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COMO ESTAS CON DIOS

«Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis


pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino
eterno».
Salmos 139: 23-24
En la vida diaria nos preocupamos por tantas cosas como por ejemplo: ¿Que ropa
me voy a poner hoy?, ¿Que haré este día?, ¿Cómo haré en el parcial o examen si
no he estudiado?, ¿Será que la chica(o) de mis sueños me hará caso?, además
nos preocupamos por quedar bien con las personas, ya sea nuestros amigos,
nuestro familiares o nuestra novia o para los que estamos casados tratamos de
quedar bien con nuestra esposa, etc, etc. Pero rara vez nos preocupamos por
quedar bien con Dios.

lastimosamente hay muchos que van descuidando su relación personal con Dios,
esta clase de personas van poco a poco olvidándose de su verdadera meta que
es: “agradar a Dios”, y comienzan a ver tantas situaciones que en lugar de
hacerlos crecer espiritualmente les impide ver resultados, pues están tan afanados
en ver errores entre los que le rodean, que tratar de vivir una vida agradable a
Dios.

Existen muchas características de cuando una persona está descuidando su


relación personal con Dios, tratare de citar las más comunes sabiendo de
antemano que pueden ser muchas más:

 Su Carácter comienza a variar: quizá era una persona muy amable y


servicial, pero sin darse cuenta fue descuidando su relación personal con
Dios y su carácter poco a poco comenzó a ser el mismo que era antes. Su
rostro comienza a cambiar nuevamente y a denotar una falta de paz interior
que solo Jesús da.

 Las Criticas comienza a aparecer: Cualquier cosa por mínima que sea le


parece mal, para el pareciera que todos hacen las cosas mal y que no son
dignos de estar en los puestos que están. Critica desde las personas que
están en la entrada de la congregación, pasando por las alabanzas y
terminando por el mensaje que se dio. Definitivamente su relación personal
con Dios esta descuidada.

 Su vocabulario comienza a cambiar: Si las palabras de ofensa se habían


extinguido, con la falta de búsqueda del Señor comenzaron nuevamente a
salir aquellas palabras que en nuestra cultura son denominadas malas. Su
vocabulario no es ya el de un hijo de Dios sino mas parece el vocabulario
de una persona que jamás a conocido de Dios.

 Deja de congregarse y de servir: no en todos los casos los que dejan de


servir es porque están olvidándose de Dios, pero en la mayoría de casos si,
su mismo distanciamiento con Dios los hace valorar poco el hecho de
servirle a aquel que dio todo por nosotros.
Tienden a poner otras cosas antes que a Dios: Si su primer lugar antes
lo ocupaba Dios, ahora le da prioridad a otras cosas como por ejemplo: al
deporte, a los amigos, a su novia(o), etc.
¿CÓMO ESTA MI RELACIÓN PERSONAL CON DIOS?

 Es fácil juzgar, pero también es difícil, puesto que nadie conoce tu interior,
solamente Dios, en pocas palabras nadie puede asegurar como esta tu
relación con Dios pues nadie puede ver lo que hay en tu corazón.
 Pero también hay una balanza que se llama: “FRUTOS”, es decir que por
nuestros frutos nos conocerán, si tu dices tener una relación personal muy
buena con Dios, pero tus FRUTOS (ósea tu exterior o tu testimonio) no lo
demuestran, entonces solo estas quedando en las palabras.
 Es fácil andar pregonando que nuestra relación personal con Dios es
buena, pero mas allá de hablar y hablar, Dios demanda frutos.
 Si yo digo tener una buena relación personal con Dios, por ende mis frutos
dará muestra de ello y toda mi vida girara alrededor de tratar de agradar a
Dios.
 No voy a juzgarte por como estas viviendo, pero si tienes que entender que
debes prestar mas atención a Dios, tratarlo de agradar y de servir. No te
puedes pasar la vida diciendo que TODO esta bien cuando tú sabes muy
bien en el interior que las cosas no están tan bien como tú piensas.
 Nunca nos podremos engañar a nosotros mismos, cada uno de nosotros
sabemos como esta nuestra relación con Dios y cada uno sabemos que
cosas están impidiendo que caminemos como Dios quiere que caminemos.
 Es hora que te levantes en el Nombre del Señor y que comiences a vivir
con un objetivo fijo, ese objetivo de agradar a Dios, quizá tu seas una
persona que se preocupa por quedar bien con tus amigos o conocidos, pero
pocas veces te preocupas por quedar bien con Dios.
 Quizá tu tratas por todas las manera posibles de agradar a las personas
que amas, pero no demuestras el mismo interés por agradar a Dios que el
que demuestras por agradar a tus seres queridos.
 Momento, es hora de reflexionar sobre la importancia de Dios en mi vida,
sobre la importancia que tiene para mi el hecho de agradar a Dios y
mantener una relación excelente con El.
 Tus errores no te van alejar de Dios si tu no lo permites, puesto que Dios
siempre está dispuesto a perdonarte y levantarte para luchas cada día con
más fuerzas.

Se tu mismo tu propio juez, y has una reflexión sobre ¿Qué te esta pasando?, y


no solo quedar en la reflexión sino que mas allá de eso debes levantarte y dejar de
estar acomodado a la vida que llevas, pues la voluntad de Dios es que tu tengas
una verdadera comunión con El, pues para eso te ha llamado.

Es hora de tratar de agradar a Dios y las demás cosas vendrán por


añadidura.
“Mas buscad primeramente el reino
de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”
San Mateo 6:33

CONTESTA SINCERAMENTE LAS SIGUIENTES PREGUNTAS:


1) ¿Tienes algún área en tu vida que te afecta espiritualmente?, ¿Qué estás
haciendo para vencerla?
2) ¿Cuánto tiempo en el día le dedicas al Señor?
3) ¿Cuándo fue la última vez que te gozaste alabando al Señor?
4) ¿Cuándo fue la última vez que le hablaste a alguien de Cristo?
5) ¿Cuándo fue la última vez que leíste un libro completo de la Biblia y te
edificaste?
6) ¿Cuándo fue la última vez que serviste con mucho gozo?
7) ¿En tus decisiones tomas en cuenta Dios?
8) ¿Cuándo fue la última vez que lloraste delante de la presencia de Dios?
9) ¿Cuándo fue la última vez que conversaste con Dios?

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