' -¿dS^I^W^w' reedifíeó la porta- y ivegá ritaSbíre ~ " "
bú*, de W. H. Hudson, pubílcada en Londres, 1%2. Todo es amor dativa siegiepft eiv el ánimo-del da 9nelr-iroervo hospital? Se dijo
en "Zogoibi": a la Pampa, a la estancia, a sus labores, a sus gentes. ajetreado militar; acaso fueran trito munjc¡i>a!. Poca g«nte, ,t^
que iba a ser colocada en el edi- embargo, une el apodo de «la jLa-
Su Lucía, como la Auristela del "Persiles", es absolutamente incom- cumplimiento de votos en las te- ficio ya acabado por el Monte do
parable. "Zogoibi", el desventuradillo Federico, tiene la nobleza del merarias empresas que empren- tina" el noBjbre de la humanista,
Piedad en la plaza de Celenque. de l a poetisa, de la consejera de
hombre que no sabe mentirse a sí mismo. Se ha apasionado por una diera y realizara ganando tierras, Parece ser que las pobres piedras
señoríos, honores, ascensos y al- Isabel la Católica, d<ma Beatris
mujer mala; pero no llama amor a su pasión, ni buena a la extran- están arrinconadas en uno de los Galindo. No era madrilefia, sjno
j e r a ; sí "afinidad electiva" al adulterio. El cura español don Alvaro, caidías. almacenes de la Villa. Salvo esta salmantina; aun afeí, jno cree el
cordobés lleno de añoranza, pero abierto a la belleza de la Pampa El hospital de la Concepción de institución benéfica, que subsiste Ayuntamiento de Madrid que esta
y a la da los caracteres de sus hijos, es la figura más noble del libro. la Madre de Dios, que hoy llama- después de cuatro siglos, cuanto admirable mujea* debería tener
mos de la Latina, fué fundado labraron las manos de "la Latina" una estatua, un monumento con-
No hay desamor en la novela sino para las cosas y los seres que y cuanto fué fruto de su saber
no existen sino como ejemplo de lo que debe ser sustituido y supe- por el propio "Artillero" y co- memorativo en la plaza de San
menz-ó a prestar el benéfi» fin de pareos condenado a desaparecer. Millán, donde tantos estorlyos in-
rado: la casulla hecha sin gracia, las casas tiradas a cordel y sin su instituto dos años antes que No se sabe dónde paran sus "Co-
espíritu, aquel doctor Maldonado, algo amulatado y que "represen- útiles y antiestáticos hay, o en la
marchara a la campaña en que mentarios a Aristóteles"; se ig- plaza del Humilladero, o en Puer-
taba como pocos esa literatura, mitad delirio y quiebros de hombre donde hoy más ampliamente se nora de modo cierto si son suyas] ta de Moros?
de color, mitad simiesca imitación de modas europeas, que hace pen- encontrara la muerte, si bien las las "Notas sabias sobre los anti-
sar en los negros con taparrabo y sorabrero de copa de las colonias DitHÜBio PÉREZ
francesas".
Un libro, en suma, que pudiera adoptar como lema: "Por el amor
de nuestras cosas y su continuo perfeccionamiento a la plenitud de
nuestros destinos." El autor la ha llamado "Zogoibi", como decían a
Boabdil sus paisanos, por su desventura. Hubiera podido titularla,
sin demasiada vanidad, "La escala de Jacob".
immiiiiiiiiiiiiiiiiiiiBmiíaiiBil
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miiMiiiiimiiiiiiiiiiiiiiiiimiiiiiiHii
(Prohimm Vi reproducOón.) Ramiro DE MAEZTO
CWQ f P raí «iWC m^ üm
ALIMENTE '/%rriiVif^*-**-""l

^ © U N E N S : C O N l-A F E C U -
XA ^^aK UA F U O R OEt_ IVIAIZ
.1^ "ITil

Eli HOSPITAIi DE LA LATINA E S LA ACTUALIDAD Y CASAS MODERNAS CONSTRUIDAS EN EL SOLAR DEL CONVENTO DÍJ LA CONCEPCIÓN FRANCISCA

en el antiguo español", por Mr. James H. English; Históricos, no ha estado ocioso. Ha organizado varios
FOLLETONES DE "EL SOL" ;* Í?JE? DICIEMBRE DE isss "Concepción Arenal", por Mr. R. E. G. Vaillant (publi- cursos de conferencias, encargados al Sr, Beiaúnde, de
cadas ambas monografías por el Instituto de las Espa- la Univer.sidad de l i m a ; al Sr. Solalinde, del Centro de
tudiantes de lenguas románicas que se sdentan atraídos
por la gran cultura de Italia.
ñas); "La Iglesia y el clero en la novela picaresca es- Estudios Históricos; a D. Américo Castro, del mismo EL MAPA FILOLÓGICO DE AMBBICA
pañola", por Mr. Robcrt H. Vílüams; "La novela en Ve- Centro y de la Universidad de Madrid; a la señora de

Los estudios literarios españoles nezuela", por D. E. Rateliff; "Luis Zapata", por Jayne Falencia ("Beatriz Galindo"); al Sr. Héctor Roca, da
M. Disbrow; "La influencia da Wálter Scott en "El se- Buenos Aires, y actualmente a D. Femando de los Ríos,
ñor de Bambibre", por Katharine Duffy; "Alonso Casti- de la Universidad de Granada, enviado por la Jxmta
llo Solórzano", novelista, por Rie Jarrat; "El "Marcos para Ampliajción de Estudios al Congreso Internacional
12 terreno está bien preparatlo para la difusá&x d d
español y de la cultura española en los Estados Unidos.
Hay que considerar quo las dos lenguas principales d d
continente americano son el español y eJ inglés. El
de Obreííón" de Espinel y su relación con el desarrollo de Filosofía de la Universidad de Harvard. mapia filológico contiene, sin duda, muchos otros cdo-

en los Estados Unidos de la novóla picaresca española", por Bernard Levy;


"Vicente Querol", por Edith S. Lord; "Vida y obras de
Céspedes y Memeses", por Rovirera Onderdonl:; "La pei>
sonalidad de Eugenio M, de Hostos", por Antonio El Instituto de laü Bsipañas ha fundado IM Clubs e«-
res, aJguno de los cuales forma una mancha extensa,
como el portugués del Brasil. El francés ©n Haití tiene
un área reducida por la corta pobladóíi de esta R«?púb3i-
ca, que cuenta unos dos milloiaes de habitamtas y donde
S. Pedredra; "Vida y obras del Padre Alonso Rodrí- pañoJes en Univ«rsidad>ss de 28 Estados de la UriTón; además el lenguaje hablado por el pud>lo es im dialecto
POR E. GÓMEZ DE BAQUERO guez", por Constance Stanley; "T31 foMore en "Fernán ha abierto una biblioteca especial de 500 volúmienes,
Cabalíeiro", por Bárbara Ellis. tiene estiablecida una oficina de información, organiza
desde hace seis años lo« viajes anuales de profesores y
francocriollo muy alterado. En el Canadá, el francés,
hablado todavía por más de dos millones de habitanteé'.
Nuevos aspirantes al doctorado o a la licenciatura alumnos ad-eiantados norteamericanos para asistir a los que representan la cuarta parto de la población, va c^-
LAR LENGUAS ROMANCES EN LA centros diferentes de carácter nacional dedicados _no en español preparan monografías acerca de asuntos cursos de vacaciones d d Centro de Estudios Históricos; tíiendo ante la lengua oficial, que ©s al mismo tiempo la
LNlVEESmAU DE COLUMBIA sólo a la correspondiente especialidad románica, sino hispánicos: Emr^^a Eigler acerca de "El duque de Ri- reíúne colecciones de materiales para el estudio de temas más extendida en el Dominión. Los canadienses de ori-
a desarrollar las relaciones de su propia cultura con la vas"; L. F. Caraimo sobra "El medioevalismo en la lite- españoles e lúspanoamericanoe. gen francés son por lo general bilingües.
Un rocíente infci-me del jefe del departamento de da los Estados Unidos y a agrupar a los estudiosos de ratura española contemporánea"; Halfdan I. Gregerse: La multitud de lenguas indígenas habladas por los
Lcr^uijs roínuiíces de la Universidad de Colambia en su respectivo idioma. ÍVancia cuenta hace años ccn el Publica una revista, "The Romanic Review", y una restos de las poblaciones indias de América carecen df
"Ibsen en España"; Myra G. Hole: "Bartolomé Mitre"; "Biblioteca", en que alternan vciúmenes en inglés y en
!íueva Yi^rk <ífroco un instructivo conjunto de noticias Instituto de Estudios Fraaice-se* y la Casa de Francia, Concspción Meléxidez: "La fcoVela indianista en Hispa- español acerca de aíuntos hispánicos. Las Universida- existencia literaria. Así, pues, son el eepañol y el ingiíK
que ríívelan !a inteiiia actividad y la extensáón que han que desenvuelve múltiples actividades. Italia tiene, el noamérica"; Antonio S. fe^Eeira: "La literatura en des d'S Buenoe Airee y de Méjico ae han inscrito como las dos lenguas que se disputan el Nuevo Mundo. El ir-
ídor.nzado cu a<¡ueila Universidad y en los varios centros Instituto de Cultura Italiana y acaba de levantar la Puerto Rico"; Max Ríos:'"La sovelá gauchesca"; Cons- miembros corporativos del Instituto. Entre los periódi- teres de los norteamericanos hacia el español tiene €'•
tult-iiralea con ella relacionados loa estudios ac*pea de Casa de ItaJia. España dispone del Instituto de las Es- tancia Ste-nley: "La mujeir vista por los moralistas del cos do Isigua eapañtda le prestan su concurso "El Soi" primer término un carácter instrumental: les sirve pair.
laa iMifruas, literaturas e historia da los pueblos de la paüas, que está realizando aJiora una activa propagan- siglo XV"; Lilian Whitmsa: "La influencia española y "La Preinsa", de Btienos Aires. La primera conferen- facilitar sus relaciones con los pueblos de la Amériír.
Romanía. da para reunir fondos con destino a la coaistrucción en en Longfello-vv". española.
Al público español le interesará principalmente saber Nueva York de un edificio para la Casa de España. cia de este año estuvo a cargo del doctor Coriolano Al-
el lucido pí;p*l qu2 representa en este grupo de estu- No sé si esta enumei-acíón pecará de minuciosa. Me bertini, decano de la Facultad de Leiteas de la Univer- Pero existe además una atracción literaria. La lit«=-
dios la cultura española y el laudable y fecundo esfuer- EL DEPARTAMENTO DE ESPAÑOL ha parecido un índice expresivo de la variedad de estos sidad de Buenos Aires. BI Instituto de las Españas, fié! ratura española ha tenido i e antiguo g a n d e s aficionci-
zo realizado en tal Ksoitido, tanto por el Instituto de las trabajos, que abarcan desde los estudios de erudición a su título, promueve la colaboración íntima de españo- dos en los Estados Unidos, y la tradidón de hispanista.'!
Al frente d d deparfcam^ito do español de la Univer- no se ha interrumpido. Son bien conocidos los nombre*
Empañas cc-mo por lea más autorizados centros españo- sidad de Columbia está hace algún tiempo el profesor acerca de los clá.«cos a los temas de la literatura mo- les 6 Mspanoasnedcanoe, antes aludida.
lad <)ue fomentan esta eoJaboración internacional, o sea derna y a las influencias recíprocas que ha recibido y de Rennert, Schewill, Wickersham Crawford, por sus
D, Federico df Onis, catodrático que fué de Literatura El info<rme del Depairtatn'Kito dé Lenguais lUanances trabajos eruditos, y d del bibliófilo Archer M, Hunt-
pó- la Jiuita para Ampliación de Estudios y él Centro españda en la Universidad de Salamanca y ahora en l a que ha irradiado la litea-atura española. La li«ta peirni- d© la Universidad de Columbia es muy sati.sfa«torio
d*P<studios Históricos, te observar dos rasgos interesantes y simpáticos; la para nosotros. Revela que el esfuewo « ^ o l está bien Ingtoo, fundador de la Hispanic Sociéty. La aureola
da Coíumbia, delegado de la Junta para Ampüación de histórica del descubrimiento de América, la atracdón
,C1 peric^lo que abarca el inf«rmQ (desde 29 do abrü Estudios, colaborador del Centro de Estudios Históricos considerable participación de la mujer en estos estu- orJmtado, qu« ocupa ya un lugar muy honroso y pro-
dios y la relación en que aparecen la literatura española mete una expansión creciesnte. Sigue inmediatamente a romántica de España y el prestigio universal de su an-
hlpEta 27 <le octubre de esta año) ha sido_ de gran acti- y de la "Revista de Filología Española", mieimbro del y las hispanoamericanas, dentro de un amplio y legítimo tigua litei'atura explican suflcientetnente esa otra zona,
^•^J•i. No sólo las grandes naciones latinas: Francia, Comité ejecutivo del Instituto de la* Españas y piíbli- concepto de lo español. los estudios franceses, que ocui>an él primer lugar, y desinteresada, de hL^panismo.
Itjilia y li-paña, ac-i la Península como las Espafias ul- cista bien conocido en su espocialidad. deja a distancia a los italianos. El carácter objetivo,
tjtt.m.-íriía-'!, coiíiyviten en esta expansión de sus Idiomas Si se tiene en cuenta qua en él Baniard College, de- científico, de erudición, crítica y pensamitsrito que dis- Por uno y otro motivos, práctico y literario, d estu
El Sr. Onía ha dado gran impulso a los esCudios his- dio d d español encuentra un ambiente muy propicio. Da
y^iteratu.'íix. Otro pueblo de la misma famüia lingüís- pánicos, no sólo en la Columbia University, sino en ge- pcncHente de la Universidad, ha habido este año 120 tingue a los cursos y publicaciones españolas contri-
t i ^ , Rumania, asloníls llevó la romaniaación un empera- alumnas matriculadas en español, no sorprenderá la buye á n duda ai crédito que han alcanzado y al cre- la extensión e importancia que ha adquirido da un in-
neral en los Estados Unidos y en Puerto Rico, donde dicio docuentc el hecho de haberse reunido en Madrid
djgr (!u ori;?en español, Trajano, participa en esta obra. dio este verano dos cursos y fué nombrado "director in proporción de doctoras y licenciadas en estudios hispá- ciente inteorés que d^piertan entre los escolares de len-
14 il-is'.w!a a Nueva York de 28 intdectualcs rumanos, nicos. María de Maeztu fué designada en este año aca- guas románicas. Es tma obra de stíeccion y de discrft- en el último curso de vacadones un centenar de profe-
absentía' del Dapajrtwnento de E&pañol. sores y estudiantes norteamedcanos de esi»fiol en una
hüSi'"-5>ei¡e'> dJ H Fundación Caraegie para la Paz, ha El florecimiento de los estudios liteíarios cspañdes démico para un curso de Literatura española en el Go- ción, En las listas de publicaciones que acompañan co-
< s*sr,iu;a;io a l.i c<ili;n.Í3 rumana de la gran ciudad yan- lefjio de Bamard. mo apénaioas al informe se observa en la italiana de- matrícula de 150.
tiz manifieste en el número do tesis sobre temas de len-
, ,•' ••-•- .;.••;'•.,•:• ÍLJ Í'.CS'KPÍO <!*; fundar el Institut-:> ' b fí-iw, l'+eratiírT, y civHk,'?c!ón españolas r-"«mentadas a El, INSTITUTO DE LAS ESPACIAS masiado mussolinismo, un estuerzo desplazado de pro-
•:, i •-.i-v-'i--'''t-;./l flj l'rv-mibiri. K' Tnotit-j'o ••X"- b ? KsmñiP, que pre?!''» T). V -•.-.•••.•r)
pas-aiida y de justiíicssióu "® ®"^, s a n t o s interiores, E. GÓMEZ DE BAQUBSO
L-'i .1. ., eai.it eiíaíi, "¡un, aicei'iiau.a tii:.^ ¿a H y la 1'' ..iris, uno de ios cciaboradarcs üei Cení."!/ do i>t,,.-.l.-j quo probablemente r.j es Ip .1'*® ^^ inte-resa a los es-

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