CODIGO DE ÉTIC

PROFESIONAL

COLEGIO PROFESIONAL DE LICENCIADOS EN PRODUCCIÓN DE

BIO-IMÁGENES, TÉCNICOS UNIVERSITARIOS EN RADIOLOGÍA Y
TÉCNICOS SUPERIORES EN PRODUCCIÓN DE BIO-IMÁGENES DE
LA PROVINCIA DE CÓRDOBA

Ley Nº 9765

Córdoba - Argentina
 TITULO I

DISPOSICIONES GENERALES:

Art. 1º: Este Código de Ética es de observancia obligatoria para todos

los LICENCIADOS EN PRODUCCIÓN DE BIO-IMÁGENES, TECNICOS
UNIVERSITARIOS EN RADIOLOGÍA Y TÉCNICOS SUPERIORES EN
PRODUCCIÓN DE BIO-IMÁGENES que ejercen en la Provincia de
Córdoba, con Título Universitario habilitante y Matrícula Profesional
expedida por ente oficial. Se debe tener presente además, que a los fines
médico-legales será siempre el Médico Jefe, el responsable de nuestros actos.

Art. 2º: El Licenciado y el Técnico deberán atender a sus pacientes ateniéndose a

su condición humana como tal, y a las dificultades y exigencias de una enfermedad,
prescindiendo del rango social o de la situación económica del paciente. No hará
distinciones de nacionalidad, religión, raza, o ideas políticas.
Sólo verá en el paciente al ser humano que lo necesita, y debe entender que la
asistencia del mismo tiene la máxima prioridad.

Art. 3º: El Licenciado y el Técnico ajustarán su conducta a las reglas de la cir-

cunspección, de la probidad y del honor; será un hombre honrado tanto en el
ejercicio de su profesión como en los demás actos de su vida. La pureza de
costumbres y los hábitos de templanza son asimismo indispensables, por cuanto sin
un entendimiento lúcido no podrá ejercer acertadamente su actividad, ni menos estar
preparado para las urgencias que a menudo exigen su rápida y oportuna
intervención.

Art. 4º: El Licenciado y el Técnico colaborará con el Colegio Profesional que nuclee
a los integrantes del área de Diagnóstico por Imágenes de la Provincia de Córdoba
como así también, con la Administración Pública Provincial, Municipal, Nacional y
Privadas, en el cumplimiento de las disposiciones legales que se relacionen con la
profesión y cooperará con los medios técnicos a su alcance en la vigilancia,
protección y mejoramiento de la actividad paramédica.

Art. 5º: El Licenciado y el Técnico deberán combatir el charlatanismo, el

curanderismo y cualquier forma de ejercicio profesional que se realice con fin
puramente utilitario, denunciándolo a las autoridades pertinentes.
 TITULO II
DEBERES DEL LICENCIADO Y EL TÉCNICO PARA CON LOS PACIENTES:

Art. 6º: En los servicios de Radiología y siempre con la anuencia del Médico
responsable del mismo, con uno o más Profesionales, se deberá respetar el principio
de ser elegido libremente por el paciente, en razón de que ello constituye un derecho
inviolable del mismo.

Art. 7º: Es obligación inexcusable del Licenciado y del Técnico en el ejercicio de su

profesión, atender los llamados a través de los diversos medios vigentes, en
los siguientes casos:

a) Cuando no hubiere otro Licenciado o Técnico en la localidad en la cual se ejerce

la
profesión, o si lo hubiere, esté imposibilitado de hacerlo.
b) Cuando un colega requiera espontáneamente o por fuerza mayor su colaboración
profesional y no existiere en las cercanías otro, capacitado para hacerlo.

Art. 8º: Fuera de los casos consignados en el artículo anterior, si el Licenciado o el

Técnico resolviera no concurrir al llamado, deberá justificar deliberadamente su
decisión por escrito, y comunicarlo al Servicio, al paciente y/o a sus familiares; no
perjudicando así también su atención.

Art. 9º: El Licenciado y/o el Técnico tendrán la obligación de atender al paciente que
esté en la sala o ámbito en que se lo requiera (quirófano, terapia intensiva,
internado, etc.) aún a pesar de haber finalizado su horario de trabajo, tomando
esto como una eventual emergencia.

Art. 10º: El Licenciado y/o el Técnico podrá rehusar la continuación de la atención al

paciente, siempre que exista otro colega que pueda hacerse cargo del mismo,
cuando: sea requerida su función específica en otra área, su horario de trabajo ha
finalizado y el estudio es demasiado largo; ha sufrido una indisposición; comprobare
que la enfermedad del paciente es infecto-contagiosa, y al no haber adoptado las
medidas de prevención, considere que puede convertirse en transmisor inmediato de
la misma a un tercero; en todos los casos con la anuencia del Médico responsable
del sector.

Art. 11º: Si el Licenciado y/o el Técnico toma conocimiento con antelación que la
enfermedad de un paciente es infecto-contagiosa, y pudiera hacerlo, deberá tomar
los recaudos necesarios, y será deber del mismo realizarle los estudios solicitados.
En las necesarias y personales relaciones con cada paciente, siempre deberán
evitarle cualquier molestia innecesaria y tratarlo como si fuese vuestra única
preocupación.

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Art. 12º: El Licenciado y/o el Técnico deberán respetar la religión, credo o cualquier
situación de orden político o social del paciente y no oponerse a su práctica, salvo
que ella signifique un atentado contra el estudio que se está por realizar. En este
caso se le hará saber al paciente y podrá negarse a seguir atendiéndolo si
persistiera en ella. Se le comunicará de inmediato de esta situación al médico
responsable.

Art. 13º: El Licenciado y/o el Técnico deberá en todos los casos, explicar al paciente
a través de un léxico que él mismo interprete y haciendo énfasis, en los
procedimientos a seguir durante el estudio que se va a realizar, asegurándose de
que los haya entendido. Deberá ser firme, si es necesario, pero nunca brusco ni
descortés. Hará que se sienta cómodo y sereno, prestando el máximo de
colaboración para lograr un buen estudio.

Art. 14º: Durante la exposición radiográfica hay que cerciorarse de que el paciente y
el Técnico, como así también los demás colaboradores, reciban la máxima protección
posible por las radiaciones ionizantes, utilizando los elementos de radio protección
con los que deberá contar el Servicio, dando prioridad a la protección del paciente.

Art. 15º: El consultorio de Radiología debe reunir un mínimo de condiciones en lo

que se refiere al local, presentación, orden, aseo, y moblaje que esté de acuerdo con
la jerarquía de la profesión y con las normativas dispuestas por el Ministerio de
Salud. Se considera inaceptable la atención habitual de pacientes en habitaciones no
acondi-cionadas para tal efecto.

Art. 16º: El correcto empleo del idioma es de vital importancia. No debe usarse el
tuteo ni el nombre de pila, en particular delante de los pacientes, en una recíproca y
obligatoria comunicación que no deberá escapar a los distintos niveles enunciados
en la relación profesional-paciente. La comunicación debe ser siempre inteligente e
inteligible.

Art. 17º: Bajo ningún punto de vista el Licenciado y/o el Técnico emitirá informes o
diagnósticos al paciente, sobre los estudios realizados. Esto es responsabilidad del
Médico Radiólogo. Para abstenerse de dar información radiográfica al paciente y a
sus familiares hay que obrar de una manera que evite cualquier antagonismo.
Divulgar información sobre la interpretación a los resultados radiográficos es una
flagrante violación de la Etica Profesional que expone a severas sanciones.

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 TITULO III

DEBERES DE LOS TÉCNICOS Y / O LICENCIADOS PARA CON LAS

INSTITUCIONES MÉDICAS Y ASISTENCIALES:

Art. 18º: El Licenciado y el Técnico deberán mantener un permanente tratamiento

dentro de los aspectos deontológicos y diceológicos del arte de curar (deberes y
derechos), en especial manteniendo siempre una cordial relación con los entes de
salud.

Art. 19º: Aquellos Profesionales Licenciados y Técnicos que cumplan sus roles en
algunas de estas instituciones precedentemente enunciadas y antes de aceptar el
cargo, deberán hacerlo siempre que este acto no signifique incompatibilidad o algún
tipo de lesión moral a sus propios colegas.

Art. 20º: El Licenciado y el Técnico deberán buscar por todos los medios y a fin de
una mejor prestación profesional, llegar a una mayor calidad técnico-profesional
sobre la base del perfeccionamiento e investigación.

TITULO IV

DEBERES DE LOS LICENCIADOS Y TÉCNICOS DENTRO DEL MARCO

PROFESIONAL E INSTITUCIONAL PARA CON LOS DEMÁS.

Capítulo 1º

Relaciones entre Profesionales:

Art. 21º: El respeto mutuo entre los Licenciados y/o Técnicos, y el no valerse de
otros medios que no sean los propios de la competencia científica y aquellos que
atenten contra la moral y las buenas costumbres, constituyen la base de la ética que
rige las relaciones entre profesionales. Cuando se plantee una situación entre las
partes afectadas, siempre se deberá anteponer al conflicto o a la denuncia
correspondiente, como una obligación moral y ética, la posible conciliación entre las
partes en la búsqueda de la solución al problema planteado.

Art. 22º: Constituye falta grave difamar o injuriar a un colega, calumniarlo o tratar de
perjudicarlo por cualquier medio en su ejercicio profesional como así también no
respetarlo en su vida privada, de la misma manera en aquellos casos en que este
profesional hace comentarios inadecuados y desmedidos ante terceros respecto a
sus colegas.

Art. 23º: El Licenciado y/o Técnico que desarrolle paralelamente a su profesión

cualquier actividad pública o privada que pueda colocarle en una situación de poder
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o privilegio, no debe valerse de ella para obtener ventajas de orden profesional o de
cualquier otro tipo.

Art. 24º: Es un acto contrario a la ética intentar desplazar o pretender hacerlo, a un

colega de un puesto público o privado por cualquier medio que no sea el de un
concurso.

Art. 25º: El Licenciado y/o Técnico que llamado a atender a un paciente, sospechare
que ya está siendo atendido por otro colega, deberá averiguarlo y ante su
comprobación, ajustará su conducta posterior a las normas prescriptas en este
Código y lo pondrá en conocimiento de quien corresponda.

Art. 26º: Las visitas o acompañamientos sociales, de amistad, o parentesco de un

profesional, a un paciente atendido por otro colega, deben hacerse en condiciones
que impidan toda sospecha de miras interesadas o de control. El deber del
Licenciado y/o Técnico es abstenerse de cuanto, directa o indirectamente, tienda a
disminuir la confianza depositada en el Profesional actuante.

Art. 27º: En el ámbito de la prestación de salud en cuanto a la tarea a cumplir por

parte de este profesional, deberá darse prioridad a una adecuada atención del
paciente; para ello es espíritu de esta normativa, la necesidad de una solidaridad
profesional en cuanto al trabajo y al horario a cumplir.

Capítulo 2º
Relaciones científicas, gremiales y profesionales:

Art. 28º: Las Sociedades Profesionales y Científicas, constituyen el único medio

ético para dar expresión a los ideales personales de índole profesional. En sus
relaciones profesionales, científicas y gremiales el Licenciado y/o Técnico debe:

a) Propender, por todos los medios a su alcance, a la jerarquización, per-

feccionamiento y enaltecimiento del estado del Técnico y/o Licenciado mediante el
desarrollo de la cultura general y profesional, la moralidad y el bienestar de sus
pares y de sí mismo.
b) Estar compenetrado de la función social de la profesión y proceder de acuerdo
con ella sin mengua de sus derechos, y anteponer, en todos los casos el interés
general a los suyos propios.
c) Ser solidario con sus colegas, quienes deben merecerle la más alta consideración
especialmente en circunstancias desfavorables para ellos, distinguiendo de manera
particular a los más jóvenes y a los maestros.

Art. 29º: Todo Licenciado y/o Técnico tiene el derecho de afiliarse libremente a una
entidad científica gremial o profesional. En tal caso, debe colaborar con ella para
desarrollar y ampliar el espíritu de solidaridad, de ayuda mutua y de mejoramiento
entre los componentes de la organización, debiendo cumplir las normas y decisiones
adoptadas por la entidad a que pertenezca. Deberá abstenerse de ingresar a dos o
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más instituciones de este tipo que sean opuestas en principios o medios de acción,
cuando se diera esta situación, se procurará por todos los medios, aunar esfuerzos
en la búsqueda y en el logro de concretar la creación de una sola institución madre
de todos los Licenciados y Técnicos de la Provincia de Córdoba.

Art. 30º: El Licenciado y/o Técnico debe prestar su adhesión activa a reclamos
colectivos de mejoras profesionales y a las medidas que para el logro de su
concreción disponga la entidad a la que pertenece (paros, huelgas, etc.), en estos
casos concretos, deberá quedar perfectamente asegurada la atención
indispensable en los servicios de radiología, en casos de urgencia.

Art. 31º: El Licenciado y/o Técnico afiliado a una entidad científica, gremial o
profesional deberá acatar y cumplir al pie de la letra los respectivos estatutos y/o
reglamentos que rijan para cada una de ellas.

Art. 32º: El Licenciado y/o Técnico elegido para un cargo científico, profesional o
gremial, deberá actuar con honestidad, responsabilidad, dedicación y desinterés.
Cuando desempeñe una representación, deberá obrar dentro de los límites del
mandato o de la autorización que se le hubiere acordado.

Capítulo 3º

Relaciones del Técnico y / o Licenciado con los Médicos y demás

Auxiliares de la Medicina:

Art. 33º: El Licenciado y/o Técnico procurará mantener cordiales relaciones con los
profesionales de las otras ramas del arte de curar y los demás auxiliares de la
medicina; respetando estrictamente los límites de cada profesión, en la búsqueda de
que se respete nuestro conocimiento y experiencia, fundamentalmente como
persona. Deberemos respetar el conocimiento y la experiencia de los demás
profesionales.

Art. 34º: Se deberá respetar el trato mutuo dentro de las normas de las buenas
costumbres propias de nuestra cultura, en particular delante de los pacientes, y
corresponde como una manera de respeto para con los demás, usar el título
profesional para dirigirse a los colegas, médicos y superiores.

Art. 35º: En caso de organizarse con fines científicos o gremiales, Colegios,

Federaciones u otras entidades con los demás Auxiliares de la Medicina, deberá
observar similar criterio al dispuesto en los Artículos 22, 23, 24, 28, 29 y 30.

Art. 36º: En caso de sugerencias sobre estudios o diversas técnicas radiológicas a

efectuar para lograr un mejor diagnóstico, el Licenciado y/o Técnico deberá estar
capacitado para hacerlos, y a efectos de estas contingencias, se dirigirá al Médico
Radiólogo o jefe del servicio en que se desempeñe; caso contrario, con el
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profesional responsable del caso, conservando el debido respeto y consideración a
los conoci-mientos del médico.

TITULO V

DEL SECRETO PROFESIONAL:

Art. 37º: El secreto profesional es un deber que nace de la esencia misma de la

profesión. Los Licenciados y/o Técnicos están en el deber de conservar como
secreto todo cuanto vean, oigan o conozcan por imperio de su ministerio en el
ejercicio del mismo.

Art. 38º: Revelar el secreto “sin justa causa” produciendo o pudiendo producir daños
a terceros, constituye grave falta de ética con implicancia jurídica. No es necesario
publicar el hecho para que exista revelación, es suficiente la confidencia a una
persona cualquiera.

Art. 39º: En caso de imprescindible necesidad y por pedido expreso de la autoridad

competente, lo podrá revelar exclusivamente al médico jefe correspondiente,
aplicando el criterio sustentado por la Organización Mundial de la Salud para las
distintas patologías en la forma más discreta posible, compartiendo ambos el secreto;
todo esto como una medida de carácter excepcional.

Art. 40º: El Licenciado y/o Técnico no incurre en falta cuando revela el secreto
profesional, denunciando los delitos de que tenga conocimiento en el ejercicio de su
profesión, dando cumplimiento asimismo a lo dispuesto por el Código Penal. No
puede ni debe denunciar los delitos de instancia privada contemplados en los
Artículos 71 y 72 del mismo Código.

Art. 41º: El secreto profesional obliga a todos los que participan en la atención del
paciente. El Licenciado y/o Técnico lo mismo que el Médico Radiólogo, debe imbuir a
los demás auxiliares, estudiantes, secretarias, enfermeras, etc., de la importancia y
necesidad de la observancia de este precepto.

Art. 42º: Cuando un Técnico y/o Licenciado es citado ante la Justicia como testigo
para declarar sobre hechos que ha conocido durante el ejercicio de su profesión,
puede negarse a hacerlo en razón de motivos éticos. Puede también optar por hacer
la revelación con el fin de colaborar con la justicia, no implicando ello violación del
secreto profesional, por cuanto el requerimiento judicial constituye una “justa causa”.
También podrá el Técnico y/o Licenciado efectuar la revelación cuando procediendo
así, evite un daño de cualquier tipo al enfermo, a la familia, a terceros, a las
instituciones o a la sociedad. En estos casos el profesional debe comportarse con
mesura, limitándose a relatar lo necesario sin incurrir en excesos verbales.

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 TITULO VI

DE LA PUBLICIDAD Y ANUNCIOS PROFESIONALES:

Art. 43º: La labor del Licenciado y/o Técnico como publicista es ponderable cuando
se hace con fines de intercambiar conocimientos científicos, gremiales o culturales.
La publicación de todo trabajo científico serio, tanto en el ámbito asistencial como
académico, debe hacerse por medio de la prensa científica, siendo contraria a todas
las normas éticas su divulgación en la prensa no específica, radiotelefonía, televisión
y cualquier otro medio de difusión.

Art. 44º: Los artículos y conferencias de divulgación científica para el público no

radiólogo, sólo serán con sentido de educación sanitaria para la población y siempre
deberán ser auspiciados por entidades responsables de la especialidad.

Art. 45º: El Licenciado y/o Técnico deberá abstenerse de publicar en órganos que
no sean estrictamente científicos, consentimientos, críticas u opiniones adversas a
campañas o procedimientos sanitarios efectuados por cualquier autoridad.

Art. 46º: El Licenciado y/o Técnico al ofrecer sus servicios, puede hacerlo por medio
de anuncios de tamaño y caracteres discretos limitándose a indicar su nombre y
apellido, número de matrícula profesional, sus títulos científicos y universitarios,
cargos hospitalarios o afines, las ramas y especialidades a que se dedica, dirección,
números telefónicos y correo electrónico; todo ello con la previa autorización de la
institución deontológica pertinente.

Art. 47º: Están expresamente reñidos con la ética profesional, los anuncios que
reúnan algunas de las características siguientes:
a) los de tamaño desmedido con caracteres llamativos o acompañados de
fotografías.
b) los que ofrecen promesas en tiempo y/o seguridad en el tratamiento, cualquiera
sea la enfermedad.
c) los que ofrecen servicios gratuitos o los que implícita o explícitamente mencionan
tarifas de honorarios.
d) los que invocan títulos, antecedentes o dignidades que no poseen legalmente
e) los que por su particular redacción o ambigüedad induzcan a error respecto a la
identidad, títulos profesionales o académicos del anunciante.

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f) los que ofrecen servicios técnicos con fines de proselitismo político, o de cualquier
otra índole, del mismo modo que los incluidos en cualquier tipo de propaganda de
entidades no médicas en que se ofrecen, junto con los servicios técnicos,
prestaciones de otro carácter.
g) los difundidos por radiotelefonía, altoparlantes, televisión, Internet y cualquier otro
medio similar, los efectuados en pantalla cinematográfica, los repartidos en forma de
volantes o tarjetas que no sean distribuidas por correo y con un destinatario preciso.
Estos últimos deberán atenerse a lo establecido en los incisos anteriores.
h) los que, aunque no infrinjan alguno de los apartados del presente artículo, sean
exhibidos en lugares inadecuados, o de animosidad positiva hacia el paciente que
comprometan la seriedad de la profesión o los que colocados en el domicilio
profesional, tengan el tamaño o forma de carteles o letreros luminosos.
Los Licenciados y/o Técnicos que pertenecen o hayan pertenecido al cuerpo docente
universitario, o los que posean títulos “honoris causa” podrán señalar la dignidad
merecida, especificando las cátedras o instituciones correspondientes.

TITULO VII

DE LA FUNCIÓN HOSPITALARIA:

Art. 48º: Las funciones del Licenciado y/o Técnico son de carácter exclusivamente
sanitario y perteneciendo por tal motivo al equipo de salud, dentro del ámbito
hospitalario.

Art. 49º: El Licenciado y/o Técnico que se desempeñe en instituciones hospitalarias,

tendrá especial cuidado al atender pacientes, de no lesionar los justos intereses de
los colegas.

Art. 50º: Es obligación de todo Licenciado y/o Técnico apoyar la carrera técnico-
hospitalaria con concurso previo, escalafón, estabilidad, jubilación, etc. adhiriendo
decididamente a la acción de las organizaciones instituidas en tal sentido.

Art. 51º: El Licenciado y/o Técnico solo por excepción y en forma gratuita, podrá
derivar pacientes del hospital a algún consultorio particular, y en circunstancias
especiales y bajo el consentimiento del jefe del servicio y/u otra autoridad del
hospital.

TITULO VIII

DE LAS INCOMPATIBILIDADES, DICOTOMÍAS Y CIRCUNSTANCIAS

ANÉTICAS:

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Art. 52º: Está prohibido al Licenciado y/o Técnico ser propietario o accionista, directa
o indirectamente de: fábricas, industrias o comercios de productos radiológicos o
medicinales de venta al público, así como asociarse a personas físicas o jurídicas
que desarrollen estas actividades. Si se hallare en cualquiera de estas situaciones,
no deberá ejercer la profesión, aunque sí puede dedicarse a la investigación
científica o a la docencia.

Art. 53º: El desempeño de cargos públicos (empleado, funcionario, legislador,

concejal, etc.) que exijan completa dedicación, impone el nombramiento de un
reemplazante en su actividad profesional.

Art. 54º: Ningún Licenciado y/o Técnico prestará su nombre o título a persona no
facultada por autoridad competente para practicar la profesión, ni colaborará con
profesionales del equipo de salud inhabilitados por autoridad competente mientras
dure tal sanción.

Art. 55º: Es falta de ética, admitir dentro de la tarea asistencial concretada a través
del acto profesional, a personas extrañas a la profesión.

TITULO IX

DE LA RESPONSABILIDAD:

Art. 56º: Tal cual le establece la normativa vigente la negligencia, impericia, im-
prudencia y falta a los deberes de funcionario público, como así también lo atinente a
la conducta ética- administrativa del profesional, todo ello constituye una falta grave
en el marco de la responsabilidad profesional.

TITULO X

EL TÉCNICO Y / O LICENCIADO COMO PERITO:

Art. 57º: El Licenciado y/o Técnico si debiera actuar como perito, procederá con
ecuanimidad evitando la distorsión, aún involuntaria de la verdad, y aplicará con el
mayor rigor sus conocimientos técnicos, científicos y su experiencia; aún cuando no
se sienta encuadrado dentro de este marco ético-legal.

Art. 58º: Cuando esa actuación le corresponda en un caso de responsabilidad

técnico-profesional deberá:

a) Juzgar el caso sin espíritu de cuerpo.

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b) Deberá abstenerse de todo acondicionamiento preconcebido antes, durante o
después del acto pericial al solo efecto de no verse comprometido en la
resolución final.
c) Indagar todas las condiciones del hecho, munirse de todas las pruebas que sean
necesarias, y si algo de esto constituye la única e inmediata causa de daño.
d) Tener en cuenta todas las circunstancias que influyeron o pudieron influir en la
actuación del o de los colegas.
e) Tratar en lo posible de establecer si se ha tratado de un error grosero u omisión
de medidas elementales en el hecho cometido.
f) Adoptar la mayor prudencia, guardar el mayor secreto, evitar los trascendidos y la
divulgación del caso peritado especialmente al emitir su opinión.

TITULO XI

EL LICENCIADO Y/O TÉCNICO FUNCIONARIO:

Art. 59º: El Licenciado y/o Técnico que ocupe un cargo público está obligado en el
desempeño del mismo a respetar y hacer respetar más que nadie la ética
profesional, cumpliendo rigurosamente con lo establecido en este Código.

Art. 60º: Sus obligaciones con las instituciones públicas o privadas, sanitarias o no,
no lo eximen de sus deberes éticos con sus colegas y en consecuencia debe, dentro
de su esfera de acción propugnar:

a) El respeto al régimen de concursos en todos los ámbitos.

b) La estabilidad y el escalafón del Técnico y/o Licenciado funcionario.

c) El derecho de amplia defensa y sumario previo a toda cesantía en especial las que
llevan implícita una situación política.
d) El derecho de profesar cualquier idea política o religiosa sin que ello signifique
que
esta práctica afecte el correcto desempeño profesional.
e) El derecho de agremiarse libremente y defender los intereses gremiales
f) Todos los derechos consagrados en este Código de Ética.

Art. 61º: El Licenciado y/o Técnico, como funcionario del Estado o de organismos
asistenciales de cualquier naturaleza, le asiste el derecho a no efectuar prestaciones
que no se encuadren dentro de las obligaciones inherentes al cargo que desempeña.

TITULO XII
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DICEOLOGÍA O DERECHOS DEL TÉCNICO Y / O LICENCIADO:

Art. 62º: El Licenciado y/o Técnico que, dentro del marco legal vigente, trabajare en
forma independiente y ante lo contemplado en el Art. 10°, tendrá derecho a la libre
elección de sus pacientes, limitado solamente por lo prescripto en el Art. 7º de este
Código.

Art. 63º: El Licenciado y/o Técnico tiene derecho a abandonar o transferir la atención
de los pacientes bajo su asistencia, aparte de los casos de fuerza mayor, y los ya
previstos en este Código, cuando medie alguna de las circunstancias siguientes:
a) cuando el paciente es atendido subrepticiamente por otro profesional.
b) cuando en beneficio de una mejor atención, considere necesario derivarlos a un
especialista y otro Licenciado y/o Técnico más capacitado.
c) si el paciente, voluntariamente no sigue o abandona las indicaciones efectuadas.
d) si su estado de ánimo o de salud, no lo hace sentir capacitado para continuar con
esa atención de lo cual deberá dejar implícita constancia del hecho.

Art. 64º: El Licenciado y/o Técnico tiene derecho a obtener o reservar copias de los
elementos de diagnóstico, ya sea a los efectos científicos, académicos y judiciales,
cuando los originales sean requeridos por el paciente o pertenezcan a instituciones
públicas o privadas; en todos los casos con la anuencia del Médico responsable del
sector.

TITULO XIII

DE LAS SANCIONES DISCIPLINARIAS

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN DISCIPLINARIA:

Art. 65º: La prescripción de las acciones respecto a lo dispuesto por este código de
ética tiene una vigencia de 2 años calendario.

Art. 66º: En consonancia con lo dispuesto en el artículo ut-supra ningún Técnico y/o
Licenciado podrá ser sancionado ni sumariado si hubiere transcurrido más de dos
años de cometida la presunta falta de ética; y si esta circunstancia resulta de la
denuncia misma, el Tribunal de Etica la rechazará sin más trámite, indicando el
motivo, salvo de que se trate de un delito de derecho penal que no estuviere
prescripto.
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A tales efectos, deberá tenerse en cuenta la fecha cierta o presunta en que se
habrían cometido los hechos o actos y las de recepción de la denuncia por parte de
la Junta Directiva o Tribunal de Ética.

TITULO XIV

RESPETO POR LA DIGNIDAD DEL HOMBRE:

Art. 67°: Deben tomarse todas las precauciones para respetar la vida privada y la
intimidad de los sujetos de la investigación, tratando de minimizar el impacto de los
estudios, no solamente en su integridad física, sino también mental y en su
personalidad.

Art. 68: De la misma manera, deberá respetarse estrictamente todo lo atinente a la

normativa que hace referencia a un derecho natural de toda persona, cual es
respetar su poder de decisión, concedido en lo que denominamos autonomía del
propio paciente a través del consentimiento informado.

TITULO XV

CUMPLIMIENTO DE LAS NORMAS ÉTICAS:

Es inútil establecer normas, si éstas no se cumplen. Para conseguirlo se puede

recurrir a dos tipos de medidas:

Art. 69º: En primer lugar al convencimiento. Para ello es necesaria la difusión de

las normas, y especialmente sus razones lógicas y éticas. La discusión y la reflexión
acerca de las mismas, pueden lograr el aporte de ideas y eventuales modificaciones,
pero en última instancia deberán lograr el consenso acerca de la necesidad de éstas
por parte de todos los que pudieran involucrarse en la realización de los estudios
radiológicos.

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Art. 70°: En segundo lugar, el contralor de las normas establecidas y aceptadas.
Para conseguirlo se ha propiciado el establecimiento de una Comisión Científica y
Ética.

En todo trabajo profesional tenemos que lograr un modelo que combine técnica con
vocación consciente. Haciendo de nuestra vocación, nuestros valores más explícitos,
seremos más científicos que si embotamos nuestra vocación bajo la máscara de la
neutralidad.

DEBERES Y DERECHOS DE LOS ESTUDIANTES:

Estudiar: en una búsqueda activa y personal de la verdad. Como instrumentos de su

aprendizaje cuenta con los libros, la naturaleza, la observación y la experimentación
y por sobre todos ellos: el ser humano sano o enfermo.

Aprender: prestándose a las modificaciones que ese proceso implica, tratando de

ser materia dócil en las manos de sus docentes, sin obsecuencia ni oposición
sistemática. Aprender a estudiar, a repasar, a meditar, a observar, a evaluarse, a
razonar. Más que aprender, aprehender las ideas, incorporándolas y
transformándolas en hechos de vida.

Participar: en el proceso, interviniendo en la apasionante aventura de la enseñanza-

aprendizaje. Esta participación debe ser sobre todo en adhesión interior, de
colaboración, de crítica honesta, de donación.

Ser respetado y respetar: a sí mismo, a los pacientes, a los condiscípulos, a los

docentes, y a los superiores, en su dignidad de personas humanas. La masificación
del mundo actual puede hacernos perder el sentido de individualidad, por ello
comenzamos este “derecho-deber”, con el de respetarse y ser respetado, en su
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condición de persona, así como debe ser celosísimo guardián de aquellos seres de
los que se vale para su aprendizaje, comprendiendo que unen a su enfermedad y a
su angustia, la posibilidad de ser tratados como números, patologías o cosas. Sólo
se justificará penetrar en su intimidad física o espiritual, en la medida que se esté
dispuesto a brindarles un servicio.

Servicio, palabra hoy tan rechazada y sin embargo cargada de significados positivos
y enaltecedores, que justifica que los Papas, utilicen como uno de sus títulos más
preciados el de “Servidor de los siervos de Dios”. Respeto también a los docentes,
expresado en admiración y agradecimiento actual y futuro, así como respeto a los
condiscípulos, hermanos en el estrado y el porvenir.

Por sobre todos estos deberes se yergue EL AMOR, amor a la verdad y al prójimo,
amor que busque el bien del otro, meta a la que en forma quizás más evidente que
en otras profesiones, debemos propender permanentemente los Técnicos de
Radiología, Técnicos en Radiología y Terapia Radiante y Licenciados en Producción
de Bio-Imágenes.

Recopilación y redacción general, a cargo del Sr. Prof. Licenciado en Producción de Bío-
Imágenes EDGAR HECTOR NIÑO, Matrícula Profesional Nº 2688.

Córdoba, Junio de 2012.-

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