De lo dulce a lo amargo: la memoria como aliada y obstáculo

Martín Castillo I.
Semiótica Teatral.
Prof. Carolina Hernández P.
Ped. Castellano.
27 de Septiembre del 2019
Título La Dama de Los Andes
 Director Bosco Israel Cayo Álvarez

Dramaturgo Bosco Israel Cayo Álvarez

Año de Producción 2017

Elenco April Gregory González

María Angélica Tapia Pérez
Ana María López Rozas
María Verónica Medel Veloso

Productor Alfonso Arenas Astorga

La Dama de Los Andes es una obra teatral escrita en 2017 por Bosco Israel Cayo Álvarez y
protagonizada por April Gregory González, María Angélica Tapia Pérez, Ana María López
Rozas y María Verónica Medel Veloso. Trabaja el ejercicio de la memoria social y política
utilizando humor negro. La interacción entre las personajes es rápida e intuitiva, haciendo de
esta producción un panorama interesante aun para quien no tenga cercanía al teatro.

Tres mujeres pertenecientes a las Damas de Rojo de Los Andes, se juntan llamadas por el
deber de suplir el vacío que deja, debido al Alzheimer, su anterior líder. Éllas se reúnen en la
casa de quien fuera presidenta de su organización. Entre las tres fluirá el diálogo,
reconstruyendo acontecimientos del pasado, develando pasajes donde la memoria será aliada
y obstáculo.

La Dama de Los Andes comienza como un pequeño drama entre mujeres pertenecientes a
ésta organización. El conflicto es la necesidad de reemplazar a la anterior presidenta, quien
sufre de alzheimer. Desde un drama lleno de anécdotas cotidianas e hilarantes se construye
un ambiente que llega a tornarse denso. Surgen las relaciones mentales en el espectador
llevándolo al verdadero mensaje y temática de la obra; la desaparición de detenidos en
dictadura a través de la operación cordillera.

El tinte político y social del montaje puede permanecer oculto en un principio al espectador
joven. Ésto se debe a que el público joven no vivió en época de dictadura ni transición. Es
con pequeños detalles, la manera en que la obra entrega elementos para crear en el espectador
incomodidad, haciendo que este comience a recordar información y anécdotas
correspondientes a ese periodo. La itinerante conversación de las mujeres y el continuo juego
con la memoria hacen del montaje un viaje desde lo gracioso a el luto y el llamado a no
olvidar. Por otra parte, el contexto de producción colabora con este desarrollo de la temática
de la obra. Hay cuarenta y cuatro años entre el golpe de estado y la producción del texto, se
debe a esto la posibilidad de trabajar la temática de una forma más liviana sin dejar de lado su
gravedad.

Como a un buen cuento a La Dama de Los Andes no le falta ni le sobra nada. Resulta una
producción construida de forma que todos sus elementos son justificados según su propósito.
No abusa de elementos modernos, es más, utiliza la rima y canciones; apelando así a un teatro
con una medalidad representacional inclinada a lo tradicional. Desde el conflicto, pasando
por la problemática de fondo y llegando a la conciencia que busca generar nos vemos frente
ante a una producción armada de manera que la atención del espectador no deja de
mantenerse en el escenario. Interpretada por un grupo de actrices, quienes logran retratar con
fidelidad a personajes propios de la sociedad chilena posterior a la dictadura. Gracias a las
cuales la obra se presenta de forma verosímil. Bajo mi opinión, la producción resulta
recomendable en su totalidad, ya sea para un público joven o de mayor edad. Debido a la
capacidad de contextualizar e insertar en la realidad vivida en la época de transición que
entrega la obra.