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Ecos del Alma

SANACIONES POPULARES

Facilitadora Bárbara A. Bertero


Ecos del Alma

En primer lugar, las sanaciones populares no tienen UNA, sino VARIAS


formas de ser transmitidas. Y a la vez, cada una de ellas, tiene sus
variantes.
Se hacía y se sigue haciendo, de dos formas:
“Pasando el poder”, que es cuando el sanador decide no sanar más o un
tiempo antes de morir, le deja su oración y hasta su cinta a una sola
persona previamente elegida, como una forma de legado, de testamento.
Es la forma más originaria, en este caso no hay variantes.
Compartiendo el conocimiento en determinadas fechas. Y aquí
comienzan las diferencias y con ellas las controversias, ya que las fechas
serían:

1. Viernes Santo y Navidad (24 a las 12 de la noche).


2. Semana Santa (cualquier día), 24 de Junio (día de San Juan), 8 de
Diciembre (Día de la Virgen) y Navidad.
3. Cualquier fecha que esté relacionada con momentos religiosos. Ej, a las
anteriores se le podría agregar, entre otras, el 15 de agosto (día de la
Asunción de la Virgen).
4. Cualquier momento en que el que transmite y el que recibe, lo decidan
con respeto y responsabilidad.

Además de las fechas, hay otras cosas que también se tienen en cuenta, se
puede transmitir:
1. Sólo a familiares.
2. A cualquiera que desee aprender.
3. Sólo a tres personas en una sola fecha.
4. Sólo a tres personas menores que el que transmite.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


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Estas son sólo algunas de las muchas formas de transmitirlas. Todas son
correctas y efectivas. Las diferencias dependen de las creencias de cada
lugar y cómo fueron pasando a través de los tiempos.
Por lo tanto, no deben cuestionarse las distintas formas y cada uno
respetará el modo en que lo recibió para transmitirlas.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


Ecos del Alma

La importancia de la FÈ durante las sanaciones:


¿Qué es la fe?
¿Alguna vez has pensado sobre las cosas que hacemos a diario que
requieren fe? Andar en colectivo, comer en un restaurante, cruzar la calle,
plantar una semilla… todo esto requiere cierto nivel de fe. Pero, ¿qué es la
fe? ¿Cómo se define?

La Real Academia Española nos da algunas definiciones sobre la fe. Por


ejemplo, nos habla de la fe como un conjunto de creencias que alguna
persona o grupo de personas puede tener. Otra de las definiciones que
ofrece habla sobre la confianza, o el buen concepto que podemos tener
sobre una persona o una situación. Cuando define el concepto de la fe en
el cristianismo nos dice que es una virtud relativa a la teología que consiste
en afirmar la revelación de Dios.
Tener fe es “ACEPTAR” lo que Dios permite en nuestra vida, aunque no lo
entendamos, aunque no nos guste.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


Ecos del Alma

Si tuviéramos la capacidad de ver el fin desde el principio tal como Él lo ve,


entonces podríamos saber por qué a veces conduce nuestra vida por
sendas extrañas y contrarias a nuestra razón y a nuestros deseos.

Tener fe es “DAR” cuando no tenemos, cuando nosotros mismos


necesitamos. La fe siempre saca algo valioso de lo aparentemente
inexistente; puede hacer que brille el tesoro de la generosidad en medio
de la pobreza y el desamparo, llenando de gratitud tanto al que recibe,
como al que da.

Tener fe es “CREER” en lugar de recurrir a la duda, que es lo más fácil. Si la


llama de la confianza se extingue, entonces ya no queda más remedio que
entregarse al desánimo. Para muchos creer en nuestras bondades,
posibilidades y talentos, tanto como en los de nuestros semejantes, es la
energía que mueve la vida hacia grandes derroteros. Pero todavía hay una
forma más elevada de creer. Saber que nuestra vida está en las manos de
Dios y que Él es quien cuida de nosotros.
Tener fe es “GUIAR, DIRIGIR” nuestra vida, pero no con la vista, sino con el
corazón. La razón necesita muchas evidencias para arriesgarse, el corazón
necesita sólo un rayo de esperanza. Las cosas más bellas y grandes que la
vida nos regala no se pueden ver, ni siquiera palpar, sólo se pueden
acariciar con el espíritu.
Tener fe es “LEVANTARSE” cuando se ha caído. Los reveses y fracasos en
cualquier área de la vida nos entristecen, pero es más triste quedarse
lamentándose en el frío suelo de la autocompasión, atrapado por la
frustración y la amargura.
Tener fe es “ARRIESGAR” todo a cambio de un sueño, de un amor, de un
ideal. Nada de lo que merece la pena en esta vida puede lograrse sin esa
dosis de sacrificio que implica desprenderse de algo o de alguien, a fin de
adquirir eso que mejore nuestro propio mundo y el de los demás.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


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Tener fe es “VER” positivamente hacia adelante, no importa cuán incierto


parezca el futuro o cuán doloroso el pasado. Quien tiene fe hace del hoy
un fundamento del mañana y trata de vivirlo de tal manera que cuando
sea parte de su pasado, pueda verlo como un grato recuerdo.

Tener fe es “CONFIAR” pero confiar no sólo en las cosas y en las personas,


sino en el Dios que obra, actúa y habla a través de las personas. Muchos
confían en lo material, pero viven relaciones huecas con sus semejantes.
Cierto que siempre habrá gente que lastime y traicione tu confianza, así
que lo que tienes que hacer es seguir confiando y sólo ser más cuidadoso
con aquel en quien confías dos veces.

Tener fe es “BUSCAR” lo imposible: sonreír cuando tus días se encuentran


nublados y tus ojos se han secado de tanto llorar. Tener fe es no dejar
nunca de desnudar tus labios con una sonrisa, ni siquiera cuando estés
triste, porque nunca sabes cuándo tu sonrisa puede dar luz y esperanza a
la vida de alguien que se encuentre en peor situación que la tuya.

Tener fe es “ANDAR” por los caminos de la vida de la misma forma en que


lo hace un niño. Tomados de la mano de nuestro padre. Tener fe es dejar
nuestros problemas en manos de DIOS y arrojarnos a sus brazos antes que
al abismo de la desesperación. Fe es descansar en Él para que nos cargue,
en vez de cargar nosotros nuestra propia colección de problemas.

“Que en tu vida haya suficiente fe para afrontar y esperar que las


situaciones difíciles cambien, y la necesaria humildad para aceptar que
muchas veces el que tiene que cambiar, eres tú”

Facilitadora Bárbara A. Bertero


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 Las sanaciones populares son una ayuda espiritual que no reemplazan a


la medicina.
 Se pueden escribir o memorizar en cualquier momento, tantas veces
hasta aprenderlo.
 En muchos casos es transmitido un viernes santo, porque es el día en
que DIOS se humaniza con su sufrimiento. Éste día se abre el canal de
sufrimiento que da paso a la vida nueva: El vencer el dolor.

SEMANA SANTA

La Semana Santa, es un período de ocho días que comienza con el


Domingo de Ramos y culmina con el Domingo de Resurrección.
Con la Semana Santa, el cristiano conmemora el Triduo Pascual, es decir,
los momentos de la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesucristo.
La Semana Santa está precedida por la Cuaresma, en que se recuerda el
tiempo de preparación de 40 días que pasó Jesucristo en el desierto.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


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Las celebraciones centrales de la Semana Santa son Jueves Santo, Viernes


Santo, Sábado Santo y Domingo de Resurrección.

La Semana Santa es un tiempo para dedicarse a la oración y reflexionar


sobre Jesucristo y los momentos del Triduo Pascual, pues Jesús, con su
infinita misericordia, decide tomar el lugar de los hombres y recibir el
castigo para liberar a la humanidad del pecado.

Además, la Semana Santa es el tiempo ideal para que el ser humano


medite sobre sus acciones y los cambios que debe realizar para acercarse
más a Dios y cumplir con sus mandamientos.

Durante la Semana Santa, el católico cumple con diversos actos, como


procesiones, la escenificación del drama de la muerte y pasión de Cristo,
entre otros.

Los penitentes se someten a duras cargas como símbolo de su auto


sacrificio y, en el día Viernes Santo, los fieles deben de guardar ayuno y
abstenerse de comer carne.

Triduo Pascual de Semana Santa


Como Triduo Pascual se denominan los tres días de la Semana Santa en
que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo: Jueves
Santo, Viernes Santo y Sábado Santo.

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El Triduo Pascual, en este sentido, concentra los momentos más


importantes del año litúrgico en el cristianismo.

Jueves Santo
El Jueves Santo celebra la última cena de Jesús de Nazaret con sus
discípulos, la institución de la eucaristía, la orden sacerdotal y el lavatorio
de pies.

En este día, los católicos realizan la visita de los siete templos o iglesias,
con el objetivo de agradecer a Dios el don de la eucaristía y sacerdocio.

Viernes Santo
Durante el Viernes Santo se recuerda la pasión de Cristo y el momento de
su crucifixión en el Calvario para salvar al hombre del pecado y darle la
vida eterna.

Este día, los fieles del catolicismo guardan ayuno y abstinencia de carne
como penitencia.

Sábado Santo
El Sábado Santo es el día que media entre la muerte y la resurrección de
Jesús. Se lleva a cabo una vigilia pascual, en la cual se acostumbra bendecir
el agua y encender las velas en señal de la resurrección de Jesús, que
acontece la madrugada del domingo.

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Domingo de Resurrección
El Domingo de Resurrección, conocido también como Domingo de Pascua,
conmemora la resurrección de Jesucristo al tercer día después de su
crucifixión y su primera aparición ante sus discípulos. Es un día de suma
alegría para los fieles y es interpretado como la esperanza de una nueva
vida.

Facilitadora Bárbara A. Bertero


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SER O NO SANADOR

Ser sanador es tener una actitud dispuesta a ser un medio para la sanación
de nuestros semejantes y nuestro entorno, sin, por ello, renunciar a la
propia individualidad.
Por supuesto, que sanador se es o no se es, lo que implica necesariamente
que, en caso de serlo, se es las 24 horas del día, 7 días a la semana. Y hay
que estar dispuesto a sanar en cualquier momento. Es una fuente de
continuas satisfacciones. Podes ayudar estés donde estés y sin importar
donde se encuentre la persona que necesita ayuda. Esa es una de las
ventajas que tenemos los sanadores. A diferencia de los cirujanos
podemos llevarnos trabajo a casa. Podemos sanar tanto si la persona está
ante nosotros, como si se encuentra a muchos kilómetros de distancia.

La energía de la sanación no es una sensación extraña o sorprendente. Es


totalmente natural.

Las personas que llegan a Sanación son de todo tipo. La mayoría no


conocen muchos detalles sobre el proceso antes de llegar, pero todas
vienen confiadas, ya que algún amigo les habló de ella. Quizás no estén
muy seguros si la sanación funcionará en ellos, pero si saben que funcionó
en quien les envía.

Pueden tener un problema grave, como cáncer, sida, infecciones crónicas,


problemas de huesos, o pueden venir a comprobar un temor o a eliminar
aquella molestia que nunca recuerdan comentarle al médico.

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Siempre se le explica a la persona el proceso a que se va a someter y se le


pide permiso para actuar. Se recomienda no interferir en la íntima relación
que hay entre una persona y su enfermedad, a no ser que ella esté de
acuerdo en dejarla partir.

Una vez teniendo el permiso, se actúa. Y una vez realizada la sanación, no


hay necesidad de poner nuestra mente en ella. La labor hecha, hecha está,
y no es necesario continuar pensando en ella para que sea efectiva.
En el fondo todos tenemos la capacidad de curarnos a nosotros mismos y
nutrir a los demás. El espíritu, la energía, el pensamiento, la intención, una
práctica hábil y creer en ti mismo están disponible para todas las personas.
Sin embargo, como expresiones individuales de la fuerza vital, todos
tenemos caminos diferentes y no todos nos sentimos “llamados” a la
práctica de curación.
Para aquellos de nosotros que nos sentimos “llamados” a la curación, a
menudo nos encontramos con algún tipo de resistencia, ya sea de nuestros
amigos, familia o nuestra cultura. Esto se debe a que la sanación espiritual,
puede ser mal vista como una práctica de brujos, charlatanes, que no está
científicamente comprobada. etc.
Desafortunadamente, esto ha llevado a que gran porcentaje de nosotros
pierda contacto con las formas tradicionales de curación. A muy pocos de
nosotros nos criaron alrededor de chamanes, curanderos o curanderas,
que podrían transmitir conocimientos antiguos y practica de curación
holística.
A diferencia de esto, en nuestra niñez era más cotidiano que nos lleven
con el pediatra, con los médicos de cabecera familiares, que nos recetaron
todo tipo de medicamentos. Y aunque estos medicamentos fueron útiles, y

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ayudaron a reparar cierta parte de nosotros, nunca nos ayudaron a sanar


del todo nuestro organismo con sus múltiples capas.
A pesar de la forma en que te criaron y creciste, es posible que aun sientas
impulso hacia la curación espiritual, incluso si va en contra de todo lo que
te enseñaron.

Entonces ¿Deseas ser un sanador espiritual?


Todas las personas tienen la capacidad de ayudar a otros, durante las
sanaciones populares el que sana es Dios y nosotros somos un canal de
sanación. Todo está en el poder de creer, si queremos y creemos:
PODEMOS. “el poder de la fe”

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TODO ES ENERGÌA

El universo es un gigantesco campo de energía formado por la vibración de


todo lo que en él existe. El ser humano interactúa con este campo
universal a través de un campo energético propio, formado por distintos
planos o frecuencias de energía. El aura o halo luminoso que rodea al
cuerpo es la radiación electromagnética de cada uno de ellos. Cada uno de
estos planos está conectado entre sí y lo que sucede en cada uno de ellos
afecta a los demás.

Podemos distinguir los siguientes planos:

El plano físico (sistemas y órganos) y etérico (plantilla energética del


cuerpo físico donde se experimentan todas las sensaciones físicas).
Los planos emocional (emociones) y mental (estructuras de pensamiento).

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El plano espiritual y conciencia (conexión con uno mismo y el resto del


universo).
cuerpos

Este cuerpo de energía precisa de una determinada vibración para


mantenerse vital y saludable. Cuando esa energía disminuye su nivel
vibratorio perdemos nuestro equilibrio y nos vemos expuestos a contraer
enfermedades.

El nivel vibratorio puede descender primero en los planos espiritual,


mental o emocional e ir calando hasta llegar al cuerpo físico produciendo
un bloqueo energético. Ese bloqueo impide la correcta circulación de
energía y si permanece mucho tiempo, puede dar lugar a la enfermedad
en el plano físico.

Aunque estos procesos pueden durar años, es importante actuar sobre los
bloqueos antes de que las consecuencias sean más graves.

La vuelta al equilibrio se consigue activando la propia energía vital. La


fuerza de la vida reúne en sí misma todo el potencial sanador necesario
para liberar bloqueos y recuperar el flujo de energía. Esto contribuirá a
reestablecer la salud y el equilibrio físico y mental.

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La salud física es EQUILIBRIO

La enfermedad física es un DESEQUILIBRIO

¿QUE ES SANAR?

Es restituir el equilibrio mental- físico- emocional. Es ayudarnos a despertar el


poder de la auto curación.

Elementos de sanación:
 Agua
 Sal
 Aceite
 manos

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EMPACHO:

 Es un bloqueo energético o estancamiento.


 Se puede curar presencial o también a distancia.

Procedimiento:
Se utiliza una corbata, cinta o metro que pueden ser de color (la más
conocida) roja, violeta o negra (porque la energía fluye mejor) o del color
que desees, pero preferentemente oscura.
Nos pondremos delante de la persona que padece empacho, estiramos la
corbata y una punta se sostiene a la altura del estómago de la persona, la
estiramos y tomamos la otra punta de la corbata. Comenzamos a medir
con el codo hasta la punta de nuestros dedos, marcando una cruz con
nuestro dedo índice. Se coloca el codo seguido de donde se marcó la cruz
y repetimos una vez más. (son tres veces en total)
Mientras lo vamos haciendo se dice el CREDO (el cual se puede
personalizar).
CREDO:

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“Jesús, maría y José poned nuestras manos que yo pondré las mías. Que
salga este empacho que tiene ... (nombre de la persona) ... enseguida”
Amén.
Decir este credo mentalmente.

Cuando finalizamos este paso doblamos la cinta en la última cruz marcada


y la posicionamos a la altura del estómago. Esta será la primera medida
hecha de la curación. Repetir el proceso dos veces más.
Si la punta de los dedos no tocan o llegan justo hasta el estómago indica
que la persona está sana, si tus dedos sobrepasan esta medida es que
esta empachada.

Puntos a tener en cuenta:


 Al medir tres veces la cinta se puede achicar y esto sucede cuando
hay empacho. Por eso hay que repetir este proceso dos veces más hasta
que al medir con el brazo de justa la medida, ni más ni menos.
 Cada vez que hacemos la medición con el brazo se dibuja con tu
dedo una cruz al finalizar.
 Este ritual se repite tres días seguidos, según la gravedad del
empacho. Hay personas que necesitan una sola curación.
 Se puede curar a distancia pidiéndole los datos a la persona:
nombre completo y fecha de nacimiento. En este caso utilizamos la
visualización. Visualizamos a la persona como si estuviera en frente
nuestro, como si estuviera ahí con nosotros y seguimos los pasos antes
dichos para curar el empacho. Podremos utilizar como representación de
la persona a curar, un peluche-muñeco, o también alguna persona
cercana que nos quiera ayudar.
 Se hace la señal de la cruz 3 veces cuando va finalizando la
curación, y se dice 3 veces el credo.
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 Cada curación debe hacerse, como mínimo, con 8 horas de


diferencia entre cada una.
 Esta curación de empacho, también sirve para sanar hígado e
intestinos. Se siguen los mismos pasos, pero la persona debe sostener la
cinta desde su hígado o intestino, dependiendo lo que se quiera sanar.

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INFLAMACIONES:

 Puede ser muscular, intestinal, cualquier tipo de inflamación.

 Frotamos nuestras manos entre sí, para cargarlas energéticamente.


 Ubicamos la zona que queremos desinflamar, y colocamos nuestras
manos alrededor como abrazándola, sin tocar a la persona.
 Se dice el credo mentalmente:

“En la cuna del señor bajo el manto de María, donde pongan vuestras
manos, yo pondré las mías. Si hay inflamación en …… que desaparezca
enseguida” Amén.

 Se dejan las manos unos segundos alrededor de la zona inflamada


y luego sacudimos nuestras manos, imaginando que expulsamos la
energía negativa, por eso sacudimos hacia los costados. Nunca hacia el
paciente o hacia nosotros.
 Al finalizar se reza un credo en voz baja, se hace la señal de la cruz,
y se agradece.
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 Repetir esta curación tres veces.


 Se puede hacer esta curación presencial o a distancia. En este
segundo caso, le pedimos nombre completo y fecha de nacimiento a la
persona. Utilizaremos la visualización, imaginando a la persona en frente
nuestro, con algo que la reemplace, un muñeco-peluche. Luego se siguen
todos los pasos de la sanación, como si la persona estuviera presente.

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OJEADURA

 Mal de ojo, curación presencial.


 Para bebes, niños y adultos.
 Colocamos en la cabeza de la persona a sanar, un plato hondo de
vidrio con agua, siempre sin apoyar el plato sobre su cabeza, más bien
hay que sostenerlo en el aire y que la persona este sentada.
 Colocamos con los dedos, 9 gotas de aceite, formando una cruz.
 Por cada gota que colocamos se dice la siguiente oración
mentalmente:

“Dos ojos te han ojeado y tres santos te han mejorado”

 Si las gotas se esparcen o desarman, la persona esta ojeada, si la


cruz se mantiene no hay ojeo.
 Siguiendo con la sanación, luego se hace tres veces una cruz con el
aceite, en la frente de la persona, con nuestro dedo pulgar derecho y
repitiendo tres veces la oración antes mencionada.
 Para finalizar se reza un padre nuestro y un credo.

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 Se dice: “Gracias, porque ya está hecho”


 Luego se desecha lo que está en el plato de vidrio, puede ser en el
inodoro, la calle, o la bacha de la cocina. Donde fluya el agua o donde no
la podremos tocar, ni pisar.

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NERVIOS:

 Cuando por golpes o torceduras los nervios se anudan, se inflaman,


generando así dolor o incomodidad.

 Procedimiento:

 En un vaso de vidrio transparente con agua pondremos 9 granos de


trigo, (maíz, arroz, nunca porotos), uno a uno repitiendo el siguiente
credo:

“En la cuna del señor bajo el manto de María, donde pongan vuestras
manos yo pondré las mías” “Si …(nombre)… tiene en ..(lugar).. algún
nervio inflamado o anudado que desaparezca enseguida”

 Si aparecen burbujitas durante esta sanación, representan la


cantidad de nervios afectados.
 Después de pasado dos horas desde que hicimos la sanación se
puede tirar el agua con los granos.

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DESGARROS:

 Rompimiento del tejido interno.


 Se puede hacer a distancia y presencial.
 Realizar la curación tres veces, una vez cada 12 horas.

Procedimiento:

 Colocamos en una sarten, una taza y media de agua y lo llevamos al


fuego.
 Mientras se va calentando el agua, se reza a la Virgen del Carmen,
el siguiente credo:

“En el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo, si ...(nombre).. tiene
desgarro en ..(lugar).. que la Virgen del Carmen lo sane”

 Se apaga el fuego y colocamos la taza dad vuelta sobre la sarten en


el agua.

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 Luego, se reza un padre nuestro y se hace la señal de la cruz.

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ESGUINCES:

 Para articulaciones, dedos, rodillas, etc.


 Se puede hacer la sanación a distancia.

Procedimiento:

 En un vaso de vidrio transparente con agua pondremos 9 granos de


trigo, (maíz, arroz, nunca porotos), uno a uno repitiendo el siguiente
credo:

“En la cuna del señor bajo el manto de María, donde pongan vuestras
manos yo pondré las mías” “Si …(nombre)… tiene un esguince en ...
(lugar)... que desaparezca enseguida”

 Después de pasado dos horas desde que hicimos la sanación se


puede tirar el agua con los granos.

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PARASITOS

 Se puede hacer la curación a distancia.


 Se repite por tres días seguidos.
 Se puede curar la culebrilla con este método.

Procedimiento:

 Se cortan 9 hilos blancos finos de unos 15cm aproximadamente.


 Se prepara un plato con agua, que no rebalse.
 Se toma hilo por hilo, y se lo pasa por el cuerpo de la persona
enferma, de arriba hacia abajo. Pasando por la frente, cuello, hasta el
bajo vientre y se deposita el hilo en el plato con agua. Repitiendo la
siguiente oración:

“En el nombre de Dios todo poderoso y San Jacobo, dadme el poder y la


gracia de sanarle a ... (nombre)... los parásitos”

 Repetimos este proceso con cada hilo.

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 Luego cortamos con una tijera los 9 hilos, bien chiquitos, sin
tocarlos con las manos.
 Hacemos la señal de la cruz y decimos: “Gracias señor porque ya
está hecho”.
 Al cabo de dos horas tiramos el agua con los hilos cortados, al
inodoro.

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