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I Parte. Administrativa.
Nivel: Duodécimo
Sección: 12-4
Contenidos Calidad:
Conceptos
Características
Importancia
Beneficios
Calidad del producto o servicio
Estándar de calidad
Requerimientos mínimos de un producto competitivo
Valores o actitudes. Capacidad para mantener relaciones sociales con equidad sin
discriminar a ninguna persona
Materiales o recursos Guía autónoma de trabajo, dispositivo electrónico (computadora o
didácticos que voy a teléfono celular), herramientas tecnológicas, insumos, documento
necesitar. enviado por el profesor.
Preguntas exploratorias 1. Ejemplifique cómo aplica los conceptos relacionados con servicio al
para responder y cliente en el desempeño de las labores, una persona que trabaja en
reflexionar en torno al plataforma de servicios de un banco.
tema planteado y el valor 2. Ejemplifique cómo un estudiante desarrolla la capacidad para
o actitud. mantener relaciones sociales con equidad sin discriminar a ningún
compañero.
Planificación de las actividades que realiza el estudiante.
Marco una X encima de cada símbolo al valorar el desarrollo de las acciones efectuadas
durante la construcción del trabajo.
¿Leí las indicaciones con detenimiento?
Características de la Calidad
Cuando una persona desea adquirir un producto o servicio, busca en él una serie de
características, para satisfacer una determinada necesidad. Por ejemplo, al adquirir una
computadora, no se adquiere cualquier tipo, sino aquella que reúna las especificaciones que
el cliente, en ese momento, considera indispensables. Para que tenga calidad, un producto o
servicio debe poseer las características que respondan a la utilidad que el consumidor busca.
Las características de la calidad son: las propiedades y funciones que el cliente busca en el
producto o servicio, al adquirirlo.
Los productos o servicios poseen características objetivas y subjetivas al adquirirlos.
Las características objetivas responden a criterios propios del bien en sí, y no a los gustos y
sentimientos de un posible comprador. Las características subjetivas corresponden a
criterios personales relativos al modo de pensar o de sentir y no al objeto en sí mismo
Importancia de la calidad
La calidad es importante por muchas razones las cuales mencionaremos a continuación:
Ayuda al crecimiento de las empresas
Promueve y garantiza el desarrollo, los conocimientos y los avances científicos y
tecnológicos.
Estimula y garantiza las condiciones equilibradas de sana competencia entre las
personas de organizaciones.
Determina procedimientos que disminuyen el desperdicio y todos los errores en el
proceso.
Produce mucho más ganancias
Todas las personas están dispuestas a pagar mucho más por mejores productos o
servicios.
Una persona satisfecha no cambia el proveedor
Promueve la educación: Protege y conserva los recursos naturales del planeta y
estimula el desarrollo físico, intelectual y moral de las personas
Permite una mayor participación y representación de todos, en la construcción y
mejoramiento del entorno.
Beneficios de la Calidad
La humanidad se beneficia con la calidad. Estos beneficios son de índole personal y social. Todo
individuo, comunidad, nación y región, debe esforzarse para el desempeño de los cánones de la
sociedad.
La medicina está más enfocada a la atención del individuo, se encuentran más beneficios
personales, como los de las píldoras que alivian los dolores de cabeza y al mismo tiempo, no
dañan el aparato digestivo.
Al aplicar los criterios de calidad, las personas ahora cuentan con más y mejores productos
bienes acordes con los deseos de aroma, textura, forma, color y otros, que satisfacen sus
necesidades.
En la actualidad, debido a la gran competencia, las industrias se han visto en la necesidad de
brindar una mayor calidad y diversidad de productos. Por ejemplo la crema dental que además
de servir para lavarse los dientes y aromatizar el aliento, combate el sarro, protege las encías,
desmancha los dientes, brinda doble frescura y ofrece otros beneficios.
Esto ofrece un mayor bienestar para el consumidor, quien obtiene una mayor calidad y
variedad de bienes.
Los beneficios aportados por la calidad también se encuentran en los servicios. Agrupaciones de
taxistas y autobuseros, bancos, clínicas especializadas y generales, farmacias, hospitales,
cadenas de tiendas, supermercados, hoteles y restaurantes se esfuerzan por brindar un servicio
que satisfaga lo que el cliente requiere; ello se traduce en beneficios individuales y sociales.
Determina los beneficios de la calidad
Estándar de calidad
Estándar de calidad es el que reúne los requisitos mínimos en busca de la excelencia dentro
de una organización institucional.
Son normas y protocolos internacionales que deben cumplir productos de cualquier índole
para su distribución y consumo por el cliente final.
Veamos a continuación cuáles son los requisitos que debe cumplir una empresa para que tenga
competitividad, es decir, para que tenga una posición competitiva o vanguardista en el mercado:
Constante innovación
Hoy en día, el ciclo de vida de un producto es muy corto, por lo que se hace necesario innovar y
lanzar constantemente nuevos productos al mercado.
Lanzar un nuevo producto, no necesariamente significa tener que crear uno totalmente nuevo,
sino que al producto que ya tenemos, podemos agregarle nuevas mejoras, nuevas
características, nuevas funciones, nuevas utilidades, nuevos atributos, nuevos beneficios; por
ejemplo, podemos lanzar nuestro antiguo producto, pero con un nuevo diseño, un nuevo
empaque, una nueva etiqueta, etc.
Asimismo, no sólo debemos innovar en nuevos productos, sino también, en todo lo relacionado
a éste, por ejemplo, cambiando el diseño del logotipo de nuestra marca, lanzando nuevas
ofertas, nuevas promociones, brindando nuevos servicio adicionales, etc.
Siempre debemos mantenernos en constante innovación y cambio, aún si todo parezca ir bien,
debemos saber que los consumidores siempre terminan dejando atrás lo repetitivo, y buscando
lo novedoso.
Siempre debemos estar atentos a todo lo que suceda en el mercado, así como tratar siempre
de prever sus posibles cambios.
Por ejemplo, debemos estar atentos a las nuevas oportunidades de negocio, a las nuevas
necesidades, nuevas preferencias, nuevos gustos, a las nuevas tendencias, nuevas modas, a
las nuevas tecnologías, a los movimientos de la competencia, a sus nuevas estrategias, etc.
Y luego, adaptarnos rápidamente a los cambios, reaccionar rápidamente antes los problemas o
amenazas, y aprovechar las oportunidades.
Siempre debemos tratar de conocer bien a nuestros clientes, conocer sus necesidades,
preferencias, gustos, hábitos, deseos, expectativas, etc.
Debemos tratar de descifrar por qué nos prefieren a nosotros en vez de la competencia, y
también, qué es lo que no les gusta de nosotros o consideran que está mal.
Para ello podemos realizar pequeñas encuestas, por ejemplo, poniendo un buzón de
sugerencias; hacerles pequeñas entrevistas informales a modo de conversación, por ejemplo, al
momento de atenderlos, o entregarles los productos; o crear bases de datos, en donde nos
permita conocer las preferencias o hábitos de cada uno.
De ese modo, al conocer bien a nuestros clientes, podremos ofrecerles un trato personalizado,
ofrecerles productos de acuerdo a sus necesidades o preferencias específicas, crear ofertas
que estén a su altura, etc.
Y, por otro lado, saber en qué debemos mejorar, qué debemos cambiar, que debemos evitar o
quitar.
Buscar la diferenciación
Siempre debemos procurar ofrecer una diferenciación, es decir, ofrecer algo que nuestros
competidores no ofrezcan.
Esta diferenciación debe ser algo novedoso, algo que nos permita distinguirnos de los demás, y
sea el motivo por el cual los consumidores nos elijan en vez de la competencia, y por el cual
vuelvan a consumir nuestros productos o vuelvan a visitarnos.
Por ejemplo, nuestra diferenciación puede estar en un brindar una excelente atención, en
brindar un servicio extra, ofrecer un trato personalizado, ofrecer un beneficio extra en el
producto, etc.
Siempre debemos buscar y aprovechar las ventajas competitivas que podamos tener, es decir,
las ventajas que tengamos ante nuestros competidores en algún aspecto del negocio.
Por ejemplo, nuestra ventaja competitiva puede ser nuestra excelente atención al cliente,
nuestros costos bajos, la rapidez en la atención, un ambiente agradable, nuestra infraestructura,
nuestra localización, nuestra distribución, etc.
Debemos siempre procurar nuevas ventajas ante nuestra competencia, y sacarles el máximo
provecho.
Practicar la calidad total
No sólo nuestros productos deben ser de buena calidad (contar con características que
satisfagan las expectativas del consumidor), sino que la calidad debe estar presente en todos
los aspectos del negocio, por ejemplo, en los trabajadores (que sean competentes y estén bien
calificados), en nuestras materias primas o insumos, en nuestros procesos, en nuestra
publicidad, en la atención al cliente.
Asimismo, debemos sembrar una cultura de compromiso con la calidad, en donde todos
nuestros trabajadores la practiquen y estén siempre pendientes de ver la manera de cómo
mejorarla.
Hoy en día, debido a la alta competencia, los consumidores se vuelven cada vez más
exigentes, y lo que buscan ya no es sólo el precio y la calidad, sino también, una buena
atención, un trato personalizado, un ambiente agradable, un servicio rápido; es decir, buscan un
buen servicio al cliente.
Siempre debemos procurar ofrecer un buen servicio o atención al cliente, de ese modo, lo
“fidelizaremos”, es decir, nos ganaremos su preferencia y confianza, y además, lograremos que
muy probablemente nos recomienden.
El buen servicio al cliente debe estar presente en todos los aspectos del negocio en donde haya
interacción con el cliente, y debe ser practicado por todos los trabajadores.
Capacitación constante
Siempre debemos mejorar nuestras habilidades empresariales, y estar actualizados y al día con
los nuevos cambios.
Cultura de productividad
Tener una cultura de productividad implica que tanto nosotros como nuestros trabajadores,
busquemos constantemente la forma de hacer crecer el negocio, por ejemplo, buscando
siempre la manera de mejorar los procesos, de hacerlos más rápidos, de mejorar la calidad, de
reducir costos, de aprovechar la capacidad que no estemos utilizando, etc.
En resumen, crear una cultura de productividad es hacer que todos los que integran la empresa,
tengan el compromiso de buscar siempre la manera de que ésta crezca y sea mejor cada día.