Texto 1: EDUCACIÓN FEMINISTA PARA UNA CONCIENCIA CRÍTICA –

Bell Hoocks
Antes de los estudios de la mujer, las mujeres se reunían en grupos
para estudiar acerca del feminismo, y el pensamiento sexista, para
cambiarlo, cuestionando el patriarcado y modelos de interacción
social, entre otros.
Así la primera teoría feminista se difundió a través del boca a boca o
de boletines y folletos de poco coste. Las editoriales de mujeres, que
se estaban desarrollando constituyeron el medio para la difusión del
pensamiento feminista. Históricamente, los trabajos literarios o sobre
conocimiento académico eran desestimados, debido a una
discriminación de género, pero, poco a poco, la creación de estudios
de la mujer en facultades y universidades proporciono la legitimación
institucional para investigar los trabajos realizados por mujeres. Sin
menospreciar el trabajo de los hombres.
De esta forma, el movimiento feminista cobro impulso cuando, en las
aulas de todo el país, los jóvenes podían aprender sobre el
pensamiento feminista, leer la teoría y usarla en investigaciones
académicas. Este movimiento genero una revolución exigiendo que
se respetara el trabajo académico de las mujeres, y se acabara con
los sesgos (Orientación o dirección que toma un asunto) de género en
los currículos y pedagogía.
Durante los años setenta, la producción y teoría feminista era un
trabajo colaborativo, identificando sesgos raciales como un factor que
moldeaba el pensamiento feminista. Fue recién a finales de los
ochenta, donde la mayoría de la literatura feminista reflejo cierta
sensibilidad sobre las diferencias raciales y de clase.
Sin embargo, la legitimidad académica (mencionada en el párrafo 2),
también creó nuevas dificultades, elaborándose una jerga excluyente
y exclusiva para un público académico. Era como si se hubiera
juntado un conjunto de pensadoras feministas para formar un grupo
elitista y escribir teoría que solo pudieran entender personas
“iniciadas”. C como consecuencia, esta academización del
pensamiento debilita al movimiento feminista a través de la
despolitización
(Quitar carácter o voluntad política a alguien o a un hecho)
Por eso necesitamos una literatura que ayude a informar a la
población, a entender el pensamiento y la política feminista.
Necesitamos obras dirigidas en especial a cultura juvenil, sin
abandonar los programas de los estudios de la mujer, necesitamos
estudios feministas comunitarios. La literatura infantil, por ejemplo,
es uno de los terrenos cruciales para la educación feminista con
conciencia crítica, precisamente porque es cuando las creencias y las
identidades a un se están formando.
El movimiento feminista tiene que pensar en la educación feminista
como algo significativo en la vida de todo el mundo. Al no haber
logrado crear un movimiento educativo de masas para enseñar a
todo el mundo sobre feminismo, permitimos que los medios de
comunicación de masas patriarcales siga siendo el principal lugar en
el que la gente aprenda acerca del feminismo. Pero esto requiere que
vayamos más allá de la palabra escrita, implementando la utilización
de audiolibros, canciones, la radio, la televisión, incluso un canal de
televisión feminista, que no es lo mismo que un canal para mujeres.
Compartir el pensamiento y la práctica feminista, sostiene al
movimiento. Los saberes feministas son para todo el mundo.

Texto 2: ¿DE QUE HABLAMOS CUANDO HABLAMOS DE GÉNERO? -

Eduardo Mattio
El termino GÉNERO favorece la comprensión y resolución de ciertas
prácticas sociales de discriminación. La opinión de la jerarquía de la
Iglesia Católica no ha sido favorable a la circulación de este término.
Para los sectores religiosos más conservadores la adopción del
termino acarrea consecuencias respecto a la integridad de la familia
heterosexual, monogamica y reproductiva. Además encuentran en el
significado de este término, una justificación para la despenalización
o legalización del aborto. De allí, la necesidad de estos sectores
sociales de evitar su divulgación.
Además, la noción de género ha proporcionado en las últimas
décadas una herramienta emancipatoria tanto a las luchas de los
movimientos de mujeres como a los colectivos.
Entonces GÉNERO es…
 Interpretación cultural y variable (del sexo) por la cual «ser
mujer» y «ser varón» no pueden ser entendidos como
identidades naturales sino como roles sociales culturalmente
asignados.
 Es un modo de ordenamiento social, es una forma de las
relaciones de poder, naturalizadas e invisibilizadas.
 Reglamenta y condiciona la conducta objetiva y subjetiva de
las personas.
 Conjunto de roles, conductas, atributos, capacidades que
las sociedades establecen para definir lo masculino y lo
femenino.
  Sometido a variaciones en función de las diferentes
situaciones culturales, históricas, sociales y económicas.

La distinción sexo – género en la tradición feminista: sus

ventajas y limitaciones
“No se nace mujer: se llega a serlo. Ningún destino biológico, psíquico
o económico define la figura que reviste en el seno de la sociedad la
hembra humana; es el conjunto de la civilización el que elabora ese
producto intermedio entre el macho y el castrado al que se califica de
femenino. Únicamente la mediación de otro puede constituir a un
individuo”
Desde el fragmento anterior, parte Judith Butler establece que el
sexo es un atributo biológico, dado, necesario, inmutablemente
factico (Que está basado en los hechos o limitado a ellos, y no en lo
teórico o imaginario.), que ser humano equivale a ser sexuado, que el
género es la construcción cultural variable del sexo (ser varón, ser
mujer) y que la categoría “mujeres” es un logro cultural variable,
conjunto de significados que se adoptan o utilizan dentro de un
campo cultural. “Nadie nace con un género: el género siempre es
adquirido”
¿Qué quiere decir que los cuerpos nacen sexuados? Significa que
venimos a este mundo como machos o hembras, y que solo por un
proceso de socialización, nos constituimos como varones y mujeres
respectivamente, situados en relaciones de jerarquías y antagonismo
(Incompatibilidad, oposición o rivalidad entre personas, opiniones o
ideas)
Así, el SISTEMA SEXO – GENERO es entendido como:
 Conjunto de disposiciones por el cual una sociedad
transforma la sexualidad biológica en productos de la
actividad humana y satisface esas necesidades humanas
transformadas (Rubin, 1975).
 Modos de organización social de las relaciones entre los
sexos.
 Sistemas binarios que oponen la hembra al macho, lo
masculino a lo femenino, no sobre la base de la
igualdad, sino en términos jerárquicos y asimétricos.
Adjudicación binaria y jerárquica de caracteres, roles y espacios.

FEMENINO MASCULINO
 Naturaleza  Cultura
  Emocionalidad,  Razón
afectividad  Espacio público: política,
 Espacio privado de la cultura, ciencia
casa  Producción de la vida
 Reproducción de la vida social, económica y
cotidiana política
 Trabajo doméstico y de  Trabajo remunerado y
cuidado de niños/as y valorado
ancianos/as no
remunerado ni
reconocido

Si el género es una interpretación cultural y variable, no hay un modo

univoco de entender la feminidad o la masculinidad. El ser mujer o ser
varón no puede ser entendido como una identidad natural o
incondicionada, sino como roles sociales culturalmente asignados,
que pueden ser resignificados.
Retomando a Butler, (y relacionándolo con el párrafo 3) la misma
considera que ciertas concepciones y prácticas feministas han
permanecido sujetas a una perspectiva heterocentrada en la que:
1) el binarismo de género – varón/mujer- tiene como correlato la
diferencia sexual biológica – macho/hembra –
2) hay una relación causal o expresiva entre sexo/genero/deseo. Por
ejemplo: si nace macho, entonces es varón, por consiguiente, desea
mujeres.
3) se supone una coherencia o unidad interna entre
sexo/género/deseo que requiere de una heterosexualidad estable.
POSFEMINISMO
Esta autora, sostenía a inicio de los 90’ que la teoría feminista, debía
abrir el campo de las posibilidades para el género, sin dictar que tipos
de posibilidades debían ser realizadas.
Según Butler la matriz sexual es un marco social y cultural que lee y
significa cuerpos. Es la rejilla de inteligibilidad cultural a través de la
cual se naturalizan cuerpos géneros y deseos. A partir de ella se
regulan los modos de vivir y actuar, como mujeres o como varones.
Aquellos cuerpos géneros o deseos que transgredan los modelos que
la matriz impone (norma), están expuestos  a una sanción social
(burlas, etc). Además, para esta autora, el género no es un atributo
que precede a nuestras actuaciones "performances" masculinas o
femeninas.
Butler evita concebir al género de manera voluntarista, es decir,
nadie elije el género que ha de actuar frente a los demás. Ella,
también evita, todo compromiso constructivista, es decir, su manera
de entender el proceso de generación (género) no supone que el
cuerpo estaría sexuado de antemano. Lo que Butler señala es que el
cuerpo nos es dado.
HETEROSEXUALIDAD
Se considera como un modo de organización socio-erótico cuyas
normas que regulan las vidas de las personas:
- Imponen un género coherente con el sexo biológico;
- Imponen deseos y prácticas sexuales coherentes con el
sexo/género asignado.
Heterosexualidad obligatoria (Rich, 1980)
Institución de poder promovida por medio de la dependencia
económica de las mujeres, los relatos del cine y la literatura, por
representaciones idílicas del amor heterosexual, por el matrimonio,
etc.
LAS NORMAS Y LAS IDENTIDADES
La heterosexualidad es una norma social binaria que funciona del
siguiente modo:
- Establece una parte del cuerpo como indicador de la identidad
sexual.
- A cada identidad le otorga un conjunto de atributos y
capacidades.
- Determina que cada identidad debe desear a la identidad
opuesta.
Todo aquello que no cumpla con la norma es A-NORMAL.
Históricamente diversas identidades han desafiado la norma
heterosexual. Las identidades:
- No son naturales, sino construidas.
- No son eternas ni invariables, sino que su aparente estabilidad es
construida y sostenida día a día con nuestras prácticas.
- No son voluntarias, sino que se encuentran determinadas por
factores que exceden la conciencia del sujeto.
Entonces, devenir sujetos sexuados, hacerse mujer, varón, gay,
lesbiana, travesti, transexual, intersexual… NO es un dato inicial
biológico ni individual psicológico, sino una producción a lo largo de
una historia personal, social, cultural, política que se va entramando
con el correr del tiempo.