Sei sulla pagina 1di 9

ARQUIDIÓCESIS DE BUCARAMANGA

PARROQUIA SANTA MARÍA DE LOS ÁNGELES


AÑO DEL BAUTISMO 2020

GUÍA DE ORACIÓN
EN

SÁBADO 4 DE ABRIL
INTENCIÓN DEL DÍA: Hay quien ya ahora piensa a lo que sucederá tras la
epidemia, a todos los problemas que habrá de pobreza, de trabajo, de hambre.
Oremos juntos por toda la gente que ayuda hoy, y piensa
también en el mañana para ayudarnos a todos.
“Seguramente han oído hablar del drama de la
adicción. Y… ¿pensaron también en la adicción al
juego, a la pornografía, a internet… y los peligros
del espacio virtual? Apoyados por el Evangelio de
la misericordia podemos aliviar, cuidar y curar los
sufrimientos relacionados con las nuevas
adicciones. Recemos para que todas las personas,
bajo la influencia de las adicciones puedan estar bien
ayudadas y acompañadas”. S.S Francisco
Oración de la Mañana
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Señor, abre mis labios.
Y boca proclamará tu alabanza. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, como
era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.
Habla con Dios: Ven Espíritu Santo
Ven Espíritu Santo, envía tu luz desde el cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus
dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo.

Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo,
brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos.

Entra hasta el fondo del alma, divina luz y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si
Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento.

Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor
de vida en el hielo, doma el espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero.

Reparte tus Siete Dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al
esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
Escucha su Palabra: Sal 119 (118), 33-40
Muéstrame, Señor, el camino de tus leyes,
y lo seguiré puntualmente;
enséñame a cumplir tu voluntad
y a guardarla de todo corazón;
guíame por la senda de tus mandatos,
porque ella es mi gozo.
Inclina mi corazón a tus preceptos,
y no al interés;
aparta mis ojos de las vanidades,
dame vida con tu palabra;
cumple a tu siervo la promesa
que hiciste a tus fieles.
Aparta de mí la afrenta que temo,
porque tus mandamientos son amables;
mira cómo ansío tus decretos:
dame vida con tu justicia.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo,
Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.
Medita
El camino es sinónimo de vida y existencia cotidiana. Por eso nuestro camino, debe
ser todo aquello que me lleve a cumplir la voluntad de Dios, en mi vida. Antes de
iniciar la semana santa, haz una pausa y piensa, ¿estás cumpliendo la voluntad de
Dios en tu vida?
Ora
Oh Dios, que hiciste linaje elegido y sacerdocio real a todos los renacidos en Cristo:
concédenos querer lo que nos mandas y poder hacerlo, para que el pueblo llamado a
la vida eterna, tenga una misma fe en sus corazones y un mismo amor en sus acciones.
Por Cristo Nuestro Señor. Amén. Que el Señor nos bendiga durante este día, nos
guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. Amén.
Comprométete
Me preparé para vivir la semana santa en familia, de tal manera que sea una semana
de oración y compartir.
Oración de la Tarde
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Dios mío, ven en mi auxilio, Señor date prisa en socorrerme. Gloria al Padre y
al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre por los
siglos de los siglos. Amén.
Habla con Dios: Himno: Las banderas reales se adelantan

Las banderas reales se adelantan para lavar con ellas nuestras culpas.
y la cruz misteriosa en ellas brilla:
la cruz en que la vida sufrió muerte En ella se cumplió perfectamente
y en que, sufriendo muerte, nos dio lo que David profetizó en su verso,
vida. cuando dijo a los pueblos de la tierra:
«Nuestro Dios reinará desde un
Ella sostuvo el sacrosanto cuerpo madero.»
que, al ser herido por la lanza dura,
derramó sangre y agua en abundancia ¡Árbol lleno de luz, árbol hermoso,
árbol adornado con el manto púrpura, A ti, que eres la única esperanza,
y destinado a que su tronco digno te ensalzamos, oh cruz, y te rogamos
sintiera el roce de la carne pura! que acrecientes la gracia de los justos
y borres los delitos de los malos.
¡Dichosa cruz que con tus brazos
firmes, Recibe, oh Trinidad, fuente de
en que estuvo colgado nuestro precio, salvación,
fuiste balanza para el cuerpo santo la alabanza de todos los espíritus,
que arrebató su presa a los infiernos. y tú que con tu cruz nos das triunfo,
danos el premio, oh Jesucristo. Amén.

Escucha su Palabra: Flp 2,6-11


Cristo, a pesar de su condición divina,
no hizo alarde de su categoría de Dios,
al contrario, se anonadó a sí mismo,
y tomó la condición de esclavo,
pasando por uno de tantos.
Y así, actuando como un hombre cualquiera,
se rebajó hasta someterse incluso a la muerte
y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre todo
y le concedió el «Nombre-sobre-todo-nombre»;
de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble
en el cielo, en la tierra, en el abismo
y toda lengua proclame:
Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Medita
Cristo Jesús se sometió hasta la muerte y una muerte de cruz, con tal de cumplir la
voluntad del Padre, y de llevar su amor por nosotros, hasta las últimas consecuencias.
No hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos (Jn 15,13) y Él nos ha
hecho sus amigos. Por eso, Dios lo exaltó sobre todo nombre y lo resucitó: para que
en él tengamos vida eterna.
Ora
Oremos con el ángelus ofreciéndolo por el Papa Francisco, por nuestra Arquidiócesis,
por las intenciones de Monseñor Ismael Rueda Sierra y por el fin de esta pandemia.
V. El Ángel del Señor anunció a María.
R. Y concibió por obra del Espíritu Santo.
Dios te salve, María... Santa María...
V. He aquí la esclava del Señor.
R. Hágase en mí según tu palabra.
Dios te salve, María... Santa María...
V. Y el Verbo se hizo carne.
R. Y habitó entre nosotros.
Dios te salve, María... Santa María...
V. Ruega por nosotros, santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Cristo.
Oración: Derrama, Señor, tu gracia sobre nosotros, que, por el anuncio del Ángel,
hemos conocido la encarnación de tu Hijo, para que lleguemos, por su pasión y su
cruz, a la gloria de la resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Que el Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. Amén
Comprométete
Me comprometeré a no faltar a ninguna celebración durante semana santa, con ayuda
de los medios de comunicación y redes sociales.
Oración de la noche
En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Dios mío, ven en mi
auxilio. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Habla con Dios: Himno Tú, a quien he buscado, Señor

Tú, a quien he buscado, Señor,


en este día,
a quien he escuchado,
dame el reposo de esta noche.

Tú, a quien he cantado, Señor,


en este día,
a quien he orado,
dame el reposo de esta noche.

Tú, a quien yo he negado, Señor,


en este día,
a quien he amado,
dame el reposo de esta noche. Amén

Escucha su Palabra Mt 26,42


Padre, si este caliz, no puede pasar sin que yo lo beba, que se haga tu voluntad.
Palabra del Señor. Gloria a Ti, Señor Jesús.

Medita
Aunque a veces, no sea fácil aceptar la voluntad de Dios, acojámosla en nuestra
vida… Dios siempre nos quiere felices y plenos. Él no nos quita nada y nos lo da
todo.
Ora
Señor, Dios nuestro, concédenos un descanso tranquilo que restaure nuestras fuerzas,
desgastadas ahora por el trabajo del día; así, fortalecidos con tu ayuda, te serviremos
siempre con todo nuestro cuerpo y nuestro espíritu. Por Cristo nuestro Señor. Amén.
El Señor todopoderoso nos conceda una noche tranquila y una santa muerte. Amén.
Comprométete
No dejes de orar durante semana santa…
ORACIÓN A LA VIRGEN DE GUADALUPE
Santísima Virgen María de Guadalupe,
Madre del verdadero Dios por quien se vive.
En estos momentos, como Juan Diego,
Sintiéndonos “pequeños” y frágiles ante la
enfermedad y el dolor,
te elevamos nuestra oración y nos consagramos a
ti.
Te consagramos nuestros pueblos, especialmente a
tus hijos más vulnerables:
Los ancianos, los niños, los enfermos, los
indígenas, los migrantes, los que no tienen hogar,
los privados de su libertad.
Acudimos a tu inmaculado Corazón
E imploramos tu intercesión: alcánzanos de tu
Hijo la salud y la esperanza.
Que nuestro temor se transforme en alegría:
Que en medio de la tormenta tu Hijo Jesús
sea para nosotros fortaleza y serenidad;
Que nuestro Señor levante su mano poderosa y detenga el avance de esta pandemia.
Santísima Virgen María, “Madre de Dios y Madre de América Latina y del Caribe,
Estrella de la evangelización renovada, primera discípula y gran misionera de
nuestros pueblos”,
sé fortaleza de los moribundos y consuelo de quienes los lloran;
sé caricia maternal que conforta a los enfermos;
y para todos nosotros, Madre, sé presencia y ternura
en cuyos brazos todos encontraremos seguridad.
De tu mano, permanezcamos firmes e inconmovibles
En Jesús, tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
(CELAM: Consejo Episcopal Latinamericano)
Vive esta Semana Santa, con el subsidio que ha hecho el
Seminario Mayor. Adquiérelo en tu parroquia.

Potrebbero piacerti anche