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Antes: “más de lo mismo”. Fabián: sí, más de lo mismo, siempre estamos volviendo a lo
que ya sabemos/creemos para tratar de profundizarlo y vivirlo mejor.
Después: Finalización del taller…. “bueno, pero después de todo… qué es el kerygma?”.
Hoy: vamos a profundizar en el kerygma (eso que aparentemente es “más de lo mismo”) para que
no pase lo que pasó cuando terminó el EAC de San Juan.
Aparecida 278:
348. La gran novedad que la Iglesia anuncia al mundo es que Jesucristo, el Hijo de
Dios hecho hombre, la Palabra y la Vida, vino al mundo a hacernos “partícipes de la
naturaleza divina” (2 P 1, 4), a participarnos de su propia vida. Es la vida trinitaria del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, la vida eterna. Su misión es manifestar el
inmenso amor del Padre, que quiere que seamos hijos suyos. El anuncio del
kerygma invita a tomar conciencia de ese amor vivificador de Dios que se nos
ofrece en Cristo muerto y resucitado. Esto es lo primero que necesitamos
anunciar y también escuchar, porque la gracia tiene un primado absoluto en
la vida cristiana y en toda la actividad evangelizadora de la Iglesia: “Por la
gracia de Dios soy lo que soy” (1 Co 15, 10).
Matrimonio (familia) – confirmación (jóvenes)
164. Hemos redescubierto que también en la catequesis tiene un rol fundamental el primer
anuncio o «kerygma», que debe ocupar el centro de la actividad evangelizadora y de todo
intento de renovación eclesial. El kerygma es trinitario. Es el fuego del Espíritu que se dona en
forma de lenguas y nos hace creer en Jesucristo, que con su muerte y resurrección nos revela y
nos comunica la misericordia infinita del Padre. En la boca del catequista vuelve a resonar siempre
el primer anuncio: «Jesucristo te ama, dio su vida para salvarte, y ahora está vivo a tu lado cada
día, para iluminarte, para fortalecerte, para liberarte». Cuando a este primer anuncio se le llama
«primero», eso no significa que está al comienzo y después se olvida o se reemplaza por otros
contenidos que lo superan. Es el primero en un sentido cualitativo, porque es el anuncio principal,
ese que siempre hay que volver a escuchar de diversas maneras y ese que siempre hay que volver
a anunciar de una forma o de otra a lo largo de la catequesis, en todas sus etapas y
momentos[126]. Por ello, también «el sacerdote, como la Iglesia, debe crecer en la conciencia de
su permanente necesidad de ser evangelizado»[127].
165. No hay que pensar que en la catequesis el kerygma es abandonado en pos de una formación
supuestamente más «sólida». Nada hay más sólido, más profundo, más seguro, más denso y más
sabio que ese anuncio. Toda formación cristiana es ante todo la profundización del kerygma que
se va haciendo carne cada vez más y mejor, que nunca deja de iluminar la tarea catequística, y que
permite comprender adecuadamente el sentido de cualquier tema que se desarrolle en la
catequesis. Es el anuncio que responde al anhelo de infinito que hay en todo corazón humano. La
centralidad del kerygma demanda ciertas características del anuncio que hoy son necesarias en
todas partes: que exprese el amor salvífico de Dios previo a la obligación moral y religiosa, que no
imponga la verdad y que apele a la libertad, que posea unas notas de alegría, estímulo, vitalidad, y
una integralidad armoniosa que no reduzca la predicación a unas pocas doctrinas a veces más
filosóficas que evangélicas. Esto exige al evangelizador ciertas actitudes que ayudan a acoger
mejor el anuncio: cercanía, apertura al diálogo, paciencia, acogida cordial que no condena.
EG 35
¿Cuál es el kerygma?
o «Jesucristo te ama: dimensión trinitaria (cf. oración anterior)-cristológica,
personal y atractiva/bella (belleza del amor)
o dio su vida para salvarte: misterio pascual y soteriológica
o y ahora está vivo a tu lado cada día: actualidad (hoy, ahora, cada día) de la
salvación
o para iluminarte, para fortalecerte, para liberarte»: sentido positivo (el
pecado no es el centro) e integral (iluminar-inteligencia, espíritu;
fortalecer-voluntad, emocional; liberar-esclavitudes de todo tipo –
pecado-)
Primero en sentido cualitativo, más que cronológico (en que sería permanente),
“interesa más la cualidad que la cantidad” (AL 207)
Siempre hay que volver a escuchar-----
EG: lo esencial de la fe cristiana se reduce
a unas pocas cosas. Cuando todo se
desmorona… a qué me aferro? Qué
elementos le doy al
catecúmeno/catequizando para esos
momentos?
34. Si pretendemos poner todo en clave misionera, esto también vale para
el modo de comunicar el mensaje. En el mundo de hoy, con la velocidad de
las comunicaciones y la selección interesada de contenidos que realizan los
medios, el mensaje que anunciamos corre más que nunca el riesgo de
aparecer mutilado y reducido a algunos de sus aspectos secundarios. De
ahí que algunas cuestiones que forman parte de la enseñanza moral de la
Iglesia queden fuera del contexto que les da sentido. El problema mayor se
produce cuando el mensaje que anunciamos aparece entonces identificado
con esos aspectos secundarios que, sin dejar de ser importantes, por sí
solos no manifiestan el corazón del mensaje de Jesucristo. Entonces
conviene ser realistas y no dar por supuesto que nuestros interlocutores
conocen el trasfondo completo de lo que decimos o que pueden conectar
nuestro discurso con el núcleo esencial del Evangelio que le otorga sentido,
hermosura y atractivo.
36. Todas las verdades reveladas proceden de la misma fuente divina y son
creídas con la misma fe, pero algunas de ellas son más importantes por
expresar más directamente el corazón del Evangelio. En este núcleo
fundamental lo que resplandece es la belleza del amor salvífico de Dios
manifestado en Jesucristo muerto y resucitado .
9.30-11,40
Que es el k, sabiendo que es el primer anuncio que tenemos que hacer y retomar siempre
Cómo adecuar el k a las distintas situaciones (flias, jov): “cuanto más se afrontan las cosas
particulares, tanta más indeterminación hay” (AL 304 citando a Santo Tomás)
FAMILIAS
Capítulo VIII: las fragilidades y debilidades familiares como lugar propicio para anunciar y vivir el
kerygma. “Donde está el dolor, está nuestro lugar”
JOVENES
Carta pastoral 2017: “Lo miró con amor”, mirada que “valora cunato este joven ya está viviendo”,
animándolo a un “más”, al crecimiento-conversión (n. 3).
Una pastoral sobre el joven sin un acercamiento pastoral a su familia resulta insuficiente,
ayudando a restablecer-favorecer-acrecentar los vínculos familiares fundamentales, como vínculos
de referencia vitales.
La catequesis familiar precede, enriquece y acompaña toda otra forma de catequesis (JEP
86)