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Éxodo 20:1-17 – (16) – Salmo 15

Cristo nos libertó para que vivamos en libertad.

Los diez mandamientos es la expresión de la gracia, amor y


cuidado de Dios para con Su pueblo. Dios rescata, libra Su
pueblo pero también conduce a ellos con enseñanzas para
que vivan una vida agradable en Su presencia, y que ellos
sean de bendición unos para otros.

Ser bendecido y ser una bendición para otros es vivir bajo los
límites establecidos por Dios.

Establecidos por Dios para el bien de sus hijos. Para que ellos
vivan libres, sin ser esclavizados, por dioses falsos, por el
trabajo, por el maltrato de sus hijos, con plena armonía en el
hogar, tranquilos en cuanto a sus propiedades.

Así como el octavo mandamiento preserva los bienes de


nuestro prójimo, el noveno protege el nombre y la reputación
de nuestro prójimo.

Así como no es bueno que digan cosas que no sean


verdaderas de nosotros delante de otras personas, Dios nos
prohíbe que hablemos más que la verdad.

El noveno mandamiento nos habla que debemos controlar


nuestra lengua. Una de las virtudes más preciosas es hacer
buen uso de la lengua, pero una de las más difíciles de
alcanzar.

El mandamiento prohíbe que se diga cualquier cosa falsa e


injuriosa a respecto de nuestro prójimo, y el mandamiento
ordena que hablemos siempre la verdad.

Contexto:
2

Para la buena ejecución de los mandamientos era necesario


que hubieran testigos verdaderos. (FBI, DGII)

Un testigo falso era una amenaza para el buen ejercicio de la


verdad.

Se esperaba que el testigo dijera la verdad, nada más que la


verdad.

Así como el tercero mandamiento guardaba la reputación del


precioso nombre de Dios, el noveno mandamiento busca
proteger la reputación, el buen nombre del pueblo de Dios.

Porque Una persona puede ser destruida por calumnias y


mentiras.

Martin Lutero dijo que la reputación es algo que se roba


rápidamente, pero que no se restaura rápidamente.

Plumas en el viento (Proverbio judío)

Que dice que un rabino que vivía en un pueblito, y era un


hombre de buen carácter. Había dedicado muchos años de su
vida a servir al pueblo en esa comunidad. Lo consideraban un
hombre honrado, sincero, digno de confianza, y trabajador.
Hasta que un día una persona del pueblo se levanta, y por
razones que el rabino desconocía, empezó a decir falsedades
y cosas horribles acerca del rabino, menoscabando así su
credibilidad y carácter. Esto produjo especulación y división
en la comunidad. Algunos sospecharon del carácter del
rabino. Otros tomaron por sentado los comentarios negativos
que oyeron y se pusieron en su contra. Esto destrozó a este
hombre que había trabajado tan duro durante tantos años
para establecer una reputación en esa comunidad.

Esto transcurrió por algún tiempo.


3

Después de mucho tiempo, el hombre que se había levantado


del pueblo y menoscabó la reputación del rabino, le dijo:
«Lamento lo que dije y lo que he hecho. No tenía fundamento
y no era cierto, y quiero compensarle. ¿Qué puedo hacer para
enmendar el mal que hice, para rectificar lo que he
tergiversado?».

Y el rabino le dijo: «Quiero que vaya a su casa y tome la


almohada de su cama. Quiero que salga un día que esté
venteando y arranque la funda de la almohada, y quiero que
esparza todas las plumas de su almohada al viento».

El hombre hizo lo que le pidió el rabino, y volvió y le dijo:


«Hice lo que me pidió. ¿Puedo hacer algo más?». Y el rabino
le dijo: «Ahora tome la funda de su almohada y vuelva a
meter todas esas plumas». Y el hombre dijo: «¡Pero eso es
imposible!». Y el rabino le dijo: «Precisamente era lo que
quería decirle»
Martin Lutero dijo que la reputación es algo que se roba rápidamente,
pero que no se restaura rápidamente.

De manera que este mandamiento tiene mucho a enseñarnos,


el mandamiento no es solo para las personas que quizás
pueden venirnos a la mente, el mandamiento es para cada
uno de los hijos de Dios.

Miremos entonces a las implicaciones de este mandamiento a


nuestras vidas.

I- Que prohíbe este mandamiento – 16

El noveno mandamiento prohíbe que se dé un falso testimonio


contra nuestro prójimo, que mintamos acerca de alguien.
4

Cuando soltamos esa mentira manchamos la reputación, el


nombre, la confianza que uno tiene, y que después es difícil
restaurar, el daño que hacemos a quienes deberíamos amar.

Por eso encontramos en las escrituras que Dios prohíbe este


tipo de comportamiento.

15 No se levantará un solo testigo contra un hombre por


cualquier iniquidad o por cualquier pecado que haya
cometido; el caso será confirmado por el testimonio de dos o
tres testigos. 16 Si un testigo falso se levanta contra un
hombre para acusarle de transgresión, 17 los dos litigantes se
presentarán delante del SEÑOR, delante de los sacerdotes y
de los jueces que haya en esos días. 18 Y los jueces
investigarán minuciosamente; y si el testigo es un testigo
falso y ha acusado a su hermano falsamente, 19 entonces le
haréis a él lo que él intentaba hacer a su hermano. Así
quitarás el mal de en medio de ti. 20 Los demás oirán y
temerán, y nunca más volverán a hacer una maldad
semejante en medio de ti. (Deut 19:15-20 LBA)

En las escrituras encontramos ejemplos de falsos testigos que


se han levantado contra otros y el daño que ellos causaron.

Contra Jesús fueron levantados falsos testigos.

59 Y los principales sacerdotes y todo el concilio procuraban


obtener falso testimonio contra Jesús, con el fin de darle
muerte, 60 y no lo hallaron a pesar de que se presentaron
muchos falsos testigos. Pero más tarde se presentaron dos,
61 que dijeron: Éste declaró: "Yo puedo destruir el templo de
Dios y en tres días reedificarlo." 62 Entonces el sumo
sacerdote, levantándose, le dijo: ¿No respondes nada? ¿Qué
testifican éstos contra ti? (Mat 26:59-62 LBA)
5

13 Entonces Pilato le dijo : ¿No oyes cuántas cosas testifican


contra ti? 14 Y Jesús no le respondió ni a una sola pregunta,
por lo que el gobernador estaba muy asombrado. (Mat 27:13-
14 LBA)

Jesús fue crucificado según el plan eterno establecido por El


Padre desde la eternidad, pero la Biblia nos muestra que
ningún pecado había cometido, fue acusado falsamente por
los hombres, que deberían reconocer que Su muerte era la
provisión de la gracia de Dios para pecadores miserables,
incapaces de salvarse a sí mismos.

De la misma manera Esteban, 58 Y echándolo fuera de la


ciudad, comenzaron a apedrearle; y los testigos pusieron sus
mantos a los pies de un joven llamado Saulo. (Act 7:58 LBA)

Ahora quiero que entendamos que este mandamiento abarca


muchos más que un contexto de tribunal, que abarca todo el
contexto de la vida del pueblo de Dios.

El mandamiento prohíbe que mintamos unos a otros. 11 "No


hurtaréis, ni engañaréis, ni os mentiréis unos a otros.
(Lev 19:11 LBA), 9 No mintáis los unos a los otros, puesto
que habéis desechado al viejo hombre con sus malos hábitos,
(Col 3:9 LBA)

El mandamiento prohíbe que murmuremos unos contra otros,


murmurar es Conversar en perjuicio de un ausente, Arón y
Maria murmuraron contra Moisés, ¿Por qué, pues, no
temisteis hablar contra mi siervo, contra Moisés? 9 Y se
encendió la ira del SEÑOR contra ellos… (Num 12:8-9 LBA)

Jesús hablando a los discípulos dijo, 3 ¡Tened cuidado! Si tu


hermano peca, repréndelo; y si se arrepiente, perdónalo. 4 Y
si peca contra ti siete veces al día, y vuelve a ti siete veces,
diciendo: "Me arrepiento", perdónalo. (Luk 17:3-4 LBA)
6

No hablemos mal uno de los otros, si tenemos algo en contra


a otra persona debemos ir y decírselo a la persona y no salir
esparciendo esto entre los demás.

El mandamiento prohíbe el culto personal, La prohibición de


dar falso testimonio en contra de mi vecino igualmente me
prohíbe dar falso testimonio acerca de mí mismo, Hacer
afirmaciones a respeto de mí mismo en relación a los demás.

Es decir que no pensemos de nosotros más de lo que


conviene, 3 Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos
ustedes: Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que
debe tener, sino más bien piense de sí mismo con moderación
(Rom 12:3 NVI), 3 No hagan nada por egoísmo o vanidad;
más bien, con humildad consideren a los demás como
superiores a ustedes mismos. (Phi 2:3 NVI), 2 Que te alabe el
extraño, y no tu boca; el forastero, y no tus labios.
(Pro 27:2 LBA)

Muchos de los problemas que tenemos con nuestra boca, está


relacionado a los conceptos equivocados que tenemos de
nosotros mismos.

Si somos algo, lo somos por la gracia de Dios.

II- Que nos exige este mandamiento - 16

El mandamiento prohíbe la falsedad, la mentira y nos exhorta


a la verdad.

Dios ama la verdad. La veracidad es un atributo de Dios.

Él es nuestro protector; sus obras son perfectas, sus acciones


son justas. Es el Dios de la verdad, en Él no hay injusticia; ¡Él
es justo y verdadero! Deut. 32:4 Cantico de Moisés Ap. 15:3
7

7 Mi boca hablará la verdad, pues mis labios detestan la


mentira. (Pro 8:7 NVI) DIOS SOBRE SI MISMO

151 Cercano estás tú, oh Jehová, Y todos tus mandamientos


son verdad. (Psa 119:151 R60)

La verdad procede de Dios. La mentira no procede de Dios


sino que del diablo, pues él es mentiroso, el padre de la
mentira, cuando miente habla de lo suyo, porque es
mentiroso. (Juan 8:44), y quien ama la mentira y vive en la
práctica de la mentira es hijo del diablo.

Porque a los hijos de Dios se les ordena que digan la verdad.

Es imperativo en nuestras vidas decir siempre la verdad, nada


más que la verdad. Que vuestro si sea si, y que vuestro no
sea no para que no caigáis en juicio. Stg. 5:12

Siendo Dios verdadero en todo, Él requiere que Sus hijos


reflejen Su carácter. Así como Dios no miente, no engaña, Él
requiere que Su Pueblo siga Su ejemplo. Que nuestro carácter
sea semejante al suyo.

Proverbios 3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la


verdad; Átalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu
corazón; 12:22 Los labios mentirosos son abominación a
Jehová; Pero los que hacen verdad son su contentamiento.

Las palabras del apóstol Juan en su 3 epístola nos habla del


corazón de Dios, 4 No tengo yo mayor gozo que este, el oír
que mis hijos andan en la verdad. (3Jo 1:4 R60)

Hermanos abandonemos la mentira. Pidamos a Dios que nos


ayude a odiar y a rechazar completamente todo lo que no es
verdadero.
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25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada


uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los
otros. (Eph 4:25 R60)

III- Principios prácticos para crecer en la verdad

Crecer en la verdad es una necesidad de cada cristiano.

Los hijos de Dios deben cuidar cada día para que vayamos
creciendo en este sentido.

No podemos negar que vivimos en un mundo lleno de


mentiras.

Estamos en medio de un pueblo adicto a la práctica de decir,


escuchar y creer mentiras. La falta de veracidad y de
honestidad es un problema que cada día va en aumento. ¡Es
difícil encontrar personas que cumplan con sus palabras! ¡Es
difícil encontrar personas en quien podamos confiar!

¿Cuántos problemas en nuestro mundo moderno se deben a


la falta de veracidad y honestidad?

Mentira en el comercio. Mentira en el matrimonio, Mentira en


la creación de los hijos, mentira en la política, mentira en las
noticias, o mentiras entrelazadas con verdad, que es una
mentira completa.

Los hijos de Dios son llamados para marcar diferencia en el


mundo y reflejar el carácter de Dios, por eso necesitamos
crecer.

Algunos consejos:

Cuidado con lo que llenas el corazón. Los ojos y los oídos son
órganos por los cuales las cosas llegan al corazón, la lengua
9

es el órgano por lo cual salen. Porque de la abundancia del


corazón habla la boca. (Mat 12:34 LBA)

La palabra de Dios es la verdad. Jesús orando a Dios por Sus


discípulos, pidió, 16 Ellos no son del mundo, como tampoco
yo soy del mundo. 17 Santifícalos en la verdad; tu palabra es
verdad. (Joh 17:16-17 LBA)

Comunión continua con la verdad nos llevará a crecer en la


verdad.

Cuidado con lo que escuchas, no des espacios al chismerío, no


hable de la vida de otros, y no permitas que otros hablen de
la vida otros para sí. Hable con la persona o diga al otro que
hable con la persona.

8 Por último, hermanos, consideren bien todo lo verdadero,


todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable,
todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente
o merezca elogio. 9 Pongan en práctica lo que de mí han
aprendido, recibido y oído, y lo que han visto en mí, y el Dios
de paz estará con ustedes. Fip. 4:8-9

Piense antes de hablar… Somos personas con distintas


personalidades. Unos más extrovertidos, otros menos. Pero
todos luchamos con el uso de la lengua. Debemos poner freno
en la lengua.

Santiago 1:19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre


sea pronto para oír, tardo para hablar.

Perdemos muchas oportunidades para quedarnos callados.

Cuando hablamos sin antes pensar, terminamos por caer en


problemas, y nos exponemos en una serie de circunstancias
desnecesarias, que podríamos haber quedado sin ellas.
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Herimos y somos heridos.

El mundo dice: En boca cerrada, no entran moscas.

La biblia nos dice, Proverbios 10:19, En las muchas palabras


no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente.

17:27-28 El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De


espíritu prudente es el hombre entendido. 28 Aun el necio,
cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es
entendido.

10:32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada; Mas la
boca de los impíos habla perversidades.

13:3 El que guarda su boca, preserva su vida; El que mucho


abre sus labios, termina en ruina.

No estamos prohibidos de hablar, sino que somos animados a


hablar de manera que seamos una bendición en lo que
hablamos y a los que hablamos.

Proverbios 12:18, Hay hombres cuyas palabras son como


golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina.

Conclusión…

Las mentiras destruyen, las vidas, la reputación, la confianza,


las relaciones, el carácter de uno mismo, afectan la vida de la
iglesia…

A.W. Pink, nos dice que la mentira es la puerta de entrada


para todos los vicios y corrupción. Debemos cuidarnos y
estimularnos, presionándonos constantemente hacia la
verdad, que seamos ejemplo para nuestros hijos, que seamos
reflejo de Dios en el mundo tomado por la mentira.

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