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COEFICIENTE DE ABSORCIÓN MÁSICO µ0

Presentado por:

ARIS DANILO TRUJILLO CAMACHO-20141127960

EDUARDO FELIPE TOVAR VARGAS-20142130077

JEAN MIT POLANIA BARRIOS-20142131078

JESSICA FERNANDA FIERRO-20161146669

JUAN CAMILO AVENDAÑO CHARRY-20151137869

KERLY JOHANA PASTRANA GUTIERREZ-20152141115

LAURA DANIELA POLANCO CHANTRE-20161148654

MANUEL FERNANDO ARRIETA HERNANDEZ-20142130929

YENIFER CAROLINA BATA SANTA-20142130843

MARIA CAMILA MAZORRA-20142130975

Universidad Surcolombiana

Facultad de Ciencias Exactas y Naturales

Programa de Física

Neiva-Huila
Enero 24 de 2020

OBJETIVO GENERAL

µ
 Mostrar experimentalmente que el coeficiente de absorción másico, µ0= , para
ρ
un material de espesor constante, es función de λ .
3

MATERIALES

 Unidad de rayos x
 Cristal difractor de LIF
 Goniómetro
 Contador geiger
 Computadora con software measure
 Impresora
 Amplificador de corriente
 colimador de 2mm.
 Aluminio, espesor 0.08 mm
 Estaño, espesor 0.025 mm

MARCO TEÓRICO
INTERACCIÓN DE PARTICULAS CON LA MATERIA

Interacción de las partículas cargadas. Tipos de colisiones

Cuando las partículas interaccionan con la materia producen una serie de efectos
que son función del tipo de partícula (masa y carga), de su energía y del medio
con el que interacciona (en lo referente a componentes, densidad, estado físico,
etc.).

Las partículas cargadas pierden su energía al interaccionar con la materia


fundamentalmente por colisiones coulombianas, esto es, colisiones debidas a la
interacción de las cargas de las partículas incidentes con las cargas de los electrones
y protones de los átomos. Fundamentalmente, estas colisiones se producen a través
de tres tipos de interacciones:

a) Colisión elástica: la partícula choca con los átomos del medio, desviándose de
su trayectoria y cediendo una cierta cantidad de energía en forma de energía
cinética. No se produce alteración atómica ni nuclear en el medio.
e-

e-

COLISIÓN ELÁSTICA

b) Colisión inelástica: la partícula interacciona con los electrones atómicos


transfiriendo a estas pequeñas cantidades de energía.

La energía transferida puede provocar que el electrón atómico escape de la


atracción del núcleo produciendo la ionización del átomo, o que el electrón atómico
pase a un estado menos ligado produciéndose en este caso la excitación del
átomo.

c) Colisión radioactiva: la partícula cargada se "frena" o se "desvía" en su


interacción con los átomos del medio y como resultado emite ondas
electromagnéticas (esta "radiación" se conoce como radiación de frenado). Este
proceso, a nivel elemental, se produce con mayor probabilidad en las proximidades
del núcleo atómico como consecuencia de pequeñas "desviaciones" de la partícula
incidente, ocasionadas por las cargas eléctricas del núcleo.
Este proceso es un caso particular del fenómeno gen eral de Física Básica sobre
generación o producción de ondas electromagnéticas. Cualquier emisor de ondas
electromagnéticas (por ejemplo una antena de una emisora de radio) supone un
movimiento no uniforme, o sea con aceleración, de cargas eléctricas.

La intensidad de la radiación de frenado (número de fotones) es mucho mayor para


partículas de masa pequeña como electrones. Para partículas pesadas es
despreciable. Asimismo, cuanto mayor sea el número atómico del material en el que
interaccionan las partículas cargadas, la intensidad de la radiación de frenado será
mayor. Por ello, si lo que queremos es obtener radiación de frenado significativa
debemos hacer impactar un haz de electrones a una energía cinética adecuada
contra un material de número atómico alto, por ejemplo, el Wolframio (Z= 74). Este es
el fundamento de los equipos de rayos X.

La energía de la radiación de frenado dependerá de los “mucho” o “poco” que se frenen


las partículas cargadas en el medio. Así, si tenemos un electrón de 100 keV que sufre
una colisión radioactiva, la energía del fotón de radiación de frenado podrá ser de unos
pocos eV si el electrón se frena poco, pudiendo tomar valore s en un espectro continuo
determinado por cuánto se frena la partícula hasta un máximo de100 keV, caso en que
el electrón se frena del todo.

Para obtener un haz de radiación con fotones de uno s cientos de keV,


correspondientes al espectro de los rayos X, debemos, por tanto, dar una energía a
los electrones incidentes de unos cientos de keV. Esto se consigue sometiendo a los
electrones a una tensión de polarización de unos cientos de kV (recuerde la def
inición de eV).

Poder de frenado y alcance

El poder de frenado S(E) se define en un medio para una partícula determinada a


una determinada energía como:
siendo dE la pérdida de energía que experimenta la partícula de energía E al
recorrer una distancia dx en el medio. El poder de frenado representa, por tanto,
la pérdida de energía por la partícula en la unidad de recorrido.

Las unidades del poder de frenado son [E]/[L], por ejemplo, MeV/cm. Sin embargo,
para poder tabular el poder de frenado en función de la energía y tipo de partícula en
un determinado medio (Z), se utiliza un artificio que evita la dependencia con la
densidad (pues de otra manera necesitaríamos tabular para cada densidad de un
mismo Z). Este artificio supone hablar del poder de frenado másico, es decir, de la
pérdida de energía por unidad de espesor másico (espesor másico = espesor
geométrico x densidad del medio, que se suele expresar en g/cm2). Así, es habitual
encontrar el poder de frenado másico expresado en (MeV cm2/g).

Las partículas ligeras (electrones, etc) experimentan colisiones elásticas, inelásticas y


radiativas, en un grado de importancia no despreciable y que depende, entre otros
factores, de la energía.

Debido a la pequeña masa de estas partículas, las colisiones elásticas provocan


importantes desviaciones en su trayectoria, resultando ésta, por tanto, irregular y en
zigzag.

Desde un punto de vista energético, estas partículas pierden su energía provocando


excitaciones e ionizaciones en los átomos del medio(colisiones inelásticas, C.I.) y
emitiendo fotones (colisiones radiativas, C.R.). Por tanto, la pérdida total de energía
por unidad de recorrido se expresa como:

En el caso de partículas pesadas, tal y como hemos visto, la pérdida de energía por
colisiones radiactivas es despreciable.

El alcance de una partícula en un medio se define como el recorrido total de la


partícula en el material, supuesto el recorrido rectilíneo. El alcance es, por tanto, la
penetración máxima de una partícula de una energía determinada en un medio. En
general, es inversamente proporcional al poder de frenado.

Interacción de electrones en un medio de alto número atómico


Cuando los electrones se aceleran mediante una diferencia de potencial V adquieren
una energía cinética e·V, siendo e la carga del electrón. Por ejemplo, potenciales de
aceleración de 100 kV suministran a los electrones una energía cinética de 100 keV.
Estos electrones al interaccionar con los átomos del ánodo producirán,
fundamentalmente, excitaciones e ionizaciones de los mismos, mediante las
colisiones inelásticas. En cada una de ellas el electrón transfiere parte de su energía
al medio y modifica su dirección de movimiento (Figura 1).

Figura 1. Interacción de electrones con la materia

En la mayoría de los casos la energía transferida en cada interacción es pequeña,


de tal forma que, por ejemplo, un electrón de 100 keV puede experimentar hasta
1000 colisiones de este tipo antes de ser totalmente frenado. Su energía acaba
siendo depositada a lo largo de la trayectoria, dando lugar a un aumento de la
temperatura del ánodo.

En algunas de las ionizaciones, el electrón inciden te golpea un electrón de una de


las capas más profundas del átomo, arrancándolo de su posición y dejando una
vacante en la capa. Esta vacante será ocupada en un plazo muy corto de tiempo
(centésimas de microsegundo) por otro electrón de una capa superior emitiéndose,
como consecuencia de esta transición, un fotón de radiación característica.

Si el electrón no tiene energía suficiente para arrancar el electrón de la capa K no se


emitirá radiación característica K. Sí podrá producirse radiación característica L, de
menor energía.

En ocasiones, el electrón incidente se aproxima tan to al núcleo de los átomos del


ánodo que interacciona electrostáticamente con el mismo. Como consecuencia de la
fuerza eléctrica ejercida, el electrón es desviado de su trayectoria experimentando una
aceleración negativa. Como partícula cargada que es, al ser frenada emite radiación
electromagnética. Si la frecuencia de radiación emitida es n, la energía del fotón que se
emite es h n y la energía del electrón se reducirá en una cantidad equivalente. En
resumen, la repentina deceleración del electrón da lugar a la emisión de radiación
electromagnética conocida con el nombre de radiación de frenado o, por el término
generalmente aceptado, de Bremsstrahlung (delmán Bremsung = frenado y Strahlung =
radiación), de la que ya hemos hablado.
Sucede a veces que el electrón con una energía incidente Eo puede ser frenado
totalmente en una sola colisión radioactiva y, por tanto, toda su energía Eo será
emitida en forma de un único fotón. El número de colisiones de este tipo es poco
frecuente y da lugar a la parte más energética del espectro. En consecuencia, cuando
bombardeamos el ánodo con electrones de 100 keV podemos esperar la producción
de unos po cos fotones de energía 100 keV pero ninguno de energía superior a ésta.

Para un electrón de baja energía, las colisiones inelásticas son mucho más frecuentes
que las radioactivas, de forma que electrones de 100 keV pierden aproximadamente un
99% de su energía por el primer mecanismo, lo que producirá un calentamiento del
ánodo. Solo el 1%, aproximadamente, será convertido en fotones de rayos X.

Los procesos comentados son muy complejos y pueden ocurrir en cualquier punto de
la trayectoria del electrón dentro del ánodo y, por tanto, a cualquier profundidad
siempre que ésta sea menor que el alcance del electrón. La radiación emitida debe
emerger del ánodo para poder ser usada y la probabilidad de que esto suceda
dependerá de la frecuencia de los fotones y del camino que tenga que recorrer.

INTERACCIÓN DE FOTONES CON LA MATERIA

Los fotones tienen un alto poder de penetración al no tener carga ni masa. Desde un
punto de vista macroscópico, cuando un haz de fotones atr aviesa un material se
reduce el número de fotones (o cantidad de energía). Desde un punto de vista
microscópico veremos los procesos elementales de interacción de los fotones con los
átomos y sus distintas probabilidades en función del número atómico y de la energía.

Atenuación de fotones

Cuando un haz de rayos X o gamma penetra en un medio material, se observa una


desaparición progresiva de los fotones que lo constituyen. Esta disminución del
número de fotones incidentes denominada atenuación, se debe a la interacción de
un cierto número de ellos con los átomos que componen el medio.

En la interacción de un fotón con un átomo, parte de la energía del fotón se transfiere


a un electrón que sale proyectado con una cierta energía cinética. El electrón
consume esta energía produciendo ionizaciones de los átomos del medio. Así, parte
de la energía del fotón incidente es absorbida por el medio. Esta forma de
transferencia de energía es la responsable de los efectos biológicos que se producen
en la irradiación con rayos X o gamma.

Otra parte de la energía de los fotones que interaccionan reaparece en forma de


fotones cuya energía es igual o inferior y cuya dirección e s distinta: son los fotones
dispersados.

La atenuación de un haz de fotones considerada como la disminución


progresiva del número de fotones que transporta el haz se debe tanto a los
procesos de absorción como a los de dispersión.
Figura 2. Atenuación de un haz de fotones.

LEY DE ATENUACIÓN

Si un haz monoenergético de fotones, de N fotones/cm2s, incide perpendicularmente


sobre un material de espesor x1 se producirá una atenuación o disminución del número de
fotones del haz que depende del tipo de material, de su espesor y de la energía de los
fotones incidentes.

Esta atenuación viene determinada por la expresión:

N = No e- µx (1)

Donde

N0 = número de fotones incidentes

N= número de fotones finales

X= espesor

µ = constante de proporcionalidad que depende de la energía de los fotones


y del tipo de material absorbente (de su número atómico y densidad).

µ se denomina coeficiente de atenuación lineal, y tiene dimensiones de L-1.


Representa la fracción de fotones que interaccionan por unidad de espesor del
material absorbente y, por tanto, la probabilidad de interacción por unidad de
recorrido.

Por tanto, un haz de fotones monoenergéticos se atenúa de forma exponencial al


atravesar un absorbente.
Figura 3. Curvas de atenuación de haces de fotones de disti ntas energías

La expresión (1) sólo es totalmente válida cuando se trata de:

- fotones monoenergéticos (al integrar hemos supuesto µ constante y µ


es función de la energía de los fotones).
- haz muy colimado, superficie transversal del haz muy pequeña.
- espesor de absorbente muy delgado.

El coeficiente de atenuación lineal µ se suele expresar en cm-1 y en este caso el


espesor x, en el exponente de la expresión (2), se pondrá en cm. Puede ser útil en
ocasiones, al igual que ocurría con el poder de frenado, utilizar un artificio que evite la
dependencia con la densidad del medio. De esta manera, se utiliza como espesor el
valor de la masa por unidad
de superficie denominado "espesor másico x ", expresado en g/cm2:

espesor másico = xm = x(cm) · ρ (g/cm3)

y, en este caso, el coeficiente de atenuación a utilizar será el coeficiente de


atenuación másico µm = µ/ρ que se medirá en cm/g y que, dado un fotón de una
energía determinada, será el mismo para cada medio independientemente dela
densidad.

Para haces monoenergéticos, se llama semiespesor o espesor de semirreducción


(d1/2) al espesor de material necesario para reducir la intensidad del haz a la mitad de
su valor inicial. Su valor calculado a partir de la expresió n (1) es:
De igual forma el espesor decimorreductor (d1/10) es aquel que reduce la intensidad
del haz a su décima parte y su valor es:

Para haces de espectro continuo se define la "capa hemirreductora" (CHR) como


el espesor de material que hay que interponer para reducir la exposición del haz a la
mitad.

Procedimiento Experimental

FIGURA 4: Montaje Experimental y Montaje del Circuito

Una vez encendida la unidad de rayos X se colocó el colimador de 2 mm junto con el


cristal de LiF y se alineo el contador geiger, con un voltaje anódico de 25 KV, una vez
alineado, se tomaron las mediciones de intensidad para los ángulos de 6º hasta 16º que
representan la intensidad inicial o completa de la radiación de frenado.

Se repite el proceso anterior pero esta vez con una lámina de material absorbente frente
al contador geiger, siendo la lámina de aluminio de 0.08 mm de espesor la primera y la de
Estaño la segunda. Los datos obtenidos de las intensidades se ven en las tablas 1 y 2.
Resultados
3
Densidades: AL= 2700 kg/m Sn= 7310 kg/m3.
Distancia atómica del LiF: d=201.4 P.m.

Tabla1: datos experimentales obtenidos de la lámina de Aluminio de 0.08 mm de


espesor.

θ I0 I I −ln T µ λ=2 d sin θ µ 1


T=
I0
µ=
X
µ0=
ρ ( )
ρ
3

6 30 17 0,567 7092,4496907 2,626833219 42,104 1,379


7 23 19 0,826 2389,5063183 0,88500234 49,089 0,960
8 98 85 0,867 1783,9537775 0,660723621 56,059 0,870
9 150 123 0,820 2480,6367340 0,918754346 63,012 0,972
10 173 155 0,896 1372,6858251 0,508402157 69,945 0,798
11 184 144 0,782 3073,7567305 1,138428419 76,858 1,044
12 185 166 0,897 1358,7427115 0,503238041 83,747 0,795
13 183 154 0,841 2164,5452376 0,801683421 90,610 0,929
14 158 107 0,677 4876,0500759 1,805944473 97,446 1,218
15 139 107 0,769 3283,3038685 1,21603847 104,252 1,068
16 138 108 0,782 3073,7567305 1,138428419 111,027 1,044

Tabla 2: datos experimentales obtenidos de la lámina de Estaño de 0.025 mm de


espesor.

θ I0 I I −ln T µ λ=2 d sin θ µ 1


T=
I0
µ=
X
µ0=
ρ ( )
ρ
3

6 30 5 0,167 71670,37
9,804 42,104 2,140
9
7 23 7 0,304 47583,36
6,509 49,089 1,867
3
8 98 56 0,571 22384,63
3,062 56,059 1,452
2
9 150 84 0,560 23192,74
3,173 63,012 1,469
0
10 173 86 0,497 27957,77
3,825 69,945 1,564
2
11 184 79 0,429 33819,51
4,626 76,858 1,666
6
12 185 63 0,340 43088,84
5,895 83,747 1,806
4
13 183 51 0,279 51106,42
6,991 90,610 1,912
1
14 158 32 0,202 63874,36
8,738 97,446 2,060
5
15 139 24 0,173 70256,80
9,611 104,252 2,126
4
16 138 20 0,145 77260,85
10,569 111,027 2,195
6

Gráfica1: (µ/p) ^(1/3) función de λ

ANÁLISIS DE RESULTADOS

El espesor de la materia junto a su densidad es inversamente proporcional a la intensidad


de rayos x que los atraviesa.
En la grafica se evidencia la ecuación lineal para uno de los materiales, el otro material no
cumple la función debido a errores en la calibración del contador de Geiger, aun así se
evidencia que λ^3 es función del coeficiente de absorción masico.

CONCLUSIONES

El coeficiente de absorción másico es función de la longitud de onda al cubo.

Hay una porción estable de la cantidad de radiación que absorbe la materia y que deja
pasar a través de ella.

Entre mayor densidad la intensidad disminuye, o sea, un mayor frenado de radiación.

Dependiendo de la cantidad de radiación puede ionizarse distintas materias.

BIBLIOGRAFÍA

[1] R. M. Eisberg: Fundamentáis of Modern Physics (John Wiley and Sons, Nueva
york, 1961).

[2] F. W. Sears, M. W. Zemansky, H. D. Young y R. A. Freedman. Física Universitaria,


12a Edicion. Vol.2. Addison-Wesley .2009.ISBN E-Book:978-607-442-307-5.

[3] Handbook Laboratory Experiments Physics.

[4] A. C. Melissinos, J. Napolitano. Experiments in Modern Physics. Second Edition.


Academic press 2003.

[5] B. D. Cullity (1967). Elements of X-Ray Diffraction. Addison- Wesley Publishing


Company, Inc.

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